Si sufres de alergias estacionales, sabes lo incómodas que son. Incluso podrías estar dispuesto a probar productos no comprobados para ver si ayudan. El polen de abeja es uno de esos productos. Sus defensores afirman que el polen de abeja recolectado mejora gradualmente los síntomas hasta hacerlos desaparecer gracias a que contiene cantidades pequeñas de los alérgenos causantes de las alergias. Aunque contiene muchos nutrientes útiles, no existen estudios que demuestren su eficacia como suplemento de salud o tratamiento para las alergias.[1] Sin embargo, siempre y cuando no seas alérgico al polen y consultes primero con tu doctor, probarlo como suplemento no debe provocarte ningún daño. Pruébalo para ver si tus alergias mejoran en unas semanas.

Método 1
Método 1 de 2:
Cómo tomar el polen de abeja

Si no has logrado aliviar las alergias con nada y deseas probar el polen de abeja como tratamiento, primero consulta con el doctor para asegurarte de que sea seguro. Si te da su aprobación, pruébalo. Suele venir en un frasco lleno de bolitas pequeñas de polen que se toman por vía oral. Puedes incluirlas en las comidas o las bebidas o tragarlas solas. No existen dosis estándar para utilizar el polen como suplemento y los distintos productos dan distintas dosis.[2] Como regla general, empieza con solo una cantidad pequeña para acostumbrar al cuerpo al polen y asegurarte de no presentar reacciones adversas. Luego, aumenta poco a poco hasta llegar a la dosis completa. Toma el polen por 30 días seguidos para ver si ayuda a aliviar tus alergias.

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    Compra una mezcla de polen de distintas zonas geográficas. Este tipo de polen aportará una buena dosis de alérgenos de distintas zonas, lo que podría hacerlo más eficaz. Sabrás que el polen está mezclado porque incluye muchos colores distintos.[3]
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    Empieza con la mitad de la dosis diaria para introducir el polen en el cuerpo. Dado que no existe una dosis oficial de polen, es mejor empezar con una cantidad pequeña. Sin importar lo que recomiende el producto, reduce dicha cantidad a la mitad para introducirlo lentamente en el cuerpo y evitar reacciones adversas.[4]
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    Espolvorea el polen en las comidas o bebidas o cómelo puro. Tampoco existe una forma estándar de tomar el polen de abeja. A algunas personas les gusta espolvorearlo en las ensaladas o en el yogur y a otras les gusta añadirlo al té. Puedes añadirlo a tu comida de esta manera o comerlo solo con una cuchara.[5]
    • El polen de abeja tiene un sabor florar ligeramente dulce, así que debes disfrutarlo si lo comes solo.
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    Aumenta tu ingesta hasta llegar a la dosis recomendada durante una semana. Una vez que sepas que el polen no provocará ninguna reacción adversa en cantidades bajas, puedes aumentar la dosis. Aumenta la cantidad que tomas a diario por una semana hasta llegar a la dosis recomendada.[6]
    • Las recomendaciones de dosis comunes varían de 1 a 5 gramos o de 1/4 a 1/2 cucharadita. No tomes más de lo que indica el paquete.
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    Deja de tomar el polen al cabo de 30 días. Los estudios solo indican que el polen de abeja es seguro hasta por 30 días, así que es mejor optar por lo seguro y utilizarlo dentro de los 30 días posteriores al inicio de su consumo.[7]
    • Si deseas volver a tomarlo, pregúntale al doctor cuánto tiempo debes esperar antes de volver a empezar.

Método 2
Método 2 de 2:
Utilizar el polen de abeja de forma segura

Aunque el polen de abeja suele ser seguro como suplemento y muestra pocas interacciones con otros medicamentos, aún hay algunos problemas médicos. El principal es una reacción alérgica, que es potencialmente mortal si eres alérgico al polen.[8] Como ocurre con todos los suplementos, consulta con tu doctor antes de empezar a tomar el polen de abeja. Él te dirá si esto es seguro para ti.

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    Hazte una prueba para asegurarte de no ser alérgico al polen de abeja antes de utilizarlo. La principal preocupación con el polen de abeja es una reacción alérgica. Siempre acude primero a un alergólogo para hacerte una prueba de alergia al polen, puesto que dichas reacciones pueden ser graves sin eres alérgico a esa sustancia.[9]
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    Consulta con el doctor si tomas warfarina. El polen de abeja puede amplificar los efectos de este anticoagulante, lo que significa que podrías sufrir moretones o sangrar con más facilidad. Pregúntale al doctor si tomar polen de abeja es seguro mientras tomas warfarina.[10]
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    Pregúntale al doctor primero si estás embarazada o dando de lactar. En la actualidad, no se sabe de qué manera el polen de abeja puede afectar a las mujeres embarazadas o a sus bebés. Si estás embarazada o dando de lactar, consulta con el doctor antes de empezar a utilizar el polen.[11]
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    Sigue todas las instrucciones de las dosis que vienen con el polen. Nunca excedas las recomendaciones de dosis o frecuencia de uso del producto. En la actualidad, se desconocen los efectos de una sobredosis de polen.[12]
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    Deja de utilizarlo de inmediato si experimentas alguna reacción adversa. Las reacciones adversas pueden indicar una alergia al polen, así que deja de tomarlo de inmediato si sospechas que tienes un ataque de alergia. Algunos de los principales signos a los que debes prestar atención son los ojos llorosos, sarpullido, picazón en la piel o la boca, tos y respiración sibilante.[13]
    • Si tienes dificultades para respirar o sientes picazón en la garganta, busca atención médica de emergencia de inmediato. Esto puede indicar una reacción alérgica grave.

Consideraciones médicas

En la actualidad, el consenso científico es que el polen de abeja no es un tratamiento eficaz para las alergias estacionales. Sin embargo, tiene otros potenciales beneficios para la salud, puesto que es rico en antioxidantes, ácidos grasos y vitaminas. Aún no se sabe si dichos beneficios hacen que valga la pena tomar el polen de abeja. Si deseas probarlo como un suplemento para la salud, asegúrate de hacerlo de forma segura. Primero consulta con el doctor para asegurarte de no tener una alergia al polen. Si él te da su aprobación, empieza con una cantidad pequeña e introduce el polen en tu dieta de forma lenta. Si notas algunos beneficios, habla con el doctor antes de tomarlo por más de 30 días seguidos.

Acerca de este wikiHow

Zora Degrandpre, ND
Coescrito por:
Doctora en salud natural
Este artículo fue coescrito por Zora Degrandpre, ND. La Dra. Degrandpre es una médico naturista con licencia en Vancouver, Washington. También es revisora de subvenciones para los Institutos Nacionales de Salud y el Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa. Recibió su doctorado en neuropatía en el Colegio Nacional de Medicina Natural en 2007. Este artículo ha sido visto 14 001 veces.

Descargo de responsabilidad médica

El contenido de este artículo no pretende ser un sustituto del consejo, examen, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Siempre debes comunicarte con tu médico u otro profesional de salud calificado antes de comenzar, cambiar o suspender cualquier tipo de tratamiento de salud.