Los lechos ungueales saludables son esenciales para tener fuertes y hermosas las uñas de los dedos de las manos y los pies. El lecho ungueal es la capa de piel debajo de las uñas que le da apoyo y asegura la uña en su lugar en el dedo.[1] Al igual que las uñas de las manos y los pies, los lechos ungueales también crecen. Sin embargo, no se vuelven más largos con el paso del tiempo.[2] A pesar de ello, puedes ayudar a que el tejido de los lechos ungueales crezca y se regenere a una tasa saludable si adoptas buenos hábitos de aseo y te haces los tratamientos correctos después de lesionarte un lecho ungueal.

Método 1
Método 1 de 2:
Adoptar buenos hábitos de aseo

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    Aplica una loción alrededor de la punta del dedo para hidratar toda la uña.[3] Usa la mano para frotar la loción en y alrededor de las uñas de la mano opuesta. La hidratación es una excelente medida preventiva que evita que las uñas se sequen.
    • El aceite para cutículas también es una buena opción para hidratar. Usa el pincel aplicador que viene con el envase para aplicarlo de manera uniforme alrededor de la punta de los dedos.[4]
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    Deja de morderte las uñas. Si tienes la costumbre de morderte las uñas, rompe este hábito, dado que puede lastimar los lechos ungueales.[5] Además, morderte las uñas puede introducir bacterias en los bordes de los lechos ungueales, lo que puede causar una infección.[6]
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    No te hagas un trabajo de manicura acrílica. Procura no pedir este servicio cuando vayas al salón de belleza de uñas. Por más hermoso que quede, el proceso es extenso. Después de dos semanas, tendrás que regresar al salón para el mantenimiento y, con el tiempo, para quitarte el trabajo. El procedimiento de eliminación consiste en mojar las uñas con acetona por casi una hora o usar herramientas especiales para quitar las uñas postizas. De todas formas, el proceso mecánico o químico lastimará los lechos ungueales.[8]
    • Las uñas de gel que se pueden sumergir para quitar de los dedos son una mejor alternativa de manicura.
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    Frota vinagre en las uñas con un hisopo antes de aplicar cualquier esmalte. Usa un hisopo impregnado con vinagre blanco para quitar los residuos naturales de las uñas. Si las limpias con anticipación, te asegurarás de que la manicura se aplique en un entorno limpio, lo que es una buena noticia para los lechos ungueales.[9] Si las uñas están limpias, existe un menor riesgo de que se acumulen bacterias.[10]
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Método 2
Método 2 de 2:
Hacerte el tratamiento correcto después de una lesión

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    Reúnete con un médico para hablar de tus opciones. Habla con tu médico antes de hacerte cualquier tratamiento de reparación de los lechos ungueales para que crezcan o vuelvan a crecer. Existen muchas formas de tener lechos ungueales saludables que vuelvan a crecer, pero el plan de tratamiento podría ser distinto, dependiendo del tipo de lesión que tengas.[11]
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    Recibe un injerto de lecho ungueal si has perdido una parte del lecho ungueal. Haz que un médico repare un lecho ungueal dañado o parcialmente despegado al aplicar un injerto de otro lecho ungueal en el área lesionada. Esto puede proporcionar resultados más instantáneos. Un injerto puede ayudar al lecho ungueal a comenzar a crecer nuevamente.[12] Las lesiones en los lechos ungueales de este tipo pueden ocurrir cuando se aplica mucha presión o fuerza en la uña, como golpearse el dedo.[13]
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    Recibe suturas si el lecho ungueal está separado del dedo. Un cirujano de manos aplicará suturas especiales para reparar el lecho ungueal y realinear el hueso del dedo, en el caso de una lesión importante. Este procedimiento reconecta físicamente el lecho ungueal a la punta del dedo, lo que permite que el proceso de crecimiento continúe. Estas lesiones ocurren después de momentos de traumas intensos, como golpearse el dedo con una puerta.[15]
    • En ocasiones, se necesita agregar un alambre para fijar el hueso en su lugar.
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Cosas que necesitarás

  • loción
  • aceite para cutículas
  • vinagre blanco
  • hisopo

Acerca de este wikiHow

Mia Rubie
Coescrito por:
Artista de uñas
Este artículo fue coescrito por Mia Rubie. Mia Rubie es una artista de uñas y propietaria de Sparkle San Francisco, un estudio de uñas con sede en San Francisco, California. Tiene más de ocho años de experiencia en gestión y arte de uñas, y es conocida por sus diseños extravagantes y su ojo artístico para los colores. Sus clientes incluyen a Sephora, Target y Vogue. Su trabajo ha aparecido en San Francisco Chronicle y StyleCaster. Tiene una licenciatura en Administración de Empresas con un enfoque en operaciones empresariales y de pequeñas empresas de la Universidad Estatal de San Francisco. Puedes encontrar su trabajo en su cuenta de Instagram @superflynails.
Categorías: Cuidado de las uñas
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