La equinácea es una flor oriunda de Norteamérica. Las flores son hermosas y suelen utilizarse como hierbas medicinales para el resfriado común y otras infecciones menores. Puedes utilizar cada parte de la planta de la misma manera.[1] Puedes cosechar solo las flores, las hojas y los tallos de equinácea o cosechar toda la planta con las raíces adheridas. Luego, sécala y guárdala de modo que esté lista para utilizarse cuando la necesites.

Método 1
Método 1 de 3:
Cosechar las flores, las hojas y los tallos de equinácea

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    Espera a que broten las flores. Después de plantar la equinácea, las flores pueden tardar un par de años en florecer. Es importante que no coseches nada de la planta hasta que las flores hayan brotado al menos una vez y luego espera a que vuelvan a florecer para cosecharlas. Así te asegurarás de que la planta sea lo suficientemente resistente para soportar la cosecha y tenga un sistema radicular establecido.
    • Cosecha la flor mientras está floreciendo y antes que empiece a debilitarse.
    • Ten presente que la equinácea es una valiosa adición para el jardín incluso antes de cosecharla. Atrae mariposas, proporciona semillas para los pájaros y repele los ciervos del jardín.[2]
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    Corta justo por encima de un nudo para cosechar una cantidad pequeña de equinácea. Puedes cortar tanto tallo de equinácea como desees, solo asegúrate de cortarlo justo por encima de un nudo. Los nudos son protuberancias pequeñas en la equinácea donde crecen las hojas. Utiliza un par de tijeras de jardinería afiladas o tijeras comunes para cortar el tallo de la equinácea justo por encima de un nudo. Este método de cosecha es ideal para recolectar un solo tallo o unos cuantos tallos.[3]
    • Repite este procedimiento para cada uno de los tallos que desees cosechar.
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    Corta justo por encima de la corona para cosechar toda la planta. La corona se localiza en la base de la planta, justo por encima de las raíces. Corta hasta un tercio de los tallos justo por encima de la corona utilizando un par de tijeras comunes o tijeras de jardinería afiladas para cosechar la planta de equinácea.[4]
    • Hazlo para cada planta completa que desees cosechar.
    • La planta volverá a crecer al año siguiente.
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    Evita podar en exceso las plantas. A la equinácea no le gusta que la molesten, por eso es importante podarla con moderación.[5] Solo corta unos cuantos tallos de cada una de las matas y trata de cortar los más viejos o los más grandes. Deja los tallos más jóvenes intactos para que sigan creciendo.[6]
    • Revisa la planta una vez por semana mientras está en florecimiento para ver si hay tallos más viejos que puedan cosecharse antes que empiecen a debilitarse.

Método 2
Método 2 de 3:
Cosechar las raíces de equinácea

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    Espera hasta que la planta tenga al menos 3 años para cosechar las raíces. Las raíces de equinácea son útiles para tinturas y tés, pero cosecharlas implica desenterrar una planta entera. Es mejor esperar hasta que la planta madure, de modo que las raíces sean lo más grandes posible. Esto también proporcionará suficiente tiempo para que otras coronas de equinácea se desarrollen a partir de la planta original.[7]
    • También es mejor desenterrar la equinácea de raíz y dividir las matas una vez cada 3 o 4 años. Programa tus cosechas de raíces en primavera u otoño cuando el clima sea fresco.
    • Es posible que solo obtengas unas cuantas matas de plantas más pequeñas o varias matas de las más grandes.
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    Utiliza una pala de jardín para desenterrar las raíces. Inserta una pala de jardín en el suelo a 45 a 60 cm (1,5 a 2 pies) de la base de la equinácea. Luego, utiliza el pie para presionar la pala y levanta la planta por las raíces. Esto te permitirá asegurarte de no excavar en las raíces.[8]
    • También puedes cavar una zanja alrededor de la planta para soltarla. Solo ten cuidado de no cavar demasiado cerca para no dañar las raíces.
    • La equinácea tiene raíces anchas y profundas.
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    Utiliza los dedos para separar las matas de raíces en coronas individuales. La corona es la zona justo por encima de una raíz individual donde los tallos de esa planta se fusionan. Ten cuidado de no romper los tallos o pedazos de las raíces mientras las separas. Separa las matas más grandes y más viejas de las matas más pequeñas y más jóvenes y divídelas en pilas.[9]
    • Si una mata es muy difícil de separar con los dedos, utiliza un par de tijeras de jardinería para cortarla.
    • También debes sacudir el exceso de suciedad para que sea más fácil ver las coronas individuales.
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    Vuelve a plantar las coronas jóvenes adheridas a las más viejas. Una vez que hayas terminado de dividir las matas, vuelve a plantar las jóvenes en el suelo. Coloca cada mata en su propio agujero a unos 30 a 38 cm (12 a 15 pulgadas) de profundidad y a una distancia de 30 a 90 cm (1 a 3 pulgadas) entre sí. Seguirán creciendo y puedes cosechar las raíces de estas plantas en 1 o 2 años más.[10]
    • Asegúrate de plantar la equinácea en una zona del suelo o en una maceta con tierra que drena bien. Evita las tierras bien compactas o arcillosas.
    • Elige una zona con pleno sol o coloca la equinácea en maceta en una ventana soleada.
    • Riega la planta a profundidad después de replantarla.

Método 3
Método 3 de 3:
Secar y guardar la equinácea

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    Enjuaga las flores, los tallos, las hojas y las raíces. Antes de utilizar cualquiera de las partes de la equinácea, asegúrate de enjuagarlas bien. Sobre todo, enjuaga bien las raíces, puesto que han estado en el suelo y estarán cubiertas de suciedad. Enjuaga las plantas con agua tibia o fría.
    • Si las raíces de la planta aún tienen mucha suciedad, primero debes sacarlas al exterior y sacudirlas. No enjuagues mucha suciedad desechándola por los drenajes, ya que lo más probable es que se obstruyan.
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    Cuelga las plantas de equinácea boca abajo o déjalas secar sobre una superficie plana. Puedes atar un manojo de tallos de equinácea con una goma elástica o una cuerda y luego colgarlos boca debajo de un gancho en la pared o el techo para secarlos. Coloca una bolsa de papel sobre las flores para atrapar los pétalos secos a medida que caen. Según el tamaño de la planta y el calor del ambiente, las plantas pueden tardar solo un par de días en secarse o una semana.
    • Otra opción es esparcir las flores sobre una superficie plana bien aireada (como un mosquitero que hayas quitado de la ventana) y colocarlas al exterior para que se sequen en un día cálido y soleado. Esto debe darte plantas secas en solo 1 o 2 días.
    • Algunas personas también han tenido éxito secando la equinácea en una bandeja para hornear dentro de su auto. Esto puede permitirte lograr plantas secas en tan solo 1 día.
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    Corta las flores secas en pedazos separados con un cuchillo o tijeras. Corta los capullos florales de los tallos, corta los tallos en pedazos de 1,3 cm (1/2 pulgada) y corta las raíces en trozos de 0,5 cm (1/4 de pulgada). Puedes dividir las partes de la planta para distintos usos o mezclarlas.
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    Guarda la equinácea seca en frascos. Utiliza frascos con tapas roscas o con cierre hermético para mantener el aire y la humedad afuera. Puedes guardar las distintas partes de la flor en un solo frasco, ya que todas las partes pueden utilizarse de la misma manera. Sin embargo, también puedes separar las partes y colocarlas en sus propios frascos si lo deseas. Puedes utilizar toda la planta para hacer tés, extractos, cápsulas y preparaciones tópicas.[11] Coloca los frascos de equinácea en un lugar frío y oscuro, como un armario de cocina o una despensa.

Consejos

  • Puedes preparar té de equinácea con la planta seca o fresca. Solo coloca una cucharadita de flores secas o frescas en 1 taza (250 ml) de agua hirviendo y déjalas en infusión por 3 a 5 minutos. Luego, cuela el té y disfrútalo cuando esté lo suficientemente frío para tomarlo.

Cosas que necesitarás

  • una pala de jardín
  • tijeras comunes o tijeras de jardinería
  • macetas y tierra para macetas (opcional)
  • una goma elástica o un mosquitero
  • una bolsa de papel
  • una bandeja o un mosquitero
  • un frasco de vidrio

Acerca de este wikiHow

Lauren Kurtz
Coescrito por:
Horticultora profesional
Este artículo fue coescrito por Lauren Kurtz. Lauren Kurtz es especialista en naturalismo y horticultura. Lauren ha trabajado para Aurora, Colorado administrando el jardín Water-Wise en el Centro Municipal de Aurora para el Departamento de Conservación del Agua. Recibió una licenciatura en estudios ambientales y de sostenibilidad en la universidad Western Michigan en 2014.
Categorías: Siembra y cultivos