Vender un terreno puede ser difícil en comparación con vender una casa, pero algunas parcelas de tierra pueden ser muy deseables, dependiendo de su zonificación y recursos. Determina el precio usando propiedades comparables. También puedes combinar tu terreno con otras parcelas y decidir si ofrecerás financiamiento propio, lo que te permitirá establecer un precio más alto que si no lo haces. Luego, publica el terreno para la venta con la ayuda de un agente inmobiliario o por cuenta propia. Cuando recibas la oferta que te interesa, cierra la venta del terreno con la ayuda de un abogado en bienes raíces o por cuenta propia.

Parte 1
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Establecer un precio

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    Averigua cuánto vale tu terreno antes de establecer un precio. Puedes contratar a un tasador para que evalúe la propiedad y sugiera un precio razonable, o hacer tu propia investigación y establecer un precio en función de los precios de propiedades similares. Determina el valor de tu terreno al evaluar los posibles usos del mismo (comercial o residencial), tener en cuenta los proyectos cercanos que podrían afectar su valor y comparar con propiedades similares.[1]
    • Por ejemplo, si una parcela de tierra similar en el área zonificada para uso residencial se vende por $50 500, pero tu tierra también está zonificada para uso comercial, puedes calcular un valor estimativo de $60 500.
    • Ten en cuenta que obtener una tasación es la mejor forma de determinar el valor de tu terreno.
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    Considera la posibilidad de combinar el terreno con cualquier otra propiedad que tengas. Vender un terreno junto con una estructura o varias parcelas podría dar lugar a un mejor precio que vender la parcela de tierra por sí sola. Si hay una tierra vecina u otras parcelas con o sin estructuras, puedes combinarlas en una sola venta.[2]
    • Por ejemplo, si tienes tres parcelas en la misma vecindad, puedes venderlas juntas. Esto podría atraer a un vendedor que busque comprar un terreno más grande o que necesite varias parcelas para distintos usos.
    • También puedes ofrecer el terreno como un conjunto o propiedades separadas y establecer distintos precios para cada opción.
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    Decide si ofrecerás financiamiento del vendedor. Ofrecer financiamiento de vendedor (también conocido como contrato de compraventa de terreno) atraerá a más compradores, dado que no tendrán que atravesar el proceso de solicitar una hipoteca para comprar el terreno y, por lo general, puedes establecer un precio de venta más elevado.[3] Sin embargo, esto significa que no obtendrás el precio de compra total del terreno al momento de la venta. En cambio, crearás un contrato de pagos con los compradores. Estas personas harán pagos regulares en función de un cronograma predeterminado hasta que se complete el pago total de la propiedad.[4]
    • Por ejemplo, si el precio acordado es de $65 500, el comprador tendrá que pagar cuotas regulares al vendedor hasta completar todo el pago. Estas cuotas incluyen intereses, y el comprador generalmente tendrá que realizar un pago inicial al vendedor.

    Consejo: si el comprador no efectúa los pagos establecidos por contrato, puedes presentar una caducidad de contrato de tierras. Si se determina que el comprador viola el contrato, perderá cualquier reclamo por la tierra y cualquier dinero que le haya pagado al vendedor.[5]

Parte 2
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Encontrar clientes potenciales

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    Haz mantenimiento en el terreno para que sea más atractivo para los compradores. Si hay algo que puedas hacer para que el terreno sea más atractivo, hazlo antes de que los posibles compradores visiten tu propiedad. Ocuparte de estas tareas puede ayudarte a incrementar el atractivo de la propiedad, aumentar las posibilidades de recibir una oferta y obtener un precio más elevado por el terreno.[6]
    • Por ejemplo, puedes hacer tareas simples de jardinería, como cortar el césped y recortar los arbustos.
    • También puedes contratar a alguien para que realice un mantenimiento más intensivo, como cavar un gran tocón o cortar un árbol muerto.
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    Contrata a un agente de bienes raíces para promocionar el terreno y obtener mejores resultados. Un agente de bienes raíces, también conocido como agente inmobiliario, trabajará para ayudarte a obtener la mayor cantidad de dinero de la propiedad como sea posible. Promocionará el terreno por ti, negociará con el comprador, se ocupará de la documentación necesaria para la venta y abogará por ti en todo el proceso de venta.[7]
    • Ten en cuenta que, si bien ahorrarás dinero por la compra al no contratar a un agente, vender una propiedad es un trabajo a tiempo completo, y puede ser emocional y mentalmente agotador hacerlo sin su ayuda.
    • Los agentes de bienes raíces generalmente obtienen un porcentaje del precio de venta de la propiedad, como un 5 %. Esto significa que, si el terreno se vende por $100 000 y el agente inmobiliario recibirá el 5 %, obtendrá $5000 después del cierre de la venta. Sin embargo, si el terreno no se vende, no recibirá nada.
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    Promociona el terreno para la venta en páginas web inmobiliarias. Si decides vender el terreno por cuenta propia, tendrás que promocionarlo de forma agresiva para encontrar compradores. Publicita la propiedad en páginas web de inmobiliarias y clasificados para que a los posibles compradores les resulte más fácil enterarse. Asegúrate de que las publicaciones incluyan descripciones detalladas de las propiedades y muchas fotos que muestren las mejores características del terreno.[8]
    • Ten en cuenta que no tendrás que hacer esto si trabajas con un agente de bienes raíces. Esta persona se ocupará de la publicidad y publicación por ti.

    Consejo: las redes sociales también son una buena plataforma para promocionar la propiedad. Comparte el anuncio en tus redes sociales e invita a tus amigos a compartirlo.

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    Habla con tus amigos, familiares y compañeros de trabajo acerca de tu terreno. Haz correr la voz sobre la venta de tu terreno al decirles a todos los que conozcas. Por más que trabajes con un agente de bienes raíces, contarles a las personas acerca de tu terreno podría ayudarte a encontrar posibles compradores.[9]
    • Por ejemplo, puedes darles a las personas una tarjeta de tu agente, entregar copias de una hoja o enviar un mensaje de texto con un enlace a una página de servicio de listado múltiple. Esto proporcionará fotos e información de la propiedad.
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    Véndele el terreno al gobierno si es una opción. En algunos países, es posible vender un terreno al gobierno. Esta podría ser una buena opción si tienes un terreno grande en un lugar remoto. El gobierno podría estar interesado en comprar el terreno por sus recursos naturales, para preservar la tierra o para otros usos. Averigua cuáles son los requisitos de los terrenos que compran y cómo vender el terreno al gobierno, en caso de ser elegible. Comunícate con el gobierno a través de su sitio web, correo electrónico o teléfono si es elegible.[10]
    • Por ejemplo, si el terreno está fuera del condado, en el bosque o incluye un área con humedales, podría ser interesante para tu gobierno como reserva natural.
    • Asimismo, si la tierra tiene recursos naturales (como carbón, madera, agua fresca o petróleo), el gobierno podría estar interesado en comprarla.

Parte 3
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Cerrar la venta

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    Contrata a un abogado de bienes raíces para preparar los documentos de cierre de venta. Contratar a un abogado que te ayude durante el proceso de cierre es una elección sabia para cualquier transacción inmobiliaria. Esta persona se asegurará de que todo esté en orden para la venta. Podrá responder preguntas legales, revisar los documentos relacionados con la venta y proteger tus intereses durante todo el proceso de cierre.[11]
    • Habla con amigos, familiares o tu agente de bienes raíces para que te recomienden a un buen abogado de bienes raíces. Asegúrate de escoger a alguien que se ocupe de este tipo de transacciones de manera regular.
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    Negocia con el comprador para obtener el precio que buscas. Negociar con los compradores para obtener el mayor precio por el terreno puede ser difícil si nunca lo has hecho. Esta es otra buena razón para contratar a un agente de bienes raíces. Sin embargo, si decides vender por cuenta propia y negociar con el comprador o el agente del comprador, tendrás que utilizar tácticas de negociación para obtener el mejor precio posible. Estas son algunas estrategias que puedes probar:[12]
    • No aceptes la primera oferta y regresa con un precio más elevado.
    • Ten un plan de respaldo si la oferta se cae, como rentar el terreno.
    • Ofrece adicionales, como una cortadora de césped u otros equipos que hayas usado para mantener la propiedad.
    • Averigua cuál es el monto de precalificación del comprador si hipoteca la propiedad.
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    Acepta una oferta cuando estés conforme. Si recibes una oferta y es lo que buscas para la propiedad o está cerca, puedes aceptarla. Ten en cuenta que, a menudo, la primera oferta que recibas será la mejor, por lo que quizás valga la pena aceptar una oferta temprana, por más que sea un poco inferior al precio deseado por el terreno.[13]
    • Por ejemplo, si esperas obtener $89 000 por el terreno y alguien te ofrece $85 000 de inmediato, quizás valga la pena aceptar esta oferta.
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    Completa los papeles de cierre por cuenta propia o con un abogado. Los papeles de cierre pueden tomar tiempo y ser complejos, pero, si has contratado a un abogado, se ocupará de estas cosas por ti. Solo tienes que proporcionarle información adicional y documentación, y firmar los papeles requeridos para la venta. Si decides ocuparte de los papeles sin un abogado, lee todo detenidamente antes de firmar para asegurarte de que esté correcto.[14]

    Consejo: ten en cuenta que algunos países requieren que contrates a un abogado para completar una venta inmobiliaria, mientras que, en otros, es opcional. Consulta con un agente de bienes raíces para determinar si necesitas contratar a un abogado.

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Categorías: Ventas