Este artículo fue coescrito por Emily Listmann, MA. Emily Listmann es una tutora particular en San Carlos, California. Ha trabajado como maestra de estudios sociales, coordinadora de currículo y maestra de preparación para el SAT. Recibió su maestría en Educación en la Escuela de Postgrado en Educación de Stanford en 2014.
Las tareas pueden resultar estresantes y aburridas con frecuencia. Desafortunadamente, si estás en la escuela, son parte de la vida. Si constantemente les temes a las tareas, debes buscar algunas formas de disfrutarlas. Así, los estudios serán más agradables para ti en general. Puedes empezar con las materias que te interesan, tomar descansos y recompensarte, y esforzarte por cambiar tu forma de pensar con respecto a las tareas en general.
Pasos
Parte 1
Parte 1 de 3:Planificar el tiempo para hacer las tareas
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1Elige un momento del día en el que te sientas con energía. Si quieres disfrutar de las tareas, la hora en que empieces puede hacer una gran diferencia. Todas las personas se sienten con más energía o más cansancio a ciertas horas del día. Es poco probable que disfrutes de las tareas si te sientes agotado mientras intentas estudiar. Elige un momento del día para ponerte a trabajar durante el cual tengas un impulso de energía natural.[1]
- Puede ser de utilidad tomarte unos días para medir tus altibajos naturales de energía. Quizás descubras que, al final de la tarde, sientes un bajón repentino de energía. Sin embargo, a medida que se aproxima la noche, quizás tu energía aumente de manera repentina. Por lo tanto, en lugar de hacer las tareas al salir de la escuela, puedes hacerlas después de la cena todas las noches.
- Te sentirás más feliz y productivo si estudias durante un momento en el que tu energía está en su punto máximo. Parecerá que haces las tareas más rápido y no tendrás tantas dificultades para concentrarte.
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2Planifica empezar con las materias que despierten tu interés. Puedes meterte de lleno a hacer las tareas si empiezas con algo que disfrutes. Si odias las tareas semanales de álgebra, no empieces con eso. Empezarás de mal humor y es probable que esto empeore a medida que avanzas en una materia que odias. En lugar de eso, empieza con una tarea que en verdad te guste. Por ejemplo, si te encanta la clase de escritura, empieza por allí.
- Puedes alternar entre las materias que te gustan y las que no. Esto puede motivarte a medida que avanzas con las materias que te aburren. Por ejemplo, si te encanta la ciencia, pero odias la historia, puedes hacer la mitad de la tarea de ciencias, luego la mitad de la tarea de historia y luego regresar a la de ciencias.
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3Busca un buen lugar para trabajar. El entorno donde trabajas puede afectar cuánto disfrutas de hacer las tareas. Si trabajas en un área donde hay muchas distracciones, tendrás más dificultades para terminar las tareas. Esto puede causarte sentimientos de estrés y frustración. En lugar de eso, elige un ambiente divertido y relajante.[2]
- Incluso algunos cambios pequeños pueden hacer que la hora de las tareas sea más agradable. Por ejemplo, podrías acercar el escritorio a la ventana. La luz natural puede crear un entorno más tranquilo y puedes ver hacia arriba de vez en cuando para disfrutar de la vista.
- También podrías estudiar fuera de la casa. Si te encanta pasar el rato en una cafetería local, puedes hacer las tareas allí. Puedes premiarte con un latte o un café a medida que vayas avanzando con las tareas.
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4Haz una lista de reproducción de música para hacer tareas. La música de fondo puede hacer que el estudio sea más agradable y divertido. Haz una lista de reproducción de música para hacer las tareas, e incluye canciones que te den ánimos y te mantengan activo. Las tareas pueden ser una experiencia más agradable con un poco de música de fondo.[3]
- Es posible que debas probar con distintas canciones, ya que algunas podrían distraerte. Por ejemplo, si una canción hace que quieras pararte y bailar, quizás no sea recomendable incluirla en la lista de reproducción para hacer tareas, porque hará que pierdas la concentración. Algunas personas consideran que la música clásica es muy útil a la hora de estudiar.
- No toda la gente puede concentrarse con música de fondo. Si te resulta más difícil estudiar con música, puedes omitir las listas de reproducción y concentrarte en otras formas de disfrutar de las tareas.
Parte 2
Parte 2 de 3:Motivarte
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1Toma algunos descansos. Quizás sea difícil mantener la motivación mientras haces las tareas, sobre todo si tienes mucho trabajo por hacer. Por eso, es recomendable motivarte con algunos descansos breves. Crea un horario en el que te premies con algunas pequeñas pausas.[4]
- Durante los descansos, puedes hacer algunas cosas como caminar, meditar, hacer estiramientos o comerte un bocadillo.
- Muchas personas consideran que es más efectivo trabajar en períodos cortos. Por ejemplo, puedes planificar trabajar en intervalos de media hora a 45 minutos, y luego descansar de 5 a 10 minutos.
- Sin embargo, debes tener cuidado con los descansos. Asegúrese de programar los descansos con prudencia para evitar pasarte. Si tomarás un descanso de 10 minutos cada 40 minutos para acceder a Facebook, programa un temporizador en el teléfono para asegurarte de no posponer las tareas por pasar horas en las redes sociales.
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2Prémiate. Las tareas pueden ser más agradables si sabes que trabajas para lograr una meta. Por supuesto, las tareas traen consigo muchas recompensas abstractas y a largo plazo, como las buenas calificaciones y el aprendizaje de cosas nuevas. Sin embargo, algunos premios concretos y a corto plazo pueden ser de utilidad en el momento. Elige un pequeño capricho, como una golosina, que te motive a esforzarte en los estudios. Por ejemplo, podrías comerte un bocadillo cuando termines la tarea de matemáticas.[5]
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3Considera la posibilidad de formar un grupo de estudio. Puedes divertirte más mientras estudias y haces las tareas si lo haces en grupo. Podrás motivarte con los demás miembros del grupo, disfrutar de la compañía y tener breves distracciones. Un grupo de estudio también puede ser de utilidad si tienes dificultades con alguna materia en particular, ya que un amigo experto podría ayudarte con una tarea difícil.[6]
- Fíjate bien a quién incluirás en un grupo de estudio. Aunque quieres disfrutar, también debes terminar el trabajo, así que elige a estudiantes que sean lo suficientemente serios para evitar distraerte durante toda la noche.
- Todos los miembros del grupo pueden pensar en algunas formas de divertirse. Por ejemplo, pueden acordar que harán las tareas en silencio durante 40 minutos y luego tomarán un descanso de 15 minutos para conversar.
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4Tómate el tiempo. Un juego de "Vencer al reloj" puede ayudarte a hacer las tareas de una forma más divertida y rápida. Mira cuántos problemas de matemáticas puedes resolver en 15 minutos. Luego, trata de batir ese récord. Si te pones un reto, las tareas pueden parecer un juego. Si trabajas con un grupo de estudio, puedes competir con tus amigos. Incluso puedes establecer un premio como motivación. Por ejemplo, el perdedor deberá comprarle una taza de café al ganador.
- Asegúrate de no hacer un mal trabajo. Si quieres batir un récord, puedes hacer la tarea sin demora. Esfuérzate por trabajar de una forma eficaz y no deprisa.
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5Identifica la relevancia de las materias. Dedica unos cuantos minutos a buscar en Internet de qué forma se aplica al mundo actual lo que estés estudiando. Por ejemplo, si estás aprendiendo sobre la exploración europea, algunos artículos sobre la controversia del Día de la Raza pueden volver a despertar tu interés en el tema.
- Habla con tus padres para saber de qué forma les afecta en la actualidad el tema que estés estudiando.
- Ten cuidado de no distraerte con esta investigación adicional o perderás la concentración en la tarea. Programa un temporizador para evitar perder mucho tiempo.
Parte 3
Parte 3 de 3:Cambiar tu forma de pensar con respecto al aprendizaje
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1Fomenta un sentimiento de logro. No debes pensar que las tareas son una actividad aburrida que tienes que hacer. En lugar de eso, considéralas como parte del proceso de aprendizaje, la finalización de los estudios y una parte normal de tu rutina diaria. Permítete sentir que tuviste un logro cuando termines las tareas. Esto te dará una sensación de motivación, por lo que será más probable que las disfrutes.[7]
- Puede ser de utilidad hacer una lista de las tareas pendientes. Puedes tachar los estudios de la lista y esto te permitirá tranquilizarte y relajarte. Además, tendrás una sensación de logro cada vez que taches un elemento de la lista.
- Cuando termines las tareas, analiza por un momento lo que has logrado. Trata de sentirte orgulloso por haber terminado el trabajo. De esta forma, aprenderás a esforzarte para obtener esa sensación de logro en el futuro.
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2Evita postergar las cosas. La postergación es una gran tentación, sobre todo si no te gusta hacer tareas. Sin embargo, la postergación reduce mucho tu capacidad de disfrutar de las tareas. Al final, te sentirás frustrado contigo mismo y lamentarás el tiempo que aplazaste las cosas cuando debías trabajar. Elimina las distracciones del tiempo de las tareas, ponte a trabajar y termina todo lo que tengas pendiente.[8]
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3Crea gráficos de tu progreso. Una buena forma de mantenerte motivado es representar tu progreso de forma gráfica. Si ya se acerca el final del año escolar, cuenta los días. Tacha un día en el calendario únicamente después de haber terminado el trabajo de ese día. También puedes hacer una lista de las tareas y tacharlas una a una a medida que avances. Esto puede contribuir a que tengas una sensación de logro. Puedes disfrutar más de las tareas si puedes hacer un seguimiento físico de tu progreso.[9]
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4Ten una visión de conjunto. También puede ser de utilidad trabajar teniendo en cuenta una perspectiva más amplia. Puedes disfrutar más si sabes que estás adquiriendo un conjunto impresionante de habilidades. Si empiezas a sentirte aburrido o frustrado a causa de una tarea, haz una pausa y piensa de qué forma te beneficiará en el futuro. Esto puede ayudarte a darle un nuevo valor a una materia, lo cual te permitirá disfrutarla más. [10]
- Si no te agradan las tareas de escritura, haz una pausa y examina de qué forma te ayudarán a conseguir un trabajo las buenas habilidades de escritura. Si no te gusta la clase de computación, ten en cuenta que, en la universidad y en el mundo laboral, es importante tener conocimientos básicos de computación.
Consejos
- Si un amigo tuyo es un estudiante serio, pídele consejos sobre cómo hacer que las tareas sean divertidas.
- Si estás estudiando para un examen, estudia durante 15 minutos y luego toma un descanso. Regresa a estudiar durante 15 minutos y luego toma otro descanso. Este método te ayudará a procesar la información, con lo que al final obtendrás mejores resultados.
Referencias
- ↑ http://www.pursuit-of-happiness.org/how-to-enjoy-studying-flow/
- ↑ https://www.oxford-royale.co.uk/articles/studying-fun.html
- ↑ https://www.oxford-royale.co.uk/articles/studying-fun.html
- ↑ https://www.oxford-royale.co.uk/articles/studying-fun.html
- ↑ https://www.oxford-royale.co.uk/articles/studying-fun.html
- ↑ https://www.oxford-royale.co.uk/articles/studying-fun.html
- ↑ http://forwardthinking.ashford.edu/enjoy-studying-matter-tedious-gets/
- ↑ http://forwardthinking.ashford.edu/enjoy-studying-matter-tedious-gets/
- ↑ http://forwardthinking.ashford.edu/enjoy-studying-matter-tedious-gets/