Muchas personas tienen una cutícula seca y desprendida debido al clima frío y seco, y por comerse las uñas. Además de comerse las uñas, a veces las personas incluso se comen la cutícula. Esto puede causar desgarrones que se podrían infectar. Por suerte, la cutícula seca y desprendida se puede reparar siguiendo algunos pasos fáciles para asegurarte de que tus manos permanezcan limpias y humectadas.

Parte 1
Parte 1 de 2:
Reparar la cutícula

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    Remoja tus manos. Toma un recipiente mediano y llénalo con unos 100 ml (4 onzas) de agua tibia.[1] Sumerge tus manos, asegurándote de meter tus uñas y cutículas. Remoja tus manos por unos 5 minutos.
    • El agua tibia ayuda a suavizar las cutículas para limpiarlas con facilidad y sin dolor.
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    Sécate las manos. Sécate las manos con palmaditas y con una toalla. No debe quedar agua en las cutículas, pero deben seguir humectadas. Querrás que tu piel permanezca humectada y suave mientras limpias tus cutículas, para que te sea más fácil y menos doloroso eliminar la piel muerta.
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    Empuja la cutícula hacia atrás. Un empujador de cutícula de madera o un palito de color naranja (un palito de manicura con un extremo en punta y el otro extremo plano) puede ayudarte a evitar que tu cutícula crezca hacia tu uña. Usa la parte plana del palito para empujar la cutícula hacia atrás y la parte punteada para pasarlo por debajo de la uña y eliminar cualquier suciedad acumulada.
    • Debes esterilizar los palitos de metal antes y después de cada uso, y botar los de madera después de cada uso. De lo contrario, pueden albergar bacterias.[2]
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    Corta la cutícula. Con un alicate de cutículas y tijeras de manicura, córtate la cutícula. Podría incluir la piel que está cerca de tu cutícula y que has empujado hacia atrás con palitos de manicura, pero ten mucho cuidado de cortar solo la parte que está suelta y suave, no tus cutículas verdaderas (la piel que rodea y protege tus uñas, en especial cerca del borde por donde empieza la uña).
    • No debes cortar la piel que rodea y protege la uña, la cual es la cutícula superior.
    • La piel suelta adicional será de un color blanco a comparación de la piel adherida a tus dedos. Solo querrás sacar la parte que se adhiera a las cosas y te cause un desgarramiento de piel.[3]
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    Aplícate un humectante. Usa lociones, aceites humectantes o cremas humectantes vendidos en las tiendas elaborados específicamente para hidratar las áreas secas alrededor de tus uñas. Frota una cantidad generosa de humectante en la uña y préstales mucha atención a tus cutículas. Toda el área que rodea la uña debe estar cubierta de un humectante.
    • También puedes aplicarte un humectante debajo de las uñas.
    • Los humectantes sin alcohol ni aromas por lo general hidratan mejor la piel.[4]
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    Usa guantes que fijen la humectación. Ponte guantes de algodón y déjatelos puestos de la noche a la mañana. Los guantes fijan la humectación y te ayudan a reparar tus uñas y cutículas. Sácate los guantes por la mañana.[5]
    • Si quieres mejorar la absorción del humectante, cúbrelo con vaselina o cera de parafina para contener la humedad. Luego ponte los guantes.
    • Para conseguir resultados mejores y más duraderos, repite este procedimiento cada noche.

Parte 2
Parte 2 de 2:
Prevenir las cutículas secas

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    Huméctate con frecuencia. Para una cutícula más suave e hidratada, huméctate a diario y varias veces al día. Siempre querrás que tus cutículas y uñas estén hidratadas, porque los padrastros y desgarros aparecen cuando las uñas y cutículas están secas.
    • Es sumamente importante que mantengas tus manos humectadas, en especial en los meses secos y de invierno.
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    No uses agentes deshidratantes. Las manos son propensas a secarse y pelarse, así que debes protegerlas de una exposición innecesaria a actividades que puedan resecar tu piel. Evita elementos como:
    • Lavar los platos con agua caliente sin guantes. El agua caliente y el jabón sacan la humectación de tus manos.
    • Usar un quitaesmalte de uñas hecho a base de acetona. La acetona elimina los aceites naturales de la piel y las uñas.
    • No usar guantes en los meses de invierno. El aire frío y seco durante el invierno resecan la piel. Por lo tanto, debes proteger tus manos usando guantes.
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    No toques tus cutículas. En vez de tocarte las cutículas, remoja y humecta tus manos. Si te tocas las cutículas, podrías causarte cortes, que pueden dar lugar a infecciones.
    • Algunas personas tocan sus cutículas por un hábito de nervios. Busca mejores maneras de encauzar tus hábitos de nervios y contrólate para dejar este hábito.
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    Mantén tus manos alejadas de tu boca. Evita morderte las uñas o mordisquearte las cutículas. Las bacterias de la boca pueden causarte una infección si te sacas las cutículas o si te muerdes demasiado las uñas.
    • Usa una pomada de un mal sabor para evitar ponerte los dedos en la boca.
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    mantente hidratado bebiendo al menos 8 vasos de líquido al día. Mantenerte hidratado mantendrá tu piel suave y húmeda, incluyendo tus cutículas.[6] El agua es tu mayor alternativa y puedes agregarle sabor utilizando rodajas de naranja, limón o pepino. También puedes aumentar tu hidratación bebiendo otros líquidos como té o jugo. Comer alimentos a base de agua como sopa y frutas acuosas también ayudará a mejorar tu hidratación.
    • Si sudas mucho, aumenta tu consume de agua.
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    Ten una dieta saludable y equilibrada. Si tu cuerpo carece de nutrientes, tu piel, cabello y uñas sufrirán las consecuencias. Consume muchas proteínas magras, vegetales y frutas. Para asegurarte de que tu cuerpo absorba nutrientes adecuadamente, come grasas saludables.[7]
    • También puedes tomar un suplemento vitamínico para fomentar la salud de tus uñas. No obstante, habla con tu médico antes de consumirlo.
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    Límate las uñas. Mantén tus uñas a un largo que evite que se enganche en algo. Presta mucha atención a los bordes de tus uñas y mantenlas suaves, para que los bordes no lastimen las cutículas.[8]
    • Cuando te limes las uñas, hazlo en una dirección de manera constante. Esto te ayuda a prevenir desgarramientos creados al limar las uñas de un lado a otro.

Advertencias

  • Nunca te saques las cutículas por completo. Puedes cortar cualquier piel suelta y muerta de color blanco, pero nunca debes sacar la cutícula por completo.

Acerca de este wikiHow

Kristin Pulaski
Coescrito por:
Propietaria de un salón de belleza y especialista en uñas
Este artículo fue coescrito por Kristin Pulaski. Kristin Pulaski es una artista de uñas profesional y fundadora de Paintbucket, un salón de manicura propio y operado con sede en Williamsburg, Brooklyn. Tiene más de tres años de experiencia dirigiendo Paintbucket y tiene licencia como técnica de uñas. Paintbucket ofrece manicuras para uñas, pedicuras y extensiones de gel suave, junto con paquetes personalizados para bodas y fiestas nupciales. Tiene una licenciatura en Ciencias Gerenciales de la Universidad de Manhattan. Este artículo ha sido visto 53 425 veces.
Categorías: Cuidado de las uñas