Cuando tu auto ha estado situado en el sol, puede calentarse bastante. Para enfriarlo lo más rápido posible, ventila la puerta rápidamente varias veces. Entra en el auto y, cuando comiences a manejar, enciende el aire acondicionado en el ajuste más alto. Baja las ventanas durante unos cuantos segundos y luego súbelas a medida que el auto se enfría.

Método 1
Método 1 de 2:
Ventilar la puerta y usar el aire acondicionado

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    Abre una ventana y una puerta. Baja la ventana del lado del pasajero. Luego, párate afuera del auto y abre la puerta del lado del conductor usando la manija de la puerta. Con la ventana abajo, estarás listo para crear un área de baja presión que expulse el aire caliente hacia afuera y absorba el aire frío hacia adentro.[1]
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    Ventila la puerta. Empuja rápidamente la puerta hacia el auto, deteniéndote justo un poco antes de cerrarla. Repite esto de seis a ocho veces, y luego entra en el auto.[2]
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    Enciende el auto. Ya que el aire acondicionado requiere que el aire se mueva sobre el condensador, utilizar el aire acondicionado mientras estás parado no enfriará el auto muy rápido. Manejar un poco te preparará para enfriar el auto lo más rápido posible.[3]
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    Enciende el aire acondicionado mientras manejas. Configura la temperatura al ajuste más frío y la velocidad del ventilador, al ajuste más alto.
    • Usa el ajuste de aire fresco (a diferencia del ajuste de recirculación de aire), hasta que la temperatura interior del aire caiga por debajo de la temperatura exterior, y luego cambia a la recirculación.[4]
    • Cuando enciendes primero el aire acondicionado en un auto caliente, es probable que sientas una ráfaga de aire caliente. Luego de unos minutos, la temperatura empezará a bajar.
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    Baja las ventanas. Mantén las ventanas abajo por uno o dos minutos para sacar el aire caliente inicial del aire acondicionado y para hacer que el aire circule. Una vez que el aire acondicionado haya enfriado el auto a un punto agradable, sube las ventanas y mantenlas arriba.[5]

Método 2
Método 2 de 2:
Evita que el auto se caliente

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    Estaciónate en la sombra. Si es posible, siempre estaciónate debajo de un árbol, en la sombra de una casa o en otro lugar frio. Si te estacionas en un edificio de estacionamiento, trata de evitar el nivel superior (que no está protegido con un techo).[6]
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    Invierte en un parasol. Los parasoles son cubiertas plegables para el parabrisas. Para usar el parasol, presiónalo contra la parte interior del parabrisas. Abre las viseras para asegurar el parasol en su lugar.[7]
    • Los mejores parasoles estarán recubiertos de cromo reflectante para desviar los rayos del sol fuera del vehículo.
    • Algunos parasoles tienen pequeñas ventosas en las esquinas para permitir que se adhieran mejor al parabrisas. Este tipo también se puede usar en las ventanas de las puertas.
    • Colócalos en cualquier ventana que esté mirando al sol (quizás quieras estacionarte con la parte frontal del auto mirando hacia el sol, para usar un parasol allí).
    • Se puede usar más de uno, pero no en la puerta que necesitas abrir para salir del auto.
    • Baja las viseras para sostener mejor el parasol frontal en su lugar y para reflejar cualquier luz que pase por la parte superior.
    • Ten cuidado que los parasoles pueden volar fácilmente a la cara del conductor o fuera de la ventana una vez que el auto se mueva, con las ventanas abajo. Dóblalos y coloca un objeto pesado encima, como zapatos, o sostenlos en tu regazo para evitarlo.
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    Abre una rendija en las ventanas. Abrir una rendija en las ventanas puede permitir que el aire continúe moviéndose a través del auto, evitando así que el auto se caliente mucho más que la temperatura exterior.
    • Mientras más grande sea la rendija de las ventanas mejor (de una pulgada o dos centímetros y medio cada una), especialmente si puedes crear una corriente de aire cruzada.[8]
    • No hagas una rendija en las ventanas si va a llover.
    • Un riesgo es que un ladrón podría alcanzar las cerraduras de la puerta usando un colgador u otra herramienta, así que ten cuidado de esto.
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    Usa una funda de asiento. Si tienes asientos de color marrón oscuro o negro, el auto absorberá más calor que un auto con asientos de colores claros o brillantes. Para remediar esto, invierte en algunas fundas de asiento blancas o de color claro.[9]
    • Las fundas de asiento son fáciles de deslizar sobre los asientos. Como una falda de cama, estas permanecen seguras con bandas elásticas incorporadas alrededor del perímetro.

Consejos

  • Si tienes un Mercedes “moderno”, antes de entrar en el auto, acércate a él y sostén el botón de desbloqueo de la llave. Todas las ventanas se bajarán para liberar el aire caliente del auto antes de entrar.

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