Mantener los labios hidratados puede ser una lucha constante, sobre todo en el invierno. Si vives en un clima de condiciones muy severas, es probable que termines con los labios agrietados en algún momento del invierno. Puedes solucionar este problema directamente utilizando un humectante, protegiendo los labios contra los elementos de la naturaleza y evitando ciertos productos o alimentos para que los labios se curen.

Método 1
Método 1 de 3:
Mantener humectados los labios

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    Toma mucha agua. Cuando una persona no toma suficiente agua, luego se deshidrata. La deshidratación te resecará la piel, incluyendo los labios. Toma 8 vasos de agua al día para ayudar a curarte los labios.[1]
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    Utiliza un humidificador. El aire seco te puede resecar la piel, mientras que el aire húmedo puede ayudar a mantener la piel hidratada. El aire seco se convierte en un problema sobre todo durante el invierno, así que coloca un humidificador en tu dormitorio para mantener hidratados la piel y los labios.[2]
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    Utiliza pepino. A algunas personas les resulta efectivo el uso del pepino para ayudar a rehidratarse los labios. Simplemente debes cortar un pepino en rodajas, y luego mantenerlas presionadas en los labios durante 5 a 10 minutos para ayudar a hidratarlos.[3]
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    Utiliza aloe vera. Cuando los labios se resecan, terminas con pequeñas grietas y el aloe vera te podrá ayudar a curarlas. Además, el aloe vera puede aliviar el dolor provocado por los labios partidos. Puedes aplicarte en los labios un gel puro de aloe vera por dos veces al día.[4]
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    Aplícate un bálsamo labial con ceramidas. Los labios generalmente cuentan con un protector natural para mantenerse humectados, pero a veces el clima y los alimentos pueden deshacer ese protector. Un producto con ceramidas fomentará la reconstrucción de esa barrera protectora y a la vez te refrescará los labios partidos.[5]
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    Utiliza una crema con hidrocortisona. Si tus labios realmente tienen un mal aspecto y los métodos para solucionarlo no te funcionan, puedes aplicarte una crema con hidrocortisona por unas cuantas veces al día. Si bien no debes utilizar esta opción por un largo periodo de tiempo, puedes usar la crema por hasta una semana para restaurar los labios y darles la oportunidad de recuperar su salud.[6]
    • Un buen momento para aplicarse esta crema es en la noche, cuando ya no vas a comer o beber nada.[7]
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    Aplícate una crema humectante por las mañanas. Cuando recién te levantes en las mañanas, aplícate un humectante para ayudar a poner en marcha el proceso de humectación por el resto del día.[8]
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Método 2
Método 2 de 3:
Proteger los labios contra los daños ambientales

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    Utiliza una bufanda. Las bufandas no solo protegen el cuello y el pecho, sino también pueden brindarle protección a los labios si te las colocas sobre la boca. El viento es un asesino para los labios agrietados, así que cubrirte del viento te ayudará a prevenir el problema.[9]
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    Utiliza diariamente un bálsamo labial. Utiliza un bálsamo natural para labios con frecuencia, especialmente durante el invierno. Los bálsamos labiales no solo humectan, sino también protegen los labios contra los factores ambientales.[10]
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    Aplícate un bálsamo labial antes de lavarte la cara. Probablemente te lavas la cara utilizando un limpiador facial diseñado para exfoliar o eliminar los aceites naturales. Estos efectos pueden dañar los labios en lugar de ayudarlos, así que primero debes protegerlos con un bálsamo labial. El aceite del bálsamo ayudará a repeler los efectos del limpiador facial.[11]
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    Aplícate un protector solar. Aplícate un protector solar en los labios o escoge un bálsamo labial que contenga un bloqueador con FPS (factor de protección solar) de 15 como mínimo. Eso te protegerá los labios contra las quemaduras solares, que pueden contribuir a tener los labios partidos.[12]
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Método 3
Método 3 de 3:
Saber lo que se debe evitar

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    Evita lamerte los labios. Es probable que te resulte casi automático pasarte la lengua sobre los labios cuando los sientes secos. Sin embargo, ese hábito solo empeora el problema, ya que la saliva terminará por resecarte los labios.[13]
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    Evita los productos artificiales. Cuando escojas un bálsamo labial, evita adquirir los que tengan tintes y sabores artificiales. Los aceites naturales, como la manteca de karité y el aceite de coco, funcionan mucho mejor para humectar los labios.[14]
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    No consumas cítricos. El ácido de las frutas cítricas pueden contribuir a tener los labios partidos, así que evita consumirlas cuando tengas los labios muy lastimados.[15]
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    No comas comidas picantes. Al igual que los cítricos, las comidas picantes también te pueden irritar los labios, sobre todo si también contienen ácidos, como las alitas con salsa picante. Deja de consumir estas comidas si tienes problemas en los labios.[16]
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    No utilices exfoliantes con ácido salicílico. Esos tipos de exfoliantes de hecho resecan los labios aún más, empeorando así el problema.[17]
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    Revisa tus medicamentos. Si la resequedad en los labios es de grado crónico, uno de tus medicamentos podría ser el culpable. Por ejemplo, los medicamentos para tratar la hipertensión pueden hacer que los labios se resequen. Si bien no debes suspender totalmente el consumo de un medicamento a causa de los labios agrietados, el médico te podrá reemplazar ese medicamento por otro que no te cause problemas.[18]
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    Cambia de pasta dental. Algunas pastas dentales, especialmente aquellas con ingredientes artificiales, pueden irritarte los labios. Esa irritación puede provocar que los labios se agrieten con el paso del tiempo.[19]
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Consejos

  • No te lamas los labios ni las zonas alrededor de la boca.
  • Puedes usar aceite de coco para cuidarte los labios.
  • Utiliza la vaselina, ya que es un bálsamo labial muy efectivo.
  • Consulta con el médico si tienes los labios partidos constantemente. Eso podría indicar que tienes una infección por hongos alrededor de la boca[20] o que sufres de una reacción alérgica a algún producto.[21]
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Categorías: Labios y boca
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