Los jerbos se comunican a través del lenguaje corporal y las vocalizaciones, que son distintos tipos de ruidos. Existen 13 sílabas diferentes que estos animales pueden combinar y emitir en distintas frecuencias para comunicarse entre sí.[1] Si prestas atención a las vocalizaciones de tu mascota, podrás comprenderla mejor, saber cómo se siente y atender sus necesidades.

Método 1
Método 1 de 2:
Reconocer las vocalizaciones negativas

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    Mantente atento a un chillido fuerte si tu mascota se ve asustada. Esta es una señal de que el jerbo tiene miedo o se siente amenazado. Esta sensación puede ser causada por el entorno o las personas que lo rodean. Asimismo, el animal podría emitir un solo chillido o varios.[2]
    • Si tu jerbo dirige el chillido hacia ti, podría estar de mal humor o sentir dolor. Si esto sucede a lo largo de varios días, será mejor que lo lleves a la veterinaria.
    • Si un jerbo nuevo chilla cuando te ve, tal vez solo quiere que lo dejes en paz. Dale un día de descanso antes de tratar de interactuar con él nuevamente.
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    Presta atención a jerbos que chillan unos a otros. Estos animales usan los chillidos para demostrar agresión entre sí. Puede indicar que una de tus mascotas está fastidiada o frustrada con la presencia de otra. Considera que a veces incluso podría significar que están a punto de empezar a luchar o pelear.[3]
    • Si notas que los jerbos están uno frente al otro, chillando, con las narices tocándose y el pelo erizado, sepáralos rápidamente y colócalos en jaulas separadas hasta que se calmen.
    • Utiliza un juguete como herramienta para trasladar a los animales a esquinas separadas de la jaula. También puedes ponerte guantes gruesos y recoger a uno de ellos para separarlo.
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    Fíjate si tu mascota da una especie de pisotón como advertencia. Los jerbos pueden producir un ruido con las patas traseras cuando se sienten amenazados o asustados. También podrían usarlo como advertencia para otros jerbos o mascotas que están cerca. Si notas que tu mascota hace esto, revisa su entorno para ver qué podría haberlo provocado, como una mascota o un ruido fuerte.[4]
    • En algunos casos, un jerbo macho puede hacer un sonido fuerte con las patas cerca de una hembra como parte de su ritual de cortejo.

Método 2
Método 2 de 2:
Prestar atención a las vocalizaciones positivas

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    Fíjate si tu mascota zumba o ronronea mientras lo sostienes. Un jerbo puede hacer un sonido similar al ronroneo del gato cuando lo acarician. Esta es una señal de que está disfrutando la atención y está de buen humor.[5]
    • El ronroneo puede hacer que el jerbo vibre. Es posible que sientas estas vibraciones en tu mano mientras lo sostienes o lo acaricias.
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    Presta atención a un chirrido si el jerbo es joven. Los jerbos bebés pueden hacer chirridos o chillidos agudos para llamar a su mamá. Esta es su forma de comunicarse con su madre y llamar su atención de alguna manera.[6]
    • No te alarmes si tu mascota hace este ruido agudo. Conforme crezca, dejará de hacerlo.
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    Identifica un sonido similar a un ladrido agudo de tu mascota. Los jerbos pueden producir un ruido de este tipo para mostrar emoción mientras interactúan con una persona. Esto suele significar que el animal está feliz de verte y de poder jugar contigo.[7]
    • Considera que el jerbo también podría dar un brinco mientras emite este ruido para demostrar su emoción.

Acerca de este wikiHow

Pippa Elliott, MRCVS
Coescrito por:
Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios
Este artículo fue coescrito por Pippa Elliott, MRCVS. La Dra. Elliott es una veterinaria con más de 30 años de experiencia. Se graduó en la Universidad de Glasgow en 1987, y ha trabajado como cirujana veterinaria durante 7 años. Después, la Dra. Elliott trabajó como veterinaria en una clínica de animales durante más de una década. Este artículo ha sido visto 1146 veces.
Categorías: Mascotas y animales