Cómo reproducir una planta de aloe vera (sábila)

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La planta de aloe vera ha sido apreciada desde hace años por su capacidad para aliviar y curar quemaduras, aliviar la piel irritada y minimizar el escozor de las picaduras de insectos. Esta planta suculenta semi-tropical se puede cultivar al aire libre en zonas libres de heladas, pero en general se cultiva como planta de interior en un alféizar soleado. Estas plantas son fáciles de cultivar y se reproducen enviando brotes hacia arriba, cerca de la base de la planta. Al poner estos brotes en macetas puedes cultivar nuevas plantas de aloe vera con facilidad.

Pasos

1
Quita los brotes jóvenes una vez que alcancen un tamaño de 7 a 10 centímetros. Aunque por lo general se sacan con un poco esfuerzo, un cuchillo afilado puede ser necesario para separarlos de la planta principal.
2
Pon una capa de 5 centímetros de grava gruesa en el fondo de una maceta de 10 centímetros. Llena con porciones iguales de tierra simple para macetas y arena. Verifica los orificios de drenaje para asegurarte de que proporcionen el drenaje adecuado, ya que el aloe requiere un suelo bien drenado y se pudren si se dejan en un suelo empapado.
3
Planta el brote nuevo a la profundidad original. Afirma el suelo alrededor de la base de la planta y riega hasta que el agua corra libremente a través de los agujeros de drenaje. Permite que el suelo se seque antes de volver a regar.
4
Coloca el brote cerca de una ventana soleada. Evita la luz solar directa y prolongada. Varios centímetros desde una ventana soleada proveerá iluminación adecuada. Las nuevas plantas se arraigarán en una semana o dos y el nuevo crecimiento debe ser evidente.
5
Fertiliza la planta en primavera con un fertilizante diseñado para plantas de interior. Diluye la solución a medias, ya que el aloe vera no requiere grandes cantidades de fertilizante.