En la vida hay cambios que de un momento a otro pueden abrir periodos de tiempo libre que no solíamos tener. Este tiempo libre puede ser producto de un cambio de estilo de vida o de profesión, la jubilación, la partida de los hijos del hogar o la graduación de la escuela o la universidad. Ocupar tu tiempo libre con actividades productivas es una buena manera de aumentar tu creatividad, energías, entusiasmo y de tener un mayor sentido de realización. Para esto, puedes desarrollar un nuevo pasatiempo, aprender un idioma, ofrecerte como voluntario en un grupo local o unirte a una organización religiosa.

Método 1
Método 1 de 4:
Aprender cosas nuevas

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    Toma clases de educación para adultos o de una universidad comunitaria. Aprovecha tu tiempo libre como una oportunidad para adquirir conocimientos que no se relacionen directamente con tu trabajo o desarrollo profesional. Utilízalo para meterte de lleno en el aprendizaje de estas cosas solo por el gusto de aprenderlas, sin tener la presión de superar los objetivos que te has trazado.[1]
    • Por ejemplo, tal vez siempre has soñado con involucrarte en la arqueología, el baile de salón, la confección de joyas, los primeros auxilios en la naturaleza o el parapente.
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    Elige un nuevo pasatiempo. Meterte de lleno en un pasatiempo durante tu tiempo libre puede convertirse en una experiencia enriquecedora y divertida. Un pasatiempo te permite disfrutar mientras exploras sus complejidades. Busca otras personas con el mismo pasatiempo, de modo que puedas relacionarte y compartir ideas.[2]
    • Considera algunos de los siguientes pasatiempos que puedas empezar por tu cuenta: aprender un nuevo lenguaje de programación, aprender un idioma extranjero, escribir un libro, un cuento o una obra teatral, confeccionar joyas, aprender diseño gráfico, fotografía amateur o un nuevo tipo de baile (baile en barra, danza del vientre, zumba, claqué, jazz, etc.).
    • También podrías aprender un nuevo idioma, aprender carpintería o tocar un instrumento musical.
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    Perfecciona tu pasatiempo. Incluso en un solo pasatiempo, existen muchas vías para mantenerte ocupado. Mientras más te sumerjas en un pasatiempo específico o en un campo de un pasatiempo, mayor experiencia adquirirás en una categoría específica.
    • Por ejemplo, las manualidades están llenas de ideas para posibles ángulos de un pasatiempo. Solo en la pintura puedes averiguar sobre acrílicos, esmaltes, murales, aguazo, tintas, óleos, óleos con fijación por calor, óleos mezclables con agua, pasteles y pasteles secos, pasteles al óleo, lápices pastel, pintura en espray (grafiti), témperas, acuarelas o esbozos.
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    Practica la jardinería. Esta actividad es una excelente forma de pasar tu tiempo libre y de utilizar las manos para cultivar tus propios alimentos. Los cactus son plantas que producen flores hermosas y son muy resistentes a las condiciones climáticas. También podrías probar con las hierbas, ya que son fáciles de cultivar, útiles en la cocina o las manualidades y crecen cada año.
    • Si ya eres un experto en la jardinería, cambia el diseño de tu jardín o el enfoque que le das a tus cultivos. Trata de expandirte y crea un jardín de meditación o un jardín persa.
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    Convierte la cocina en una actividad placentera en vez de una tarea rutinaria. Preparar recetas nuevas es una forma divertida de pasar el tiempo si lo haces por placer y no por necesidad. Toma un libro de cocina y prueba algunas recetas. Mira qué tienes en el refrigerador y la despensa, luego busca en Internet recetas con esos ingredientes (por ejemplo, busca "recetas con brócoli, piña y chile jalapeño").[3]
    • Pasa una tarde horneando y aprendiendo nuevas técnicas de cocina.
    • Una vez que domines algunas recetas deliciosas, prepara una cena para tus seres queridos.
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    Dedica tiempo a la lectura. Leer ocupará tu mente y te dará un tiempo libre más significativo, al margen de cuál sea tu género de interés (ficción, no ficción, poesía, biografía, etc.). Leer ampliará tus perspectivas y vocabulario, además de abrir tu mente a visiones y culturas que tal vez aún no conozcas.[4]
    • Si quieres sugerencias de lectura, acude a la biblioteca de tu localidad o dedica una hora a explorar una librería cercana.

Método 2
Método 2 de 4:
Hacer trabajo voluntario en tu tiempo libre

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    Dedica el tiempo libre a una causa voluntaria de tu interés. Pregúntales a tus conocidos que ya hacen voluntariado, busca en Internet o consulta con las personas que trabajan en lugares de tu interés para saber qué trabajo voluntario puedes realizar. Guíate por tus intereses. Por ejemplo, si te interesan los libros, ofrécete como voluntario en una biblioteca local.[5]
    • Independientemente de cuál sea tu nivel de experiencia, es muy probable que haya una oportunidad de voluntariado para ti. Además, el voluntariado te permitirá ganar conocimiento, experiencia y reputación con el paso del tiempo.
    • Considera trabajar como voluntario en distintos lugares y en distintos horarios. Así tendrás una experiencia variada y conocerás una diversidad de personas.
    • Según tus intereses, también puedes buscar puestos de trabajo de voluntariado con animales, ya sea en reservas naturales, zoológicos, centros de rescate o adiestramiento animal. Únete a un equipo de conservación, haz voluntariado en el extranjero u organiza visitas a un museo local.
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    Busca oportunidades de voluntariado en tu comunidad. Una forma gratificante de hacer algo por la comunidad o sociedad es aprovechar tu tiempo libre para aportarle beneficios o ayudar a los necesitados. Por supuesto, puedes elegir qué tipo de voluntariado realizar según tus creencias y lo que consideres más importante. También podrías ser mentor de un joven de tu comunidad como una manera de aportar tiempo y energía.[6]
    • Algunas ideas de voluntariado son ayudar en una tienda de segunda mano, recaudar fondos para una organización sin fines de lucro de tu localidad o servir en un comedor de beneficencia.
    • Te darás cuenta de que el voluntariado es una experiencia gratificante de gran ayuda para los demás.
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    Ofrece tu tiempo y talento voluntario por Internet. Si vives en una zona rural o remota o si prefieres el contacto virtual en vez del personal, puedes hacer trabajo voluntario vía Internet. Por ejemplo, ofrécete a realizar trabajos web para organizaciones sin fines de lucro o escribir boletines informativos para instituciones benéficas. El voluntariado virtual te dará un sentido de realización y promoverá las conexiones personales.[7]
    • Si vives en Estados Unidos y quieres enterarte de más oportunidades de voluntariado virtual (y presencial), visita la página web: https://www.volunteermatch.org/.

Método 3
Método 3 de 4:
Conocer nuevas personas y socializar

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    Participa en una iglesia, sinagoga, mezquita o templo. Esta es una manera segura de conocer personas interesantes y de involucrarte en tu comunidad, además de desarrollar tus creencias espirituales. Busca en Internet una variedad de iglesias de tu zona.
    • No es necesario que estés de acuerdo con una serie de creencias religiosas para pasar tiempo libre en una organización religiosa.
    • Por ejemplo, los universalistas unitarios, a pesar de provenir de raíces cristianas, son conocidos por aceptar a personas de otras creencias, entre ellas los agnósticos, ateos, paganos, pensadores libres, humanistas seculares y liberales de cualquier tipo.
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    Haz amigos en tu escuela, oficina, iglesia o comunidad. No te aísles durante todo tu tiempo libre. Relaciónate con los demás y pasa tiempo con tus seres queridos. Programa reuniones semanales o mensuales con tus amigos, reúnete de forma espontánea y ocasional y ponte al día con los familiares que no hayas visto por un tiempo para saber cómo les va.[8]
    • Así tendrás la oportunidad de compartir ideas, pasarla bien y recargarte de energías por medio de tus conexiones.
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    Establece una red de contactos para fines profesionales durante tu tiempo libre. Solo porque no estás trabajando no significa que no puedas avanzar profesionalmente o desarrollar conexiones profesionales.[9] Llama a los amigos de tus amigos e invita a un par de colegas a un brunch de media mañana o quédate después de una reunión nocturna e invita a un par de personas que no conozcas muy bien para disfrutar de un cóctel.
    • Incluso si no tienes muchas ganas de pasar mucho tiempo estableciendo contactos, dedícale al menos un poco de tu tiempo durante la semana para asegurarte de relacionarte con los demás sin restricciones de tiempo, obligaciones y plazos laborales o autoimpuestos.

Método 4
Método 4 de 4:
Dedicar tu tiempo libre a tu salud y bienestar

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    Pasa tiempo con una mascota. Si aún no tienes una, ahora puede ser el momento de conseguirla. Las mascotas necesitan cuidados regulares y ayudan a ocupar tu tiempo libre jugando, dando un paseo o preparándoles la comida. Si buscas comprar una mascota, acude a un refugio de animales.
    • Los perros y los gatos son los más populares por buenas razones: sus personalidades son divertidas, son cariñosos y puedes dejarlos solos por varias horas seguidas.
    • Si no tienes tiempo suficiente para dedicárselo a una mascota o buscas un animal que requiera poca atención, prueba con un pez.
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    Céntrate en tu espiritualidad. El tiempo libre es el momento ideal para todo lo espiritual, puesto que te permites relajarte, reflexionar y pensar en la perspectiva más amplia y el propósito de la vida. Al margen de ser o no una persona espiritual, el tiempo de espiritualidad es una parte fundamental de ser humano y ocuparte de este lado tuyo es una de las cosas más sanas que puedes hacer por ti.[10]
    • Tras varias semanas de oración diaria, empezarás a percibir resultados positivos en tu vida: sentirás más tranquilidad y tendrás una mejor concentración.
    • La oración centrante emplea métodos similares en un contexto cristiano.
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    Aprende la meditación. Siéntate tranquilo por 20 minutos y respira con naturalidad. Cuenta hasta 10 mientras respiras y vuelve a empezar. El propósito de la meditación es tener algo en que centrarte, de modo que te mantengas presente de manera integral y tu mente no se distraiga. La meditación te da calma y te ayuda a evitar los pensamientos y sentimientos negativos.[11]
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    Ejercítate para estar en forma. Una manera fácil y saludable de pasar 1 o 2 horas es aprovechar tu tiempo libre para mantenerte en forma. El tiempo libre te da la oportunidad de mantener un buen estado físico, ya sea levantando pesas en tu garaje o haciendo lagartijas en tu sala. Depende de ti cómo mantenerte en forma. Si no tienes mucho tiempo libre, dedica 15 a 30 minutos a ejercitarte en casa.[12]
    • Ajusta tu programa de ejercicios a la cantidad de tiempo libre que tienes. Si dispones de muchas horas libres al día, dedícalas a ejercitarte en casa o a correr varios kilómetros.
    • Si prefieres hacer ejercicios fuera de casa, únete a un gimnasio de tu zona para levantar pesas y ganar músculo o para correr en máquinas cardiovasculares. También podrías correr en un parque cercano a tu casa o trabajo. Busca unirte a un grupo de escaladas en roca.
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    Organiza tu agenda. Entre el trabajo, las reuniones y obligaciones profesionales, las reuniones sociales y las demás partes de la vida, es fácil terminar abrumado. Saca 10 minutos de tu tiempo libre para organizar tu agenda. Si escribes y organizas las fechas y horas de ciertas obligaciones, te estresarás menos y cumplirás con tus citas.[13]
    • Si no cuentas con una agenda, anota tus planes en el celular. Así te mantendrás más organizado y olvidarás menos compromisos.

Consejos

  • No llenes tu tiempo libre con demasiadas actividades. De lo contrario, se convertirá en una carga para ti por tener tanto que hacer. El tiempo libre debe ser divertido y placentero, no agitado.
  • Dedica tiempo a probar nuevas experiencias. Aunque al principio algo puede parecerte difícil, empezará a gustarte y será más gratificante si eres constante.
  • Recuerda que tú eres el dueño de tu tiempo libre. Si decides cambiar de iglesia o grupo de voluntariado o dejar un pasatiempo, no hay problema con eso.
  • Trata de relajarte durante tu tiempo libre.

Advertencias

  • Consulta con tu doctor antes de empezar cualquier régimen de ejercicios o actividades físicas intensas. No lo postergues. Al doctor le agradará saber que deseas empezar algo nuevo y solo te aconsejara que no lo hagas si existe un buen motivo para hacerlo.

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