Cómo dibujar un ojo con lápices de colores

Elige la marca de lápices de colores que usarás antes de comenzar a dibujar. Cualquier marca está bien, pero usar lápices más suaves ayudará a la difuminación de los colores. Un ejemplo de buena marca es la Prismacolor Premier, que se muestra en la imagen de arriba.

Busca una fotografía de referencia. Será mucho más fácil seleccionar los colores correctos si tienes una foto para observarla, como así también ayudará a hacer la forma y la sombra.

• Puedes usar una foto de tu propio ojo o una de internet.

Dibuja el boceto del ojo con un lápiz tradicional. Presta atención al tamaño del conducto lagrimal y al de la línea de agua, ya que esto será importante para hacerlo lucir realista. También observa las áreas donde haya brillos o reflejos; debes dibujar estas áreas para que puedas evitar colorear dentro de ellas. Si tienes pensado volver luego a las áreas luminosas con un bolígrafo de gel blanco, solo dibuja las zonas de luz más grandes.

Con un marcador o un bolígrafo negro, colorea la pupila y otras áreas muy oscuras, como la parte superior del iris.

• No dibujes las pestañas todavía, pues lo harás después.

Elige los colores que planeas usar. Pruébalos antes de usarlos para asegurarte de que sean del mismo color que en la foto de referencia.

• Un lápiz blanco te ayudará a difuminar algunas áreas si cometes un error.
• No afiles mucho los lápices, ya que es probable que la punta se rompa si es muy afilada.

Borra el boceto del iris para que sea menos visible. Hazlo para que el grafito del lápiz negro no se mezcle con los colores.

Utiliza el color más claro que hayas elegido para rellenar las áreas con más luz en la foto. No rellenes las áreas donde dibujaste el reflejo o brillo del ojo.

Continúa rellenando las áreas más claras y agrégale algunas áreas oscuras de detalle. Recuerda que es mucho más fácil oscurecer que aclarar colores.

Utiliza un color más oscuro para delinear el contorno del iris.

Colorea las áreas más oscuras del iris. La parte superior del iris probablemente sea una de esas áreas, como también algunos detalles.

Si alguna de las áreas de brillo no son totalmente blancas en la foto, coloréalas con el color correcto.

Comienza agregándole colores más intensos si es necesario, con cuidado de no excederte. Agregarle más color luego es más fácil que eliminarlo.

Con un lápiz color negro, repasa suavemente las áreas del iris con textura. Esto servirá como referencia para luego ayudarte a saber dónde están las partes más profundas del iris.

Colorea el iris con el color de base. Este color será el que se vea de forma más prominente en el iris, como anaranjado, marrón claro o azul. Trata de evitar elegir un color oscuro.

Colorea con un color más intenso para complementarlo con el color de base. En el caso del anaranjado, puedes usar anaranjado más brillante o incluso rojo si lo usas con cuidado.

Agrégale más sombra alrededor del iris y concentra la mayoría de la sombra en la parte superior.

Añádele color blanco al centro del iris con un anillo alrededor de la pupila. Esto hará que se vea más tridimensional.

Con un color de tono medio, repasa las áreas de la piel que tengan más sombra.

Continúa superponiendo colores para que se vuelva más oscuro a medida que avances.

Agrega un color oscuro en el pliegue del ojo y en otras partes del dibujo que tengan más sombra.

Dibuja las pestañas. Es más fácil hacerlas con un marcador o bolígrafo negro, pero también puedes usar un lápiz de color. Asegúrate de que sean curvas y no vayan recto hacia arriba. Observa la foto de referencia para ver cómo se curvan por debajo de la línea de agua.

Finaliza con las pestañas superiores, asegurándote de que vayan en la dirección correcta según el ángulo de la foto y que varíen en longitud.

Añade la línea de pestañas inferior dibujando las pestañas en el borde de la línea de agua cuidadosamente.

Sombrea la esquina interna de las partes blancas del ojo. En una foto con luz más fría, utiliza color gris. Si la foto tiene luz más cálida, usa un tono más rosáceo.

Colorea el conducto lagrimal y observa algunas líneas y sombras en la foto de referencia que te ayudarán a que el dibujo sea más realista.

Extiende el sombreado de las partes blancas del ojo. También puedes añadirle reflejos o sombras de las pestañas.

Con un color rojo o morado oscuro, dibuja suavemente las venas del ojo. No las hagas muy visibles o el ojo quedará poco realista. Presta atención a las partes de la foto donde las venas sean más visibles.