¿Has notado que tu gran danés está inquieto o incómodo? Si notas un cambio en su conducta además de una hinchazón en su abdomen, es posible que tenga distensión abdominal (también conocida como torsión gástrica, estómago retorcido o dilatación y vólvulo gástricos). La distensión abdominal es un trastorno potencialmente letal. Los perros de razas grandes como el gran danés, el lobero irlandés y otros perros de pecho grande están predispuestos debido al espacio adicional que se crea en su abdomen. El gran danés es la raza que más comúnmente experimenta distensión abdominal y se ha demostrado que ocurre en más del 42 % de todos los especímenes.[1] El estómago puede hincharse o retorcerse durante varias etapas durante las que el perro se deteriora rápidamente. Toma en cuenta los síntomas de este trastorno y busca ayuda veterinaria inmediata. De este modo, el perro tendrá más posibilidades de sobrevivir.[2]

Parte 1
Parte 1 de 2:
Prestar atención a los signos de distensión abdominal

  1. 1
    Fíjate si presenta hinchazón. El estómago del perro puede estar hinchado si cuando lo tocas se escucha un sonido timpánico, parecido al de un tambor. Esto significa que el estómago está lleno de gases. Si bien la hinchazón es el síntoma más obvio de distensión abdominal, puede ser difícil de detectar en un gran danés debido a su gran tamaño. Si no sabes si tiene distensión estomacal, habla con un veterinario en vez de esperar a que los síntomas mejoren. El tratamiento oportuno puede aumentar considerablemente las posibilidades de que sobreviva.[3] El aumento de la presión estomacal puede conducir a lo siguiente:[4] [5]
    • hinchazón
    • cierre del estómago (de modo que quede sellado y lleno de aire)
    • suspensión del suministro de sangre que va a la pared del estómago
    • disminución del suministro de sangre que va a los órganos principales
    • insuficiencia de órganos
    • acumulación de toxina en el torrente sanguíneo
    • choque a causa de los cambios importantes en los electrolitos y la presión arterial
    • muerte a causa de la disminución de la presión arterial y la acumulación de toxinas
  2. 2
    Revisa la boca del perro. Levanta los labios del gran danés y mira sus encías. Deben tener un color rosa saludable y el color debe volver rápidamente si las presionas y quitas el dedo. Si notas que las encías están pálidas o cenicientas, o que permanecen blancas después de presionarlas, es posible que el perro tenga distensión estomacal.
    • Si las encías del perro están inusualmente de color rojo oscuro, azul o blanco, busca atención médica de forma inmediata.[6]
  3. 3
    Presta atención a la respiración y el pulso. El perro puede tener distensión estomacal si tiene una respiración agitada que se oiga pesada y rápida. Puede parecer que el perro jadea en vez de respirar. Si tiene distensión abdominal, el pulso del gran danés también será rápido, como si acabara de hacer ejercicio.[7]
    • Bajo condiciones normales, el ritmo cardíaco de un gran danés es de alrededor de un latido por minuto. También debe respirar cada dos a tres segundos durante el reposo.[8]
  4. 4
    Fíjate si babea. El gran danés puede babear intensamente y tener tiras de saliva colgándole de la boca. Eso sucede cuando el estómago está sellado, lo cual hace que quede saliva ingerida en la boca. El gran danés deja de tragarla y empieza a babear.[9]
    • También puedes detectar arcadas secas en el perro. Si ha comido recientemente, pero experimenta arcadas, ponte en contacto inmediatamente con un veterinario. Este es un signo clásico de distensión abdominal.
  5. 5
    Toma en cuenta el tipo de cuerpo del perro. Los perros de pecho grande y cuerpo estrecho tienen un riesgo alto de distensión abdominal. Debido a su anatomía particular, el gran danés tiene un riesgo más alto de sufrir este trastorno. El estómago grande de un gran danés está suspendido en solo dos puntos dentro del abdomen, como una hamaca. Si el estómago está lleno de comida y de gas, puede volverse inestable y darse la vuelta sobre sí mismo, especialmente si el gran danés hace ejercicio o rueda después de comer.[10]
    • Algunas otras razas que tienen un riesgo alto de distensión abdominal incluyen pastor alemán, setter irlandés, setter rojo, san bernardo y braco de Weimar.
    Anuncio

Parte 2
Parte 2 de 2:
Diagnosticar la distensión abdominal

  1. 1
    Controla la conducta del perro. De manera más notoria, el gran danés puede sentirse incómodo y ser incapaz de acomodarse. También puede parecer ansioso y mirar con frecuencia a los costados, en los que puedes notar hinchazón a medida que el aire llene su estómago. A medida que la distensión abdominal empeora, el perro puede angustiarse cada vez más. Puede quejarse o aullar para vocalizar el dolor y la incomodidad que siente. Si no recibe tratamiento, entrará en estado de choque y puede colapsar a medida que el sistema circulatorio se debilite.[11]
    • La distensión generalmente se asocia al hecho de haber comido recientemente. Después de que el perro coma, es posible que notes que se inquieta y que camina de un lado a otro.
  2. 2
    Llama a un veterinario. Si sospechas que el perro tiene distensión abdominal, visita a un veterinario de inmediato. Llama al veterinario o reúnete con él para hablar de los síntomas del gran danés. Debido a que el tratamiento oportuno es esencial, es mejor ser muy precavido y buscar atención médica tan pronto como veas los signos de distensión abdominal.
    • Incluso con atención veterinaria, alrededor del 25 al 33 % de los perros con distensión abdominal mueren, por lo que el tratamiento oportuno es importante.[12]
  3. 3
    Pide que le hagan un examen físico al perro. El veterinario palpará el abdomen del perro para detectar signos de tímpano (acumulación de gas) y verificará si hay signos de choque. Si sospecha que tiene distensión abdominal, puede insertar un catéter de diámetro grande en el estómago, en donde se acumula la mayor cantidad de gas. Esta medida eliminará la presión inmediata.[13]
    • Si sale gas fétido a través del catéter, es muy probable que el gran danés tenga distensión abdominal.
  4. 4
    Pide que le hagan pruebas adicionales. Es posible que el veterinario deba confirmar el diagnóstico de distensión abdominal con pruebas adicionales. Durante una prueba, el gran danés tendrá que acostarse de costado mientras se le toma una radiografía de la parte delantera del abdomen. Si la radiografía muestra el estómago dilatado por la presencia de aire y de tejido blando que lo atraviesa, el veterinario puede confirmar la distensión abdominal.[14]
    • El veterinario también puede ordenar un ultrasonido para ver la ubicación del bazo. Sin embargo, es más probable que el veterinario quiera comenzar a aliviar la presión estomacal y realizar una cirugía correctiva.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Pippa Elliott, MRCVS
Coescrito por:
Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios
Este artículo fue coescrito por Pippa Elliott, MRCVS. La Dra. Elliott es una veterinaria con más de 30 años de experiencia. Se graduó en la Universidad de Glasgow en 1987, y ha trabajado como cirujana veterinaria durante 7 años. Después, la Dra. Elliott trabajó como veterinaria en una clínica de animales durante más de una década. Este artículo ha sido visto 3817 veces.
Categorías: Mascotas y animales
Anuncio