La lectura no es simplemente una habilidad profesional importante, también es una manera de disfrutar las obras de literatura informativas, creativas e inspiradoras que enriquecen las experiencias de nuestras vidas. Al igual que cualquier otra habilidad que vale la pena dominar, se necesita tiempo y dedicación para desarrollar un hábito de lectura. No obstante, este consiste en una fuente permanente de gozo y entretenimiento, y en un pasatiempo asequible para todo aquel que desee leer un libro.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Desarrollar un hábito de lectura

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    Mejora tus habilidades de lectura. Empieza a practicar buenas habilidades de lectura, así desarrollarás tu hábito de leer y disfrutarás tus lecturas al máximo. Por ejemplo, haz lo siguiente:
    • Lee el contenido. Durante la lectura, tendrás que leer la idea principal de cada párrafo, junto con las razones de sustento. Si deseas aprender habilidades de lectura pasadas de moda, puede ser de utilidad leer teniendo un lápiz en la mano para hacer apuntes o subrayar las ideas clave de cada párrafo.
    • Busca las palabras desconocidas. Si sabes inglés, Merriam Webster en línea es un recurso fantástico y minucioso en el que encontrarás las definiciones de las palabras desconocidas. Tan solo subraya las palabras desconocidas o elabora una lista con ellas. Al llegar a un buen punto de parada, vuelve a revisar cada palabra leyendo nuevamente la oración en la que aparezcan. Esto será de utilidad para contextualizar la palabra y su uso, por si cuenta con diversos significados.[1]
    • Aprende a entender el contexto. Si te topas con palabras o ideas desconocidas, el contexto literario, histórico o social suele brindar pistas sobre lo que habla el personaje o el escritor. Esto podría requerir una pequeña investigación externa, así te informarás sobre los distintos niveles de contexto que un texto presenta.[2]
    • Conoce los recursos literarios. Si conoces las tácticas literarias comunes, esto será esencial para volverte un mejor lector, en particular si eres un fanático de las novelas o las historias cortas. Si entiendes las herramientas comunes como la metáfora, la hipérbole, la estructura paralela, la personificación y la aliteración, esto puede enriquecer la experiencia lectora de manera considerable.[3] [4]
    • No te apresures. Nunca debes apresurarte si vas a leer para aprender y disfrutarlo. En lugar de ello, tómate tu tiempo y nutre tus habilidades y su desarrollo a tu propio ritmo. No te desanimes si lees lento, en particular al inicio. Todos los días, conforme leas, tu mente volverá a aplicar las tácticas de lectura que haya aprendido antes, lo que suele ocurrir cada vez con más eficacia.[5]
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    Ten a la mano los materiales de lectura. Un jugador de baloncesto no puede practicar si no tiene listos su balón y sus zapatillas. La lectura es similar a cualquier otra habilidad. A continuación se sugieren algunas maneras en las que siempre podrás contar con material de lectura nuevo a la mano:
    • Suscríbete a revistas. Las revistas de oficios o intereses especiales son una manera adecuada de tener a la mano materiales de lectura actuales. También existen revistas literarias como Harper’s o The New Yorker (disponibles en los EE. UU.) que brindan textos creativos o ficticios.
    • Acude a la biblioteca. Incluso la ciudad más pequeña cuenta con una biblioteca llena de libros que puedes revisar gratis. Si aún no has obtenido una tarjeta de la biblioteca, consigue una y averigua qué es lo que las bibliotecas de tu localidad pueden brindarte.
    • Puedes obtener un lector de libros electrónico. Barnes and Noble y Amazon venden lectores electrónicos y una gran selección de libros digitales, y permiten el préstamo de estos últimos. Las bibliotecas también suelen permitir el préstamo de libros electrónicos de manera gratuita.
    • Busca en Internet. Las páginas web de las bibliotecas universitarias suelen brindar en Internet los textos completos de las obras literarias con un registro previo de los derechos de autor. Por ejemplo, actualmente Ibiblio conduce el “proyecto Gutenberg” a través de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill. Este proyecto cuenta actualmente con casi 50 000 ensayos, novelas y novelas e historias cortas; además, agrega un promedio de 50 novelas nuevas a la semana.[6]
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    Busca maneras de relacionar la lectura con tu vida cotidiana. Si integras a la lectura en tu horario cotidiano, podrás desarrollar tus habilidades lectoras con más facilidad. A continuación te indicaremos algunas maneras en las que podrás lograrlo.
    • Únete a un club de lectura. Estos suelen tener reuniones una vez a la semana o dos veces al mes, y son una manera adecuada de motivarte para leer y también para conocer a personas que también están comprometidas con los buenos hábitos de lectura. Asimismo, los clubs de lectura te permiten conversar sobre lo que leas y brindan el beneficio de conversar con diversos lectores inteligentes e interesados.[7]
    • Descarga un recopilador de noticias. Existen diversos servicios gratuitos como Feedly o Digg que te permiten seguir blogs, periódicos y revistas en línea mediante una plataforma en buscadores, y que también organizan lo que lees en carpetas y clasificaciones teniendo en cuenta los elementos “leídos” frente a los “no leídos”.[8]
    • Busca un momento y un lugar en los cuales leer. ¿Tienes una mesa favorita en una cafetería o un rincón tranquilo de tu casa en donde te gustaría acurrucarte y relajarte? Busca un lugar que fomente tu propio hábito de lectura. Reserva un tiempo constante para disfrutar tu espacio y siempre lleva lo que estés leyendo.
    • Fija metas diarias o semanales. No existe una velocidad fija a la que debas culminar un libro o una revista; no obstante, si eres un lector ambicioso y cuentas con una lista de lecturas que deseas leer con ansias, una manera adecuada de saciar estas ambiciones consiste en fijar metas de lectura razonables. Por ejemplo, fíjate la meta de que leerás una hora diaria, o que leerás un capítulo del libro o 10 páginas de la revista que estés leyendo actualmente.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Elegir lo que vas a leer

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    Ten en cuenta tus pasatiempos e intereses personales. La lectura puede ser más interesante y satisfactoria si lees sobre temas que te importan.
    • Busca blogs, libros y revistas que aborden tus propios pasatiempos e intereses, así incentivarás la lectura y el gozo máximo.
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    Haz que tus amigos te den recomendaciones. El boca a boca suele ser una herramienta útil para orientar nuestras opciones de lectura.
    • Conversa con tus amigos o busca lectores en Internet que tengan los mismos intereses que tú. Averigua cuáles son los libros que han disfrutado.
    • Si sabes inglés, Goodreads.com es un recurso adecuado para obtener recomendaciones de libros con descripciones detalladas.[9]
    • Acude a la tienda de libros de tu localidad, si hay alguna. Por lo general, los empleados de estas tiendas adoran la lectura y estarán felices de recomendarte sus libros favoritos. Si cuentas con una tienda de libros independiente o una de libros usados, esto será incluso mejor.
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    Lee las obras clásicas. Para ser un buen lector, tendrás que conocer cómo lucen los buenos textos. Prueba por tu cuenta los libros que le hayan dado forma a la historia de Occidente y, al mismo tiempo, ten en cuenta lo siguiente:[10]
    • Conoce la manera de expandir esa búsqueda y también busca libros que sean clásicos en otras partes del mundo.
    • Descubre la manera en la que cada generación de escritores declara, reconoce y reinterpreta los hechos vitales de la historia en su propia generación.
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    Averigua qué dicen los críticos. Ellos dicen que todos somos críticos y que el gusto es relativo; no obstante, las tendencias surgen debido a determinadas situaciones culturales que repercuten y se vuelven relevantes para muchas personas de una sola vez. Estos son algunos beneficios de leer revisiones de libros:[11] [12]
    • Desarrollar un nuevo conjunto de habilidades de lectura. La lectura de críticas es diferente a la lectura de obras de ficción o no ficción. Desarrolla tus habilidades de aprendizaje para comprender el fin y la utilidad de las críticas literarias.
    • Conseguir información sobre un libro sin tener que comprarlo. Las revisiones son una manera adecuada de anticipar y rechazar las posibles compras de libros. Además, son una buena manera de aprender la forma de componer tus propios gustos como lector.
    • Iniciar una conversación informada. Quizás tu club de lectura y tú hayan leído recientemente un libro que ha obtenido una mala revisión en el New York Times. Habla sobre la revisión y señala los puntos clave que el crítico mencione. Observa qué es lo que los demás piensan. Concibe tu propia opinión sobre el libro.
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    Elabora una lista de lectura. Es esencial que mantengas un registro de los libros, las revistas y los blogs que despierten tu interés, así sabrás qué leer luego de terminar el libro que estés leyendo. Goodreads.com es una página adecuada para mantener un registro de ello; no obstante, incluso una página de un diario personal es adecuada para controlar lo que esperas leer en el futuro.
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Hacer que la lectura se vuelva un compromiso para toda la vida

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    Haz trabajo voluntario como lector. Las escuelas, los asilos, los centros correccionales e incluso los refugios aprecian los servicios de los lectores voluntarios. Hacer trabajo voluntario como lector es un servicio importante por los siguientes motivos:
    • No todos los niños están con sus padres en casa el tiempo necesario para desarrollar buenos hábitos de lectura. En los hogares con un solo padre y varios hijos, el padre puede tener dificultades para brindar ayuda personalizada en la lectura a un niño que tiene dificultades. Si trabajas como voluntario, podrás moldear el futuro educativo y las posibilidades profesionales de un niño.[13]
    • No todos los adultos pueden leer. Existen diversos motivos por los que hay personas que llegan a la adultez sin haber aprendido el alfabeto, lo que reduce las posibilidades de trabajo y la capacidad de tener una vida independiente. Al ser un lector voluntario para adultos, podrás influir de manera positiva en la vida y la autoestima de las personas necesitadas.[14]
    • Podrás permitir que las personas puedan aprender durante toda su vida. Es probable que la lectura ya no sea una opción para las personas de edad avanzada con problemas de visión. Si ellas disfrutaban la lectura en una etapa anterior de su vida y alguien empieza a leer para ellas, esto no solo será una experiencia de aprendizaje. Esto puede brindar compañerismo, amistad y un intercambio mutuo de conocimientos.[15]
    • Asimismo, algunas comunidades podrían contar con un programa de voluntarios en los que podrás grabar libros de texto y otros materiales escritos que las personas ciegas o disléxicas podrán escuchar.[16]
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    Inicia un programa de intercambio de libros o participa en uno. Busca en Internet mediante recursos como paperbackswap.com o ubica una tienda de libros usados en tu localidad que participe en un intercambio de libros.[17]
    • Los intercambios de libros son una manera útil y poco costosa de mantener tu estante de libros lleno, en particular si te gusta leer ficción popular, novelas de romance o ciencia ficción.
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    Asiste a festivales de libros. ¿Deseas aprender sobre los nuevos autores y conocer a los que ya habías leído? Los festivales de libros son una oportunidad grandiosa para hacer ambas cosas. Además, estos brindan otros beneficios como los siguientes:
    • Libros en oferta. Las editoriales y los vendedores de libros acuden a los festivales de libros y suelen brindar ofertas para los libros de los autores que asistan al festival.
    • Haz que te firmen un libro. Con frecuencia, a los autores se les pide que asistan a los festivales de libros para promocionar su trabajo, en particular si acaban de publicar su obra. Las firmas de libros te permitirán disfrutar la literatura y, al mismo tiempo, crear una reliquia familiar.
    • Disfruta que lean para ti. Los festivales suelen hacer que los autores invitados lean fragmentos de sus obras más recientes, u organizan lecturas públicas con el fin de fomentar el interés por los autores talentosos o para conmemorarlos.
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    Cuenta con un blog de lectura. Esta es una manera adecuada de recordar los libros que hayas disfrutado, criticar los libros que no te hayan gustado y mantener un control de lo que ya hayas leído. Además, un blog de lectura permite lo siguiente:
    • Ayuda a conocer personas. Hace que tus entradas sean públicas y permite que las personas al azar que se encuentren en Internet disfruten e incluso comenten tus reflexiones.
    • Permite practicar la escritura. La lectura y la escritura son dos caras de la misma moneda. Si puedes escribir bien, e incluso imitar los estilos de escritura que te gustan, esto será un buen ejercicio. Asimismo, esto requiere que te conviertas en tu propio editor, ya que tendrás que revisar lo que hayas escrito con el fin de garantizar la calidad y la precisión.
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    Aprende a leer otros idiomas. Si te gusta leer textos en tu propio idioma, escoge un nuevo idioma que puedas aprender. Puedes empezar a leer en otro idioma si haces lo siguiente:
    • Obtén un diccionario del idioma que hayas elegido. Consigue uno en la biblioteca o compra una copia en una tienda de libros.
    • Empieza leyendo libros para niños. Los libros para niños pequeños en edad escolar están compuestos por fragmentos sencillos y claros, y cuentan con un vocabulario básico que describe acontecimientos de la vida comunes y fáciles de traducir. Si aprendes a leer en este nivel básico, esto puede alistarte para abordar lecturas más avanzadas.[18]
    • Escoge la traducción de una poesía. Escoge a un poeta conocido que escriba en el idioma que hayas elegido aprender y encuentra una versión de su libro que cuente con versiones en su idioma nativo y en el tuyo. Lee de manera lenta y cuidadosa, y compara la traducción con la versión original. Identifica la manera en la que determinados conceptos se han traducido junto con el lenguaje empleado para describirlos. Esta es una manera eficaz de comprender no solo un idioma nuevo, sino también una cultura nueva.[19]
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Acerca de este wikiHow

Megan Morgan, PhD
Coescrito por:
PhD en Inglés
Este artículo fue coescrito por Megan Morgan, PhD. Megan Morgan es una asesora académica del programa de posgrado en la Escuela de Asuntos Públicos e Internacionales de la Universidad de Georgia. Recibió su PhD en Inglés en la Universidad de Georgia en 2015. Este artículo ha sido visto 16 222 veces.
Categorías: Lectura y comprensión
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