Cómo remojar tus pies para una pedicura

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Remojar tus pies en una pedicura puede ser una experiencia muy relajante y placentera. Con un poco de agua tibia, sulfato de magnesio, aceite aromatizado y algunos otros artículos, estarás en camino al paraíso de la relajación de los pies.

Pasos

1
Llena una tina de plástico con agua tibia. Asegúrate de que el agua esté tibia, ya que el agua fría o caliente no ayudarán para que sea una experiencia más placentera o relajante.
2
Después de eso, añádele sulfato de magnesio al agua. Si te gustaría una experiencia de pedicura más relajante y de spa, también puedes añadir tu aceite aromatizado preferido.
3
Ahora coloca tus pies en el agua y remójalos por al menos diez minutos enteros. Trata de usar un cronómetro. Remojar tus pies la mayor cantidad de tiempo posible te ayudará a que después elimines la piel muerta con más facilidad.
4
Después de remojarlos, saca un pie (el que prefieras, el derecho o el izquierdo) del agua y deja remojando el otro.
5
Frota una piedra pómez en la parte trasera de tu pie (del que hayas sacado del agua), concentrándote en las partes más ásperas. Las limas para los pies también funcionan bien para eliminar la piel muerta. Prueba ambos para ver qué funciona mejor para ti.
6
Coloca el pie que acabas de exfoliar en el agua y repite el paso anterior en el otro pie.
7
Saca tu pie del agua y sécalo suavemente con toquecitos.

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Consejos

Sácale el máximo provecho al tiempo en que remojes tus pies durante la pedicura al leer tu revista favorita, escuchar música o navegar en Internet. Mientras más tiempo remojes tus pies, los sentirás más suaves.

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