Una infección por levaduras es un trastorno extremadamente común y es producto de una levadura llamada Candida albicans. La cándida es parte de la flora normal de la vagina, junto con las bacterias buenas, y generalmente el sistema inmunitario la mantiene bajo control. Sin embargo, a veces el equilibrio entre las levaduras y las bacterias puede interrumpirse y provocar el crecimiento excesivo de las primeras, causando una infección por levaduras (conocida como candidiasis vaginal).[1] La mayoría de las mujeres experimentarán una infección por levaduras a lo largo de la vida.[2] Estas infecciones pueden ser muy irritantes, de modo que es importante saber si tienes una y recibir un tratamiento rápido.

Parte 1
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Evaluar los síntomas

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    Verifica los síntomas. Hay varios signos físicos que pueden indicar una infección por levaduras. Los siguientes son los síntomas más comunes:[3]
    • comezón (de manera particular en la vulva o alrededor de la abertura de la vagina)
    • dolor, enrojecimiento y malestar general en el área vaginal
    • dolor o ardor durante la micción o el sexo
    • secreción vaginal espesa (como requesón), blanca e inodora (toma en cuenta que no todas las mujeres experimentan este síntoma)
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    Toma en cuenta las causas potenciales. Si se te hace difícil saber si tienes una infección por levaduras, entonces piensa en algunas de las causas más frecuentes de este tipo de infecciones. Por ejemplo:
    • Antibióticos. Muchas mujeres desarrollan una infección por levaduras después de tomar antibióticos por varios días. Los antibióticos matan algunas de las bacterias buenas del cuerpo, incluyendo las que previenen el crecimiento excesivo de las levaduras, lo cual causa las infecciones por levaduras.[4] Si has tomado antibióticos recientemente y experimentas ardor y comezón vaginal, es posible que tengas este trastorno.
    • Menstruación. Una mujer es más propensa a desarrollar una infección por levaduras cuando está por tener su periodo. Durante la menstruación, el estrógeno deposita el glucógeno (un tipo de azúcar que está presente dentro de las células) en el revestimiento de la vagina. Cuando la progesterona aumenta, las células se desprenden de la vagina, haciendo que el azúcar esté disponible para que las levaduras se multipliquen y crezcan. Por lo tanto, si experimentas los síntomas anteriores y estás a punto de tener tu período, es posible que tengas una infección por levaduras.[5]
    • Anticonceptivos. Algunas pastillas anticonceptivas y pastillas "del día siguiente" (de una sola dosis) causan un cambio en los niveles hormonales (principalmente en el estrógeno), lo que a su vez puede provocar una infección por levaduras.[6]
    • Duchas vaginales. Las duchas vaginales se emplean principalmente para limpiar la vagina después de la menstruación. Según el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, las duchas vaginales pueden cambiar el equilibrio de la flora vaginal y la acidez de la vagina, alterando así el equilibrio de las bacterias buenas y malas. El nivel de bacterias ayuda a mantener el ambiente ácido y su destrucción puede causar el crecimiento excesivo de las bacterias malas, lo que a su vez causa infecciones por levaduras.[7]
    • Trastornos médicos existentes. Algunas enfermedades o trastornos, como VIH o diabetes, también pueden causar infecciones por levaduras.[8]
    • Salud general. Las enfermedades, la obesidad, los malos hábitos de sueño y el estrés pueden aumentar la probabilidad de desarrollar una infección por levaduras.[9]
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    Hazte una prueba de pH en casa. Hay una prueba que puedes hacer para averiguar si tienes una infección por levaduras. El pH vaginal normal es de alrededor de 4, que es ligeramente ácido. Sigue todas las instrucciones que se incluyan en la prueba.[10]
    • En una prueba de pH, debes sostener un pedazo de papel de pH contra la pared de la vagina durante unos segundos. Luego, debes comparar el color del papel con la tabla que viene con la prueba. El número de la tabla con el color que se aproxime más al color del papel es el número de tu pH vaginal.[11]
    • Si el resultado de la prueba es superior a 4, es mejor que visites a un médico. Esto no indica la presencia de una infección por levaduras, pero podría ser un signo de otra infección.[12]
    • Si el resultado de la prueba es inferior a 4, es probable (pero no definitivamente) que se trate de una infección por levaduras.

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Recibir un diagnóstico

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    Haz una cita con el médico. Si nunca has tenido una infección por levaduras o si no estás segura del diagnóstico, entonces debes programar una cita con el médico o con una enfermera en el consultorio del ginecólogo. Esta es la única manera de saber con certeza si tienes este trastorno. Es importante confirmar el diagnóstico, pues existen diferentes tipos de infecciones vaginales que a menudo las mujeres diagnostican erróneamente como infecciones por levaduras. De hecho, aunque estas son muy comunes entre las mujeres, pueden ser difíciles de autodiagnosticar con precisión. Los estudios han demostrado que solo el 35% de las mujeres con antecedentes de este trastorno fueron capaces de diagnosticarlo correctamente basándose únicamente en sus síntomas.[13] [14] [15]
    • Si tienes en este momento el periodo, considera la posibilidad de esperar hasta después de que termine para ver al médico, si es posible. Pero si experimentas síntomas graves, haz que te examinen lo antes posible, aunque tengas el periodo.
    • Si visitas una clínica ambulatoria y no a tu médico habitual, prepárate para proporcionar tus antecedentes médicos completos.
    • Las mujeres embarazadas no deben tratar la infección por levaduras antes de consultar con un médico.[16]
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    Sométete a un examen físico, incluyendo un examen vaginal. Para confirmar el diagnóstico, el médico te examinará para ver si tienes una inflamación en los labios o en la vulva, generalmente sin hacerte un examen pélvico completo. Luego empleará un bastoncillo de algodón para tomar una muestra de la secreción vaginal con el fin de observarla bajo el microscopio para detectar levaduras u otras infecciones. Esto se llama montaje húmedo y es el método principal para confirmar una infección vaginal por levaduras. El médico puede ordenar exámenes adicionales para descartar otras causas de los síntomas, como exámenes para infecciones de transmisión sexual (ITS).[17] [18]
    • La levadura se puede identificar con un microscopio pues adopta una forma de brote o de ramificación.[19]
    • No todas las infecciones por levaduras son producto de la Candida albicans, existen también otras formas de levaduras. Algunas veces, es necesario realizar un cultivo de levadura si la paciente sigue teniendo infecciones recurrentes.
    • Recuerda que hay otras razones potenciales por las que puedes experimentar malestar vaginal, incluyendo otras infecciones como vaginosis bacteriana o tricomoniasis. Por ejemplo, muchos de los síntomas de una infección por levaduras son muy similares a los de una ITS.[20]
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    Recibe tratamiento. El médico puede prescribirte una pastilla de una sola dosis del medicamento antifúngico fluconazol (Diflucan), que se toma oralmente. Se puede prever un alivio de los síntomas en las primeras 12 a 24 horas. Esta es la cura más rápida y efectiva para una infección por levaduras.[21] [22] También hay varios tratamientos tópicos de venta libre y prescritos disponibles, incluyendo cremas, pomadas y supositorios antifúngicos que se aplican o se insertan en el área vaginal.[23] Pregúntale al médico cuál puede ser la mejor opción de tratamiento para ti.
    • Si has experimentado una infección por levaduras que un médico haya diagnosticado, podrás autodiagnosticar estas infecciones en el futuro y curarlas con tratamientos de venta libre de fácil acceso.[24]
    • Llama al médico si los síntomas no mejoran después de tres días o si alguno cambia (por ejemplo, la secreción vaginal aumenta o cambia de color).[25]

Advertencias

  • La primera vez que sospeches que tienes una infección vaginal por levaduras, un médico calificado debe hacer el diagnóstico. Después del diagnóstico inicial, las infecciones por levaduras posteriores (siempre y cuando no sean complicadas o graves) se pueden tratar en casa.
  • Las infecciones por levaduras recurrentes (cuatro o más infecciones por año) pueden ser un signo de un trastorno subyacente más grave, como diabetes, cáncer o sida.[26] [27]
  1. http://www.fda.gov/MedicalDevices/ProductsandMedicalProcedures/InVitroDiagnostics/HomeUseTests/ucm126074.htm
  2. www.fda.gov/MedicalDevices/ProductsandMedicalProcedures/InVitroDiagnostics/HomeUseTests/ucm126074.htm
  3. www.fda.gov/MedicalDevices/ProductsandMedicalProcedures/InVitroDiagnostics/HomeUseTests/ucm126074.htm
  4. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/8656170
  5. http://blog.doctoroz.com/oz-experts/gyno-myth-yogurt-on-tampon
  6. http://www.womenshealth.gov/publications/our-publications/fact-sheet/vaginal-yeast-infections.html
  7. http://www.webmd.com/women/yeast-infections-should-you-treat-yourself-or-see-a-doctor
  8. http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/ency/article/001511.htm
  9. http://www.womenshealth.gov/publications/our-publications/fact-sheet/vaginal-yeast-infections.html
  10. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK288/
  11. http://www.webmd.com/women/yeast-infections-should-you-treat-yourself-or-see-a-doctor
  12. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/yeast-infection/basics/treatment/con-20035129
  13. http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/ency/article/001511.htm
  14. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/yeast-infection/basics/treatment/con-20035129
  15. http://www.emedicinehealth.com/vaginal_infections/page7_em.htm
  16. http://www.emedicinehealth.com/vaginal_infections/page4_em.htm#when_to_seek_medical_care_for_vaginal_infection
  17. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/yeast-infection/basics/symptoms/con-20035129
  18. Erika Ringdall MD.Treatment of Recurrent Vulvovaginal Candidiasis,American Family Physician, 2000 June 1 61 (11) 3306-3312

Acerca de este wikiHow

Lacy Windham, MD
Coescrito por:
Obstetra y ginecóloga certificada por el colegio oficial
Este artículo fue coescrito por Lacy Windham, MD. La Dra. Windham es ginecóloga y obstetra certificada por el colegio oficial en Tennessee. Asistió a la escuela de medicina en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Tennessee en Memphis y completó su residencia en la Escuela de Medicina Eastern Virginia en 2010, donde fue galardonada con el premio "Residente más destacado en medicina fetal materna", y el premio "Residente más destacado en oncología" y el premio "Residente más destacado en general". Este artículo ha sido visto 4611 veces.
Categorías: Salud vaginal