La gota o artritis gotosa es un trastorno artrítico que surge a causa de los niveles elevados de ácido úrico en los tejidos, las articulaciones y la sangre. Las personas con gota pueden producir demasiado ácido úrico o no excretarlo con eficacia.[1] Una cantidad excesiva de ácido úrico en el cuerpo provocará dolor, enrojecimiento e hinchazón.[2] Los ataques de dolor de la gota suelen ocurrir durante la noche, por lo que es una buena idea conocer la forma de evitarlos y aliviar el dolor cuando haya empezado.

Parte 1
Parte 1 de 5:
Tratar el dolor agudo para ayudarte a dormir

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    Coloca hielo en el área. En general, las primeras 36 a 48 horas de un ataque de gota son las más dolorosas, pero puedes aliviar el dolor inicial y cerciorarte de hacer todo lo posible para ponerle fin al ataque tan pronto como puedas. Puedes aliviar parte del dolor de la gota colocándote hielo en la articulación. Envuelve una compresa de hielo con una toalla y colócatela en el área afectada por 20 a 30 minutos cada hora que estés despierto.[3]
    • Mantén el área afectada lo más elevada posible mientras tienes el hielo puesto. Esto será de utilidad para evitar que la sangre se asiente en el área en donde lo coloques.
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    Consume analgésicos de venta sin receta. Puedes consumir analgésicos comunes, como ibuprofeno (p. ej., Advil o Motrin IB) y naproxeno (como Aleve). Consume todo AINE de venta sin receta por el menor tiempo posible. El consumo prolongado de AINE puede aumentar las probabilidades de sufrir un ataque cardiaco o un derrame, y eleva el riesgo de desarrollar úlceras y hemorragias. Debes seguir las indicaciones del fabricante al pie de la letra. [4]
    • No obstante, debes evitar toda aspirina o productos tópicos con aspirina (como Aspercreme o toda crema tópica con salicilatos). Los productos con aspirina pueden hacer que una mayor cantidad de ácido úrico se deposite en las articulaciones.
    • Tylenol (paracetamol) no es un medicamento antiinflamatorio y es probable que no sea de utilidad.
    • También podrías consumir la colchicina, pero esta requiere receta.
    • Para controlar los ataques crónicos de la gota, deberás consumir alopurinol, el cual disminuye la cantidad de ácido úrico en el cuerpo.[5]
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    Usa una crema o gel tópicos para el alivio del dolor. Se ha demostrado que los analgésicos tópicos son muy eficaces, en especial para las articulaciones como los dedos de los pies, los tobillos, las rodillas, los codos y las manos.[6] Por ejemplo, Voltaren en gel es un AINE tópico de venta con receta que puede aliviar el dolor de la gota de forma considerable. Consulta con el doctor sobre el uso de este gel.[7] Estos son algunos medicamentos tópicos de venta sin receta que podrían ser de utilidad:
    • Crema de capsaicina: la capsaicina es una substancia que se deriva de la pimienta roja, la cual agota la substancia P que participa en la percepción del dolor. Debes lavarte bien las manos después de aplicarte la capsaicina, ya que puede provocar una sensación intensa de quemazón, en particular si está cerca de los ojos.
    • Cremas homeopáticas: estas comprenden a Topricin, la cual contiene una mezcla de remedios homeopáticos para el dolor.
    • Ungüento para el alivio de la gota: Tanza Botanicals cuenta con un ungüento que alivia la gota y que está elaborado con diversas hierbas para el alivio del dolor.

Parte 2
Parte 2 de 5:
Prepararte para dormir si sufres un ataque

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    Ponte lo más cómodo posible. La gota suele brotar durante la noche. En este punto, el peso de una manta sobre un dedo del pie con gota puede provocar demasiado dolor. Si este es tu caso y has estado sufriendo ataques, evita este malestar elevando la calefacción en tu dormitorio y manteniendo las mantas fuera del área afectada.
    • Podrías sentirte más cómodo (al menos en la primera noche) si duermes en un sillón común o reclinable en los que puedas mantener la articulación elevada.
    • Si el dolor de la gota ocurre en los dedos del pie, el tobillo o la rodilla, quizás lo mejor sea no usar una manta o colocar una cubierta por encima de la articulación, si es posible.
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    Recibe tratamiento para las condiciones relacionadas con el sueño. La gota también se vincula con las condiciones que afectan al sueño, como la apnea del sueño. Si en el pasado te has despertado durante la noche a causa de la gota, conversa con el doctor sobre los posibles tratamientos para una condición relacionada con el sueño.
    • Debes evitar todo estimulante como la cafeína o el tabaco, así como todo alimento o bebida rico en purina. Entre los alimentos ricos en purina tenemos a las carnes rojas, las anchoas, los mariscos, los pescados grasos, el espárrago, la espinaca y la mayoría de los frejoles secos.[8] Si evitas estos alimentos, esto te ayudará a dormir mejor.
    • Sigue bebiendo mucha agua. Esto no siempre ayudará a dormir en sí, pero será de utilidad para eliminar el ácido úrico que se haya acumulado.
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    Consume todo medicamento aproximadamente 1 hora antes de que planees dormir. Esto brindará un tiempo para que el medicamento surta efecto. Por ejemplo, si vas a usar un analgésico tópico, aplícatelo aproximadamente de 20 a 30 minutos antes de que planees dormir.
    • Si vas a consumir AINE, trata de hacerlo junto con los alimentos, como el yogur o las galletas con mantequilla de maní. Comer ayudará a recubrir el estómago y disminuir la probabilidad de desarrollar úlceras o una hemorragia gastrointestinal.
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    Practica buenos hábitos de sueño. Evita los ruidos fuertes o las luces brillantes, y reproduce música tranquila o “ruidos blancos” para relajarte. Si es posible, toma una ducha o un baño calientes antes de irte a dormir. Esto puede ser de utilidad para relajarte incluso más.
    • Haz algunos ejercicios de respiración profunda, escucha música tranquila o usa técnicas de meditación para relajarte lo más que puedas.
    • Despierta y ve a dormir a las mismas horas todos los días. No fuerces el sueño; si no puedes dormirte, haz otra cosa hasta que te sientas cansado. Soluciona los conflictos antes de irte a dormir. No consumas alcohol ni tabaco antes de ir a la cama. Haz ejercicio en la mañana, y no te ejercites por menos de 4 horas antes de irte a dormir.

Parte 3
Parte 3 de 5:
Tratar la gota con medicamentos

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    Obtén un diagnóstico. Es importante que consultes con un doctor si crees que sufres de gota. Él podrá ayudarte a aliviar tus síntomas y te recomendará tratamientos. La gota suele diagnosticarse tan solo revisando los síntomas y el historial clínico.
    • Quizás el doctor también tome una muestra de líquido articular para identificar los cristales de ácido úrico característicos; realice un análisis de sangre para medir la cantidad de ácido úrico; u ordene una radiografía, un ultrasonido o una tomografía computarizada. No obstante, las pruebas de imágenes se realizan con muy poca frecuencia para este diagnóstico.[9]
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    Consume medicamentos recetados. El tratamiento médico para la gota emplea medicamentos que bloquean la producción de ácido úrico, como el alopurinol (Aloprim, Lopurin o Zyloprim) y el febuxostat (Uloric); o que aumentan la excreción de ácido úrico, como el probenecid (Probalan). Tal como puedes imaginar, estos medicamentos pueden provocar efectos secundarios considerables, como los siguientes:
    • El alopurinol puede provocar erupciones cutáneas y anemia, y a veces puede aumentar el dolor articular. Las personas de descendencia asiática y africana corren un mayor riesgo de desarrollar erupciones cutáneas al consumir alopurinol.
    • El alopurinol solo se emplea para el tratamiento de la gota crónica. Este no cura la gota aguda. Si sufres de gota aguda, debes consumir colchicina para aliviar tus síntomas.[10]
    • El febuxostat puede alterar las enzimas del hígado de forma considerable.[11] Este medicamento también se usa únicamente para tratar la gota crónica.[12]
    • El probenecid puede provocar dolores de cabeza y de articulaciones, y respiración rápida.[13]
    • Otros medicamentos usados comprenden a los AINE de venta con receta como la indometacina (Indocin) o el celecoxib (Celebrex). También pueden recetarse agentes antiinflamatorios esteroides y colchicina (Colcrys o Mitigare). La colchicina es un medicamento antiguo que se usa con menos frecuencia, debido a sus efectos secundarios considerables.
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    Sigue las recomendaciones del doctor con respecto a los cambios en tu estilo de vida. Además de medicamentos, el tratamiento de la gota y el dolor relacionado con la misma requerirá cambios en tu dieta y estilo de vida. El doctor debe brindarte algunas recomendaciones para estos cambios en tu estilo de vida, así podrás limitar el dolor y ser capaz de dormir un poco.

Parte 4
Parte 4 de 5:
Hacer cambios en tu dieta

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    No consumas alimentos que aumenten tus probabilidades de sufrir un ataque. Si es tu primer ataque o si aún no has realizado cambios en tu dieta, será el momento de disminuir tu consumo de alimentos ricos en purina. Las purinas se descomponen en el cuerpo para producir ácido úrico. Evita estos alimentos por completo durante un ataque de gota y por un mínimo de 1 mes luego del ataque. Una vez que te hayas recuperado, evita consumir más de 2 a 4 porciones por semana de cualquiera de estos alimentos. Estos comprenden los siguientes:[14] [15]
    • Alcohol.
    • Refrescos azucarados.
    • Alimentos grasosos, como los alimentos fritos, la mantequilla, la margarina y los lácteos ricos en grasa.
    • Carne de órganos (hígado, riñones o mollejas). Estos alimentos poseen los niveles más elevados de purinas.
    • Carne de res, pollo, cerdo, ternera y venado, y tocino.
    • Anchoas, sardinas, arenque, mejillón, bacalao, vieira, trucha, merluza, cangrejo, ostras, langosta y camarón.
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    Aumenta tu consumo de alimentos que sean de utilidad para eliminar la gota. Además de evitar determinados alimentos, también puedes aumentar el consumo de alimentos que puedan protegerte contra los niveles elevados de ácido úrico. Estos comprenden a los siguientes:[16]
    • Alimentos ricos en fitato: el fitato es una substancia que parece evitar la formación de muchos tipos de cálculos renales, incluidos los que tienen ácido úrico. Los alimentos ricos en fitato comprenden a los frejoles, las legumbres y los granos integrales. Debes incluir 2 o 3 porciones de frejoles, legumbres y granos todos los días.
    • Té verde: el té verde disminuye el riesgo de desarrollar cálculos renales con ácido úrico. Bebe alrededor de 2 o 3 tazas de té verde al día.
    • Alimentos ricos en calcio: los productos lácteos bajos en grasas son alimentos ricos en calcio que puedes incluir en tu dieta.
    • Jugo de cereza: el jugo de cereza se ha consumido por mucho tiempo en la medicina naturista para el tratamiento de la gota y los cálculos renales. Si sufres un ataque de gota, bebe 3 o 4 vasos de 240 ml (8 oz) de jugo de cereza orgánica todos los días. Esto deberá brindarte un poco de alivio dentro de las 12 a 24 horas posteriores.
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    Consume suplementos recomendados para la gota. Estos suplementos no te ayudarán a dormir de inmediato, pero serán de utilidad para disminuir a largo plazo la frecuencia y la duración de un ataque de gota. Si ya consumes medicamentos contra la gota de venta con receta, consulta con el doctor antes de consumir algún suplemento. Asimismo, sigue las recomendaciones del fabricante con respecto a la dosis. Entre los suplementos útiles tenemos a los siguientes:[17] [18]
    • Ácidos grasos omega-3, en especial el ácido eicosapentaenoico (EPA).
    • La bromelina es una enzima derivada de las piñas. Esta suele usarse para ayudar a tratar los problemas digestivos, pero en el caso de la gota, se emplea como un agente antiinflamatorio.
    • El folato (una vitamina B) inhibe a la misma enzima (xantina oxidasa) que el medicamento contra la gota llamado alopurinol, por lo que disminuye los niveles de ácido úrico.
    • La quercetina es un bioflavonoide que también inhibe a la xantina oxidasa.
    • La garra del diablo (harpagophytum procumbens) se ha usado comúnmente para tratar la gota, ya que disminuye los niveles de ácido úrico.
    • Todo aquel que sufra de gota deberá evitar los suplementos de vitamina C o niacina. Ambas vitaminas pueden aumentar los niveles de ácido úrico.

Parte 5
Parte 5 de 5:
Detectar la gota

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    Busca los síntomas de la gota. Los síntomas de la gota suelen brotar de forma repentina y suelen hacerlo de noche. Entre ellos tenemos a los siguientes:[19]
    • Dolor intenso en las articulaciones, por lo general en la base del dedo gordo del pie. La articulación afectada también puede ser el pie, el tobillo, la rodilla o la muñeca.
    • La gota suele afectar solo a una articulación a la vez, pero puede afectar a muchas, en especial si no se trata la causa subyacente.
    • Malestar en la articulación luego del ataque inicial.
    • Enrojecimiento y otros signos de inflamación, como quemazón, hinchazón y sensibilidad.
    • Menor capacidad de mover la articulación afectada.
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    Evalúa si tu dieta podría fomentar la gota. Puedes correr el riesgo de sufrir de gota si consumes una dieta con muchos alimentos y bebidas ricos en purina y con niveles elevados de fructosa (gaseosas y refrescos). Los alimentos que suelen actuar como desencadenantes de la gota comprenden a los siguientes:[20] [21]
    • cervezas y licor;
    • refrescos azucarados;
    • alimentos grasos (alimentos fritos, mantequilla, margarina y productos lácteos ricos en grasas);
    • carne de órganos (hígado, riñones o mollejas);
    • carne de res, pollo, cerdo, ternera y venado, y tocino;
    • anchoas, sardinas, arenque, mejillón, bacalao, vieira, trucha, merluza, cangrejo, ostras, langosta y camarón.
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    Evalúa tus factores de riesgo para la gota. La gota puede surgir a cualquier edad, pero mayormente brota en los hombres adultos y las mujeres postmenopáusicas. No obstante, existen factores de riesgo (además de la dieta) que pueden influir de forma considerable en la probabilidad de que desarrolles esta enfermedad. Estos son los siguientes:
    • Obesidad o sobrepeso.
    • Falta de tratamiento para la presión arterial elevada, diabetes, síndrome metabólico, enfermedad cardiaca y renal.
    • Medicamentos, incluidos los diuréticos tiazídicos (píldoras diuréticas), las dosis bajas de aspirina y los medicamentos inmunosupresores.
    • Historial familiar de gota.
    • Cirugías o traumatismos recientes. Si controlas la cantidad de purinas de tu dieta, pero dejas caer un objeto pesado en tu dedo del pie, aun así esto podría provocar un ataque agudo.

Advertencias

  • Comunícate con el doctor si tus síntomas no mejoran luego de 2 o 3 días.
  • Si consumes algún medicamento, deberás informar al doctor sobre toda hierba y suplemento que también consumas.

Acerca de este wikiHow

Alex Dimitriu, MD
Coescrito por:
Profesional de medicina del sueño y psiquiatría
Este artículo fue coescrito por Alex Dimitriu, MD. El Dr. Alex Dimitriu es el propietario de Menlo Park Psychiatry and Sleep Medicine, una clínica con sede en el Área de la Bahía de San Francisco que cuenta con experiencia en psiquiatría, sueño y terapia transformacional. Alex obtuvo su doctorado en Medicina en la Universidad Stony Brook en 2005 y se graduó del Programa de Residencia de Medicina del Sueño en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford en 2010. Profesionalmente, Alex tiene doble certificación en psiquiatría y medicina del sueño. Este artículo ha sido visto 13 895 veces.