Las contracciones de Braxton Hicks son tensiones en el abdomen que pueden confundirse fácilmente con dolores de parto. Son ocasionadas por la tensión y relajación del útero en preparación para el futuro trabajo de parto pero no son una señal de que este ha empezado. Las contracciones de Braxton Hicks pueden empezar hasta en el segundo trimestre pero son más comunes en el tercer trimestre. Todas las mujeres embarazadas experimentan estas contracciones, pero no todas las sienten.[1] Las contracciones de Braxton Hicks tienden a incrementar en frecuencia e intensidad cerca del final del embarazo y a menudo se confunden con el trabajo de parto.

Parte 1
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Diferenciar entre contracciones de Braxton Hicks y contracciones verdaderas del parto

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    Ubica el dolor. ¿La contracción se tensiona en una banda a través de tu abdomen? Si es así, es probable que sea una contracción de Braxton Hicks. Los verdaderos dolores de parto generalmente empiezan en la zona lumbar y se desplazan hacia adelante en dirección al abdomen, o desde el abdomen a la zona lumbar.[2]
    • Los verdaderos dolores de parto a menudo se describen como similares a los cólicos menstruales.[3]
    • El dolor en la zona lumbar que viene y va y la presión en la pelvis a menudo son señales de que las contracciones son verdaderas.
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    Evalúa el dolor. ¿Las contracciones son incómodas o muy dolorosas? ¿Se vuelven más dolorosas con cada contracción? Las contracciones de Braxton Hicks no son normalmente dolorosas y no se vuelven más dolorosas con cada contracción. Generalmente se mantienen débiles o empiezan fuertes y se debilitan.[4]
    • Los verdaderos dolores de parto incrementarán en intensidad continuamente.
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    Cronometra las contracciones. Las de Braxton Hicks a menudo son irregulares. No se vuelven más frecuentes. El trabajo de parto verdadero ocurre a intervalos regulares que se vuelven lentamente más frecuentes, comenzando a entre 15 y 20 minutos entre cada contracción e incrementando hasta menos de 5 minutos entre cada una. Los verdaderos dolores de parto duran entre 30 y 90 segundos.[5]
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    Cambia de posición. Si experimentas una contracción mientras estás sentada, prueba caminar. Si estás caminando o de pie, siéntate. Una contracción de Braxton Hicks a menudo se detendrá cuando cambies de posición. Las verdaderas contracciones del parto no se detendrán cuando cambies de movimiento y a menudo se intensifican cuando caminas.[6]
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    Toma nota de en qué etapa del embarazo te encuentras. Si aún no has llegado a las 37 semanas, es más probable que tus contracciones sean de Braxton Hicks. Si has pasado las 37 semanas y tienes otros síntomas, como orina frecuente, heces sueltas, manchado vaginal o pérdida del tapón mucoso, es posible que tus contracciones sean verdaderas.[7]
    • Las contracciones verdaderas antes de las 37 semanas podrían ser una señal de parto prematuro. Contacta a tu proveedor de servicios médicos si crees que tienes contracciones verdaderas prematuras.

Parte 2
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Lidiar con las contracciones de Braxton Hicks

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    Da una caminata. Si las contracciones de Braxton Hicks te hacen sentir incómoda, moverte a menudo hará que desaparezcan. Si has estado caminando, tomarte un tiempo para sentarte también podría detenerlas.[8]
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    Relájate. Obtener un masaje, darte un baño o simplemente tomarte un tiempo de descanso necesario puede ayudar a aliviar tus contracciones. Leer, escuchar música o tomar una siesta también puede ser útil.[9]
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    Conoce los detonantes. Las contracciones de Braxton Hicks son un ejercicio saludable que tu útero realiza para prepararse para el parto. Ocurren naturalmente pero algunas mujeres embarazadas encuentran que se desencadenan por actividades particulares. Puedes experimentar contracciones de Braxton Hicks después del ejercicio o la actividad extenuante. Algunas son desencadenadas por el sexo o el orgasmo. Algunas mujeres experimentan contracciones de Braxton Hicks cuando están agotadas o deshidratadas.[10]
    • Aprender cuáles son tus detonantes puede ayudarte a reconocer una contracción de Braxton Hicks cuando suceda.
    • Las contracciones de Braxton Hicks no necesitan prevenirse pero pueden ser un buen recordatorio para beber agua y descansar.

Parte 3
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Saber cuándo llamar al doctor

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    Llama al doctor si tienes síntomas de parto verdadero. Si tienes contracciones cada 5 minutos durante más de una hora o si rompes fuentes, llama a tu proveedor de servicios médicos. Si no estás segura de tener los síntomas, un doctor o enfermera pueden ayudarte a identificarlas por teléfono o en persona.[11]
    • Es posible que no tengas que ir al hospital inmediatamente, pero llamar puede ayudarte a determinar cuál es tu siguiente paso.
    • Las falsas alarmas son comunes, sobre todo en los primeros embarazos. No te preocupes por pasar vergüenza haciendo una visita prematura al hospital: es parte de la experiencia.[12]
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    Llama si tienes síntomas prematuros de parto. Si tienes cualquier síntoma de parto antes de las 36 semanas, consulta a tu proveedor de servicios médicos. Si tienes síntomas de parto en combinación con manchado vaginal antes de las 36 semanas, llama al doctor inmediatamente.[13]
    • Si experimentas sangrado vaginal en lugar de un manchado leve en cualquier momento de tu embarazo, llama a tu proveedor de servicios médicos.
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    Llama a tu doctor si tu bebé parece moverse menos de lo normal. Una vez que tu bebé haya empezado a patear regularmente, una falta de movimiento podría requerir atención médica. Si no sientes por lo menos diez movimientos en el espacio de dos horas o si los movimientos se han ralentizado significativamente, llama a tu doctor.[14]

Consejos

  • Los dolores agudos o punzadas en los lados de tu abdomen probablemente no sean contracciones verdaderas. A estos dolores se les llama dolores del ligamento redondo y se desplazan hasta la entrepierna. Pueden ser causados por el estiramiento de los ligamentos que respaldan a tu útero. Para aliviar estos dolores, prueba cambiar de posición o de nivel de actividad.[15]
  • La ansiedad puede hacer que la incomodidad parezca más grave de lo que es. Si es tu primer embarazo o si has experimentado un embarazo traumático, es posible que las contracciones falsas te perturben más. Evita las situaciones estresantes y descansa adecuadamente a lo largo del embarazo. Hablar sobre tus preocupaciones en cuanto al embarazo puede proporcionarte el alivio necesario.[16]

Advertencias

  • Es importante comprender que no hay nada malo en contactar a tu doctor en cualquier momento. Si algo no se siente bien, llámalo.
  • Es esencial llamar a tu doctor si tienes sangrado vaginal, un goteo continuo de fluido, contracciones cada 5 minutos durante una hora o si sientes menos de 10 movimientos del bebé cada 2 horas.[17]

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Categorías: Parto