Blanquear es una técnica culinaria que consiste en cocinar los alimentos en agua hirviendo y enfriarlos de inmediato en un baño de agua con hielo. Es excelente para los espárragos porque ayuda a que conserven su sabor, textura y color. Después de blanquearlos, puedes servirlos de inmediato, refrigerarlos de 3 a 5 días o congelarlos hasta durante 1 año. Con un poco de preparación, puedes disfrutar de unos espárragos frescos y nutritivos.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Cocinar los espárragos

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    Lava los espárragos con agua fría para quitarles la suciedad de la superficie. Antes de blanquear los espárragos, asegúrate de que estén limpios. Sostén los tallos bajo el grifo de agua fría del fregadero de 10 a 30 segundos.
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    Recorta los extremos de los espárragos. Para recortar los extremos con facilidad, coloca los espárragos sobre una tabla de cortar de modo que todos los extremos queden alineados. Luego, corta con un cuchillo grande y afilado el cuarto inferior de los tallos. Quita el extremo grueso y blanco del tallo delgado y verde. Haz un corte en todos los extremos para quitarlos con facilidad.[1]
    • Los extremos son menos masticables y tienen menos sabor, por lo que no son muy atractivos para comerlos.
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    Pon a hervir una olla grande de agua a temperatura alta. Para blanquear los espárragos, llena la mitad de una olla grande con agua del fregadero. Luego, coloca la olla sobre la estufa y elije una temperatura alta.[2]
    • El agua deberá hervir en aproximadamente 5 minutos.
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    Agrégale sal al agua si quieres realzar el sabor. Espolvorea la sal en el agua en cuanto enciendas el fuego. Usa aproximadamente 2 cucharadas por 6 tazas (1 ½ litros) de agua.[3]
    • Aunque la sal es opcional, ayuda a sazonar los espárragos y a que retengan sus nutrientes.
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    Coloca los espárragos en el agua cuando empiece a hervir. Cuando veas que se forman burbujas en la olla, coloca los espárragos limpios y recortados en el agua con las manos. Luego, sumerge los espárragos por completo en el agua con la ayuda de una espumadera o unas pinzas.[4]
    • Mientras lo haces, debes tener cuidado de no quemarte con la olla caliente o con el vapor.
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    Deja que se cocinen de 2 a 4 minutos. Los espárragos se habrán cocido por completo en 3 minutos aproximadamente. Mientras se cocinan, presta atención a su color.[5]
    • Los espárragos estarán listos cuando los tallos tengan un color verde vivo.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Sumergir los espárragos en agua con hielo

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    Prepara un baño de agua con hielo mientras los espárragos se cocinan. Después de colocarlos en el agua hirviendo, toma un tazón grande y llénalo con hielo. Luego, cubre el hielo con agua fría del fregadero. Coloca el tazón a un lado de la estufa para transferir los espárragos con facilidad.[6]
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    Transfiere de inmediato los espárragos al baño de agua con hielo después de que se cocinen. Cuando hayan pasado más o menos 3 minutos, toma los espárragos con las pinzas. Asegúrate de que tenga un color verde vivo antes de sacarlos del agua hirviendo. Inmediatamente después de sacar los espárragos del agua, colócalos en el tazón de agua con hielo. Déjalos en remojo de 1 a 3 minutos hasta que se hayan enfriado por completo.[7]
    • Si cocinas los espárragos en exceso, quedarán pastosos y se pondrán de un color verde oscuro.
    • El agua fría detendrá el proceso de cocción y suavizará los espárragos.
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    Coloca los espárragos sobre una toalla limpia después de 3 minutos. Cuando los espárragos se enfríen, sácalos del agua con hielo y colócalos sobre una toalla limpia de cocina o una toalla de papel. Sécalos con palmaditas para quitarles el exceso de agua.[8]

Parte 3
Parte 3 de 3:
Servir y guardar los espárragos

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    Come los espárragos blanqueados como bocadillo o como una guarnición saludable. Cuando los espárragos estén secos, puedes simplemente tomar un tenedor y comerlos. Espolvoréales un poco de sal y pimienta por encima si quieres darles un poco más de sabor.[9]
    • Por ejemplo, puedes servir los espárragos en una bandeja de vegetales para crear un aperitivo delicioso. Agrega zanahorias frescas, apio, brócoli y coliflor para llenar la bandeja. ¡No te olvides de la salsa para los vegetales!
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    Corta los espárragos si quieres agregarlos a una ensalada. Toma el cuchillo afilado y corta los espárragos en trozos del tamaño de un bocado. Luego, mezcla los trozos con espinaca o lechuga romana picada. Agrega otros ingredientes como arándanos secos y queso de cabra para crear un platillo saludable y delicioso.[10]
    • ¡Puedes agregarle espárragos a la ensalada que prefieras!
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    Cubre los espárragos con vinagre balsámico si quieres crear una deliciosa salsa. Para hacerlo, coloca los espárragos en una fuente para servir o en platos individuales. Bate 3 cucharadas de vinagre balsámico, 2 cucharadas de cebolla roja picada, 2 cucharadas de aceite de oliva, 1 diente de ajo picado y una pizca de pimienta negra. Luego, vierte la mezcla encima de los espárragos.[11]
    • De esta forma, crearás un delicioso aperitivo o guarnición.
    • Esta mezcla rinde para 4 porciones de espárragos.
    • Para servir los espárragos tibios, vierte la mezcla en una sartén mediana y caliéntala durante 2 o 3 minutos.
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    Sirve los espárragos con aceite de oliva y parmesano para decorarlos de una forma exquisita. Coloca los espárragos en un tazón e incorpora 2 cucharadas de aceite de oliva, 2 cucharadas de queso parmesano rallado y 1 cucharadita de ralladura de limón. Si quieres, puedes espolvorear también sal y pimienta al gusto. Mezcla bien todos los ingredientes y sírvelos en una fuente o en platos individuales.[12]
    • Si prefieres servir los espárragos tibios, puedes omitir el paso del baño de hielo y mezclar los ingredientes mientras los espárragos aún estén calientes.
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    Refrigera los espárragos blanqueados de 3 a 5 días. Para obtener mejores resultados, refrigera tus espárragos en un plazo de 2 horas después de haberlos blanqueado. Envuelve los espárragos firmemente con plástico adherente para alimentos y colócalos en un recipiente hermético, como un táper Tupperware. Coloca bien la tapa y mete el recipiente en el refrigerador.[13]
    • Come o congela los espárragos en los próximos 3 días aproximadamente.
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    Congela los espárragos si quieres guardarlos durante un período prolongado. Cubre una bandeja para hornear con papel vegetal y extiende los espárragos en toda la bandeja. Coloca la bandeja en el congelador durante 1 a 3 horas hasta que los espárragos se hayan congelado por completo. Luego, saca la bandeja del congelador. Coloca los espárragos congelados en una bolsa para congelar. Luego, sácale todo el aire posible. Coloca la bolsa en el congelador y guarda los espárragos de 8 a 12 meses.[14]
    • Cuando cubras la bandeja, deja un espacio entre los tallos.
    • Como alternativa, coloca los espárragos congelados en un recipiente apto para congelar, como un táper Tupperware.
    • Si quieres, puedes escribir con un marcador en la bolsa o el recipiente la fecha en que los congelaste.
    • Para cocinar con los espárragos congelados, saca los tallos según los necesites.

Cosas que necesitarás

  • espárragos
  • cuchillo
  • olla
  • agua
  • tazón
  • hielo
  • sal (opcional)
  • pinzas
  • bolsa para congelar o recipiente hermético (opcional)

Consejos

  • Para obtener mejores resultados, usa espárragos frescos. Si esperas más de 3 días para cocinarlos, es posible que pierdan su firmeza.

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Categorías: Consejos en la cocina