Este artículo fue coescrito por Carrie Noriega, MD. La Dra. Noriega es una obstetra y ginecóloga certificada por el colegio oficial, y escritora médica en Colorado. Se especializa en salud de la mujer, reumatología, neumología, enfermedades infecciosas y gastroenterología. Recibió su doctorado en la Creighton School of Medicine en Omaha, Nebraska, y completó su residencia en la Universidad de Missouri - Kansas City en 2005.
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Después de dar a luz, es posible que tengas un flujo abundante de sangre, tejidos y bacterias, el cual se conoce como “loquios”. Esta pérdida de sangre es completamente natural y debe ser igual a una menstruación abundante. Para estar segura de que el sangrado posparto es normal debes saber lo que debes esperar, el momento en el que debas comunicarte con un doctor y reconocer los síntomas de una hemorragia posparto, una condición grave, pero que sucede raras veces.
Pasos
Método 1
Método 1 de 3:Comprender lo que debes esperar
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1Espera sangrar mucho durante tres a diez días. Durante aproximadamente la primera semana después de dar a luz, experimentarás un flujo de sangre abundante y brillante. Durante este tiempo, quizá también expulses varios coágulos de sangre pequeños o medianos.[1]
- Durante esta primera etapa del sangrado posparto, probablemente llenes una toalla sanitaria de sangre aproximadamente cada tres horas.[2]
- Probablemente también expulses uno o dos coágulos grandes (del tamaño de una moneda de 25 centavos de dólar) y varios coágulos más pequeños (del tamaño de una uva).[3]
- En caso de que hayas dado a luz mediante una cesárea, es de esperar que sangres un poco más.[4]
- Comenzarás a notar un cambio ligero en el color de los loquios después de dos o cuatro días después del parto.
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2Presta atención al color del flujo. En los primeros tres a diez días, los loquios serán de un color rojo intenso y brillante (y se volverán un poco más claros después de aproximadamente cuatro días). Después de tres a diez días, su color debe cambiar de rojo a rosado. Después de pocos días después, los loquios lucirán de un color marrón y finalmente de color blanco amarillento.[5]
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3Prevé que continuarás sangrando. Aunque solo debes sangrar mucho durante tres a diez días después de dar a luz, continuarás teniendo un flujo de ligero a medio durante varias semanas (hasta seis). Durante este tiempo, el sangrado irá disminuyendo lentamente y se volverá de un color más claro.[6]
- Si amamantas a tu bebé, quizá notes un ligero incremento en el sangrado y los calambres cuando lo hagas (o inmediatamente después). Amamantar hace que el útero se contraiga ligeramente, así que es perfectamente normal.
- Si has comenzado a tomar un método anticonceptivo hormonal, quizá el sangrado irregular continúe después de seis semanas. Conversa al respecto con tu proveedor de servicios médicos.
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4Infórmate sobre lo que le sucede a tu cuerpo. Comprender lo que sucede dentro de tu cuerpo después del parto puede calmar algunos de tus temores. Después de dar a luz, la placenta se separa del útero y los vasos sanguíneos a los que estaba sujetada se abren, lo cual ocasiona un sangrado dentro del útero. Después de expulsar la placenta, el útero continúa contrayéndose y expulsa sangre, así como también cualquier residuo de tejidos, fluidos y bacterias. A medida que el útero se contrae también sella los vasos sanguíneos. En resumen, durante las primeras seis semanas después del parto, el útero se limpia a sí mismo y restaura su condición normal.[7]
- Durante el embarazo, la cantidad de sangre del cuerpo se incrementa en aproximadamente el 50 %, así que tu cuerpo está bien preparado para esta pérdida de sangre después del parto.
- Si experimentas una rasgadura durante el parto o tienes una episiotomía, también podrías sangrar en esta área.
Método 2
Método 2 de 3:Saber cuándo debes comunicarte con un doctor
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1Observa si expulsas coágulos de sangre grandes. Aunque es normal y es de esperar que expulses algunos coágulos de pequeños a medianos, comunícate con tu proveedor de servicios médicos si expulsas coágulos más grandes que una pelota de golf.[8]
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2Monitoriza el uso de toallas sanitarias. Una forma de monitorizar la cantidad de sangre que hayas perdido es prestando atención a la frecuencia con la que cambies tu toalla sanitaria. Comunícate con tu doctor si empapas una o dos toallas sanitarias por hora, durante tres o más horas consecutivas.[9]
- Durante este tiempo, no es recomendable que uses tampones, ya que al hacerlo podrías introducir bacterias en la vagina.
- El sangrado será más abundante durante los primeros días y, luego, comenzará a disminuir lentamente. Comunícate con un doctor si notas que el sangrado no disminuye.
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3Ten en cuenta el color de la sangre. Durante los primeros días después de dar a luz, la sangre será de un color rojo muy brillante. Después de aproximadamente cuatro días, el color se aclarará. Conversa con tu doctor si la sangre todavía es de color rojo brillante durante más de cuatro días después de dar a luz.[10] [11]
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4Presta atención a olores inusuales. Si la sangre tiene un olor fétido y podrido podría ser un signo de infección posparto. Los loquios deben tener un olor típico a sangre menstrual. Si la sangre tiene mal olor, comunícate con tu proveedor de servicios médicos.[12]
- La infección posparto generalmente está relacionada con un dolor grave y una fiebre de 38 °C (100 °F).
Método 3
Método 3 de 3:Reconocer una hemorragia posparto
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1Ten en cuenta que esta condición se presenta raras veces. La hemorragia posparto (HPP) es una condición poco frecuente pero grave que afecta a tan solo del 4 a 6 % de mujeres después del parto. Aunque se presenta raras veces, continúa siendo la causa número uno de muertes después del parto. Por lo tanto, es importante que reconozcas los factores de riesgo que hacen que seas más propensa a padecer hemorragia posparto, así como sus síntomas.[13]
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2Infórmate sobre las condiciones médicas que incrementan el riesgo de hemorragia posparto. Es muy probable que la experimentes si has sido diagnosticada con condiciones médicas que afectan el útero, la placenta o la forma en la que tu sangre se coagule.[14]
- Entre las condiciones que afectan el útero se encuentran la atonía uterina, el útero invertido y la ruptura uterina.
- Algunas condiciones que afectan a la placenta son el desprendimiento prematuro de la placenta, la placenta accreta, la placenta increta, la placenta percreta y la placenta previa.
- Entre las condiciones que afectan la coagulación de la sangre se encuentran la enfermedad de von Willebrand, la coagulación intravascular diseminada (CID) y la ingesta de anticoagulantes (warfarina, enoxaparina, etc.).
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3Infórmate sobre otros factores de riesgo. Varios factores pueden hacer que tengas un alto riesgo de hemorragia posparto. Ten en cuenta que ninguna de estas condiciones indica que experimentarás hemorragia postparto (esta condición sucede raras veces). Tan solo señalan que el riesgo es ligeramente mayor.[15] Podrías estar en riesgo si experimentas lo siguiente:
- obesidad
- trabajo de parto prolongado (más de 12 horas)
- cesárea de emergencia
- anemia
- preeclampsia o presión arterial alta
- hemorragia posparto en un parto anterior
- infecciones uterinas (endometritis)
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4Reconoce los síntomas. Es muy probable que la hemorragia posparto ocurra dentro de un día de haber dado a luz. Sin embargo, es posible que suceda hasta dos semanas después del parto. Es crucial que trates este problema de salud inmediatamente, así que comunícate con tu proveedor de servicios médicos si experimentas cualquier síntoma.[16] Entre los síntomas que podrías presentar se encuentran los siguientes:
- sangrado vaginal que no disminuye ni se detiene
- disminución de la presión arterial o síntomas de choque (visión borrosa, escalofríos, piel húmeda y pegajosa, latido del corazón acelerado, sensación de confusión, mareo extremo o desmayo)
- piel pálida
- hinchazón y dolor alrededor de la vagina o el perineo
Referencias
- ↑ http://www.babycenter.com/0_postpartum-normal-bleeding-and-discharge-lochia_11722.bc
- ↑ https://www.nct.org.uk/parenting/guide-blood-loss-after-birth
- ↑ https://www.nct.org.uk/parenting/guide-blood-loss-after-birth
- ↑ http://www.babycenter.com/0_postpartum-hemorrhage_1152328.bc
- ↑ http://www.whattoexpect.com/first-year/month-by-month/your-body-postpartum-week1.aspx
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- ↑ http://www.webmd.com/parenting/baby/tc/postpartum-first-6-weeks-after-childbirth-when-to-call-a-doctor
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- ↑ http://www.babycenter.com/0_postpartum-warning-signs-when-to-call-your-caregiver_12257.bc
- ↑ http://www.webmd.com/parenting/baby/tc/postpartum-first-6-weeks-after-childbirth-when-to-call-a-doctor
- ↑ http://www.babycenter.com/0_postpartum-warning-signs-when-to-call-your-caregiver_12257.bc
- ↑ http://www.marchofdimes.org/pregnancy/postpartum-hemorrhage.aspx
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- ↑ http://www.chw.org/medical-care/fetal-concerns-center/conditions/pregnancy-complications/postpartum-hemorrhage