Cómo convertir a tu hijo en una estrella de fútbol (soccer)

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Como padres, siempre queremos lo mejor para nuestros hijos, es por eso que los apoyamos en todo lo que hacen. Pero a veces, presionarlos de más en la dirección que tu crees que es correcta, podría ocasionarle problemas.

Pasos

1
Descubre si tu hijo tiene los talentos de un jugador de fútbol. Podrás darte cuenta de esto si es capaz de driblear (mover la pelota cerca de tus pies) y tira con certeza.
2
Descubre si a tu hijo le interesa este deporte. Pregúntales si les gustaría jugar fútbol o algo parecido a eso.
3
Apoya sus intereses modelando los tuyos. (Mira un partido de fútbol con él, juega fútbol con él.) Algunas veces el unirse (o empezar) una liga de fútbol por ti mismo, podría ayudar a que tu hijo disfrute más del deporte.
4
Envíalo a una escuela de fútbol o a un campamento y observalo durante los primeros días para darte cuenta si lo está disfrutando o no. Si no lo está disfrutando no lo obligues a jugar.
5
Inscríbelo en una liga de otoño de fútbol. En algunas áreas existen ligas de primavera y de otoño, porque en otoño es la temporada de fútbol, generalmente es mucho más competitiva y tiene mejores entrenadores que las ligas de primavera.
6
Apóyalos y quédate con ellos, aún y cuando fallen. Sin embargo, recuérdales que lo importante no es sólo ganar. Siempre y cuando den su mejor esfuerzo y se diviertan, tu siempre estarás orgulloso de ellos.
7
Entrénate para ser un entrenador de fútbol. Tu hijo entenderá que puede jugar contigo más seguido o que puede jugar solo cuando tu no estés. Esto no es costoso y tan sólo requiere de 3 a 4 horas de entrenamiento para convertirte en entrenador de una liga de fútbol juvenil.

Consejos

Si son buenos en el deporte, apóyalos y diles que son buenos jugadores como un joven Pele o un joven Beckham.
Pregúntale si quiere jugar una posición especial, si quieren hacerlo, entonces hazlos que trabajen para conseguirla. Por ejemplo, si quieren ser porteros, entonces haz unos tiros (no muy fuertes) mientras están parados en la portería.
Pide prestado o compra un libro o dos de fútbol y léelos, comparte la información que aprendas de los libros con tu hijo. Pero no los presiones constantemente, esto podría ocasionar que tu hijo ya no quiera jugar fútbol.
Felicita a tu hijo cuando haga algo bueno, dentro y fuera del campo de juego, esto subirá su autoestima para que puedan intentar nuevas cosas dentro y fuera del campo.
Habla con tu hijo/hija si llegan a fallar y pregúntales qué pudieron haber hecho para evitar esas fallas.
No le grites a tu hijo por “no jugar su posición”, el entrenador puede haberles dicho que cambiaran de posición.
Ayuda que tu hijo recuerde que el fútbol es un juego en equipo, no debe de haber una persona sola haciendo todo el trabajo.
Enséñale a tu hijo a respetar a los árbitros, oponentes y los demás entrenadores, siendo respetuoso y amigable con ellos. Observa como los equipos de ligas mundiales se saludan al comienzo de un partido, intercambian sus camisas y hasta abrazan a sus contrincantes.
Es una buena intentar que tu hijo se una a una liga de fútbol más avanzada cuando esté joven, para que pueda desarrollar sus habilidades y aprenda a jugar a un nivel más alto.

Advertencias

Si tu hijo no está interesado, no lo fuerces a que juegue este deporte.
No lo halagues de más, esto sólo lo hará sentir apenado y/o podría hacer enojar a tu hijo.
No le digas cuáles son todos sus errores, el/ella saben cuando hicieron algo mal. Si hicieron algo mal, hay que dejar que aprendan de sus errores sin sermonearlo ni recriminarlos.
Deja que el entrenador dirija durante los partidos; tu único trabajo es apoyar al equipo.
No los sigas por todo el campo gritándoles durante el partido. Esto sólo los hará sentir apenados y hará que se enojen.