¿Quieres asombrar a tus amigos aparentando que puedes separar el pulgar del nudillo? Aprende este truco clásico que solo requiere tus manos, un espejo y un poco de práctica para quitarte el dedo.

Método 1
Método 1 de 2:
Practicar el truco

  1. 1
    Párate frente a un espejo para practicar. Es importante que puedas mirar como se ve el truco frente a la audiencia, para que puedas tener una idea del ángulo en que necesitas sostener los pulgares de modo que estén parcialmente ocultos.
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    Extiende la mano izquierda con la palma mirando hacia ti. Esto significa que el pulgar izquierdo se apoya sobre el borde de la mano que apunta al cielo, y la parte de atrás de la mano está mirando a la audiencia. Imagina dónde se parará tu audiencia (de preferencia directamente en frente de ti), y ten cuidado de no doblar la mano de modo que puedan mirar detrás de tu palma.
  3. 3
    Dobla el pulgar izquierdo hacia atrás en dirección a tu cuerpo. El pulgar debe doblarse en un ángulo de 90°, solo con la mitad inferior (la mitad debajo del nudillo) visible para alguien que esté parado directamente en frente de ti.
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    Dobla el pulgar derecho en un ángulo de 90° y ponlo sobre el borde de la mano izquierda de modo que los nudillos de los pulgares se toquen. Debe parecer como si tuvieras un pulgar muy largo, el pulgar izquierdo proporcionando la parte de abajo del nudillo, y la mano derecha formando la parte de arriba del nudillo, o la parte con la uña.[1]
  5. 5
    Enrolla los dedos índice y medio de la mano derecha encima del lugar donde los nudillos de los pulgares se tocan. Esto cubre la única zona donde es obvio que las personas pueden ver dos pulgares doblados que se mantienen juntos, en cambio solo ven tu pulgar izquierdo extendido sobre el borde de tu mano.
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    Desliza el pulgar derecho hacia la derecha, a lo largo de la longitud de la mano izquierda. Los dedos índice y medio se moverán con naturalidad con el pulgar. Parecerá que la punta del pulgar izquierdo se ha desprendido y que lo estás separando.[2]
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    Practica este movimiento hasta que se sienta cómodo y fluido. Quizá te des cuenta de que tienes que ajustar el ángulo en que doblas los pulgares para que se vea convincente.
    • Si eres zurdo, el truco es exactamente lo mismo, solo inviértelo de modo que el pulgar derecho sea la parte inferior del pulgar y el pulgar izquierdo haga la punta.
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Método 2
Método 2 de 2:
Ejecutar el truco

  1. 1
    Aprende un poco de distracción para ocultar el proceso a la audiencia. Una vez que hayas dominado el movimiento básico, necesitas aprender cómo entrar y salir del truco con unos movimientos fluidos, en lugar de claramente estar preparando el truco ante los ojos de la audiencia.[3]
  2. 2
    Sostén la mano derecha sobre el antebrazo izquierdo. Los dedos deben estar sobre el lado del brazo que mira a la audiencia y el pulgar debe estar sobre el otro lado del brazo, donde es visible solo para ti.[4]
  3. 3
    Desliza los dedos hacia abajo por todo el antebrazo con un movimiento fluido. Puedes mover los dedos un poco si quieres hacerlo dramático y también alejar los ojos de la audiencia de tus pulgares. Mantén el pulgar izquierdo, lejos de la mano.[5]
  4. 4
    Cubre el pulgar izquierdo con los dedos de la mano derecha. Tan pronto como el pulgar izquierdo esté cubierto, pon los pulgares en posición. Harás el cambio detrás de los dedos que usas para cubrir, doblando tus pulgares izquierdo y derecho, y juntándolos nudillo con nudillo.
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Categorías: Trucos con el cuerpo
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