Es muy probable que en alguno que otro momento te entre una partícula en el ojo y tengas que quitártela, lo cual puede ser bastante incómodo, pero en la mayoría de los casos se puede resolver en casa. Las partículas de arena, maquillaje o suciedad, y las pestañas que entran en el ojo se pueden sacar en casa sin necesidad de recibir atención médica, a no ser que el objeto arañe alguna parte del ojo o se incruste en su superficie.

Método 1
Método 1 de 2:
Quitar la partícula

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    Haz que el ojo lagrimee. Si te entra una partícula en el ojo, la forma más adecuada y natural de quitártela consiste en hacer que lagrimee. En el caso de que el ojo esté irritado, es posible que lagrimee por sí mismo, pero si esto no ocurre, prueba a parpadear muchas veces rápidamente para que te llore. Las lágrimas naturales ayudarán a enjuagar el ojo, y tal vez arrastren la partícula hacia fuera.
    • No te restriegues el ojo para que lagrimee. Se lo que sea el objeto extraño que te haya entrado, si te restriegas el ojo, podrás hacerte daño en la córnea o hacer que la partícula se incruste.[1] [2]
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    Busca la partícula. Si las lágrimas no arrastran la partícula hacia fuera, tendrás que localizar dónde se encuentra. Pídele a un amigo o a un familiar que te mire el ojo. Mantén el ojo bien abierto y mira a tu alrededor mientras la otra persona busca la partícula. Asegúrate de mirar hacia arriba, hacia abajo y de un lado a otro para que la persona que te ayude pueda inspeccionar todas las zonas del ojo.
    • Si no encuentras la partícula a la primera, tal vez tengas que tirar del párpado inferior hacia abajo y examinar esa zona del ojo. También puedes sujetar el párpado superior para mantenerlo abierto e inspeccionar esa otra zona. Es posible que la partícula esté atrapada detrás del párpado.
    • Si no tienes a nadie que te ayude, agarra un espejo. Mantén el ojo bien abierto y muévelo en todas direcciones para inspeccionarlo a fondo y buscar la partícula.[3] [4]
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    Utiliza las pestañas inferiores. Las pestañas están hechas para ayudar a eliminar partículas extrañas del ojo. Tira del párpado superior hacia abajo, por encima del párpado inferior. Al cerrar el párpado superior sobre el inferior, rota el ojo. De esta forma, es posible que las pestañas del párpado inferior barran la partícula hacia fuera del ojo.
    • Si este método no funciona a la primera, inténtalo unas cuantas veces más. Sin embargo, si después de varios intentos sigue sin funcionar, puedes probar otros métodos.[5]
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    Quítate la partícula con un bastoncillo de algodón. Si las pestañas no ayudan a arrastrar la partícula hacia afuera, tendrás que hacerlo con un bastoncillo de algodón. Localiza la partícula en la parte blanca del ojo. Humedece con agua un extremo del bastoncillo de algodón. Mantén el párpado abierto sujetándolo con una mano y retira suavemente la partícula con el extremo del bastoncillo de algodón.
    • También puedes utilizar un paño limpio o una toalla suave húmeda si no tienes bastoncillos de algodón.
    • Si la partícula se encuentra en la córnea (la parte no blanca del ojo), no utilices un bastoncillo de algodón para quitártela. La córnea es muy sensible y podrías dañarla.[6] [7]
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    Enjuágate el ojo con agua. Si no eres capaz de quitarte la partícula con un bastoncillo de algodón o se encuentra en la córnea, enjuágate los ojos con agua. Pídele a alguien que vierta un vaso de agua a temperatura ambiente con cuidado sobre tu ojo, desde la nariz hacia fuera, mientras lo mantienes abierto sujetándote los párpados con dos dedos. Después de enjuagarte una vez, comprueba si la partícula sigue ahí o ha salido. Si no ha salido, enjuágate el ojo de nuevo para intentar que salga.
    • Si no cuentas con la ayuda de nadie, prueba con otro método más lento y suave, como un cuentagotas o un vaso de agua más pequeño.[8] [9]
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    Prueba a utilizar una solución salina. Si no dispones de agua limpia o quieres probar un método diferente, prueba a enjuagarte los ojos con una solución salina. Agarra la solución salina y échate unas cuantas gotas en el ojo. Si de esta forma no sale la partícula, échate unas cuantas gotas más.
    • Las gotas para los ojos y las lágrimas artificiales funcionan igual que una solución salina. Manteniendo el ojo abierto con una mano, inclina la cabeza hacia atrás y aprieta el bote para echarte unas cuantas gotas y arrastrar la partícula hacia fuera.[10] [11]
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    Utiliza colirio. Probablemente puedas tener acceso a un colirio esterilizado, el cual está disponible de venta libre en las farmacias. La solución vendrá con una copa ocular estéril que puedes utilizar para lavar el ojo afectado. Para usar el colirio, llena la copa a la mitad, luego dóblala y presiónala contra tu ojo de modo tal que no se derrame el contenido. Luego, inclina la cabeza hacia atrás y abre el ojo. Mueve el ojo alrededor de la cuenca para enjuagarlo bien.[12]
    • Asegúrate de lavar la copa después de cada uso.[13]

Método 2
Método 2 de 2:
Buscar atención médica

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    Tápate el ojo con un apósito. Si eres incapaz de quitarte la partícula del ojo, ponte un apósito sobre el ojo y busca atención médica. También deberás acudir al médico si no consigues quitarte la partícula de la córnea enjuagándote el ojo. Si sigues intentando sacarte la partícula, tal vez acabes arañándote el ojo o haciéndote daño en la córnea. Al taparte el ojo, lo protegerás de la luz y te sentirás más cómodo hasta que recibas atención médica.
    • También puedes tapártelo con una toalla o un paño suave si consigues una cita inmediatamente después de fracasar en el intento de quitarte la partícula con los métodos descritos.[14]
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    Inspecciona el ojo para ver si tienes un arañazo o una úlcera. Si consigues quitarte la partícula pero sigues teniendo la sensación de que te ha entrado algo en el ojo, tal vez tengas un arañazo o una úlcera. También es posible que hayas sufrido una abrasión de la córnea en el caso de que la partícula te haya arañado la superficie del ojo. Cualquiera de estas complicaciones podría causar dolor, irritación y visión borrosa. Si te ocurre algo así, acude a tu médico lo antes posible.[15]
    • La mejor forma de saber si tienes un arañazo o una úlcera consiste en acudir al médico y comprobarlo. Hay una solución especial de fluoresceína amarilla que el médico te aplicará en el ojo para localizar cualquier arañazo o úlcera que puedas tener.[16] [17]
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    Utiliza una pomada o un colirio con antibiótico. Si tienes una úlcera o un arañazo, es probable que el médico te recete una pomada o un colirio con antibiótico para curar la lesión. Estos tratamientos, además, ayudarán a evitar que la lesión se infecte antes de cicatrizar.
    • Recurre siempre al consejo de un médico antes de utilizar cualquier tipo de pomada o colirio para los ojos.[18]
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    Ten cuidado con las perforaciones. Si crees que la partícula puede haber causado una perforación del ojo, busca asistencia médica inmediatamente, ya que este problema debe ser tratado con urgencia. Cualquier partícula punzante puede causar serios daños en el ojo si no tratas el problema inmediatamente. El objeto podría quedar incrustado bajo la superficie del ojo.
    • Tal vez necesites cirugía u otro procedimiento no invasivo para quitarte el objeto en el caso de que haya quedado atrapado bajo la superficie del ojo.[19]

Consejos

  • Lávate las manos antes quitarte cualquier partícula u objeto extraño del ojo. Después de lavarte las manos, enjuágate bien para no irritarte más los ojos con los restos de jabón que queden en los dedos.
  • La mejor forma de evitar que te entren partículas en los ojos consiste en taparlos para protegerlos. Debes llevar gafas protectoras para trabajar en la construcción, practicar determinados deportes, trabajar con sustancias químicas que puedan salpicarte a los ojos, y en cualquier situación en la que se levanten polvo y escombros.[20]

Acerca de este wikiHow

Theodore Leng, MD
Coescrito por:
Cirujano vitreorretiniano certificado por el colegio oficial
Este artículo fue coescrito por Theodore Leng, MD. El Dr. Leng es oftalmólogo certificado y cirujano vitreorretiniano, y profesor auxiliar de oftalmología en la Universidad de Stanford. Completó su beca de investigación para el doctorado en Medicina y Cirugía Vitreorretiniana en la Universidad de Stanford en 2010. El Dr. Leng es miembro de la Academia Estadounidense de Oftalmología y el Colegio Estadounidense de Cirujanos. También es miembro de la Asociación para la Investigación en Visión y Oftalmología, la Sociedad de Retina, la Sociedad Mácula, la Sociedad Vit-Buckle, así como para la Sociedad Estadounidense de Especialistas en Retina. Recibió el Premio de Honor de la Sociedad Americana de Especialistas en Retina en 2019. Este artículo ha sido visto 116 711 veces.
Categorías: Cuidado de los ojos