Dar un niño en adopción puede ser un gran acto de amor. Existen unos servicios profesionales y unas agencias de adopción que te ayudarán a encontrar un hogar amoroso para tu bebé si no puedes cumplir con las responsabilidades morales y legales de la paternidad.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Prepararse para la adopción

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    Conoce tus derechos. Tienes una serie de derechos legales y morales al ser el padre biológico de un niño. Las cortes sostienen repetidamente que es una libertad fundamental criar a un niño de la manera en que se desee. Por ello, tienes el derecho de tener una relación con tu hijo y dirigir su formación educacional, moral y religiosa.[1]
    • Tienes una responsabilidad recíproca de proveerle un apoyo financiero y material a sus necesidades, como el hecho de que tenga casa, vestimenta y alimentos. Asimismo, tienes la responsabilidad moral de proveerle un entorno seguro y cariñoso.[2]
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    Considera tus opciones. Al conocer tus derechos y responsabilidades, un embarazo no planeado o la incapacidad de cuidar a un niño es un momento estresante y emocional.[3] Antes de tomar una decisión, debes examinar y considerar las opciones con las que cuentas. Debes ver a la adopción como una decisión permanente y como que haces lo mejor para tu hijo y para ti.
    • La custodia puede ser una solución temporal mientras estableces los recursos emocionales y financieros que necesitas para ser un padre. La corte otorga la custodia temporal a un familiar u otra persona acordada. De esta forma, mantienes los derechos paternales y contribuyes con el apoyo financiero del niño mientras el tutor se encarga de la labor diaria de criarlo. La custodia se puede disolver por la corte cuando puedas probar que eres apto y que estás preparado para ser un padre.[4]
    • La adopción familiar puede ser una solución permanente que mantenga a tu hijo dentro de la familia y te permita tener una relación con él. De esta forma, tu hijo será adoptado por sus abuelos u otro pariente cercano, en vez de un extraño. Este tipo de adopción voluntaria dentro de la familia se puede tratar con un abogado privado en un corto tiempo. Con frecuencia, los procedimientos, incluidos los estudios del hogar, son menos rigurosos, o se puede dispensar de estos.[5]
    • Las adopciones abiertas permiten que los padres biológicos interactúen con el niño y la familia adoptiva. En una adopción abierta, a pesar de renunciar a tus derechos legales, puedes representar una gran parte en la selección de la familia adoptiva y expresar tus deseos en cuanto a la crianza del niño. Asimismo, este tipo de adopción le permite a tu familia tener una participación limitada en su vida por medio de cartas, regalos e incluso visitas. La familia adoptiva debe dar su consentimiento para acordar una adopción abierta.[6]
    • La adopción tradicional o cerrada. En esta, los padres biológicos tienen poco aporte o contacto, o nada de estos con la familia adoptiva, y los documentos se archivan. Este tipo de adopción ofrece una mayor privacidad y puede darle a los padres biológicos un sentido de cierre y la habilidad de seguir con su vida después de tomar esta decisión difícil.[7]
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    Toma una decisión. La decisión de dar a tu bebé o niño en adopción dependerá de ti a fin de cuentas, a menos que la corte esté involucrada. Tienes que pensar claramente y no dejar que las personas te presionen para tomar una decisión.
    • Considera hablar con un consejero para discutir tus emociones en cuanto a la decisión. Podrías querer seguir con la terapia después de tomar tu decisión, aunque dependerá de tus circunstancias.
    • Si tienes preguntas o dudas acerca de tus derechos y responsabilidades paternales, deberías discutirlas con un abogado de derecho de familia.
    • En un juicio en el que tu hijo podría ir a un hogar de acogida, tienes el derecho a tener una asesoría legal. Puedes discutir la posibilidad de adopción con tu abogado.
    • El proceso será más sencillo y rápido si el otro padre lo consiente. Si es práctico y seguro, deberías discutir tu decisión con el otro padre biológico.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Planificar la adopción

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    Investiga las agencias de adopción. Después de tomar la decisión de darlo en adopción, escoger una agencia será la decisión más importante que tendrás que tomar. Al igual que tener un buen abogado u otro profesional a tu lado, una agencia de adopción cualificada puede disminuir el estrés de una situación difícil. Las agencias de adopción examinan a las familias adoptivas y las emparejan con las madres biológicas y sus hijos. Se encargan de los estudios del hogar y otros requerimientos legales y actúan como unos intermediarios con los abogados para la adopción y el sistema judicial. En algunos casos, incluso pueden organizar un hogar de acogida para los niños abandonados por sus padres biológicos.
    • La ley estatal regula a las agencias de adopción. Para contar con una licencia, una agencia debe cumplir con los requerimientos rigurosos que se exigen. El estado se fijará en el personal, la capacitación, los programas, las instalaciones y el seguro con los que cuente.[8]
    • Las asociaciones profesionales, como la Academia Americana de Abogados de Adopciones, y las organizaciones de protección del menor mantienen unos directorios de las agencias de adopción con licencia.[9] [10]
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    Evalúa unas agencias de adopción potenciales. Querrás encontrar una agencia de adopción que tenga las habilidades, los contactos y los programas para brindar los servicios necesarios para emparejar a tu bebé con el mejor hogar posible. Hacer una investigación antes te llevar a cabo un acuerdo puede disminuir tu estrés.
    • Revisa la página web de la agencia de adopción. Esto te dará una idea rápida de sus operaciones. La página web debe incluir una información de contacto, la información de su licencia, una acreditación profesional, su misión y una información para los padres biológicos y los padres adoptivos.[11]
    • Haz una búsqueda en línea con el nombre de la agencia y las palabras "reseñas", "estafa" y "denuncias". Lee las reseñas y los testimonios con detenimiento. Una sola denuncia podría no descalificarla, pero una gran cantidad de denuncias o unas denuncias similares pueden ser una advertencia.
    • Comunícate con un grupo de apoyo de adopción o para padres de la localidad. Puedes encontrar unos grupos por medio de unas búsquedas en línea, unos recursos en la oficina de tu obstetra, o por medio de una organización profesional como el Consejo Norteamericano de Niños Adoptables.[12] Los grupos pueden ser unos foros públicos y privados o unos que tienen unas reuniones presenciales. Encuentra un grupo que te brinde la información que necesites y cumpla con tu nivel de comodidad y privacidad.
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    Comunícate con las agencias de adopción probables. Algunas agencias pueden ofrecer una consulta por teléfono, mientras que otras pueden insistir en tener una cita en persona o solicitar que llenes una solicitud preliminar. Escribe tus preguntas antes de tener tu cita y prepárate para tomar unos apuntes.
    • Verifica la licencia. Pregunta acerca de la licencia y la acreditación, y si son actuales.
    • Pregunta acerca de las adopciones abiertas y cerradas. Querrás contar con una agencia que esté de acuerdo con tus deseos. Incluso en una adopción cerrada, el historial médico familiar estará disponible para los padres adoptivos. Después de eso, la información restante se puede compartir por medio un acuerdo concertado por las partes.
    • Si es importante para ti que tu hijo se coloque en una familia de la misma raza o religión, este será el momento para preguntarle a la agencia cuál es su filosofía en cuanto a este punto.
    • Pregunta acerca del apoyo financiero. Ninguna madre biológica tiene permitido "vender" su bebé. Sin embargo, las leyes estatales admiten un apoyo financiero durante el embarazo y una ayuda con los gastos médicos. Las leyes varían en la mayoría de los estados en cuanto a los gastos "razonables y habituales". Algunos estados tienen un límite financiero de $1 000 a $5 000.[13]
    • Pregunta acerca de las referencias y los testimonios. Si bien es cierto que la agencia de adopción no puede revelar una información privada, muchos padres le permitirán que cuente su historia. Si bien es cierto que la imagen se limitará a lo positivo, puede darte una indicación del tipo de familias con los que dicha agencia trabaja.
    • Pregunta acerca de tu derecho de cancelar el consentimiento de dar tu hijo en adopción. Esto puede ser una decisión tan difícil como decidir dar tu hijo en adopción. La mayoría de los estados tiene pequeñas oportunidades en las que tendrás el derecho de cambiar de parecer. Pregúntale a la agencia si tiene un procedimiento establecido para cancelar la adopción. Las leyes son diferentes en todos los estados.[14]

Parte 3
Parte 3 de 3:
Organizar la adopción

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    Coopera con la agencia. Después de elegir una agencia que sea la apropiada para tu bebé y para ti, será tu deber cooperar con sus reglas y procedimientos. Esta establecerá un cronograma para la adopción, aunque dependerá de la semana de embarazo que tengas o si el niño es mayor.
    • Si será una adopción abierta, podrías tener permitido revisar los perfiles de las familias adoptivas y escoger las que coincidan con tus esperanzas y expectativas para tu hijo.
    • Si estás embarazada, cumple con tu atención médica y sigue las órdenes del doctor. Actúa teniendo en mente los mejores intereses de tu hijo.
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    Brinda la información acerca del padre biológico. Tendrás que dársela a la agencia. No mientas ni guardes alguna información al respecto. Si dices que no sabes quién es el padre o dónde se encuentra, la corte podría tomar unas acciones al respecto para otorgar la adopción del niño. Sin embargo, si el padre biológico aparece y refuta la adopción, esta podría cancelarse potencialmente y podrías ser acusada de mentir ante la corte.
    • La agencia tratará de conseguir el consentimiento del padre biológico o le brindará una notificación de la audiencia para la adopción.
    • Específicamente, si un padre biológico quiere disputar la adopción, debe reconocer la paternidad, probar que ha tenido (o ha intentado tener) una relación con el niño, y estar preparado para mantenerlo. Tendrá que contar con su propio abogado, y tus intereses serán representados por el abogado de la agencia. Coopera y brinda la información que se te solicite.
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    Brinda tu consentimiento para la adopción. Las embarazadas no suelen dar su consentimiento hasta que el niño ha nacido seguramente. La mayoría de los estados tienen un periodo de espera para darte un tiempo para recuperarte de dar a luz y no estar bajo la influencia de los medicamentos para el dolor. El periodo de espera puede ser de 12 horas hasta 15 días. El periodo de espera típico es de 24 a 48 horas. Los documentos de consentimiento se firmarán en presencia de un notario o un juez.[15]
    • Incluso si has trabajado con una agencia, tienes el derecho de consultar con un abogado independiente antes de firmar los formularios de consentimiento.
    • Cuando los hayas firmado, la decisión se considerará como permanente a menos que canceles la adopción durante el plazo limitado o que pruebes que tu firma se obtuvo de manera fraudulenta o por coacción.
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    Concluye la adopción. Cuando firmes los formularios de consentimiento, tu participación se completará. Sigue en comunicación con la agencia para estar consciente del cronograma para la adopción y que se completó sin incidentes. Si la adopción es abierta, puedes recibir más información detallada acerca del procedimiento y la conclusión.
    • La agencia debe tener unos programas de cuidado posterior, como un asesoramiento para ayudarte a recuperarte de dar a luz y dar tu hijo en adopción. De lo contrario, considera buscar un asesoramiento independiente.

Consejos

  • No abandones a tu bebé. En los Estados Unidos, existe una ley de refugio que te permite dar tu hijo legal y seguramente a una sala de emergencias, la policía u otro centro de emergencia sin una repercusión legal. De esta forma, tu niño encontrará un buen hogar.

Acerca de este wikiHow

Clinton M. Sandvick, JD, PhD
Coescrito por:
Abogado litigante retirado
Este artículo fue coescrito por Clinton M. Sandvick, JD, PhD. Clinton M. Sandvick trabajó como litigante civil en California durante más de 7 años. Recibió su doctorado en Derecho en la Universidad de Wisconsin-Madison en 1998 y su PhD en Historia Americana en la Universidad de Oregon en 2013. Este artículo ha sido visto 23 588 veces.
Categorías: Salud emocional