Cómo conservar remolachas

Las remolachas (betarragas) constituyen una manera nutritiva y deliciosa de añadirle color a tus alimentos. Al conservar las remolachas frescas, puedes preservar su sabor y sus beneficios para la salud, y disfrutarlas todo el año. No obstante, ya que las remolachas tienen baja acidez, se necesita utilizar una olla a presión especial para hacer conservas y prevenir así la contaminación bacteriana.^{[1]
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Fuente confiable
National Center for Home Food Preservation
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Ingredientes

6 kg (13,5 lb) de remolachas de cualquier tipo o color
Sal para conservas, también llamada sal para encurtidos^{[2]
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Fuente de investigación}

Pasos

1
Prepara las remolachas para conservarlas. Escoge las remolachas firmes y frescas que tengan un diámetro de 2,5 a 5 cm (1 a 2 pulgadas). Corta la parte superior y la raíz de las remolachas dejando 2,5 cm (1 pulgada) del tallo y la raíz para evitar el descoloramiento. Lava y restriega las remolachas con un cepillo para vegetales bajo agua fresca de grifo.
2
Cocina las remolachas en agua hirviendo por 15 a 25 minutos para separar la cáscara. Retira las remolachas del agua caliente, retira la cáscara con ayuda de una cuchara o las manos, y corta las raíces y tallos restantes. Transfiere las remolachas a un bol grande con agua fría para detener el proceso de cocción.
- Si tienes remolachas de diferentes tamaños, trata de cocinar las de tamaño similar al mismo tiempo, ya que las más grandes tomarán más tiempo para cocinar y para que la cáscara se separe.
3
Corta las remolachas medianas o grandes en cubos o rodajas de 1,3 cm (1/2 pulgada). Sin embargo, puedes dejar enteras las remolachas pequeñas.
4
Limpia con jabón y agua caliente los frascos de vidrio para conservas de 500 ml (9 pintas) y las tapas de metal para conservas. Mantén calientes los frascos y las tapas hasta que se utilicen.
- Para mantener calientes los frascos y las tapas, puedes colocarlos boca abajo dentro de una olla con agua caliente o lavarlos en el lavaplatos, y dejarlos ahí hasta que se necesiten.
5
Llena los frascos limpios con las remolachas preparadas, dejando 2,5 cm (1 pulgada) de espacio en la parte superior de los frascos. Añade opcionalmente una cucharadita (5 ml) de sal para conservas a cada frasco; luego, llena los frascos con agua hirviendo y deja 2,5 cm (1 pulgada) de espacio de aire en la parte superior de los frascos. ^{[3]
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Fuente de investigación}
6
Limpia los bordes de los frascos con un trapo limpio, agita con delicadeza para que las burbujas de aire desaparezcan y cierra los frascos con las tapas de metal. Coloca los frascos sellados en una base de soporte dentro de la olla a presión que contiene 2,8 litros (3 cuartos de galón) de agua caliente. ^{[4]
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Fuente de investigación}
- Los frascos no deben tener contacto directo con el fondo de la olla a presión y no deben chocarse para así permitir que el vapor fluya con libertad alrededor de los frascos.
7
Coloca la tapa de forma segura sobre la olla a presión y calienta el agua hasta llegar a la ebullición. Deja que el vapor de la olla a presión se ventile por 10 minutos antes de añadir los pesos de la olla o cerrar la ventilación. Después de los 10 minutos, cierra la ventilación o coloca los pesos, dependiendo del tipo de olla a presión que uses, y deja que la presión incremente.
8
Procesa los frascos en la olla a presión por 30 minutos, ajustando la presión en base a la altitud del lugar en el que te encuentres (ver la guía de abajo).^{[5]
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Fuente confiable
National Center for Home Food Preservation
Ir a la fuente} Cuando se llegue a la presión requerida, comienza a tomar el tiempo. Revisa con frecuencia el manómetro para asegurarte de que la presión sea constante.
- Para una olla a presión con manómetro de dial, fija la presión a 68,95 kPa (10 psi) para una altura de 0 a 305 m (0 a 1000 pies), 75,8 kPa (11 psi) para una altura de 305 a 610 m (1001 a 2000 pies), 82,7 kPa (12 psi) para una altura de 610 a 1220 m (2001 a 4000 pies), 89,6 kPa (13 psi) para una altura de 1220 a 1830 m (4001 a 6000 pies) y 96,5 kPa (14 psi) para una altura de 1830 a 2440 m (6001 a 8000 pies).
- Para una olla a presión con manómetro basado en peso, fija la presión a 68.95 kPa (10 psi) para una altura de 0 a 305 m (0 a 1000 pies) y 103,4 kPa (15 psi) para una altura mayor a 305 m (1000 pies).
9
Apaga el fuego y deja que la presión vuelva a 0 kPa (0 psi); luego, retira los pesos o abre la ventilación y espera 2 minutos. Retira la tapa con cuidado y deja que el vapor escape.
10
Retira los frascos de la olla a presión con una pinza para frascos y colócalos en una tabla de madera o una toalla gruesa de cocina para que se enfríen en un área sin corrientes de aire. Deja un espacio de 2,5 a 5 cm (1 a 2 pulgadas) entre los frascos para que circule el aire.
- Los frascos se encontrarán sellados apropiadamente si escuchas un sonido proveniente de las tapas de los frascos, indicando que se ha succionado el sello de estas. El proceso de conserva puede demorar 12 horas.
11
Etiqueta los frascos, indicando los ingredientes y la fecha; luego, almacénalos en un lugar fresco, seco y protegido de la luz.
12
Listo.

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Consejos

Ten el manómetro sobre la olla a presión con regularidad para asegurar que la lectura de la presión sea precisa.
Prueba conservar diferentes tipos de remolachas (chioggia, amarilla, etc.) para tener una variedad de colores.

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Advertencias

Sigue las instrucciones indicadas para evitar el riesgo de botulismo por contaminación bacteriana^{[6]
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Fuente confiable
Centers for Disease Control and Prevention
Ir a la fuente} que puede poner en riesgo la vida.
Si las tapas de los frascos para conservas no logran sellarse, es decir, el botón en el centro de la tapa no desciende, utiliza las remolachas o remolachas de inmediato y no las almacenes.
El jugo de la remolacha puede manchar la ropa, la tabla de picar y la encimera. Por ello, asegúrate de vestir un delantal, cubrir la superficie del área de trabajo con una tela y utilizar una tabla de picar que no te importe que se manche.

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