Cada vez que vayas a sembrar una planta en una maceta ornamental o en un macetero, particularmente si no tienen orificios de drenaje, utiliza un revestimiento y te ahorrarás muchas molestias. El uso de un revestimiento te permitirá sacar la planta de la maceta y volverla a poner sin estropear las raíces. Asimismo, puedes evitar el desastre que significa poner la tierra directamente dentro de la maceta. ¡Con unos cuantos materiales muy sencillos y siguiendo algunos pasos fáciles podrás elaborar un revestimiento que permitirá que el agua drene, que las raíces respiren y que tu planta florezca!

Parte 1
Parte 1 de 2:
Revestir la maceta

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    Elige el material. Los materiales que más se usan son el plástico y algunas telas como la arpillera. En el caso de plantas pequeñas incluso se utiliza papel de filtro para café. El material que vayas a usar depende únicamente del tamaño de la maceta y de lo que tengas a tu alcance. Busca en tu casa algún material que puedas reutilizar para fabricar un revestimiento para maceta.
    • Los envases de leche de plástico, botellas y otros artículos parecidos son excelentes como revestimientos para macetas. Corta el pitón, lava el envase por dentro y colócalo dentro de una maceta de tamaño similar.
    • Debes elegir un material que puedas perforar, ya que es fundamental que la maceta pueda drenar.
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    Compara el tamaño del revestimiento con el de la maceta. Dicho de otro modo, coloca el revestimiento dentro de la maceta y marca con un lápiz las partes que deberás cortar o reducir. Por ejemplo, si vas a usar un pedazo de arpillera, colócalo dentro de la maceta y marca el sitio donde la tela sobrepasa el borde de la maceta. Si vas a usar una caja de plástico vieja, marca el lugar donde debes cortar el plástico de tal forma que entre sin problemas dentro de la maceta.[1]
    • El revestimiento puede entrar hasta el fondo de la maceta, pero no es necesario. Si tienes una maceta muy profunda, no tienes que llenarla toda con tierra. Si fabricas un revestimiento que sea lo suficientemente firme y resistente como para contener a la planta y a la tierra, este puede ir desde el borde de la maceta pero realmente no tiene que llegar hasta el fondo. Parecerá que la maceta está completamente llena, pero solo el revestimiento lo estará. Asimismo, si este no llega hasta el fondo de la maceta, puedes colocar piedras o bolitas de poliestireno.
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    Recorta el revestimiento. Normalmente, hay que recortar el revestimiento de tal forma que no se vea fácilmente y parezca que la planta está ubicada directamente dentro de la maceta ornamental o el macetero. No obstante, debes dejar una parte del revestimiento libre para que puedas sujetarlo cuando necesites retirarlo de la maceta. Con la ayuda de una tijera afilada córtalo siguiendo las marcas que hiciste, colócalo dentro de la maceta y vuelve a revisar si es necesario hacer un recorte una vez más.
    • Si vas a utilizar un revestimiento de tela, como la arpillera, podrías colocarlo de tal forma que quede visible como parte de la decoración y darle una apariencia rústica.
    • Puedes utilizar parte de la tela que sobra a ambos lados del revestimiento para que te sirva como asas cuando quieras sacarlo del macetero o de la maceta. Antes de llenarlo con tierra pesada, asegúrate de sacarlo de la maceta un par de veces a manera de práctica. Debes contar con la cantidad suficiente de material como para que el revestimiento sea resistente.
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    Corta orificios de drenaje en el fondo del revestimiento. Los orificios deben estar distribuidos de forma equitativa por todo el fondo y deben ser lo bastante grandes como para permitir que el agua drene, pero no tanto como para dejar que se pierdan pedazos de tierra cada vez que se mueva la maceta. ¡Esto estropearía el objetivo del revestimiento! Los orificios de drenaje son absolutamente esenciales para que las plantas florezcan. Si las raíces están siempre con agua, no reciben el aire que necesitan. A menudo, las plantas mueren porque se pudren al estar en charcos de agua estancada.[2] Sin importar si vas a usar plástico, tela o papel de filtro, tienes que hacer orificios en el fondo del revestimiento.
    • Esta es otra de las ventajas enormes que tiene el uso de revestimientos para macetas. Si vas a sembrar una planta en una maceta o macetero que no cuenta con orificios de drenaje, el revestimiento te permitirá sacar la planta de la maceta, dejar que las raíces drenen debidamente y ponerla nuevamente en su lugar.

Parte 2
Parte 2 de 2:
Plantar

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    Llena el revestimiento con tierra para macetas. El tipo de tierra para macetas que debes utilizar está en función de la planta. Una tierra adecuada favorece la retención de agua y nutrientes en las raíces al mismo tiempo que les permite respirar. Puedes encontrar diversas clases de tierra para macetas en cualquier tienda especializada en productos para jardinería. En concreto, busca un tipo de tierra que contenga musgo de turba, corteza de pino y perlita o vermiculita.[3] Antes de colocar la planta llena la maceta hasta la mitad aproximadamente.
    • Es importante que adquieras una tierra especial para macetas. Otras, como la tierra de jardín o el mantillo no están hechas para sembrar en recipientes.
    • Se recomienda dejar de dos a ocho centímetros (de dos a tres pulgadas) entre la superficie de la tierra y el borde de la maceta.
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    Coloca la planta en la tierra. Ubica la planta más grande al centro de la maceta y las más pequeñas pueden ir más cerca del contorno. [4] Una vez que hayas trasladado la planta a la maceta, deberás agregar más tierra para que las raíces queden cubiertas por completo. [5] La tierra no debe estar demasiado compacta — la tierra blanda es la mejor para sembrar en macetas.
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    Deja que la maceta reciba la luz del sol y riégala con frecuencia. No obstante, ten cuidado con el riego excesivo. Toca la superficie de la tierra y riégala cuando sientas que está seca. Agrega el agua gradualmente hasta que empiece a salir por los orificios de drenaje. En el mejor de los casos, las macetas ornamentales tienen un agujero de drenaje; de lo contrario, deberás levantar el revestimiento con la planta, sacar el agua de la maceta y volver a colocar adentro el revestimiento con la planta. [6] Toda la raíz tiene que estar húmeda, pero no inundada permanentemente. La ventilación y el drenaje son fundamentales.

Acerca de este wikiHow

Lauren Kurtz
Coescrito por:
Horticultora profesional
Este artículo fue coescrito por Lauren Kurtz. Lauren Kurtz es especialista en naturalismo y horticultura. Lauren ha trabajado para Aurora, Colorado administrando el jardín Water-Wise en el Centro Municipal de Aurora para el Departamento de Conservación del Agua. Recibió una licenciatura en estudios ambientales y de sostenibilidad en la universidad Western Michigan en 2014. Este artículo ha sido visto 1812 veces.
Categorías: Jardinería