Los aztecas en México cultivaban flores de pascua, incluso mucho antes que los primeros europeos llegaran a los Estados Unidos. No fue sino hasta 1825 cuando el primer embajador de Estados Unidos en México, Joel Roberts Poinsett, introdujo las flores de pascua a los Estados Unidos. Desde ese momento, se ha vuelto omnipresente como planta navideña. Cuidar de tus flores de pascua durante la época de las festividades es fácil, ya que requieren de poca atención mientras florecen. Sin embargo, cuidarlas durante todo el año y lograr que florezcan en diciembre, es otra historia. A continuación verás cómo hacer ambas cosas.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Elige tus flores de pascua

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    Elige una planta en buen estado. Las flores de pascua en buen estado deben tener un follaje verde y brácteas de colores llamativos (estas son hojas rojas modificadas que se ven como pétalos). No deben tener signos de marchitez y no debe tener hojas caídas o amarillas.
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    Observa las condiciones que exhiba. La planta debe verse completa y atractiva y no debe estar amontonada entre otras plantas, ya que puede provocar la caída prematura de sus brácteas. Debe tener una altura de dos veces y medio el diámetro de su maceta.
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    Revisa la tierra y las hojas. Revisa que la tierra esté húmeda: si está muy mojada, pero la planta se ve marchita, esto puede indicar que la raíz está podrida. Si es así, revisa si en la parte inferior de las hojas no hay insectos como pulgones y moscas blancas. No elijas una planta que tenga las hojas moteadas y amarillas. [1]
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    Examina las flores verdaderas. Las flores verdaderas de las flores de pascua se encuentran en la base las hojas rojas o brácteas. Deben verse como pequeños brotes frescos con puntas rojas o verdes. Si hay una capa de polen amarillo cubriendo las flores, esto significa que la planta es más madura y que no durará mucho tiempo. [2]
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    Evita comprar flores de pascua que estén envueltas en papel o plástico. Es posible que la planta haya sido exhibida de esta forma por algún tiempo. Si este es el caso, las hojas pueden volverse amarillas y caer mucho antes de lo esperado.
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    Sé cuidadoso cuando lleves la planta a tu casa. Si la temperatura es menor a 10 °C (50 °F), es importante que cubras tus flores de pascua antes de llevarlas a casa.
    • Si expones tus flores de pascua a temperaturas bajas, aunque sea solo por unos pocos minutos, estas pueden enfriarse o hasta congelarse, causando que las hojas se marchiten y se caigan.
    • La tienda o vivero en donde compres tus flores de pascua debe darte algún tipo de cobertor para protegerla para el camino a tu casa.
    • Asegúrate de quitar el cobertor tan pronto llegues a tu casa, de lo contrario puedes dañar tu planta. [3]

Parte 2
Parte 2 de 3:
Cuida tus flores de pascua

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    Elige un lugar adecuado para tus flores de pascua. Colócalas en un lugar en donde reciba al menos seis horas de luz solar directa cada día.
    • La ubicación ideal es cerca de una ventana que dé al este u oeste y que reciba luz solar.
    • No dejes que sus hojas toquen los vidrios de ventanas frías, ya que esto puede causar que se congelen y se caigan. [4]
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    Mantén la temperatura correcta. La temperatura ideal para las flores de pascua no debe ser mayor a 21 °C (70 °F) durante el día o menor a 18 °C (65 °F) en la noche.
    • Esto es importante para mantener el color rojo llamativo de las brácteas.
    • Evita exponer tu flor de pascua a chiflones de aire fríos o al calor de radiadores, aparatos o incendios.
    • Ten en cuenta que las temperaturas por debajo de los 10 °C (50 °F) enfriarán la planta y le causarán daños graves, while mientras que la exposición a las heladas la matará.
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    Riégalas cuando sea necesario. A las flores de pascua les gusta la tierra húmeda pero no empapada, así que riégalas cuando la superficie de la tierra se sienta seca al tacto. Riega la planta hasta que veas que el agua empiece a filtrarse por los agujeros de la parte baja de la maceta.
    • Después de 10 minutos, saca el exceso de agua del plato debajo de la maceta. Si se deja la planta en agua estancada, la tierra estará muy mojada y no contendrá mucho aire, haciendo que la raíz se pudra o provocando otras enfermedades.
    • Si se deja mucho tiempo sin agua, las hojas empezarán a marchitarse. Para prevenir esto, asegúrate de revisar la tierra frecuentemente. Si las hojas empiezan a marchitarse, riega la planta de una vez y riégala de nuevo 5 minutos después.
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    Fertiliza tus flores de pascua después de las festividades. Dependiendo de cuándo compraste tu planta, no debería ser necesario fertilizarla en ningún momento antes de las festividades, cuando todavía esté floreciendo. Puedes esperar hasta que hayas tenido tu planta por 6 a 8 semanas antes de fertilizarla.
    • Por supuesto, si no tienes planificado quedarte con tus flores de pascua, no es necesario fertilizarlas. Muchas personas ven más fácil comprar una planta nueva cada año en lugar de cuidarla durante todo el año.
    • Sin embargo, si tienes planificado cuidar tu flor de pascua, utiliza un fertilizante para todo propósito y soluble en agua para hacerlo a inicios de enero. Úsalo según las instrucciones del fabricante.
    • El fertilizante ayudará a mantener el follaje verde y promoverá nuevos crecimientos.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Reflorecimiento de tus flores de pascua

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    Comprométete a cuidar tus flores de pascua. Es posible cuidar tu planta y lograr que florezca el año siguiente. Sin embargo, esto requiere de un calendario de cuidados de todo el año que debes cumplir de forma estricta, de lo contrario la planta no reflorecerá.
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    Mantén el mismo calendario de riego hasta abril. Después de las festividades, puedes mantener el mismo calendario de riego que has estado utilizando: regándola cuando la tierra se sienta seca. Continúa fertilizando tu planta cada 6 u 8 semanas con el fertilizante para todo propósito.
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    Deja que la planta se seque. Una vez que llegue abril, ya no riegues tu planta y deja que se seque gradualmente. Sin embargo, no debes dejar que se seque tanto porque que los tallos pueden secarse. Durante este tiempo, almacénala en un lugar fresco que reciba un poco de viento a una temperatura de 15 °C (60 °F).
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    Corta los tallos. Al final de la primavera, cuando las brácteas están de un color verde fangoso, será momento de cortar los tallos. Corta unos 20 cm (8 pulgadas) de largo, aunque esto varía levemente con el tamaño y la forma de la planta. Puedes iniciar el riego de a partir de este punto, usando el mismo procedimiento anterior.
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    Trasplanta tu planta si es necesario. Si la planta está muy apretada en la maceta, muévela a una que sea de 5 u 8 cm (2 o 4 pulgadas) más grande. Usa tierra comercial para sembrar con alto porcentaje de musgo de turba. [5]
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    Saca tus flores de pascua al exterior. Durante los meses de verano, puedes sacar tus plantas al exterior (en sus macetas). Colócalas en un área con un poco de sombra. Continúa el riego regular y fertilízala.
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    En agosto, poda los brotes nuevos. Cuando llegue agosto puedes cortar los brotes nuevos en 2.5 cm (1 pulgada), dejando de tres o cuatro hojas en cada uno. Fertiliza de nuevo.
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    Regresa tus flores de pascua al interior. Al inicio de septiembre (o antes de la primera helada) coloca tus plantas en el interior. Colócalas cerca de una ventana en donde reciba bastante luz natural de forma indirecta. Continúa el riego de la misma manera y fertiliza cada dos semanas.
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    Sigue los procedimientos correctos de reflorecimiento. La flor de pascua es una planta de fotoperiodos, esto significa que sus brotes y flores dependen de la cantidad de luz del sol que recibe. Así que para que reflorezca en navidad, debes limitar su exposición a la luz solar en los meses previos a las festividades.
    • Desde el 1ro de octubre, mantén tus flores de pascua en la oscuridad completa e ininterrumpida durante 14 horas cada noche, de 6 p.m. a 8 a.m. Colócalas en un cuarto oscuro o cúbrelas con una caja. Recuerda que exponer la planta incluso a la luz artificial puede alterar o retrasar el proceso de florecimiento.
    • Quita la planta de la oscuridad durante el día, ya que necesita entre 6 a 8 horas de luz. Mantén la temperatura entre 15 y 21 °C (60 y 70 grados F) y continúa el riego y fertilización normales.
    • Sigue estos procedimientos durante diez semanas hasta que las plantas reflorezcan y se empiece a notar el color rojo en las brácteas. Vuelve a colocar las flores de pascua en un área soleada ¡y continúa con los procedimientos de cuidado descritos en la sección anterior!

Consejos

  • Si estás replantando tus flores de pascua, hazlo en un medio estéril que tenga un buen drenaje y que al mismo tiempo no gotee agua y nutrientes rápidamente. Usa suelo fértil, mantillo y ácido con pH de 5.5.
  • Se creía que las flores de pascua eran venenosas e incluso tóxicas, pero según la Universidad de Florida en su extensión del Instituto de Alimentos y Ciencias Agricultoras, los estudios recientes han negado esa teoría. Sin embargo, ninguna parte de la planta es comestible.

Advertencias

  • La pudrición de la raíz es una enfermedad fúngica que hay que evitar. Entre los síntomas se incluye el color amarillo en las hojas y su caída. Desafortunadamente, una vez inicien los síntomas, la enfermedad ya estará muy avanzada, por lo que no es posible salvarla.
  • Cuida tu planta de enfermedades como costras, las cuales se identifican con hojas con manchas blancas, amarillas o cafés. El hongo puede esparcirse en toda la rama o planta si no se controla. Elimina las áreas afectadas inmediatamente para evitar una mayor contaminación.
  • Agarra los gusanos cornudos con tus dedos y destrúyelos. Lava las hojas con un jabón suave y agua o aplica alcohol para controlar otros insectos. Para infestaciones serias, un control químico podría ser necesario.
  • Cuida tus flores de pascua de insectos y enfermedades. Examínalas en búsqueda de insectos comunes como gusanos cornudos de flores de pascua, pulgones, cochinillas, escamas, moscas blancas y ácaros araña.
  • Las flores de pascua contienen savia blanca hecha de látex que puede irritar la piel de las personas alérgicas este material.

Acerca de este wikiHow

Lauren Kurtz
Coescrito por:
Horticultora profesional
Este artículo fue coescrito por Lauren Kurtz. Lauren Kurtz es especialista en naturalismo y horticultura. Lauren ha trabajado para Aurora, Colorado administrando el jardín Water-Wise en el Centro Municipal de Aurora para el Departamento de Conservación del Agua. Recibió una licenciatura en estudios ambientales y de sostenibilidad en la universidad Western Michigan en 2014. Este artículo ha sido visto 90 328 veces.
Categorías: Propagación de flores
Resumen del artículoX

Para cuidar de una flor de pascua, primero elige un lugar en donde pueda recibir 6 horas de luz solar indirecta al día. Por ejemplo, colócala cerca de una ventana soleada que mire al este o al oeste. Trata de que la temperatura permanezca a alrededor de 21 grados Celsius (o 70 grados Fahrenheit) y asegúrate de que nunca descienda por debajo de los 10 grados Celsius (50 grados Fahrenheit), ya que las hojas podrían caerse si hace demasiado frío. Si bien las flores de pascua no necesitan mucha agua, debes regar la planta cuando la tierra se sienta seca. Cuando riegues la flor de pascua, detente apenas veas que el agua se filtra por los agujeros en la parte inferior de la maceta. Esto evitará que la riegues en exceso. Las flores de pascua florecen únicamente de noviembre a marzo, por lo que la mayoría de las personas prefieren comprar una nueva todos los años para las fiestas de fin de año. Si prefieres conservar la flor de pascua durante todo el año, aplícale un abono multipropósito a principios de enero. Sigue leyendo para encontrar consejos sobre cómo elegir una flor de Pascua saludable de la tienda.