Las afeitadoras eléctricas se consideran herramientas increíblemente prácticas, ya que reducen de manera drástica el tiempo que pasas afeitándote y son más fáciles de llevar que una maquinilla de afeitar, una crema y una loción para después del afeitado. Sin embargo, una afeitadora eléctrica requiere un poco más de mantenimiento y cuidado para que continúe funcionando de manera óptima, por lo que debes aprender a desarmarla para limpiarla. El proceso de limpieza en sí mismo es mucho más complicado para una afeitadora eléctrica que para una maquinilla de afeitar.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Desarmar la afeitadora

  1. 1
    Sostén la afeitadora sobre el lavabo. Debido a que el objetivo es eliminar el vello y las células muertas de la afeitadora, lo mejor es que evites hacerlo sobre el piso. Debes limpiar la afeitadora sobre el lavabo para deshacerte con facilidad de los vellos sueltos y las células cutáneas con solo un poco de agua.
  2. 2
    Apaga y desenchufa la afeitadora. Algunas afeitadoras cuentan con un interruptor de encendido y apagado, mientras que otras tienen un interruptor que debes presionar para activar las cuchillas. De cualquier manera, debes asegurarte de que la afeitadora se encuentre apagada y la electricidad no circule a través de esta antes de comenzar. Si la afeitadora entra en contacto con el agua, podría dañarse o provocar un cortocircuito.
    • Si la afeitadora eléctrica funciona con baterías, lo mejor es que retires las baterías antes de iniciar el proceso de limpieza.[1]
  3. 3
    Separa el cabezal de la afeitadora. Si bien los modelos pueden variar, la mayoría cuenta con un cabezal extraíble. Es probable que encuentres un clip pequeño en la parte inferior del cabezal que debes presionar con el dedo para que se desprenda. En general, este es el único requisito para desarmar una afeitadora.
    • Por lo general, las afeitadoras eléctricas se ajustan en una de dos categorías: rotativas o de láminas. El desmontaje es un poco diferente para cada categoría, por lo que puedes consultar el manual de instrucciones de la afeitadora para más detalles.
    • Debes tener cuidado con las piezas que extraes de la afeitadora, ya que algunas son increíblemente delicadas, por lo que no deben limpiarse. Puedes consultar el manual del propietario para informarte hasta qué punto puedes desarmar la afeitadora y qué piezas debes limpiar.[2]
  4. 4
    Examina la afeitadora para detectar desperfectos. Debido a que estás a punto de limpiar la afeitadora, debes inspeccionarla durante un minuto para asegurarte de que no existan grietas en el armazón ni daños en el cabezal (por ejemplo, sobre las cuchillas). Además, debes revisar las juntas para verificar que no existan daños.[3]
    Anuncio

Parte 2
Parte 2 de 3:
Limpiar la afeitadora

  1. 1
    Golpea la afeitadora ligeramente para sacudir el vello. Debes sostenerla en ángulo de manera que el cabezal apunte hacia el lavabo. Luego, golpea suavemente el costado de la afeitadora con un dedo varias veces para sacudir la mayor parte del vello suelto. Debes repetir este procedimiento hasta que elimines todos los vellos.
    • Evita golpear la afeitadora contra el lavabo, ya que el impacto sobre la porcelana dura podría dañar las partes más delicadas.[4]
  2. 2
    Sacude las cuchillas de la afeitadora y las piezas giratorias. La mayoría de las afeitadoras eléctricas vienen con un cepillo pequeño específicamente diseñado para limpiarla. Después de separar el cabezal de la afeitadora, deberías ser capaz de alcanzar los mecanismos en los que podrían alojarse los vellos. Debes cepillar suavemente para evitar ocasionar rayones.
    • Si la afeitadora no viene con su propio cepillo, puedes utilizar un pincel pequeño. Asegúrate de que no haya pedazos de pintura seca adheridas a las cerdas, ya que estos podrían rayar, marcar o dañar los mecanismos de la afeitadora.[5]
  3. 3
    Limpia las afeitadoras lavables con agua del grifo. Algunas afeitadoras eléctricas están diseñadas específicamente para limpiarse con agua sin dañar el mecanismo. Para estos dispositivos, puedes utilizar agua caliente del grifo. También puedes utilizar un detergente si necesitas eliminar la suciedad de la afeitadora.
    • No todas las afeitadoras pueden limpiarse de esta manera, ya que algunas pueden dañarse de manera permanente al entrar en contacto con el agua. Debes consultar el manual del propietario antes de intentar limpiar una afeitadora con agua.[6]
  4. 4
    Deja que la afeitadora se seque. Utiliza una toalla para secar el armazón y las partes de la afeitadora. Luego, deja que se sequen al aire. Debes evitar ensamblar todas las piezas si aún existen gotas de agua atrapadas en el interior de la afeitadora.[7]
  5. 5
    Aplica un producto comercial en aerosol. Por lo general, el fabricante de la afeitadora es el que ofrece estos productos que sirven para lubricar y desengrasar las cuchillas y otros mecanismos.[8] Las instrucciones pueden variar dependiendo del tipo de limpiador, pero generalmente solo debes rociar un poco del producto sobre la afeitadora después de separarla del cabezal.
  6. 6
    Vuelve a ensamblar la afeitadora. La complejidad de este paso dependerá de cuán minuciosamente hayas tenido que desarmar la afeitadora. Debes invertir el orden del desmontaje, hasta que la afeitadora vuelva a encontrarse lista.[9]
    Anuncio

Parte 3
Parte 3 de 3:
Darle mantenimiento a la afeitadora

  1. 1
    Sacude el vello de la afeitadora con regularidad. Después de retirar el cabezal, debes golpear el armazón suavemente con el dedo para sacudir los vellos sueltos. Debido a que este constituye un procedimiento muy sencillo y solo te tomará unos cuantos segundos, puedes realizarlo después de cada afeitado, incluso si no planeas limpiar la afeitadora por completo.[10]
  2. 2
    Limpia la afeitadora de manera minuciosa una vez a la semana. El mantenimiento diario solo implica sacudir los vellos sueltos. Sin embargo, para limpiar la afeitadora más a fondo, debes cepillar el vello para extraerlo del motor y el ensamblaje de corte. Si dejas vellos en el interior, la afeitadora se deteriorará más rápido.[11]
  3. 3
    Reemplaza todas las partes de corte cada 18 o 24 meses. Este procedimiento asegura el funcionamiento óptimo de la afeitadora en el largo plazo.[12] Puedes conseguir repuestos directamente del fabricante de la afeitadora. Es probable que te parezca costoso, pero gastarás mucho menos dinero comprando repuestos originales que una afeitadora nueva debido a que la anterior se arruinó con repuestos baratos.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Personal de wikiHow
Coescrito por:
wikiHow Staff Writer
Nuestro equipo de editores e investigadores capacitados han sido autores de este artículo y lo han validado por su precisión y amplitud.

wikiHow's Content Management Team revisa cuidadosamente el trabajo de nuestro personal editorial para asegurar que cada artículo cumpla con nuestros altos estándares de calidad. Este artículo ha sido visto 6218 veces.
Anuncio