Si la chica que te gusta te pregunta si le gustas, evalúa por qué te hace la pregunta antes de responder. Evalúa su lenguaje corporal, tono de voz y expresiones faciales para saber cómo responder. Pídele un minuto antes de responder. Quizás quieras tener esta conversación en un lugar mejor. Una vez que puedas centrarte y estés en un buen lugar, sé honesto y dile que te gusta. Sé transparente pero amable cuando te comuniques. Si no siente lo mismo, toma medidas para recomponerte y sentirte bien contigo y con la situación.

Método 1
Método 1 de 3:
Evaluar por qué te pregunta

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    Presta atención a su tono de voz y lenguaje corporal. Evalúa por qué te pregunta si le gustas. Si tienes una idea de cómo se siente, te ayudará a tener una conversación más productiva con ella. Las personas se comunican principalmente a través del tono de voz y el lenguaje corporal, así que procura comprender qué sucede al utilizar estas señales.[1]
    • Si levanta las cejas, es posible que se sienta incómoda. Esto podría significar que no quiere que le gustes.[2]
    • Si imita tu lenguaje corporal, probablemente tengan una conexión. Quizás desee que también le gustes o se sienta conectada contigo y quiera que sepas que no desea lo mismo.[3]
    • Mucho contacto visual es una señal de interés. Sin embargo, puede ocurrir por dos motivos; quizás quiera saber qué sientes porque son cercanos y no quiere lastimarte, o tal vez le gustes.[4]
    • Varios gestos juntos demuestran que siente una conexión contigo. Por ejemplo, si sonríe, inclina la cabeza hacia un costado y te sujeta o toca el rostro al mismo tiempo, podría significar que le gustas. Sin embargo, siempre debes creer en sus palabras más que en cualquier señal que percibas.[5]
    • Las piernas y los brazos cruzados podrían significar que quiere cerrarse contigo, lo que podría traducirse en que siente ansiedad o resistencia a sus sentimientos.[6]
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    No supongas demasiado. Una vez que evalúes cómo se siente y prestes atención a su lenguaje corporal, no pienses demasiado en sus sentimientos por ti. La realidad es que no tienes la seguridad de cómo se siente, y tampoco lo sabrás hasta que se lo preguntes directamente. Recuerda creer más en sus palabras que en las señales que creas que percibes por su parte.
    • No te sientas mal con respecto a sus pensamientos o sentimientos. Esto no te ayudará a conservar tu confianza, y probablemente tampoco sea preciso.
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    Evalúa si sale con alguien. Esto te ayudará a saber cómo hablarle. Si le gusta otra persona o está con alguien más, utiliza un enfoque diferente para la conversación. Lo sabrás porque quizás hayas escuchado a otras personas hablar del tema o quizás ella misma te lo cuente.
    • Si sabes que está con alguien más, reconócelo en el inicio de la conversación. Es importante que menciones que no quieres interponerte en su relación. Sé un poco más reservado o distante durante la conversación, pero no dejes de ser sincero.
    • Puedes preguntarle si quiere compartir sus sentimientos contigo. En ocasiones, cuando una persona hace una pregunta, no está interesada en escuchar una respuesta sincera. Por ejemplo, en este caso, quizás quiera señalar que actúas como si le gustaras. Ser sincero y directo en tu pregunta “¿Quieres que sea sincero?” es la mejor forma de lidiar con esta posibilidad.
    • Mantén la distancia física y emocional si está con otra persona. Acercarte o ser muy abierto y sincero podría incomodarla. Conserva la distancia.
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    Evalúa si puede tener citas. ¿Sabes si tiene permiso para tener citas? Algunas personas podrían estar interesadas en tener citas, pero sus padres quizás sean muy estrictos con las reglas. Si sabes que no tiene permiso para tener citas, reconócelo en la conversación. Ayúdala a sentirse cómoda si parece estar preocupada por sus padres. Dile que no quieres interponerte en su relación con ellos.
    • En este caso, quizás no necesites decirle que te gusta. En cambio, reconoce que no tiene permiso para tener citas.
    • Mantén la distancia física para que se sienta cómoda.
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Método 2
Método 2 de 3:
Responder con honestidad

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    Pregúntale si pueden hablar en algún lugar. Si realmente quieres saber cómo se siente, escoge un lugar tranquilo para hablar. Invítala a un sitio donde nadie los interrumpa. Es importante que tengas la conversación en un lugar donde estén cómodos para hablar de sus sentimientos de manera abierta.
    • Esta puede ser una gran oportunidad para mostrarle qué tan genial eres, sin importar el motivo por el que pregunte. Si le dices lo que sientes y conservas la calma y la serenidad, te respetará aún más.
    • Salir a caminar puede ser una buena opción para este tipo de conversación. Esta actividad puede eliminar parte de la incomodidad que la charla pueda generar. Además, es ideal porque estarán en movimiento, en vez de estar sentados mirándose a los ojos.
    • Ir a un restaurante o una cafetería también puede ser una buena opción si no hay muchas personas en el lugar. Si encuentras una mesa alejada para sentarse o una mesa afuera, quizás sea la opción ideal.
    • Vayan a un parque. Siéntense en los columpios o encuentra un banco donde ambos puedan hablar.
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    Pregúntale dónde se sentiría cómoda para hablar. Para demostrarle que respetas su espacio y límites, pídele que escoja el lugar. Si no tiene preferencias, puedes sugerirle algunas opciones.
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    Mírala a los ojos y dile “Sí, me gustas”. Una vez que hayas tenido un minuto y estés ubicado, puedes reconocer tus sentimientos y mostrarte seguro.[7] Ten cuidado de no forzarla para que sienta lo mismo que tú. Dile que te gusta de forma tal que esté libre de implicaciones. Libre de implicaciones significa que no comunicas un mensaje distinto a través del lenguaje corporal o el tono de voz.
    • Por ejemplo, no la mires demasiado fijo de forma tal que parece que quieres que sienta que le gustas. Tampoco te inclines hacia adelante y abarques su espacio personal, a menos que sepas que le gustas.
    • Puedes preguntarle cómo se siente antes de decir algo. Sin embargo, es más atractivo y seguro si reconoces tus sentimientos y hablas primero.
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    Pregúntale cómo se siente. Dado que te ha preguntado si le gustas, tienes todo el derecho de preguntarle por qué quiere saberlo. Simplemente dile “¿Por qué lo preguntas?”. No supongas que sabes por qué lo hace.
    • Nuevamente, mantén un tono de voz y lenguaje corporal libre de implicaciones. No sugieras que sabes por qué lo pregunta con un tono acusatorio o de coqueteo.
    • Enfócate por completo en sus palabras. Demuestra interés, asiente con la cabeza, sonríe y comunica que comprendes a través del lenguaje corporal y los sonidos.[8]
    • No la interrumpas. Permite que diga lo que quiera decir. Ya podrás pedirle aclaraciones más tarde.[9]
    • Ofrécele tu opinión de lo que diga. Por ejemplo, puedes decir “Entonces lo que dices es que…”. De esta forma, le harás saber que realmente la has escuchado y que quieres comprenderla.[10]
    • No seas crítico con respecto a lo que diga. Es lo que siente y, por más que te involucre, no te tomes sus sentimientos de manera personal. Lee el próximo método para más información sobre cómo no tomarte su respuesta de manera personal.
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    Responde con honestidad y amabilidad. Si le gustas, puedes decirle “¡Me emociona mucho saber que también te gusto!”. Si no le gustas, puedes decirle con sinceridad “Me entristece que no te guste, pero valoro que me lo hayas dicho”.
    • También puedes agradecerle por ser lo suficientemente valiente para iniciar la conversación.
    • Si no le gustas, no la hagas sentir mal. Por más que sientas que deberías gustarle, no tienes derecho a decírselo o hacer que se sienta de esa forma.
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    Habla acerca de lo que debes hacer con respecto a tus sentimientos. Si no siente lo mismo por ti, puedes preguntarle si quiere seguir siendo tu amiga. Si sientes que no pueden ser amigos, pídele que te brinde espacio. Si le gustas, pregúntale si quiere comenzar a tener citas.
    • No supongas lo que sucederá entre los dos si dice que también le gustas. En cambio, habla con ella acerca de cómo se siente con respecto a la posibilidad de tener citas.
    • Si quieres comenzar a tener citas, pregúntale qué significa eso para ella y explícale qué significa para ti. Asegúrate de que hablen de lo mismo. También puedes hablar acerca de las expectativas de ambos con respecto a la relación. Esta puede ser una gran conversación en sí, y una que retomen de manera periódica.
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    Haz un seguimiento acerca de la conversación más adelante. Dado que se trata de una conversación incómoda, es posible que quieras evitar hablar del tema. Sin embargo, acepta la incomodidad y muéstrate seguro. Si siguen siendo amigos, pero no le gustas, puedes decirle “Gracias por tener esta conversación conmigo. Realmente lo valoro”.
    • También puedes enviarle un mensaje de texto, pero procura ser breve. No quieras convencerla. En cambio, reconoce la conversación y sigue adelante.
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Método 3
Método 3 de 3:
Seguir adelante si no le interesas

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    No lo tomes como algo personal. El hecho de que le gustes o no a una persona no dice nada acerca de ti como persona. Sigues siendo alguien maravilloso por las mismas razones. No permitas que tus sentimientos románticos cambien la forma en que te sientes acerca de ti mismo.[11]
    • Piénsalo desde su perspectiva. Cuanto más la comprendas, más fácil te resultará comprender que no se trata de ti.[12]
    • No saques conclusiones precipitadas. Realmente no sabes por qué no le gustas. Ten cuidado de no suponer que se debe a algo específico acerca de ti.
    • Deja algo de espacio entre ti y tu reacción inmediata. Elimina cualquier emoción inicial de pánico. Comprende que tus sentimientos se irán, y espera hasta que esto pase antes de hablar o hacer algo.
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    Trabaja en gustarte a ti mismo. Gustarte es más importante que gustarles a otras personas.[13] Si realmente te sientes bien contigo mismo, tiene un efecto maravilloso, y las personas querrán estar más tiempo contigo.
    • Háblate como le hablarías a un amigo. Ofrécete la misma compasión, amor y apoyo que le brindarías a un amigo que atraviese una situación difícil.
    • Imagínate seguro y libre. En tu mente, visualiza cómo lucirías si fueses absolutamente seguro y feliz. ¿Cómo lucirías? Esfuérzate por ser esa persona. Piensa en esa persona cuando dudes de ti mismo.
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    Siéntete bien por ser honesto. Es difícil abrirse y ser sincero con alguien que te gusta. Si no siente lo mismo por ti, al menos ahora lo sabes. Por lo tanto, te encuentras en una mejor posición, dado que no tendrás que pasar más tiempo preguntándote por ella.
    • Ser abierto y honesto es un buen hábito a adoptar. Con la próxima chica que te guste, serás más capaz de interactuar con ella porque ya habrás tenido esta experiencia.
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    Tómate un tiempo para superarla. Si sientes que no estás listo para comenzar a salir con otras personas, trabaja en ti mismo. No te preocupes por gustarle a alguien hasta sentirte mejor.
    • Sal con tus amigos. Pasa tiempo con buenos amigos que te hagan sentir bien contigo mismo. Estas personas te recordarán tus intereses y otras cosas que adoras.
    • Aléjate de ella. Si te resulta difícil lidiar con tus emociones, dile que necesitas tiempo y espacio de la relación. Quitarla de tu vida por el momento podría ayudarte a enfocarte en ti.
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    Comienza a hablar con personas nuevas. Si sientes que estás listo para seguir adelante, habla con chicas que te interesen. Sal con un grupo de personas donde haya chicas nuevas. Pregúntales a tus amigos acerca de las próximas salidas y asiste.
    • Cuando conozcas a una chica que te gusta, pídele su número. Puedes ser directo y decir “Me ha gustado mucho hablar contigo. ¿Puedo tener tu número para que sigamos hablando?”.
    • Usa páginas web de citas. Existen algunas páginas web gratuitas de citas a las que puedes unirte para conocer personas. Muchas personas usan estas aplicaciones para encontrar a otros que compartan sus intereses y tipo de personalidad.[14]
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Categorías: Amor y romance
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