¿Sientes que nadie aprecia tus talentos? ¿Ya no soportas que los demás te pisoteen? ¡Es hora de volverse una persona altanera! Sigue los pasos a continuación para que te reinventes en alguien con decisión y seguridad. Con este artículo aprenderás a valorarte, pensar y comportarte con confianza, y, lo más importante, a caminar como si fueras el rey o la reina del universo.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Piensa como una persona altanera

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    Piensa que eres lo mejor. La altanería proviene de la confianza (algunos dirían “arrogancia”) de saber que eres la persona más capacitada, la más interesante y la más guapa del lugar (¡aun cuando no lo seas!). También necesitas pensar lo contrario: que casi todos los que conoces son apagados, aburridos y/o incompetentes. Si realmente crees que eres la persona número uno y que casi nadie te puede igualar, los siguientes pasos te resultarán más fáciles; podrían incluso caer por su propia cuenta.
    • Intenta exaltar y venerar mentalmente tus destrezas, y no le des mucha importancia a lo que no te sale muy bien. ¿Eres un gran estudiante pero un mal atleta? Entonces, piensa así: “Soy la persona más inteligente que conozco. Tendré un gran empleo algún día. ¿Qué importan esos grandulones que todo el mundo ama? Los deportes no son importantes; esos chicos estarán lavando mi auto en algunos años”.
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    Da por sentado que todos te aman. Una persona altanera es el alma de la fiesta (de cualquier fiesta). Es el motivo por el que otros se divierten. Ten esta mentalidad cuando estés en reuniones sociales: ya que todos te aman, puedes saltarte la cháchara aburrida y conversar de frente sobre temas interesantes, como ¡tu vida! Da por sentado que tienes cierto grado de familiaridad con todos; si todos son tus amigos, puedes unirte a sus conversaciones e incluso bromear un poco (como un amigo).
    • Por ejemplo, digamos que una persona altanera acaba de llegar a una fiesta. Ve a un conocido casi cercano conversando con alguien en la esquina. Esta persona altanera, sin dudarlo, se acercaría sigilosamente al conocido, pero sin que este último logre verla, luego, interrumpiría la conversación de repente a modo de broma. Dar por sentado que se tiene familiaridad es crucial; una persona menos altanera podría simplemente acercarse al conocido, presentarse de manera forzada e incómoda y luego retirarse de la conversación.
    • La sinceridad es clave. Las personas naturalmente buscan señales sociales, así que mientras más creas sinceramente que eres el centro de la atención, más personas lo creerán.
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    Haz conocer tus opiniones. El único momento que una persona altanera es indecisa es cuando no sabe a qué supermodelo invitar a salir. La gente altanera tiene una opinión enérgica sobre casi todo y casi nunca tiene vergüenza de decirla. No le preocupa ofender a otros porque está segura de que tiene la razón; y, si alguien no quiere admitirlo, no es motivo de preocupación alguna. Una persona altanera no tiene miedo de tener un buen debate, después de todo, está segura de que ganará porque "está segura" de que tienen la razón.
    • Por otro lado, una persona altanera nunca pasará la vergüenza de involucrarse demasiado a nivel emocional en una discusión. Siente que no es necesario degastar energías gritando o insultando. Después de todo, la razón la tiene él (ella), ¿por qué habría la necesidad de hacerlo?
    • Una persona altanera no se abstendrá de corregir a alguien por cortesía. Digamos que su profesor de historia dice por error que Alemania Occidental y la Oriental se unificaron en 1989, no en 1990. Esta persona levantará la mano y corregirá amablemente (pero con firmeza) el error del profesor: “Disculpe, me parece que Alemania se unificó formalmente en 1990. Mi abuela estuvo allí”.
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    Asume que todos(as) piensan que eres sexy. Saber que alguien te desea es un gran estímulo de confianza; ¡imagina los niveles a los que llegaría tu confianza si simplemente asumes que “todos o todas” piensan que eres el/la más sexy! Enorgullécete de tu apariencia física y de tu encanto. ¿Estás usando un nuevo conjunto por primera vez? Ten tu cabeza erguida; ten la certeza de que todos te admiran. Muéstrale una sonrisa atractiva al chico o chica que te interesa. Si crees que todos(as) están enamorados(as) de ti, no tienes motivos para preocuparte.
    • Las gente verdaderamente altanera destila un aire de seguridad natural, así que, aunque te hayas esforzado mucho en tu apariencia física o tu comportamiento, actúa como si fuera algo natural para ti. Si te halagan por alguna prenda audaz, di: “Ah, ¿esto? Es lo primero que encontré en mi armario” en vez de “Me demoró cuatro horas armar este conjunto, ¡así que espero que se vea bien!”
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    No dejes que los criticones te bajen el ánimo. Es triste, pero cierto: no importa lo excelente que seas, siempre te encontrarás con gente reacia a darte el respeto que mereces. Es probable que incluso encuentres a alguien que no le caigas bien. No pierdas tu tiempo con personas tan estrechas de mente. Si no te aman, ellos son el problema, no tú.
    • Los criticones siempre buscan alterarte. No hagas que se salgan con la suya y no te molestes ni te alteres. Ignóralos con naturalidad con una frase como: “Están celosos(as) porque no tienen mi gusto exquisito para todo”.
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    Ten confianza en ti mismo(a). La altanería es la versión exagerada de la confianza personal. Para ser realmente altanero(a), deberás tener una buena base de confianza en ti mismo(a). La altanería sin confianza verdadera viene a ser una actitud patética, lo cual es totalmente opuesto a lo que quieres lograr. En lugar de dar la impresión de que no te importa lo que los demás piensen, estarás demostrando que sí te preocupa.
    • Si no tienes confianza, no hay fórmula mágica que funcione de la noche a la mañana. Sin embargo, para dar el primer paso hacia la confianza, empieza esforzándote para alcanzar logros de los que te sientas orgulloso. El orgullo que te genera haber alcanzado esos logros te dará el impulso necesario para alcanzar otros más grandes, y, al final, tendrás más destreza, experiencia y confianza.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Compórtate como una persona altanera

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    Que todos sepan lo increíble que eres. No tengas vergüenza de compartir tu grandeza. Si estás habituado a verte como el líder, es hora de anunciarlo a los cuatro vientos. En este punto, se requiere sutileza: si simplemente le andas diciendo a todo el mundo que eres increíble y que ellos son lo peor, entonces creerán que eres o un(a) matón(a) o un(a) psicópata. En lugar de ello, sólo aprovecha las oportunidades que se te presenten en conversaciones comunes para alabarte a ti mismo asolapadamente.
    • Por ejemplo, si tus amigos están conversando sobre el partido de fútbol de la semana anterior, podrías decir: “Sí, el gol de Beckham no estuvo mal, pero sus pases eran bastante flojos. Cuando yo estaba en el equipo de fútbol, no dejaba que se me escapara el balón tan seguido”.
    • Cuando estés compitiendo con alguien, será muy altanero de tu parte tener una pequeña charla desafiante. Si estás compitiendo por una conquista amorosa, puede ser incluso algo coqueto. Tan sólo asegúrate de evitar los golpes bajos; si eres realmente cruel, pueden castigarte o echarte.
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    Acepta los cumplidos como un(a) campeón(a). Si te hacen un cumplido (tenlo por seguro), acéptalo y a la vez reconoce sutilmente que ya sabías que eras lo mejor de lo mejor. En vez de decir: “¿En serio? ¡Muchas gracias!” cuando te hacen un cumplido, mejor di: “Gracias, es bueno saberlo”. Se supone que quieres dar la impresión de que no te sorprende de que todos(as) tengan envidia de ti. Muéstrale al mundo que esperas que te adore.
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    Saca a relucir tus logros. La gente realmente altanera tiene muchos logros. Enorgullécete de cualquier logro que tengas. Sácalos a relucir cada vez que la oportunidad se presente. Cuando alcances un nuevo logro, disfruta de tu victoria. Celebra con tus amigos. Muéstrate seguro(a) y confiado(a) después. Quizá consideres la idea de hacer un cambio de apariencia tras tu gran logro (y con razón). Después de una gran victoria deportiva, quizá quieras, por ejemplo, ponerte un jersey o una chaqueta universitaria para ir a estudiar el día siguiente.
    • Ten muy presente: restregarle la derrota en la cara a alguien no es un buen comportamiento altanero. Es vergonzoso para todos, especialmente para ti. Ser un(a) ganador(a) vengativo(a) deja al descubierto tu baja confianza; las personas altaneras saben de antemano que van a ganar, así que, cuando ganan, no son rudos con sus oponentes.
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    Ten buenos amigos. Una persona altanera no tiene necesariamente que tener millones de amigos y conocidos falsos. De hecho, una persona demasiado preocupada por cuántos amigos tiene denota inseguridad, lo opuesto a la altanería. Deberás, sin embargo, tener unas cuantas personas a las que puedas llamar "amigo", "viejo" o "hermano". Saber que tienes personas con las que puedes contar en los momentos difíciles te hará alguien con mayor confianza y con ganas de tomar riesgos. Además, los buenos amigos son siempre buenos colegas o aliados para tus propósitos pro-altaneros.
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    Sé generoso(a) con tus muestras de cariño. Si se emplean apropiadamente, las muestras de cariño pueden servir para crear una impresión duradera de que te sientes seguro(a) con tu cuerpo. Sin embargo, si exageras la frecuencia y las veces que haces contacto físico con las personas, te verán como un(a) raro(a). La línea divisoria puede ser muy sutil, así que empieza con muestras de cariño simples y pequeñas. Cuando saludes a alguien, dale un abrazo en vez de un apretón de manos. Si alguien dice algo gracioso, palmotea ligeramente su hombro mientras te ríes. Mantente cerca de alguien que te gusta, tocándolo(a) "por casualidad". Estas muestras de cariño pueden ayudarte muchísimo a demostrar que tienes confianza en ti mismo(a) y que no te importa cómo reaccionen los demás; en resumen: que eres un(a) altanero(a).
    • Tocar a alguien de manera altanera es coqueto, siempre y cuando se haga razonablemente. Adapta tu lenguaje corporal para gustarle a esa persona, pero si en algún momento parece incómodo(a) o asustado(a), deja de hacer tantas muestras de afecto.
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    Coquetea como un(a) experto(a). Las personas altaneras saben que todos(as) los(as) desean, así que no tienen problemas para coquetear con la gente que les atrae. Se acercan a quienes le interesa sin duda alguna. Cuando hablan con la gente que les atrae, lo hacen con soltura y confianza. Nunca tienen temor del rechazo. Después de todo, ¡saben que la otra persona debería sentirse halagada por haber tenido la oportunidad con tremendo(a) chico(a)!
    • La gente altanera siempre es descarada cuando coquetea. ¡Sé escandaloso(a)! Permite que la persona que te atrae sepa cómo te sientes por él(ella), pero deja de hacer cualquier cosa que pienses que lo(a) pueda asustar.
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    Supera las inevitables dificultades de la vida. Nadie tiene una vida perfecta. Incluso las personas más confiadas y seguras del planeta tienen que lidiar con conflictos y problemas periódicamente. Enfréntalos; no se pueden evitar todas las dificultades en la vida. No te sientas obligado(a) a mantener una apariencia de altanería cuando en realidad estás triste. Si, por ejemplo, perdiste a un pariente muy querido, tu altanería habitual se verá poco natural y forzada. Todos tienen periodos malos de vez en cuando; si finges que tú no, sólo harás más difícil superarlos. Dale a tus problemas la atención que merecen y con el tiempo volverás a tu personalidad altanera.
    • La altanería es en parte engañarte a ti mismo. Las personas altaneras crean versiones idealizadas de ellas mismas y se comportan como si estas idealizaciones fueran la realidad, cuando en verdad, no lo son. Las dificultades temporales son una gran oportunidad para que puedas examinarte. Hazte preguntas como: “¿En qué maneras he tenido una imagen distorsionada de mí mismo(a)?” y “¿He sido demasiado altanero(a)?”. Las dificultades de la vida pueden servir para controlar un ego desmedido y evitar que nos convirtamos en narcisistas molestos.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Luce como una persona altanera

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    Mantén una postura segura y fuerte. Un excelente manera de informar a todos que eres una persona altanera es mostrar este rasgo con un lenguaje corporal confiado.Tendrás que estar siempre de pie con una postura amplia y erguida. Mantén tus hombros hacia atrás y tu cabeza erguida mientras levantas tu pecho. Suena descabellado, pero funciona: cambiar de una postura desganada o encorvada a una postura más digna puede hacer una gran diferencia en cómo te ven los demás (y cómo te ves a ti mismo[a]).
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    Refleja tu altanería en el rostro. Las personas altaneras saben que son las mejores personas que caminan sobre la faz de la tierra; sus rostros lo reflejan muy bien. Una persona así está constantemente contenta. Ten una gran sonrisa por donde vayas. Cuando interactúes con alguien, en especial si es alguien que te atrae a nivel amoroso, quizá te interese ser un poco juguetón(a) con tu expresión, como si la conversación fuera para ti una juego entretenido.
    • Estos cambios relativamente pequeños en tu expresión pueden generar cambios significativos en tu comportamiento. Al fingir sentirte de cierta manera puede, en realidad, hacerte sentir así, lo cual puede hacer de tu altanería más natural.
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    Demuestra tu altanería con tus movimientos. Las personas altaneras siempre saben lo que hacen y a donde van. Tus movimientos deberán reflejar esto. Camina con confianza: mantén tu cabeza erguida y tus hombros hacia atrás mientras das pasos relativamente rápidos a donde quieres ir. Cuando sea posible, camina en línea recta hacia tu destino. No camines lento o pierdas el tiempo a menos que te topes con alguien o algo que te interese.
    • Lo ideal sería que, si quieres dar la impresión de que todo lo que haces es importante, camina como si necesitaras ir a una reunión importante. La mayoría de la gente asumirá que eres importante.
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    Reluce tus mejores atributos. Las personas altaneras saben que son sexys. Vístete para sacar provecho a las partes más sexys de tu cuerpo. Si tienes unos brazos musculosos, usa camisetas de manga corta para que las chicas caigan a tus pies. ¿Tienes piernas largas y sexys? ¡Osténtalas con unos jeans ajustados! No tengas vergüenza; tú eres la persona más guapa de todos(as), así que sería un insulto no exhibir lo que tienes.
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    Muéstrate fuerte, no a la defensiva. La gente altanera tiene confianza en sus opiniones; sus gestos y su postura lo reflejan bien. Siempre haz contacto visual con tu todos tus oyentes. En general, deberías colocarte de tal manera que tu cuerpo esté frente a él o ella; una buena pauta para hacerlo es mantener tu ombligo frente a la persona que consideres más interesante en un momento dado. De esta manera, incluso si tienes que desviar la mirada momentáneamente por algún motivo, todo el peso de tu lenguaje corporal seguirá recayendo sobre tu oyente.
    • No des la impresión de estar a la defensiva durante una discusión. Por ejemplo, si estás en un debate o discusión, no te cruces de brazos y mires a otro lado. En lugar de ello, direcciona tu cuerpo hacia tu oponente y míralo(a) de frente.
    • Haz gestos con seguridad. Si alguien te pregunta dónde está el Norte, en vez de señalar con un dedo tembloroso, extiende todo tu brazo.

Consejos

  • Nunca dudes de que lo que digas muestra confianza y altanería.
  • Siempre mantén una buena postura. Si alguien pilla algún defecto tuyo, se usará en tu contra.
  • Nunca, jamás seas aburrido(a). Siempre ten en mente algo interesante para conversar o hacer
  • Recuerda usar gafas de sol dentro de la universidad, no te consideres tonto(a).

Advertencias

  • No actúes como un simple aspirante. Los principiantes intentan parecer altaneros, pero no conocen todos los detalles para serlo. Solamente intentarán copiarte.

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Categorías: Filosofía