Cualquier persona que alguna vez haya tenido que arrojar restos de papas fritas a la basura ha deseado que existiera un método excelente para recalentarlas. Por fortuna, es fácil recalentar las papas fritas hasta que vuelvan a quedar crujientes, siempre y cuando no utilices un microondas. Puedes dejarlas unos minutos en una sartén sobre la estufa, una charola en el horno o la canastilla de una freidora de aire para conseguir papas fritas deliciosas que sepan como si acabaras de prepararlas por primera vez.

Método 1
Método 1 de 4:
Recalentarlas en la estufa

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    Calienta una sartén a fuego de medio a alto durante 2 minutos. Enciende una hornilla de la estufa y coloca la sartén para que se caliente antes de agregarle las papas fritas. Para conseguir papas fritas más crujientes, puedes utilizar una sartén de hierro fundido, ya que conserva el calor mejor que una sartén antiadherente.[1]
    • Si no cuentas con una sartén de hierro fundido, puedes utilizar la sartén más pesada que tengas.
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    Agrega 2 cucharaditas de aceite y caliéntelo durante 30 segundos. Para evitar que el aceite se queme, debes utilizar uno que tenga un punto de humeo alto (por ejemplo, aceite vegetal, de canola o de maní). Deja que el aceite se caliente antes de colocar las papas fritas en la sartén.[2]
    • Si vas a recalentar más de un puñado de papas fritas, debes utilizar de 1 a 2 cucharaditas adicionales de aceite.
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    Agrega 1 taza (85 g) de papas fritas en la sartén. Trata de acomodar las papas fritas en una sola capa para lograr que sus lados queden crujientes. Si deseas recalentar más de un puñado de papas fritas, puedes hacerlo por tandas para evitar que la sartén se abarrote.[3]

    Consejo: si vas a recalentar papas fritas para varias personas, considera la posibilidad de emplear el método del horno, ya que podrás recalentar una charola entera de papas a la vez.

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    Cocina las papas fritas de 2 a 5 minutos y voltéalas a la mitad de ese tiempo. Deja que las papas fritas se cocinen de 1 a 2 minutos aproximadamente antes de voltearlas con una espátula plana. Luego, calienta las papas fritas por un minuto más y voltéalas nuevamente para que se calienten por todos los lados.[4]
    • Si vas a recalentar papas fritas delgadas, es probable que solo tengas que calentarlas de 2 a 3 minutos, mientras que las papas fritas gruesas (para acompañar carnes) tardarán más de 5 minutos.
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    Traslada las papas a un plato forrado con papel absorbente y sírvelas. Arranca de 1 a 2 pedazos de papel absorbente y extiéndelos en un plato. Luego, utiliza una espumadera para pasar las papas fritas de la sartén al papel absorbente. Sirve las papas fritas de inmediato mientras aún se encuentren crujientes.[5]
    • El papel absorberá el exceso de grasa de las papas fritas.

Método 2
Método 2 de 4:
Utilizar el horno

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    Calienta el horno a 230 °C (450 °F) y forra una charola con papel de aluminio. Toma una charola para hornear con borde y presiona una lámina de papel de aluminio sobre ella. La lámina evitará que las papas se adhieran a la charola.[6]
    • Es importante que utilices una charola con borde para que las papas fritas no se salgan cuando las traslades al horno.
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    Esparce las papas sobre la charola para hornear. Trata de distribuir las papas fritas de manera uniforme sobre la charola para que no se adhieran ni se vuelvan pastosas. Para conseguir papas más crujientes, trata de acomodarlas en una sola capa.[7]

    Consejo: si vas a recalentar papas fritas para varias personas, puedes dividirlas entre 2 charolas para que consigas la mejor textura.

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    Hornea las papas fritas de 2 a 3 minutos. Coloca la charola en el horno precalentado y deja que las papas se calienten. Si vas a recalentar papas fritas finas, verifícalas una vez que hayan permanecido en el horno durante 2 minutos, pero deja las papas más gruesas por un minuto más.[8]
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    Retira la charola de papas fritas una vez que estén calientes y crujientes. Abre la puerta del horno y utiliza una espátula para sacar una papa frita. Córtala por la mitad para verificar si está caliente. El proceso terminará cuando las papas se encuentren completamente calientes y presenten un pequeño crujido.[9]
    • Si la papa aún está fría en el centro, debes dejar el resto de papas fritas en el horno durante 1 minuto más y verificarlas nuevamente. Ten en cuenta que las papas no tardarán mucho en calentarse.

Método 3
Método 3 de 4:
Utilizar una freidora de aire

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    Enciende la freidora de aire a 175 °C (350 °F). Enchufa la freidora y caliéntala durante unos 2 minutos antes de colocar las papas fritas en la canastilla. Si calientas la freidora con anticipación, ayudarás a que las papas fritas se recalienten de manera uniforme.[10]
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    Acomoda las papas fritas en la canastilla. Coloca de 1 a 2 puñados de papas fritas en la canastilla de la freidora y sepáralas para que queden uniformes. Trata de no llenar más de la mitad de la capacidad de la canastilla, ya que las papas fritas no se volverán crujientes al recalentarse.[11]
    • Si deseas recalentar muchas papas fritas, considera la posibilidad de hacerlo por tandas.

    Consejo: puedes recalentar otros alimentos (por ejemplo, tater tots o pizza) en la freidora junto con las papas fritas.

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    Calienta las papas fritas de 3 a 4 minutos y agítalas a la mitad de ese tiempo. Coloca la canastilla de papas fritas en la freidora y caliéntalas de 2 a 3 minutos. Luego, detén el dispositivo y retira la canastilla para que puedas agitar un poco las papas fritas. Vuelve a colocar la canastilla y termina de recalentar las papas fritas de 1 a 2 minutos más.[12]
    • Para recalentar papas fritas gruesas, es probable que necesites agregar un minuto más al tiempo de cocción.
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    Esparce las papas fritas sobre un plato forrado con papel absorbente antes de servirlas. Extiende el papel absorbente sobre un plato y apaga la freidora. Con cuidado, vuelca las papas fritas recalentadas de la canastilla sobre el papel para que absorba el exceso de grasa. Luego, disfruta tus papas fritas calientes y crujientes.[13]

Método 4
Método 4 de 4:
Conseguir mejores sabores y texturas

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    Condimenta las papas fritas antes de servirlas. Aunque las papas fritas originalmente sean saladas, es probable que necesiten un aumento de sabor después de recalentarlas. Puedes comprar o preparar una mezcla de sal sazonada que hará que las papas sepan como si acabaran de salir del restaurante. Para preparar un recipiente pequeño de condimento para tus papas fritas, puedes combinar los siguientes ingredientes:[14]
    • ¼ taza (70 g) de sal
    • 2 cucharadas de pimentón
    • 1 cucharada de ajo en polvo
    • 1 cucharada de sal de ajo
    • ½ cucharada de comino
    • ½ cucharada de pimienta negra molida
    • ½ cucharada de albahaca seca
    • ½ cucharada de perejil seco
    • 1 cucharadita de chile en polvo
    • ½ cucharadita de sal de apio
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    Evita recalentar las papas fritas en el microondas. Si no tienes acceso a una estufa, un horno o una freidora, puedes colocar las papas en el microondas, pero se volverán mucho más suaves. Si vas a utilizar un microondas, debes rociar un poco de aceite vegetal sobre las papas y esparcirlas sobre un plato forrado con papel absorbente. Luego, cocínalas durante 20 segundos hasta que las papas se calienten.[15]

    Consejo:el uso de algunos papeles absorbentes no es seguro para el microondas (en especial si contienen materiales reciclados), así que debes cerciorarte de este detalle antes de colocar las papas.

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    Sirve las papas fritas recalentadas con varias salsas para untar. Puedes volver las papas fritas recalentadas más interesantes al presentarlas con algunas salsas diferentes. Por ejemplo, puedes ofrecer clásicos como kétchup, salsa ranchera o salsa barbacoa, junto con salsa para filetes o mostaza de cerveza picante. Para preparar algo aún más único, puedes probar lo siguiente:[16]
    • chorizo y salsa de queso
    • crema de ajo y hierbas
    • aioli
    • salsa de curry
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    Prepara una comida nueva con papas fritas recalentadas. Si prefieres reutilizar las papas fritas en lugar de comerlas solas, puedes recalentarlas en la estufa, el horno o la freidora. Luego, colócalas en un plato y vierte salsa encima para preparar poutine. También puedes derretir queso sobre las papas fritas recalentadas y servirlas con salsa y guacamole para hacer nachos.[17]
    • Si deseas un delicioso picadillo para el desayuno, puedes combinar las papas fritas recalentadas con huevos fritos y tocino.

Consejos

  • Debes desechar las papas fritas que ya has recalentado, ya que bacterias dañinas pueden comenzar a formarse si las recalientas varias veces.

Cosas que necesitarás

Recalentarlas en la estufa

  • una sartén de hierro fundido o una sartén pesada
  • una espátula plana
  • papel absorbente
  • un plato

Utilizar el horno

  • una charola para hornear con borde
  • papel de aluminio
  • una espátula plana
  • manoplas

Utilizar una freidora de aire

  • una freidora de aire
  • papel absorbente
  • un plato

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Categorías: Comida francesa