Cómo eliminar y prevenir las puntas abiertas

Información del autor

Las soluciones mágicas que desaparecen todas las puntas abiertas son solo temporales y no detienen el daño progresivo. Para eliminarlas de forma permanente, es necesario cortarlas. Sin embargo, hay cientos de maneras de evitar que vuelvan a aparecer. Prueba los siguientes métodos para tener un cabello suave y saludable.

Parte 1

Parte 1 de 4:
Eliminar las puntas abiertas

1
Revisa si tu cabello está dañado. Examínalo atentamente con la ayuda de un espejo y una buena iluminación. El cabello partido mayormente se da en las puntas, pero puede aparecer en cualquier parte del cabello. Las puntas abiertas y el daño relacionado pueden ocurrir de distintas formas. Si encuentras cualquiera de los siguientes, elimínalo usando las instrucciones que indicamos más adelante:
- Puntas de cabello que se parten en dos o más mechas
- Un agujero en medio del cabello (el cual es más visible si amontonas la mecha)
- Puntos blancos en la punta del cabello
- Nudos en una sola mecha (los cuales son más comunes en el cabello seco y rizado)
2
Córtatelas tú mismo. Si no necesitas un corte de cabello completo, encárgate tú mismo de las puntas abiertas. Córtalas usando un par de tijeras para el cabello, ya que las tijeras comunes pueden dañar el cabello y dar lugar a más puntas abiertas. Corta las mechas por separado, más o menos 6 mm (1/4 de pulgada) por encima de las puntas abiertas. Si cortas muy cerca de la parte dañada, esta podría volver a aparecer.
- Algunas puntas abiertas forman una bola pequeña directamente por encima del daño. Asegúrate de cortar por encima de él.
- Esto puede tardar mucho tiempo, sobre todo en el caso del cabello grueso y dañado. Sin embargo, mantendrás su longitud completa.
3
Córtate el cabello regularmente. El peluquero siempre puede cortar las puntas abiertas, pero generalmente quitará 0,6 a 2,5 cm (1/4 a 1 pulgada) de tu cabello junto con las puntas. Al final, todo el cabello se desgasta lo suficiente para requerir este tratamiento. El tiempo que debes esperar entre cada corte de cabello depende de tu tipo de cabello, salud capilar y del tiempo que estás dispuesto a pasar capturando tus propias puntas partidas. Esto puede ser de seis semanas a seis meses.
- Si no cortas las puntas abiertas tú mismo, evitar ir al peluquero no salvará tu cabello largo. Las puntas abiertas descuidadas se volverán cada vez más débiles y terminarán quebrándose.
4
Adopta medidas para salvar la longitud de tu cabello. Si cortar las puntas abiertas afecta la longitud deseada del cabello, considera cortártelo en capas. Pídele al peluquero que corte el cabello dañado en la capa de la superficie, mientras deja las capas inferiores y la longitud intacta. Si tienes cabello de textura afro, un texturizador suave puede lograr un efecto similar, lo cual te permitirá manipularlo con más facilidad y evitar cortar el cabello saludable.
5
Ten cuidado con los productos de reparación del cabello. Hay acondicionadores y otros tratamientos comerciales que aseguran "sanar" las puntas abiertas. Estos sellan las puntas abiertas para ocultarlas de la vista, pero el daño sigue estando allí. Puedes usarlos como una solución temporal, pero depender de ellos a largo plazo podría provocar un mayor daño.
- Dichos productos pueden ayudar a prevenir daños futuros en el cabello sano.

Parte 2

Parte 2 de 4:
Lavar, secar y cepillar el cabello para tenerlo saludable

1
Aplica champú con cuidado. El exceso de champú puede despojar al cabello de sus aceites saludables, lo cual lo deja vulnerable al daño. Sigue estos consejos para encontrar un régimen que minimice las puntas partidas:
- Lávate el cabello no más de tres veces por semana (o menos seguido si tienes rizos gruesos o cabello de textura afro).
- Lava solo el cuero cabelludo y el cabello más cercano a él. Deja que caiga el resto del cabello. Debe recibir suficiente lavado del champú para que caiga hacia abajo por sí solo.
- El agua caliente despoja al cabello de sus aceites protectores, así que enjuágalo con el agua más fría que puedas soportar.
- Si tu cabello sigue partiéndose rápidamente, prueba otro champú más suave. Evita los champús con sulfatos o parabenos.
2
Usa acondicionador. Después de lavarte con champú, aplica acondicionador a lo largo de la longitud del cabello. Déjalo remojar al menos 3 minutos antes de enjuagarlo.
3
Seca tu cabello suavemente. Secar el cabello frotándolo enérgicamente con una toalla no es una buena idea. Mejor, escurre suavemente el cabello empapado con una toalla para quitarle el exceso de agua. Una vez que lo hayas quitado, déjalo secar naturalmente con el aire.
- Si necesitas acelerar el proceso de secado, usa un secador a temperatura baja o media, de preferencia con aire frío. Sostenlo a varios centímetros de tu cabello para minimizar el daño.
- Si normalmente envuelves tu cabello en una toalla, mejor hazlo con una camiseta de algodón.
4
Acondiciónalo profundamente con regularidad. Si tu régimen de acondicionamiento no es eficaz, prueba un "acondicionamiento profundo" una o dos veces al mes. Esto implica aplicar un acondicionador que no se enjuaga o un aceite y dejarlo por un rato en el cabello. Los aceites como el aceite de jojoba y el aceite de coco son excelentes para esto. Este es un ejemplo de régimen de acondicionamiento:
- Moja tu cabello.
- Echa un poco (tamaño de una moneda) de acondicionador profundo o de aceite en la palma de la mano. Usa una pizca (del tamaño de una moneda de diez centavos americana) si el largo del cabello está por debajo del hombro y usa hasta 1/4 si el cabello llega hasta la cintura.
- Frótalo por todo el cabello.
- Déjalo reposar durante 5 minutos o 10 minutos para el cabello muy dañado.
- Enjuaga con agua fría.
5
Busca un peine o cepillo suave. El cepillo o peine debe ayudar a desenredar el cabello, no arrancarlo. La mejor opción para las personas con cabello grueso es un peine de madera de dientes anchos o uno de púas anchas. Las personas con cabello fino pueden usar un peine de madera de dientes estrechos o un cepillo con cerdas de jabalí u otras cerdas flexibles y naturales.
6
Cepíllate o péinate suavemente. Empieza en la parte inferior y avanza hacia arriba. Cuando te encuentres un nudo, detente y desenrédalo con los dedos antes de continuar cepillándote.
- Deja de peinarte hacia atrás. Esto tira de las escamas del cabello, lo cual lo vuelve quebradizo.
- No te cepilles más de lo necesario. Una vez que el cepillo o el peine pasen por tu cabello sin obstrucciones, habrás terminado.
- El cabello es muy frágil cuando está húmedo. Cepíllalo solo cuando esté seco, a menos que tengas un cabello rizado y muy grueso que solo puede cepillarse húmedo.

Parte 3

Parte 3 de 4:
Proteger tu cabello

1
Protege tu cabello mientras duermes. Duerme con el cabello en una trenza o moño para ayudar a prevenir los nudos y el rompimiento. También es útil ponerse una gorra de dormir o usar una funda de almohada de satén.
2
Lleva una dieta equilibrada. Asegúrate de comer las cantidades recomendadas de vitaminas y proteínas para garantizar que el cuerpo produzca el cabello más saludable que sea posible. Las grasas saludables como los ácidos grasos omega 3 también pueden ayudar a mantener el cabello brillante y sin daños.
- La vitamina E es especialmente útil. Está presente en muchos alimentos, como las nueces, las semillas, los aguacates, los aceites vegetales, algunas verduras de hoja verde y algunos pescados.
3
Aceita tu cabello para protegerlo. Usa un aceite rico en nutrientes como el aceite de almendras, el aceite de argán, el aceite de huevo, el aceite de ricino o el aceite de oliva extra virgen. Esto puede lubricar el tallo del cabello para evitar que se parta. Aplica aceite hasta dos veces por semana, déjalo durante toda la noche con una gorra y lávalo por la mañana.
- Evita los productos que contengan parafina o queroseno, ya que secan el cabello.
- Aplica aceite en el medio y en las puntas del cabello. Aplicar aceite cerca del cuero cabelludo puede provocar la acumulación de caspa o dañar las raíces.
4
Usa accesorios que no maltraten el cabello. Las bandas elásticas y ajustadas o las bandas con partes metálicas pueden dañar el cabello, en especial si las dejas por mucho tiempo. Los coleteros y las cintas tratan el cabello con más suavidad.
5
Aplica una mascarilla capilar. Una mascarilla capilar una vez por semana o cada dos semanas puede ayudar a mantener tu cabello saludable, hidratado y sin daños. Déjalo por 30 minutos, en cualquier parte excepto cerca del cuero cabelludo.
- Haz tu propia mezcla con aceite de oliva, miel y un acondicionador.

Parte 4

Parte 4 de 4:
Evitar el daño

1
Protege tu cabello del calor. El calor desnaturaliza las queratinas (proteínas) del tallo del cabello, lo cual lo debilita y lo hace propenso a tener puntas abiertas. Los tratamientos con calor son una causa importante de daño y puntas abiertas. Esto incluye: secado con aire caliente, estilismo por calor, alisado y ondulación por calor y tratamientos con vapor. Si los usas, toma las siguientes precauciones:
- No alises o uses otros tratamientos con altas temperaturas más de una vez cada dos semanas o de preferencia una vez al mes.
- Busca planchas u otras herramientas que permitan ajustar la temperatura con exactitud. Mantenlas por debajo de los 180 °C (356 °F).
- Hazle saber al estilista que prefieres tratamientos con bajas temperaturas.
2
Protege tu cabello antes de nadar en la piscina, el mar o el lago. Considera aplicar un hidratante especial para antes de la piscina. Otra alternativa es usar un acondicionador que no se enjuaga, aceitar tu cabello o usar una gorra para nadar. Enjuagar bien el cabello antes de nadar podría reducir su absorción de químicos dañinos. Asegúrate de enjuagarlo y lavarlo con champú lo más pronto posible después de nadar.
3
Lávate con agua blanda. Si tu cabello es delicado, los minerales o el cloro que contiene el agua pueden dañarlo. Considera un sistema de ablandamiento del agua si el agua local es "dura" y contiene altos niveles de carbonato de calcio. Si es necesario, usa un sistema de filtración para eliminar el cloro de tu zona.
4
Protege tu cabello del sol. Los rayos ultravioleta pueden ser tan dañinos para el cabello como para la piel. Usa tu cabello en un moño debajo de un sombrero o usa un acondicionador con protector solar que no se enjuaga.
5
Reduce tu dependencia de los productos para el cabello. Los tintes y las decoloraciones del cabello son especialmente dañinos, pero cualquier producto puede desgastar el cabello. Trata de usarlos solo cuando sea necesario para que tu cabello se mantenga saludable por mucho más tiempo.

Consejos

Bebe mucha agua para mantener tu cabello saludable.
Péinate con un peine de dientes anchos.
Usa aceite de almendras una vez a la semana.
Algunas personas aclaran su cabello con miel. Aunque solo tiene un efecto leve, este método es mucho menos dañino que los tintes comerciales para el cabello.
El vinagre de manzana puede ser útil después del uso excesivo de productos para el cabello.
No cepilles el cabello bruscamente; Hazlo lenta y suavemente.

Advertencias

Nunca ajustes una cola de caballo dividiéndola en dos secciones y tirando de ellas. Esto equivale a cepillar el cabello hacia atrás y puede provocar un daño significativo.