Cómo quitarte un tampón

Usar un tampón es una manera sencilla de nadar, hacer deportes o simplemente estar más cómoda durante tu periodo. Sigue leyendo para que aprendas cuándo y cómo quitártelos fácilmente.

Parte 1

Parte 1 de 3:
Saber en qué momento debes cambiarte el tampón

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Quítatelo si lo has tenido puesto por 8 horas. Los tampones se pueden utilizar sin problemas hasta por 8 horas pero luego se deben cambiar. Dejártelo por más tiempo supone un alto riesgo de contraer una infección por el Síndrome del shock tóxico (TSS, por sus siglas en inglés), que es poco frecuente pero que podría ser mortal.^{[1]
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Fuente de investigación}
- Si tratas de cambiarte el tampón luego de 8 horas pero este aún tiene mucha capacidad de absorción o solo tiene un poco de sangre, usa a uno de menor absorción. Siempre utiliza el tampón que tenga la menor absorción posible para tu flujo.^{[2]
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Cambia de tampón si sientes algo húmedo. Esto significará que el tampón ya no está absorbiendo la sangre y que está filtrando.^{[3]
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- Ponte un protector diario delgado si te preocupa que tu tampón filtre.
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Si te incomoda tu tampón, revísalo. Si lo has insertado de manera correcta, no lo sentirás. Pero si puedes sentir algo, es porque el tampón está muy abajo. Lávate las manos y usa un dedo para empujarlo más adentro de tu vagina.^{[4]
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Fuente de investigación}
- Si el tampón no se mueve o empujarlo te causa dolor, entonces tu vagina está muy seca, y tendrás que retirarlo y comenzar todo de nuevo. Sería mejor que pruebes un tampón de menor absorción. ^{[5]
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Cambia de tampón si tiras del hilo y se sale con facilidad. Cada vez que vas al baño debes darle un tirón de prueba. Si el tampón sale rápidamente, entonces será el momento de cambiarlo.^{[6]
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Cambia tu tampón si hay sangre en el hilo. Incluso si el mismo tampón no está completamente lleno o no sale con facilidad, si el hilo está ensangrentado, quiere decir que está a punto de filtrar.^{[7]
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Quítate el tampón y busca ayuda médica si tienes una fiebre alta repentina (normalmente de 39° C o más); te aparece un sarpullido rojo que parece una insolación en alguna parte del cuerpo; te sientes mareado o te desmayas cuando te paras; o tienes vómitos o diarrea. Estos son los síntomas del TSS que, aunque es poco frecuente, puede ser mortal, así que debes tomar las señales muy en serio.^{[8]
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Parte 2

Parte 2 de 3:
Retirar el tampón

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Siéntate en el inodoro con las piernas separadas.^{[9]
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Fuente de investigación} Si lo haces, habrá menos posibilidades de que crees un desastre.
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Relájate. Quitarte un tampón no debe ser doloroso. Si eres nerviosa, respira profundamente y distráete con una revista. No contraigas tus músculos vaginales.
- Si no puedes relajarte, prueba orinando un poco. Es posible que hacerlo relaje tus músculos lo suficiente para retirar el tampón fácilmente.^{[10]
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Tira del hilo que está al extremo del tampón. Este debe deslizarse fácilmente, con poca o ninguna resistencia.
- Si el tampón no sale con facilidad o es difícil de retirar, es posible que no tengas que cambiarlo. A menos que hayan pasado 8 horas (si es así debes intentar el truco de orinar para que sea más fácil retirarlo), déjalo una o dos horas más y luego revísalo.^{[11]
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- Si retiras el tampón después de 4 a 8 horas y tiene muy poca sangre, es posible que sea mejor cambiarlo por uno de menor absorción o reemplazarlo con protectores diarios.^{[12]
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Una vez que lo retires, envuelve el tampón en papel higiénico y colócalo en el tacho de basura. Algunas compañías aseguran que no tendrás problemas si tiras sus tampones al inodoro, pero generalmente no es una buena idea.^{[13]
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Fuente de investigación} Estos se romperán a la larga, pero no lo suficientemente rápido para que no se expandan y atoren tus tuberías, destruyan tu tanque séptico o provoquen muchos problemas (de expansión) en tu plomería.

Parte 3

Parte 3 de 3:
Retirar un tampón sin hilo

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No entres en pánico. Es imposible que un tampón se “pierda” en tu cuerpo si el hilo se rompe o no puedes encontrarlo.^{[14]
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Fuente de investigación}
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Lava tus manos y asegúrate de que tus uñas no estén astilladas o afiladas.
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Ponte en la posición en la que normalmente insertas el tampón (siéntate sobre el inodoro, en posición de sentadilla, o párate con una pierna sobre su asiento). Respira profundamente y trata de relajarte.^{[15]
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Inserta tu dedo índice en tu vagina y tantea buscando el tampón. Haz movimientos circulares y de adelante hacia atrás hasta que lo sientas. Es posible que esté hacia un lado o en la parte superior del canal vaginal, cerca de la cérvix y detrás de tu vejiga.^{[16]
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Inserta dos dedos. Úsalos para atrapar el tampón entre ellos y luego tira de él.^{[17]
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- Si no puedes sentir el tampón o tienes problemas para retirarlo, trata de sentarte en el inodoro y puja como si fueras a dar a luz o a hacer tus deposiciones.

Consejos

No lo pases por el inodoro pues podrías atorarlo.
¿Necesitas ayuda? No tengas miedo de pedirle ayuda a uno de tus padres a una amiga.

Advertencias

Cerciórate de utilizar un tampón de absorción de acuerdo a tu flujo. Si el tuyo es escaso y usas un tampón para flujo abundante, no se llenará y podría romperse en la vagina y provocarte el Síndrome del shock tóxico.
TSS o el Síndrome del shock tóxico, por sus siglas en inglés. Este problema es muy poco frecuente, pero es muy grave. Es una enfermedad que ocurre cuando el tampón se utiliza por un periodo muy largo de tiempo. ¡Asegúrate de cambiarlo cada 8 horas!