La harina de avena ha sido utilizada durante siglos como calmante y remedio casero para la picazón cutánea, erupciones, picaduras de insectos, hiedra venenosa y herpes. Tiene propiedades que no solo hidratan la piel, sino que también puede actuar como emoliente y mejorar la piel seca.[1] Una buena noticia para los padres es que también alivia la varicela. Un baño de avena casero puede disminuir la picazón y la incomodidad de tu hijo(a) durante este período difícil.

Método 1
Método 1 de 2:
Bañarse con una bolsa (saché) de avena

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    Compra avena. Esta especie de "súper alimento" no solo es comestible, también tiene diversos usos curativos: hidrata la piel, alivia la picazón, sirve como emoliente y tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. También protege contra los daños del sol y la inflamación ocasionada por ciertas afecciones de la piel.[2] La harina de avena puede comprarse en cualquier tienda de alimentos o supermercado. La avena entera --no la instantánea—es más efectiva para baños. También evite las variedades de sabores.[3]
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    Haz una bolsita de avena. Echa copos de avena en una media de nailon o en un trozo de tela de muselina. La cantidad que se necesita para un niño es aproximadamente 1/3 de taza. Luego, anuda la tela para que la avena no se derrame. La clave es usar un tipo de tela que contenga la avena a la vez que permite que el agua pase a través de ella.
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    Llena la bañera. Asegúrate de que el agua esté a un nivel y temperatura adecuados para tu hijo(a). No demasiado caliente, solo lo suficientemente tibia para ser relajante al tacto y activar las propiedades curativas de la avena. Lo mejor es usar agua templada a tibia.
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    Coloca la bolsita en la bañera. Deja remojando la bolsita de avena en el agua durante unos minutos. Después de unos instantes la harina de avena soltará un líquido lechoso que alivia la picazón.[4]
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    Mete al niño(a) en la bañera. Una vez que la avena esté bien empapada, mete al niño en el agua. Ten cuidado, ya que la harina de avena hará que la bañera sea más resbaladiza de lo habitual.[5]
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    Baña delicadamente al niño(a). Moja al niño con la avena durante 15 a 20 minutos. Levanta la bolsita y deja que el agua lechosa se escurra sobre la piel del niño. [6]
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    Sécalo(a) con palmaditas. En lugar de frotar, seca al nilo con ligeras palmaditas con la toalla para evitar agravar la picazón de la piel.

Método 2
Método 2 de 2:
Bañarse con avena coloidal

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    Compra harina de avena coloidal. La avena coloidal es un tipo especial de avena que no es comestible como la avena regular, pero que ha sido finamente molida para convertirla en polvo, y se utiliza en productos como champú, gel para afeitar y crema hidratante. La avena coloidal tiene altos niveles de almidón que hidrata, así como antioxidantes y antiinflamatorios, lo que significa que funciona muy bien como calmante y protector de la piel.[7] La avena coloidal puede comprarse en la mayoría de tiendas de alimentos saludables o naturales.
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    Prepare su propia harina de avena coloidal. También puedes preparar tu propia avena coloidal utilizando un procesador de alimentos. Usa la avena regular, no la instantánea. Tritúrala en un procesador de alimentos u otro triturador hasta convertirla en un polvo fino, eliminando los copos grandes. Prepara la cantidad por anticipado, ya sea una cantidad pequeña o un recipiente completo.[8]
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    Prepara el baño. Se necesita alrededor de 1/3 taza de avena en polvo para cada baño. Llena la tina con agua templada a tibia. Luego, mientras la bañera se llena, vierte el polvo de avena en el flujo de agua corriente. Esto dispersará mejor la avena hasta formar una solución coloidal, lo que significa que se suspenderá en el agua y no se hundirá hasta el fondo de la bañera. Vuelve a asegurarte de que la avena se disuelva correctamente agitando el agua para deshacer los grumos.[9]
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    Mete al niño(a) en la bañera. Al igual que con el baño con bolsita, mete al niño en el agua una vez que la avena haya comenzado a soltar a el agua lechosa. También aquí debes tener cuidado porque la avena coloidal puede hacer que la bañera se vuelva bastante resbaladiza [10]
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    Baña al niño(a). Deja que se moje también de 15 a 20 minutos con la avena coloidal. En lugar de usar la bolsita o una esponja, recoge el agua lechosa con la mano y échela sobre la piel del niño [11]
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    Sécalo(a) con palmaditas. Cuando hayas terminado, seca al niño con palmaditas utilizando una toalla limpia, evitando frotar su piel, y eso es todo. Puedes bañarlo de esta manera una o dos veces al día mientras persista la condición, más aun si así lo recomienda el médico.

Advertencias

  • Desecha la media de nailon con avena después de usarla.
  • Usa una nueva media de nailon para cada baño.
  • Nunca dejes a los niños desatendidos.

Acerca de este wikiHow

Laura Marusinec, MD
Coescrito por:
Pediatra certificado por el colegio oficial
Este artículo fue coescrito por Laura Marusinec, MD. La Dra. Marusinec es pediatra certificada por el colegio oficial en el Children's Hospital de Wisconsin, donde pertencece al Consejo de Práctica Clínica. Ella recibió su doctorado en mediciana en el Medical College of Wisconsin School of Medicine en 1995 y completó su residencia en el Medical College of Wisconsin in Pediatrics en 1998. Es miembro de la Asociación Americana de Escritores Médicos y de la Sociedad de Atención de Urgencia Pediátrica. Este artículo ha sido visto 27 159 veces.