Hacer un diario puede ser una excelente forma de registrar tus pensamientos y de mantenerte en contacto contigo mismo(a). No obstante, empezar puede ser la parte más difícil. No te debes preocupar por hacerlo perfecto. Solo trata de escribir sobre tu día o sobre lo que pase por tu mente. Deja que todo fluya.

Método 1
Método 1 de 3:
Escribir la primera entrada

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    Haz la primera entrada. Escribe la fecha en la parte superior de la página de modo que sepas cuándo escribiste la entrada. Considera darle un título a tu entrada (por ejemplo, “La bitácora del capitán”) o empezar con algo como “Querido diario”. Incluye dónde estás y cómo te sientes (por ejemplo, “12/08/2016: me siento nervioso en el bus”). Es probable que en algún momento en el futuro vuelvas a leer este diario, por lo tanto, dale a tu futuro algunos puntos de referencia para refrescar tu memoria.
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    Empieza por escribir sobre tu día. No pienses demasiado sobre qué contar. Empieza por escribir sobre tu mañana o sobre lo que se te venga primero a la mente. Escribe sobre lo más emocionante que te haya pasado en el día o sobre tus amigos, tus clases o tu pareja.[1]
    • Escribe sobre la persona en quien has estado pensado últimamente, sobre lo que te dijo esa persona y sobre lo que alguna otra persona te dijo respecto a él o ella. Escribe sobre lo que pienses de esa persona.
    • Escribe sobre lo que hace que te sientas feliz y lo que hace que te sientas triste.
    • Escribe una historia. ¡El diario no tiene que ser necesariamente sobre ti! Haz un personaje y escribe la primera página de su diario.
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    ¡Deja que fluya! Haz como si le escribieras a un amigo cercano o a alguien en quien confías bastante. Tu diario es tu espacio para escribir sobre todo lo que piensas, lo bueno y lo malo. No te preocupes demasiado sobre lo que escribas. Lo importante es que empieces a escribir.[2]
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    Explica tus relaciones con las personas. En la primera entrada cuando menciones a las personas, escribe la relación que tengas con ellas. ¿Es tu mejor amigo, tu peor enemigo o tu pareja? De este modo, cuando vuelvas a leer tu diario en los años posteriores, sabrás lo que significaron esas personas para ti en ese momento de tu vida.[3]
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    Sigue escribiendo. Solo escribe lo que se te venga a la mente, sin importar cuán tonto parezca. Llenar tu diario no se trata de hacer que todo parezca perfecto. ¡Se trata de expulsar todas las palabras que tengas dentro de ti![4]
    • Si no puedes pensar en algo para escribir, entonces escribe sobre lo raro que va a ser escribir sobre ti mismo. Escribe sobre por qué no puedes pensar en otra cosa o sobre por qué quieres hacer un diario.[5]
    • Trata de establecerte un límite de tiempo. Establécete una alarma de 10 minutos y luego empieza a escribir. ¡Esto podría hacer que avances!
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    Cierra tu entrada. Cuando termines de escribir, incluye algunas líneas para terminar la entrada. Si le escribes “a” tu diario, entonces podrías terminar la entrada como si escribieras una carta, es decir, firmando tu nombre o con tus iniciales. No es necesario que escribas algo especial al final de la entrada; no obstante, eso te podría ayudar a sentir que terminaste.
    • Di algo variado como “Regresaré mañana con más cosas para contar, por ahora finalizo”.

Método 2
Método 2 de 3:
Decorar la primera página

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    Escribe las fechas de inicio y de finalización del diario. Si empiezas el diario en noviembre del 2016, entonces escribe “Noviembre de 2016”. Luego cuando termines el diario, puedes escribir el día o mes de cuando lo completaste. Podría verse como “Noviembre de 2016 - Febrero de 2017”. Más adelante cuando vuelvas a visitar tu diario, sabrás inmediatamente de qué periodo de tu vida es.
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    Escribe una advertencia para los fisgones. Si te preocupa que alguien pueda leer tu diario, puedes hacer que la primera página sea un mensaje para alguien que abra la cubierta frontal. ¡Deja en claro a todos que no deben leer nada! Podrías escribir:
    • “Este diario es propiedad de Ariana Sánchez. ¡Sigue leyendo bajo tu propia responsabilidad!”
    • “¡Diario personal! ¡No abrir!”
    • “Propiedad personal. ¡Por favor, no leer!”
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    Decora visualmente la primera página. Haz un dibujo o un garabato. Añade pegatinas que muestren tu personalidad. Pega con cinta o goma una imagen de algo que sea significativo para ti. ¡Haz que la primera página quede bonita de modo que eso te inspire a escribir cada vez que abras el diario!

Método 3
Método 3 de 3:
Hacer un perfil

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    Haz que la primera página sea un perfil. Pega con cinta o goma una fotografía tuya. Agrega pegatinas o haz un dibujo. Incluye información de identificación como referencia para tu “yo mayor” cuando vuelvas a leer ese diario. Considera escribir una “biografía” breve de ti que describa quién eres en ese momento de tu vida.
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    Incluye señas principales de identificación. Escribe tu nombre completo. También tu cumpleaños y tu edad para que así recuerdes qué edad tuviste cuando empezaste el diario. Incluye tu color de ojos y de cabello, junto con otras características de identificación.
    • Incluye a qué escuela vas y dónde trabajas. Escribe dónde vives (la ciudad, el estado e incluso tal vez la dirección).
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    Enumera a las personas importantes en tu vida. Escribe los nombres de tus mejores amigos, tus amores y tus peores enemigos. Ten cuidado: ¡si alguien alguna vez lee este diario, sabrá inmediatamente lo que sentiste por esas personas!
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    Anota lo que te gusta y lo que no te gusta. Puedes incluir lo que es favorito y menos favorito para ti respecto a cosas como comidas, bebidas, cantantes y caramelos. ¡Escribe sobre tu animal favorito!
    • Esto es solo por diversión. ¡Cuando uno mira al pasado puede ver cómo han cambiado los gustos!

Consejos

  • Decora la cubierta. Si no quieres que las personas fisgoneen tu diario personal, entonces colócale una etiqueta que diga algo aburrido como “Tarea de Álgebra”.
  • Encuentra un lápiz o lapicero con el que puedas escribir cómodamente. Elige un color que te guste, pero que también te sea fácil de leer. Usar un lapicero se ve bien y es permanente, pero al usar un lápiz podrás borrar más fácilmente y corregir los errores.

Advertencias

  • Todo lo que esté en tu diario tiene probabilidades de ser descubierto. Recuérdalo.
  • Procura ocultar tu diario en un buen escondite en caso de que alguien quiera tener acceso a él. Algunos buenos lugares podrían ser:
    • en el bolsillo de un abrigo viejo;
    • en una estantería o al colocar encima la cubierta de otro libro;
    • en el cajón de tus pantalones o de tu ropa interior;
    • debajo de tu almohada.

Cosas que necesitarás

  • un diario
  • un instrumento para escribir

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Categorías: Diarios y secretos