Dormir bien por la noche algunas veces puede ser difícil cuando has tomado demasiado. Puedes mejorar las probabilidades de levantarte descansado y recargado tomando algunas medidas simples antes de empezar a tomar. Come una comida equilibrada para que el organismo pueda procesar todo el alcohol que pronto fluirá en tu interior y asegúrate de tomar mucha agua entre las bebidas más fuertes. Cuando llegues a casa, mantén el dormitorio lo más oscuro y silencioso posible para que puedas dormir tranquilamente y sin interrupciones. Pero lo más importante es que no te olvides de acostarte de costado en caso de que vomites a mitad de la noche.

Método 1
Método 1 de 3:
Acostarte

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    Toma un par de pastillas de ibuprofeno cuando llegues a casa para prevenir los dolores de cabeza. Toma la dosis más pequeña recomendada con un vaso grande de agua. Un régimen preventivo de analgésicos reducirá las posibilidades de que te despiertes con un dolor de cabeza debido a la resaca.[1]
    • No podrás evitar el dolor de cabeza sin importar cuántos analgésicos te tomes si te emborrachaste hasta el punto de perder el conocimiento. Es mejor tratar de no excederte en primer lugar.
    • No mezcles ibuprofeno y alcohol si eres alérgico o si has tenido alguna vez una reacción adversa al medicamento bajo condiciones normales.

    Advertencias: evita los analgésicos con paracetamol como Tylenol. Si se mezclan con licor, pueden ser malos para el hígado.[2]

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    Come un bocadillo pequeño para seguir acelerando la absorción del alcohol. Muerde algo dulce, como un trozo de fruta, una barra de cereales o unas galletas de mantequilla de cacahuete. Comer un bocadillo ligero antes de irte a dormir puede salvarte la vida, especialmente si no comiste mucho antes de empezar a tomar alcohol.[3]
    • Las manzanas, las bananas y otras frutas listas para llevar son bocadillos previos perfectos para mantener unos niveles saludables de azúcar en la sangre sin llenarte demasiado.
    • Evita los alimentos demasiado azucarados, aceitosos o procesados. Estos pueden deshidratarte o alterar el estómago mientras intentas dormir.[4]
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    Toma unos vasos más de agua para asegurarte de que estés completamente hidratado. Una vez que tengas un bocadillo nutritivo y un par de pastillas de ibuprofeno en el estómago, vuelve a llenar el vaso con 240 a 350 mililitros (8 a 12 onzas líquidas) de agua y tómatela toda. Asegúrate de terminar hasta la última gota y vuelve a servirte tantas veces como sea necesario hasta que quede saciada la sed posterior a la fiesta.[5]
    • Es muy probable que hayas orinado una o más veces desde que dejaste la fiesta. Tomar un poco de H20 restaurará los fluidos vitales y ayudará a asegurar que no te deshidrates.
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    Deja un poco de agua adicional en la mesa de noche por si acaso. Tendrás un suministro listo a la mano si te despiertas con sed en cualquier momento. Recuerda que mantenerte hidratado es una de las partes más importantes de la recuperación de una noche de alcohol. Esto también se aplica a la hora de dormir, sobre todo porque probablemente pasarán unas horas antes de que tomes otro trago.
    • Considera la posibilidad de poner el agua en un frasco o un termo para no terminar con un revoltijo húmedo en las manos si la vuelcas torpemente.
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    Vacía la vejiga antes de acostarte. Haz un esfuerzo por usar el baño una última vez antes de meterte en la cama, aunque no sientas la necesidad de ir. Probablemente tendrás ganas muy pronto, así que puedes limitar el número de viajes innecesarios que te veas obligado a hacer más tarde.[6]
    • Idealmente, debes ubicarte en algún lugar que esté cerca del baño. Toma en cuenta que tendrás que orinar al menos una vez durante la noche.
    • No te avergüences si tienes un accidente. No significa que no seas un chico o una chica grande, es solo que el cuerpo tiene problemas para controlar la vejiga cuando tiene alcohol en la sangre.

Método 2
Método 2 de 3:
Dormir sano y salvo

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    Trata de que tu casa tenga una temperatura moderada, como de 16 a 20 °C (60 a 68 °F). Ingerir una cantidad excesiva de alcohol aumenta el flujo sanguíneo, lo cual puede hacer que te calientes y te alteres rápidamente. Al bajar el termostato unos pocos grados, puedes tener la garantía de que te mantendrás fresco y cómodo mientras la temperatura de tu cuerpo se eleve por encima de los niveles normales.[7]
    • De por sí, puede ser difícil que te quedes dormido estando demasiado caliente. Si has bebido mucho, es dos veces más difícil.[8]
    • Lleva una manta adicional a la cama para que no te congeles cuando comiences a volver a una temperatura normal.
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    Corre las cortinas para oscurecer la habitación tanto como sea posible. Eres mucho más sensible a la luz cuando estás ebrio. Incluso un ligero rayo de sol puede parecer un foco si te cae directamente sobre la cara. Si no tienes cortinas en la habitación, tira de las persianas para reducir el exceso de luz que entre desde el exterior.[9]
    • Si la luz ambiental irritante sigue siendo un problema, una máscara de ojos puede mantener tu vista al margen de una vez por todas.
    • Cierra las cortinas o deja la máscara de ojos en la cama antes de salir. Puede que no recuerdes hacerlo más tarde cuando estés cansado y desorientado.
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    Apaga el celular y otras distracciones potenciales. Pon el celular en modo silencioso, apaga el televisor y guarda cualquier otro dispositivo que pueda sonar inesperadamente mientras cuentas ovejas. Al igual que la luz, el ruido también tiende a intensificarse con la embriaguez y el más mínimo pitido, chirrido o zumbido puede bastar para despertarte del sueño que el alcohol induce.[10]
    • Comprueba que has silenciado o apagado todos los dispositivos electrónicos problemáticos antes de meterte en la cama. No querrás tener que levantarte de nuevo después de que te hayas puesto cómodo.
    • Ten cuidado de no cometer el error de desactivar la alarma con el resto de los dispositivos, a menos que tengas la mañana siguiente libre en el trabajo o en la escuela (en cuyo caso puede ser bueno que duermas más tiempo).
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    Pídele a un amigo que pase la noche contigo. Siempre es una buena idea tener a alguien cerca si te has excedido tomando. “Descansa” puede ser un consejo común, pero puede ser peligroso hacerlo si has ingerido una cantidad poco segura.[11]
    • Si alguno de tus amigos sigue estando sobrio, pregúntale si estaría dispuesto a dormir en tu casa o si te permite dormir en la suya.[12]

    Consejo: asegúrate de que tu amigo conozca el número de emergencias de tu país si pierdes la consciencia (en contraposición a las fases de entrada y salida del sueño normal), si empiezas a vomitar incontrolablemente o si experimentas convulsiones u otros síntomas alarmantes.

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    Acurrúcate de costado en caso de que vomites en algún momento. Esta es la única posición en la que es seguro dormir mientras estés activamente ebrio. Una vez que esté acurrucado en la cama o en el sofá, coloca una almohada detrás de ti para evitar que te voltees involuntariamente boca arriba. Luego, haz todo lo posible para mantenerte quieto y descansar en paz hasta que llegue la mañana.[13]
    • Estar echado boca arriba o boca abajo te pone en riesgo de ahogarte con tu propio vómito si es que vomitas mientras duermes. Por más obsceno que suene, definitivamente no es motivo de risa.

Método 3
Método 3 de 3:
Prepararte para un sueño exitoso

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    Asegúrate de haber dormido bien durante varias noches antes de beber. Si sabes que vas a ir a la ciudad o a una fiesta el fin de semana, intenta dormir al menos 7 u 8 horas cada noche antes de salir. De esta manera, una noche de juerga no hará que tus patrones de sueño en general se perjudiquen demasiado.[14]
    • Si tienes falta de sueño para cuando empieces a tomar, puedes estar seguro de que la sentirás más cuando te tomes unos cuantos tragos.
    • Por la misma razón, es aconsejable no ponerte en una posición en la que te veas obligado a sacrificar una noche de sueño más de una vez a la semana.
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    Come una comida equilibrada para que no tengas el estómago vacío. Escoge alimentos que tengan un contenido alto de proteínas, carbohidratos y grasas, como las carnes y otros alimentos nutritivos y sustanciosos. Empezar teniendo un poco de comida en el estómago evitará que llegues a tu límite demasiado rápido y hará que sea más fácil que el cuerpo absorba y procese todo el alcohol del organismo.[15]
    • Un puñado de lazos salados en el bar no es suficiente, pero una hamburguesa con queso grasosa o una quesadilla de pollo pueden ayudar a disminuir el daño que te haces a ti mismo en el transcurso de una noche salvaje.[16]
    • Si no tienes la oportunidad de sentarte para una comida completa, come muchos bocadillos ricos en nutrientes como frutos secos, queso y fruta para mantener elevado el nivel de azúcar en la sangre.
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    Regula el ritmo con agua para asegurarte de permanecer hidratado. Por cada cóctel o trago que bebas, toma al menos 240 mililitros (8 onzas) de agua para equilibrar los niveles de líquido. El alcohol es un diurético, lo cual significa que cuanto más bebas, más ganas tendrás de orinar. Reponer constantemente el agua de las células evitará que la deshidratación te sorprenda.[17]
    • Lleva una botella de agua contigo para que no dependas de que el camarero o el barman te sirva más agua.
    • La deshidratación es la causa principal del dolor y la desorientación asociados a la resaca.[18]

    Consejo: el agua sola es tu mejor amiga cuando se trata de permanecer hidratado, no las bebidas azucaradas (como gaseosas o jugos), las cuales requieren agua para que se puedan digerir adecuadamente.

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    Evita las bebidas mixtas que contengan cafeína. Limítate a los cócteles que no incluyan cola, café o bebidas energéticas mejoradas. Esto es algo obvio, pues la cafeína es un estimulante y es una de las peores cosas que puedes introducir en el cuerpo si planeas dormir un poco en el futuro inmediato. El vodka y el Red Bull pueden mezclarse bien, pero la cafeína y el sueño reparador no.[19]
    • Otras bebidas populares llenas de cafeína que debes evitar son el ron con Coca-Cola, los tés helados Long Island, el Southern Comfort de 70 grados, los cafés irlandeses, los coches bomba y el Four Loko.[20]
    • Si necesitas agregar un poco de gaseosa a tu bebida, opta por un 7 and 7, que generalmente requiere una gaseosa de lima y limón sin cafeína.

Consejos

  • Si vas a salir para tomar unas bebidas, asegúrate de tener algún medio confiable para volver a casa. Puedes recurrir a Uber, Lyft y servicios de taxis locales.
  • Tomar un multivitamínico (o algunos suplementos específicos como tiamina, ácido fólico y magnesio) después de una noche de beber mucho puede detener o suavizar los efectos de la resaca.[21]
  • La mejor manera de evitar que el alcohol se interponga en tu sueño reparador es, por supuesto, beber con moderación.

Advertencias

  • Evita quedarte dormido en lugares en los que sea peligroso o ilegal hacerlo. Sinceramente, nadie duerme bien en una celda de la cárcel.
  • Nunca uses somníferos para tratar de dormir más rápido cuando estés borracho. Cuando se combinan con el alcohol, que es un depresor, pueden interferir significativamente con tus ciclos normales de sueño o con tu capacidad de respirar.

Acerca de este wikiHow

Alex Dimitriu, MD
Coescrito por:
Profesional de medicina del sueño y psiquiatría
Este artículo fue coescrito por Alex Dimitriu, MD. El Dr. Alex Dimitriu es el propietario de Menlo Park Psychiatry and Sleep Medicine, una clínica con sede en el Área de la Bahía de San Francisco que cuenta con experiencia en psiquiatría, sueño y terapia transformacional. Alex obtuvo su doctorado en Medicina en la Universidad Stony Brook en 2005 y se graduó del Programa de Residencia de Medicina del Sueño en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford en 2010. Profesionalmente, Alex tiene doble certificación en psiquiatría y medicina del sueño. Este artículo ha sido visto 51 451 veces.
Categorías: Salud | Bebidas alcohólicas