Es probable que tu gato esté estreñido si no puede evacuar sus heces o si sus deposiciones son muy duras y secas.[1] Tu gato podría incomodarse debido al estreñimiento, y te frustrará verlo haciendo fuerza. Puedes aplicarle un enema en casa para aliviar el problema si tu veterinario está de acuerdo con ello y si tu gato suele cooperar.

Parte 1
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Determinar el momento en el cual aplicar el enema

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    Identifica los signos del estreñimiento. Si tu gato sufre de estreñimiento, es probable que lo veas entrar en la caja de arena reiteradas veces y que se agache para defecar sin poder evacuar sus heces. Durante estos intentos, es probable que tu gato haga fuerza y vocalice (maullando, llorando o aullando). Existen otros síntomas, como la poca energía, la pérdida del apetito y el dolor abdominal. En ocasiones, incluso podrías palpar un pedazo de heces duro y grande si presionas suavemente el abdomen de tu gato.[2]
    • Los signos del estreñimiento pueden asemejarse a los de una obstrucción urinaria, la cual consiste en una emergencia que puede poner en peligro la vida del animal con rapidez. Debes llevarlo al veterinario para descartar una obstrucción urinaria si crees que hace esfuerzo para miccionar o si no has detectado ningún rastro de orina en la caja de arena en más de 12 horas.
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    Intenta determinar cuál es la causa del estreñimiento. La evacuación de las heces puede obstruirse debido a los tumores y los objetos externos, como el pelo, los huesos y el material vegetal.[3] En ocasiones, la dieta puede ser un factor importante para el estreñimiento. Si tu gato cuenta con un historial de estreñimiento, podrías alimentarlo con comida enlatada para brindarle una humedad adicional o podrías enriquecer su dieta con psyllium.[4]
    • El estreñimiento también puede deberse a trastornos metabólicos o endocrinos, como la deshidratación, el desequilibrio de electrolitos o la obesidad. Algunos gatos pueden estreñirse debido a los problemas neurológicos de una enfermedad en la médula espinal, las lesiones en la pelvis o una disfunción de los nervios principales.
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    Considera aplicar un enema en casa solo si tu gato tiene estreñimiento leve de vez en cuando. Puedes aplicar un enema en casa si tu gato tiene un estreñimiento leve (menos de 2 o 3 días) o si no ocurre de manera crónica. Debes acudir a un veterinario si el estreñimiento es más grave o si consideras que tu gato podría padecer un trastorno más complicado.
    • Podría tratarse de un trastorno más complicado si observas cambios en el consumo de agua de tu gato, un nivel de energía muy bajo, vómitos graves o una total pérdida del apetito. En ocasiones, es probable que un gato con estreñimiento esté un poco menos hambriento debido a que se siente lleno o incómodo por el estreñimiento; sin embargo, es probable que aún esté dispuesto a comer.
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    Considera el temperamento de tu gato. Solo debes aplicar un enema en casa si tu gato es dócil y cariñoso. No debe presentar ninguna otra condición médica o dolor subyacentes, como fracturas, artritis y problemas renales. Una de las posibles ventajas de aplicar un enema en casa es que tu gato se encontrará en un lugar que conoce mejor, y podría sentirse más tranquilo.
    • Es probable que necesites la presencia de otra persona para que ayude a sostener a tu gato con cuidado. Tu gato podría no cooperar y arañarte o morderte. Si tu gato forcejea, no lo sujetes de manera excesiva.
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Parte 2
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Hacer los preparativos para el enema

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    Adquiere un enema adecuado. El mejor tipo de enema es aquel que está preparado específicamente para gatos. Estos contienen dioctilsulfosuccinato de sodio en glicerina, como Feline Pet-Ema ® (de venta en EE.UU.).[5] El dioctilsulfosuccinato de sodio envía el agua a las heces, lo que las ablandará. La glicerina es de utilidad para lubricar el recto. En internet, será muy fácil encontrar enemas en venta.
    • Del mismo modo, puedes emplear agua tibia o aceite mineral. También puedes emplear agua tibia o aceite mineral. La opción más económica y segura consiste en usar agua tibia limpia, ya que es probable que no provoque una deshidratación. El aceite mineral también es relativamente seguro, puede lubricar el recto con facilidad y es de utilidad para evacuar las heces pequeñas y duras. No obstante, puede influir en los niveles de vitaminas liposolubles (como la vitamina D) y no debe administrarse en gatos que cuenten con una enfermedad renal subyacente. Si vas a emplear agua o aceite mineral, ten en cuenta que las heces se ablandarán luego de un tiempo, ya que no absorberán el agua de los intestinos, tal como lo hacen los enemas elaborados con sodio. Estos tampoco cuentan con propiedades lubricantes. Tendrás que aplicarlos varias veces en el recto para ablandar las heces y hacer que salgan poco a poco (lo que tomará de unos minutos a 2 horas).
    • Nunca emplees enemas Fleet ni ningún otro con fosfato sódico. La sangre y los tejidos de los gatos pueden absorber el sodio y las moléculas de fosfato que contienen estos enemas. Esto puede provocar un desequilibrio de electrolitos grave y deshidratación, lo que podría poner en riesgo la vida del gato.[6]
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    Emplea la jeringa lubricada correcta. Si vas a adquirir un kit para enemas preparado, este incluirá la jeringa adecuada. Si aplicarás un enema con agua o aceite mineral, elige una jeringa de 10 a 25 ml con un tubo de alimentación blando conectado a su extremo.[7] Las puntas de los tubos de alimentación son redondas, blandas y no causarán lesiones al introducirlas.
    • Siempre lubrica el extremo de la jeringa o el tubo de alimentación. Aplica un poco de lubricante (como KY Jelly o vaselina) en un extremo de la jeringa o el tubo de alimentación.[8]
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    Alista el espacio y tus implementos. Un lugar grandioso para aplicar un enema es el baño, ya que tu gato conocerá esa área, esta es cerrada y solo tendrás que limpiar en un espacio pequeño. Asea todas las superficies y reúne tus implementos.
    • La administración de un enema puede ser un procedimiento desastroso. Debes cubrir el piso del baño con algunas toallas, almohadillas absorbentes o papel periódico. Lo mejor es que uses guantes plásticos limpios. Es esencial que este procedimiento también sea limpio para ti.
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Parte 3
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Aplicar el enema

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    Envuelve una toalla en el gato. Coloca una toalla limpia y echa a tu gato en el centro. Jala un lado y colócalo sobre el lomo de tu gato y en su costado, y dobla el extremo libre por debajo de sus patas. Jala el otro lado de la toalla y colócala en la dirección contraria de una manera similar. Tu gato deberá estar envuelto como un burrito.
    • Si estás solo, acerca a tu gato a tu cuerpo cerciorándote de que su cabeza apunte a la dirección contraria a la de tu mano dominante. Háblale con un tono de voz tranquilo en todo momento. Si lo haces durante todo el proceso, podrás ayudarlo a tranquilizarse.
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    Introduce el enema. Levanta la cola del gato e introduce con cuidado la punta de la jeringa del enema o el tubo de alimentación conectado a una jeringa de 20 cc. Debes introducirlo de 5,1 a 7,6 cm (2 a 3 pulgadas) en el recto. Asimismo, puedes introducirlo hasta sentir que la punta del tubo de goma entra en contacto con las heces duras. No empujes con mucha fuerza el tubo o el líquido, ya que esto podría provocar traumas o desgarros en el recto, lo que puede dar origen a complicaciones graves en su salud.
    • Si vas a emplear aceite mineral, aplica de 15 a 20 ml con lentitud en el recto. Si vas a emplear agua tibia, aplica de 50 a 75 ml con lentitud. Si vas a emplear un enema Feline Pet-Ema ®, primero debes administrar 6 ml a una velocidad aproximada de 1 ml cada 3 segundos. Vuelve a administrar 6 ml del enema después de 1 hora y sigue el mismo procedimiento que has empleado la primera vez que lo administraste.[9]
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    Palpa la zona abdominal. Coloca la palma de tu mano por debajo del vientre de tu gato, entre sus piernas, y presiona con suavidad hasta sentir las heces duras. Aplica un masaje en esta zona sujetando con suavidad con el dedo gordo y tus demás dedos. Las heces saldrán con rapidez en algunos gatos, luego de 5 a 10 minutos.
    • Otros gatos podrían tener heces muy duras, por lo que podrías requerir 1 o 2 horas para evacuar las heces blandas. Si no se evacúan las heces, puedes volver a aplicar el enema luego de 1 o 2 horas. Debes comunicarte con el veterinario si el segundo enema no da resultados.
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    Supervisa a tu gato para determinar si sufre complicaciones. Es probable que observes algunas rayas o manchas pequeñas de sangre brillante, lo cual es normal. No obstante, si notas que hay cantidades abundantes de sangre o una hemorragia rectal continua, tu gato podría tener una lesión en el recto. Acude a un veterinario de inmediato.
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Consejos

  • Siempre ten en cuenta que el veterinario es la persona más adecuada para llevar a cabo un enema o elegir el tipo más apropiado que debe aplicarse. Nunca dudes en comunicarte o acudir al veterinario si tu gato está estreñido por más de 3 días.
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Advertencias

  • Comunícate con el veterinario si el enema o los enemas que hayas aplicado no han dado resultados.
  • Algunos gatos cuentan o desarrollan una condición llamada “megacolon”. Esta consiste en tener un colon demasiado grande debido a una acumulación excesiva de heces. Se requerirán tratamientos más complejos, por lo que tu gato debe recibir atención veterinaria. Los casos más graves podrían requerir una cirugía en el colon.[10]
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Referencias

  1. Ludwig, Lori: Constipation/Obstipation and Megacolon. In Cote, E. (ed): Clinical Veterinary Advisor: Dogs and Cats Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2007, págs. 234-236.
  2. Ludwig, Lori: Constipation/Obstipation and Megacolon. In Cote, E. (ed): Clinical Veterinary Advisor: Dogs and Cats Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2007, págs. 234-236.2. Washabau, R; Day, M. J.: Canine and Feline Gastroenterology Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2013 pág. 95
  3. Washabau, R; Day, M. J.: Canine and Feline Gastroenterology Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2013 pág. 95
  4. Freiche V1, Houston D, Weese H, Evason M, Deswarte G, Ettinger G, Soulard Y, Biourge V, German AJ. J Feline Med Surg.Uncontrolled study assessing the impact of a psyllium-enriched extruded dry diet on faecal consistency in cats with constipation. Diciembre de 2011;13(12):903-11. Epub 22 de septiembre de 2011.
  5. http://www.prnpharmacal.com/pdfs/Pet-Ema-PS.pdf
  6. Washabau, R; Day, M. J.: Canine and Feline Gastroenterology Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2013 pág. 95
  7. Ludwig, Lori: Constipation/Obstipation and Megacolon. In Cote, E. (ed): Clinical Veterinary Advisor: Dogs and Cats Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2007, págs. 234-236.
  8. https://www.holisticanimalmedicines.com/2010/07/19/how-to-do-a-enemas/
  9. http://www.prnpharmacal.com/pdfs/Pet-Ema-PS.pdf
  1. Washabau, R; Day, M. J.: Canine and Feline Gastroenterology Ed 1 St. Louis, Elsevier, 2013 pág. 95

Acerca de este wikiHow

Jamie Freyer, DVM
Coescrito por:
Veterinaria licenciada
Este artículo fue coescrito por Jamie Freyer, DVM. La Dra. Jamie Freyer es doctora licenciada en medicina veterinaria que reside en Washington. Con más de diez años de experiencia en práctica y la industria clínica, se especializa en medicina y cirugía veterinaria, conducta y genética de animales. Tiene una licenciatura en ciencias de la vida en la Universidad de Portland, así como un doctorado en medicina veterinaria en la Universidad Estatal de Oregon. Este artículo ha sido visto 75 556 veces.
Categorías: Salud de los gatos
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