Tener el periodo es algo natural en la vida de las mujeres. Puede ser frustrante y estresante por momentos, y doloroso e incómodo en otros. Sin embargo, cuando estás preparada física y mentalmente para tu periodo, puede ser mucho más fácil de manejar. Cuidando tu cuerpo y controlando los síntomas, puedes comenzar a enfrentar tu periodo.

Método 1
Método 1 de 3:
Prepararte para tu periodo

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    Replantéate tu forma de pensar acerca de tu periodo. Muchas mujeres le temen a la llegada de su periodo y piensan que es algo por lo que van a tener que sufrir. Durante tu ciclo menstrual, las hormonas en tu cerebro cambian y pueden afectar tu estado de ánimo, pero también puedes cambiar de forma consciente la manera en que piensas acerca de tu periodo.[1] Puede ser motivante pensar a tu periodo como un símbolo de tu femineidad y como una parte natural de tu vida.
    • Tu primer periodo, llamado menarquia, se celebra a menudo como la entrada a la femineidad de una jovencita.[2] Cuando te das cuenta de que tu periodo puede ser algo que se celebra, podrías dejar de tenerle miedo a su llegada y superarlo.
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    Lleva la cuenta de tu periodo. Seguir tu ciclo menstrual no solo te avisará cuándo tendrás tu periodo, sino que también te puede ayudar a saber cuándo eres fértil y puedes embarazarte.[3] Tener tu periodo de forma inesperada puede hacerte sentir desprevenida y estresada. Puedes llevar la cuenta del día en que tu periodo comienza y cuándo termina con un calendario, en un diario, o con una aplicación de tu dispositivo móvil.
    • Recuerda que durante tu primer año, los periodos a veces son impredecibles y vienen al azar. También pueden saltearse. Es completamente normal. Sin embargo, después del primer año, tu periodo debe comenzar a seguir un patrón más regular y ser más fácil de rastrear.
    • Los ciclos menstruales varían entre las mujeres. Pueden durar entre 21 a 35 días, y tu periodo podría durar de dos a siete días. Puede ser regular y llegar al mismo tiempo cada mes, o puede ser irregular.[4]
    • Llevar la cuenta de tu periodo es muy importante cuando eres sexualmente activa. Te ayuda a determinar cuándo eres más fértil, lo que es importante de saber cuando quieres evitar un embarazo o cuando quieres quedar embarazada.[5]
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    Mantén los productos de higiene femenina contigo todo el tiempo. Ten un tampón, un protector de pantis, o una toallita higiénica extra en tu cartera, en tu mochila y en tu auto. De esta forma, si te viene el periodo y no tienes acceso a otros productos femeninos igual estás protegida. Es especialmente importante si tus periodos son irregulares y no puedes predecir con precisión cuándo comenzará el próximo.
    • Es una buena idea mantener contigo algunos productos de higiene femenina extra así se los puedes ofrecer a otra mujer si necesitara uno.
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    Come alimentos ricos en hierro. Durante la ovulación, que ocurre de 12 a 16 días antes del comienzo tu periodo, tu cuerpo se prepara para un embarazo potencial. Tu cuerpo libera dos hormonas diferentes, la progesterona y el estrógeno, que le dicen que debe prepararse para un embarazo.[6] Tu metabolismo se acelera durante este tiempo así que necesitarás consumir más calorías de las que consumes generalmente. Come muchas comidas ricas en hierro para ayudar a compensar el que perderás justo antes y durante tu periodo.[7]
    • La carne, frijoles, lentejas, huevos y verduras de hojas verdes son buenas fuentes de hierro.
    • Debes continuar comiendo comidas ricas en hierro durante tu periodo. Puede ayudarte a aliviar algunos síntomas, como fatiga y cólicos.[8]
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Método 2
Método 2 de 3:
Minimizar el dolor y la incomodidad

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    Mantente hidratada. Muchas mujeres se sienten hinchadas e incómodas durante sus periodos. Puedes ayudar a subsanar la hinchazón tomando mucho líquido. Trata de limitar la cantidad de cafeína, de alcohol, y de bebidas azucaradas que consumes.[9] Tomar mucho líquido, especialmente agua, es una buena manera de ayudar a aliviar la hinchazón.
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    Toma medicamentos para el dolor. Muchas mujeres experimentan algún nivel de dolor durante sus periodos. Generalmente, este dolor se relaciona a los cólicos cuando la pared uterina se contrae. Puedes tomar medicamentos sin receta, como ibuprofeno, paracetamol, y aspirina para ayudarte controlar tu dolor. Estos medicamentos se pueden encontrar en cualquier farmacia, y debes seguir la recomendación del fabricante para las dosis.[10]
    • Habla con tu médico si los analgésicos sin receta no funcionan y continúas teniendo dolor severo durante los cólicos.
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    Emplea calor para aliviar los cólicos. El calor ayuda a relajar los músculos del abdomen cuando tienes cólicos. Puedes tomar una compresa caliente o una botella con agua caliente y colocarla sobre tu estómago donde te duele, o toma un baño caliente de burbujas o una ducha.
    • Masajear la parte baja del abdomen con movimientos circulares y suaves también podría ayudarte a aliviar el dolor.[11]
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    Modifica tu dieta. Durante tu periodo, podrías descubrir que te apetecen comidas diferentes. Desafortunadamente, las comidas saladas, azucaradas y procesadas pueden hacer que los cólicos sean más dolorosos. Los alimentos que consumes deben ser nutritivos y deben darte energía a lo largo del día. Puedes tener antojos por ciertas cosas, como chocolate o helado, y está bien comer un poco, siempre y cuando sea con moderación.[12]
    • Los alimentos con contenido alto de potasio, como las bananas y las verduras de hoja verde, te pueden ayudar a aliviar la hinchazón naturalmente.
    • Come muchos alimentos que sean ricos en calcio, como los frijoles, las almendras y los lácteos
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    Controla las náuseas. Muchas mujeres sienten náuseas durante sus periodos, lo que puede ser muy incómodo. Los cambios en tus niveles hormonales pueden llevar a malestar gastrointestinal, o podrías sentir náuseas como resultado del dolor de los cólicos o de los dolores de cabeza.[13] Aunque podrías tener mucho apetito, trata de comer alimentos que no tengan sabores fuertes como arroz blanco, manzanas, y tostadas, que se asentarán en tu estómago. El jengibre, ya sea en forma de té, de suplementos, o de raíz, es una forma natural de aliviar las náuseas también.
    • Trata las náuseas con medicamentos sin receta que sean antieméticos, como la difenhidramina y los antihistmínicos.[14]
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    Haz actividad física. El ejercicio es una gran manera de controlar naturalmente tu dolor. Cuando te ejercitas tu cuerpo libera endorfinas impulsadoras del estado de ánimo, que pueden aliviar el dolor y mantener tu mente alejada de la incomodidad relacionada con tu periodo.[15] Es preferible que hagas ejercicio menos extenuante que tu rutina normal si tienes dolor.
    • Los ejercicios suaves como los que calientan tu tronco, como el yoga, también pueden ayudar a minimizar la hinchazón.[16]
    • Siéntete libre de faltar al gimnasio si realmente no te sientes con ganas de ir. Aunque el ejercicio puede ayudarte a controlar tus síntomas, no necesitas forzarte a hacerlo.
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    Habla con tu doctor si los síntomas son incontrolables. Aunque algo de dolor y de incomodidad son normales durante el periodo, quizás necesites consultar con tu doctor si tus síntomas son incontrolables. Puedes hablar con tu médico de cabecera o con tu ginecólogo sobre estos problemas, y ellos te pueden recomendar ver a un especialista. Podrían recetarte medicación para el dolor, darte recomendaciones para cambiar tu estilo de vida, o sugerirte que tomes anticonceptivos orales.[17]
    • Debes visitar a tu doctor si tienes manchas entre los periodos, si tienes mucho flujo, si tienes cólicos muy dolorosos o si el flujo dura más de 10 días.[18]
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Método 3
Método 3 de 3:
Cuidarte a ti misma

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    Descansa mucho. Podrías sentirte más cansada de lo normal durante tu periodo. El dolor y la incomodidad de los cólicos y de la hinchazón pueden hacer que sea más difícil dormir, mientras que la fatiga en realidad disminuye tu tolerancia al dolor.[19] Trata de dormir al menos ocho horas durante la noche y toma una siesta durante el día si lo necesitas.
    • Los ejercicios suaves, como la meditación, el yoga, y el estiramiento pueden ayudarte a dormir mejor.
    • La temperatura interna de tu cuerpo se eleva durante tu periodo, haciéndote sentir con más calor. Esto puede dificultar el sueño así que mantén la temperatura de tu cuarto ente los 15,5 y los 19 grados Celsius, o los 60 y 70 grados Fahrenheit.[20]
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    Ponte ropa cómoda. La mayoría de las mujeres prefieren no usar ropa apretada y cerrada u otro tipo de ropa incómoda mientras tienen su periodo. Debes ponerte lo que te sientas más cómoda cuando tengas la oportunidad. Las mujeres que tienen hinchazón quizás prefieran usar blusas sueltas o pantalones con cintura elástica.
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    Usa ropa interior adecuada. Durante tu periodo, debes usar ropa interior que no te importe que se ensucie. Incluso cuando uses los productos de higiene femenina correctos, podría mancharse tu ropa interior. A algunas mujeres les gusta tener un par de mudas que solo usan durante su periodo. Quizás te sientas más cómoda usando ropa interior de cobertura completa, en lugar de tangas, especialmente si vas a usar una toallita higiénica.
    • Procura ponerte ropa interior de algodón cuando tengas tu periodo. Este material no solo es cómodo, sino que también podría reducir el riesgo de sufrir infecciones por hongos.[21]
    • Las manchas se notan menos en la ropa interior oscura.
    • Tu ropa interior debe ser de algodón, ya que permite que el área respire y es más suave sobre la piel.[22]
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    Encuentra maneras de relajarte. El periodo puede añadir más estrés y ser un inconveniente. Date tiempo para relajarte cuando el día termine y encuentra un espacio tranquilo para entender tus pensamientos y sentimientos. Encuentra las formas de relajarte y de despejar tu mente de cualquier dolor o incomodidad que pudieras estar sintiendo.
    • Haz las cosas que te hacen feliz. Por ejemplo, escucha tus canciones y artistas favoritos y ten un baile en tu cuarto.
    • Encuentra actividades que te parezcan relajantes o tranquilizantes, como meditar, escribir en un diario, dibujar, o mirar televisión.
    • La aromaterapia también podría ayudar a relajarte. Puedes utilizar aceites esenciales de salvia, lavanda o rosa.
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    Ten previstos cambios de estados de ánimo durante tu periodo. Los cambios hormonales pueden afectar tu estado de ánimo durante tu periodo. Por ejemplo, podrías sentirte triste, ansiosa, o irritable en situaciones que normalmente no te impactan. Ten presente que si te sientes molesta sobre algo, tus emociones podrían estar relacionadas a tus hormonas más que a cómo te sientes realmente. Quizás prefieras evitar tener que tomar grandes decisiones durante este tiempo, o la confrontación.
    • Puedes escribir tus emociones cada día durante tu periodo para ver si notas si te sientes más triste o más ansiosa durante este tiempo.
    • Si experimentas cambios de estados de ánimo extremos o si tienes cualquier pensamiento sobre hacerte daño a ti misma contacta a tu doctor inmediatamente.[23] Podrías sufrir una condición llamada trastorno disfórico premenstrual, el cual puede impactar significativamente sobre tu estado de ánimo.
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    Cambia el producto de higiene femenina siempre que sientas la necesidad. Las toallitas higiénicas deben cambiarse cada tres a seis horas y los tampones cada cuatro a ocho horas. Nunca te dejes un tampón más de ocho horas, ya que se incrementa el riesgo de desarrollar el síndrome de shock tóxico (TSS por sus siglas en inglés). Puedes dejarte la copa menstrual por más de doce horas, y esta es la opción más ecológica. Cambiar tu producto de higiene femenina puede ayudar a sentirte fresca y con más seguridad de que no te mancharás.
    • Quizás necesites cambiar el producto de higiene femenina que usas con más frecuencia si tienes mayor flujo o si son los primeros días de tu periodo.
    • El Síndrome de shock tóxico es una infección bacteriana seria y potencialmente fatal. Si comienzas a tener un sarpullido que se parece a una quemadura de sol, especialmente en tus palmas y planta de los pies, fiebre alta, presión arterial baja, o si comienzas a vomitar contacta a un profesional médico.[24]
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Consejos

  • Si estás preocupada por manchar tus sábanas mientras duermes, coloca una toalla oscura debajo de ti. Y si vas a dormir en otro lado, podrías llevar una manta (que no te importe que se manche) sobre la que puedas dormir.
  • Encuentra las toallitas higiénicas o los tampones con una absorción correcta para ti. Cada chica es diferente, y una vez que tengas la adecuada te sentirás más segura y te ayudará a evitar las manchas.
  • Si no tienes ningún producto, envuelve papel higiénico 3 veces alrededor de tu ropa interior para improvisar una toallita higiénica o pregúntale a la enfermera de tu escuela o a una amiga si tiene una. No tengas miedo de preguntar, ellas entenderán.
  • En el evento desafortunado de que manches tu ropa interior, asegúrate de ponerla en remojo en agua fría. El agua caliente fijará la mancha.
  • Si necesitas cambiar tu toallita higiénica durante una clase, pregúntale al profesor si puedes ir al baño. Y si no tienes ninguna, usa papel higiénico. O podrías poner toallitas en tus zapatos o en tus botas.
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Advertencias

  • No se deben usar los tampones por más de 8 horas. Después de este tiempo, tienes mayores probabilidades de contraer el Síndrome de shock tóxico, el cual es una condición potencialmente fatal.
  • Lee las etiquetas de cualquier medicación que tomes, incluso aquellos sin receta, especialmente si eres sensible a cualquier medicación. Siempre sigue las instrucciones de dosificación y no tomes medicamentos para el dolor con el estómago vacío.
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Categorías: Menstruación
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