Cómo reconocer una enfermedad en un hámster

Coescrito por Star of Texas Veterinary Hospital

Reconocer un hámster enfermo puede ser difícil debido a que se trata de animales muy pequeños que suelen esconder sus problemas de salud hasta que estos son demasiado graves. Afortunadamente, es posible notar algunos síntomas de enfermedades estomacales, malestares respiratorios y problemas de la piel antes de que sea muy tarde. Si observas las señales de estas enfermedades, no dudes en comunicarte con el veterinario para que te indique cuál es el mejor tratamiento para tu mascota.

Método 1

Método 1 de 3:
Reconocer la cola mojada

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Fíjate si tiene la cola mojada y cubierta de heces. La cola mojada es una enfermedad gastrointestinal causada por una infección bacteriana. El síntoma más claro de este problema es la cola manchada por orina o heces. Asimismo, es posible que veas al hámster hacer sus necesidades y quedarse quieto al terminar.^{[1]
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Busca restos de diarrea en la jaula. Si el hámster tiene la cola mojada, considera que esto es el resultado de una diarrea, así que luego de encontrar la evidencia en el cuerpo del animal, tendrás que buscarla también en la jaula. Ponte un guante y con un dedo, revisa el área donde suele hacer sus necesidades, así como el resto del material de lecho.^{[2]
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- La diarrea en sí no es un síntoma de la cola mojada. Esta suele ocurrir cuando el hámster ha comido muchas frutas y verduras.
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Presta atención a la falta de apetito. Observa el tazón de comida de tu mascota y fíjate si se ve más lleno de lo normal. Dado que los hámsteres tienden a almacenar su comida, tendrás que revisar el material de lecho en la jaula para ver si hay restos de comida podrida que tu mascota haya escondido pero que no llegó a comerse.^{[3]
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Fíjate si se comporta de manera agresiva. Un hámster enfermo se siente más vulnerable de lo normal, por lo que podría tratar de atacar a su dueño o a otros hámsteres. Si normalmente tu mascota no es agresiva y de pronto te muerde, podría ser una señal de que está enferma. No intentes seguir sosteniéndola si notas una conducta agresiva.^{[4]
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Fíjate si duerme más de lo normal. Los hámsteres suelen dormir mucho durante el día, así que tal vez tengas que quedarte despierto hasta tarde para observar la rutina nocturna de tu mascota. Si te parece que no está despierta por mucho tiempo ni durante el día ni durante la noche y no tiene tanta energía mientras está en movimiento, podría estar enferma.^{[5]
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Comunícate con el veterinario tan pronto como puedas. La enfermedad de la cola húmeda es una de las más graves y de más rápido deterioro que puede sufrir un hámster. No dudes en llamar al veterinario, incluso si no estás seguro de que se trate de este problema. Comunicar la situación dentro de las 24 horas de haber observado estos síntomas permitirá que tu mascota tenga una mejor probabilidad de recuperarse.^{[6]
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Método 2

Método 2 de 3:
Identificar una infección respiratoria

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Fíjate si hay secreciones en la nariz u ojos. Un hámster saludable no debería tener ninguna secreción en la nariz, así que presta atención si notas que tu mascota tiene la nariz mocosa o los ojos húmedos o con secreciones. Los estornudos esporádicos son algo normal, pero si observas los síntomas mencionados además de los estornudos, es probable que tu hámster esté enfermo.^{[7]
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- Es posible que solo tenga un resfriado, pero esto podría convertirse en una neumonía, así que toma estos síntomas en serio y observa a tu hámster para ver si empeora dentro de las siguientes 24 a 48 horas.
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Presta atención a la dificultad para respirar. Si el hámster tiene problemas para respirar o si escuchas una especie de silbido, podría tratarse de una infección respiratoria. Considera que la dificultad para respirar también podría presentarse luego de que el animal se ejercita, así que presta mucha atención a estos síntomas, sobre todo si se dan mientras está en reposo.
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Fíjate si el animal tiembla. Si tu hámster tiembla y tiene la nariz mocosa, es posible que tenga una infección en los pulmones. Comunícate con el veterinario para que te indique qué debes hacer. De ser posible, calienta la casa o la habitación donde se encuentra tu mascota elevando la temperatura del termostato o utilizando una estufa portátil.
- Nunca coloques algo caliente (como una estufa portátil) junto a la jaula. Considera que una temperatura superior a 25 °C (75 °F) podría ser perjudicial para el hámster.
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Ten cuidado con el letargo fuera de lo normal. Presta atención al hámster mientras suele estar activo, que sería alrededor de la hora de comer durante el día o a lo largo de la noche. Si no corre en su rueda por la noche, podría ser una señal de que no se siente bien.

Método 3

Método 3 de 3:
Buscar problemas de la piel

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Fíjate si hay piel reseca o irritada. Cuando sostengas a tu hámster cada día, usa tus dedos para peinar su pelaje y revisar la piel. La piel reseca, escamosa o irritada podría ser el síntoma de una alergia al material de lecho, pero también podría indicar la presencia de ácaros o parásitos.^{[8]
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- Retira cualquier objeto que hayas colocado en la jaula recientemente, y limpia y desinfecta todo lo demás. Si el problema persiste, es poco probable que se trate de un tipo de alergia.
- Evita usar trocitos de madera como material de lecho para tu hámster, ya que estos pueden causar reacciones alérgicas. De preferencia, utiliza papel o viruta.^{[9]
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Revisa el interior de las mejillas inflamadas para ver si hay restos de comida. Los hámsteres suelen almacenar alimentos en sus mejillas hasta que están tan llenas que sobresalen de su rostro. Pero si notas que tu mascota parece tener las mejillas llenas todo el tiempo, es recomendable que revises el interior de su boca para ver si tiene comida. Si no es así, podría tener un absceso, el cual tiene que ser drenado por el veterinario.^{[10]
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- Los abscesos podrían ser el resultado de un corte en el interior de la mejilla del hámster, así que asegúrate de no ofrecerle premios o bocadillos con bordes afilados o irregulares.
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Fíjate si tiene el pelaje enmarañado o si se rasca demasiado. Si tu hámster tiene el pelaje suave y de pronto notas que hay partes enredadas o sin pelo, podría ser una señal de que tiene un problema en la piel. Observa al animal para ver si se rasca de manera excesiva, ya que esto podría indicar la presencia de ácaros.
- La pérdida de pelaje podría ser el resultado de tener contacto con un material de lecho muy abrasivo, de frotarse con la rueda de ejercicios o del agua de un bebedero que gotea. También podría indicar problemas en los riñones de un hámster más viejo.
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Presta atención a la presencia de sangre en el cuerpo del animal o en la jaula. Puede ser complicado ver la piel de tu mascota, pero si hubiera algo grave, como una herida abierta, es posible que encuentres sangre en su pelaje. Además, podrías encontrar rastros de sangre en alguna parte de la jaula, como en el material donde duerme.^{[11]
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- Aprovecha la limpieza semanal de la jaula para observar si hay algo fuera de lo normal o si hay algún cambio en el material de lecho que botes.
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Fíjate si hay bultos en el cuerpo del animal. Estos pueden ser abscesos, quistes o tumores. Para realizar un examen, usa tus manos para revisar el cuerpo del hámster. Si notas alguna protuberancia, llévalo a la veterinaria tan pronto como puedas.
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Examina los incisivos del hámster. Si estos dientes se ven más grandes de lo que deberían estar, podría ser una señal de que el animal no está comiendo como debe. Los dientes grandes pueden generar otras complicaciones, como problemas para comer. Si notas que los dientes de tu hámster están muy grandes, llévalo a la veterinaria para que lo examinen.