Todos odian las nauseas, ¿cierto? Esa sensación expectante de vomitar junto con el malestar estomacal es absolutamente fatal. En vez de sufrir esa tortura, encárgate del problema con tus propias manos y ayuda a disminuir las nauseas con remedios caseros. Con los métodos a continuación te sentirás fresco y sano en poco tiempo.

Método 1
Método 1 de 3:
Cambiar tus actividades

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    Descansa. Quédate en cama apenas empieces a sentir nauseas. Recuéstate, evita hacer ejercicios, movimientos bruscos y duerme un poco más para reducir y detener las nauseas, además de reducir las probabilidades de que vomites. Si es necesario, no vayas al trabajo o a la escuela para hacerlo.
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    Respira aire fresco. Si bien es fácil quedarse en una habitación cuando se tienen nauseas, el aire se pondrá pesado y te sentirás peor. Mantén las ventanas abiertas para dejar que entre una brisa de aire fresco y si te es posible, tómate unos cuantos minutos para ir afuera.
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    Evita los olores fuertes. Tomar un baño de burbujas podría parecer estupendo, pero agregar perfumes demasiado intensos hará que tu estómago se sienta peor. En general, evita todo (perfumes u otras fragancias) cuanto tenga un aroma muy fuerte. El sentido del gusto y del olfato están conectados, así que un olor fuerte hará que te sientas igual de mareado que un mal sabor. Mata dos pájaros de un tiro manteniendo la ventana abierta para dejar entrar el aire fresco y para mantener alejados los malos olores.
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    Aléjate un tiempo de tus aparatos electrónicos. El brillo, el ruido y el movimiento asociado con la televisión, la laptop, la tablet y el celular podría ser demasiado estimulante y empeorar el malestar estomacal. Más bien, recuéstate en cama con las luces bajas y lee un libro o relájate de alguna manera parecida. Tomarse una pausa de los aparatos electrónicos aliviará el malestar del estómago y prevendrá también un dolor de cabeza asociado.
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    Regula la temperatura. Nada es peor que sentirse con náuseras además tener demasiado calor o frío. Mantente en una temperatura cómoda para que el descanso sea fácil. Ponte o sácate capas de ropa y de mantas o toma una ducha o baño cortos. También te ayudará cambiar las temperaturas de los líquidos que vayas a tomar.
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    Prueba los medicamentos de venta libre. Si los remedios naturales no son lo tuyo, opta por los medicamentos de tu farmacia local. Busca aquellos especiales para las nauseas y antivomitivos en vez de tomar medicamentos genéricos. Asegúrate de revisar la dosis de ese medicamento y toma el número de pastillas que te indique.
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    No evites vomitar. Si el dolor de estómago no desaparece y el impulso de vomitar es cada vez mayor, no lo detengas. Tu cuerpo estará tratando de expulsar la causa de las náuseas, así que déjale. Vomitar ciertamente no es una actividad placentera, pero te ayudará muchísimo para aliviarte. De todos modos, quizá te sientas mejor después.[1]

Método 2
Método 2 de 3:
Alimentos que combaten las nauseas

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    Consume un poco de jengibre. Por años, el jengibre se ha usado para aliviar a los que padecen de nauseas por sus propiedades antieméticas. Ve a la alacena y toma un poco de jengibre fresco o confitado. Si puedes soportar el sabor del jengibre fresco, cómelo crudo, de lo contrario, trata de confitar o rallar un poco en una taza de agua para hacer una infusión.
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    Come algunas galletas. Si nada te funciona, las galletas sin sal suelen funcionar para detener las nauseas. Tienen un sabor suave y son fáciles de digerir, por eso es el alimento perfecto para los que tienen nauseas. Si puedes comer galletas, trata de comer pretzels, cuyo valor nutricional es un poco más alto.
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    Prueba la sandía. Si bien no es la primera opción cuando se tienen náuseas, la sandía en realidad es excelente para aliviarlas. Su alto contenido de agua y su sabor suave ayudan a aliviar el estómago e incorporan más líquidos en el organismo. Si también tienes fiebre, prueba comer la fruta fría para que tenga un efecto calmante y refrescante.
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    Come arroz solo. El arroz blanco sin ingredientes adicionales no es el platillo más sabroso, pero ayuda a combatir las nauseas. Los carbohidratos difíciles de digerir te darán un corto estímulo de energía, mientras el sabor simple no irritará más el estómago.
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    Come una banana. Es excelente comer una banana apenas madura (más bien verde, sin manchas) por varios motivos: gracias a su textura y su sabor suaves es fácil de digerir, además está llena de potasio, sustancia que ayuda al sistema inmunológico a sanar el cuerpo. Mata dos pájaros de un tiro haciendo un puré de banana mezclado con una taza de arroz blanco.
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    Toma un poco de yogur. Hoy en día, la mayoría de producto lácteos no se ve con buenos ojos durante los periodos de nauseas. Sin embargo, el yogur con cultivos activos brinda al estómago las bacterias buenas necesarias para expulsar las bacterias malas. Por lo tanto, deberás buscar un sabor de yogur simple que diga que tenga probióticos y tu estómago volverá a sentirse bien muy pronto.
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    Prueba las tostadas solas. Sin mantequilla, sin mermelada, nada. Las tostadas (no tan doradas) tienen casi las mismas características de las galletas. El pan es fácil de digerir y tiene un sabor muy suave, por eso tu estómago no lo combatirá. Prueba una sola rebanada de pan y observa cómo te sientes antes de comer otra.[2]
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    Evita los alimentos que sienten mal al estómago. Lo mejor será limitarse a comer los alimentos antes mencionados, pero si debes comer otras cosas, usa tu mejor criterio. No comas alimentos grasosos, fritos, picantes ni muy dulces, sino podrían empeorar tu malestar estomacal y será más probable que te hagan vomitar.

Método 3
Método 3 de 3:
Combatir las nauseas con diversos líquidos

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    Bebe mucha agua. El agua sirve para eliminar las toxinas del organismo y para mantenerlo hidratado para que pueda luchar contra aquello que lo aqueja. Si bien es importante beber agua regularmente, será más importante que lo hagas cuando tengas nauseas. Asegúrate de tener un vaso de agua en todo momento y de beberla al menos cada hora.
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    Prueba las bebidas deportivas. Si tienes nauseas y vomitas, quizá hayas perdido muchos líquidos y te cueste retener los frescos. Las bebidas deportivas tienen electrolitos agregados, los cuales son necesarios para que el organismo acelere el proceso de recuperación. Toma la de tu sabor favorito después de vomitar para ayudar a repoblar los electrolitos y los líquidos del cuerpo.
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    Bebe un poco de jugo de arándano. Si bien muchos jugos están llenos de azúcar y de sabores que pueden ser duros para un estómago delicado, el jugo de arándano brinda algunos nutrientes sin el golpe de azúcar. Bébelo cuando tengas nauseas, sobre todo cuando no hayas podido comer nada de comida.
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    Mezcla jugo de limón con miel. Esta combinación dulce y ácida alivia el estómago rápidamente, sin la necesidad de tomar muchos litros de líquidos. Mezcla 1 cucharadita de jugo de limón con 1 cucharadita de miel tibia. Lentamente, toma sorbos de este líquido durante el transcurso de varios minutos. Si las nauseas no bajan, podrás tomar esta mezcla varias veces al día.
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    Bebe té de canela. La canela se ha venido usando por décadas como remedio natural para las nauseas y el vómito. Mezcla ½ cucharadita de canela con 1 taza de agua caliente y déjala en infusión. Toma el té lentamente varias veces al día hasta que el malestar estomacal desparezca.
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    Prueba tomar té de clavo de olor. Los clavos de olor, que tienen un sabor reminiscente al otoño, también ayuda a aliviar el malestar estomacal. Para preparar una taza de té de clavo de olor, mezcla 1 taza de agua caliente con 1 cucharadita de clavo de olor en polvo. Deja la mezcla en infusión durante varios minutos antes de colar los clavos.
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    Hazte una taza de té de comino. Normalmente se le asocia con la cocina, pero el comino puede ayudar mucho como té antiemético. Para probar una taza, mezcla 1 taza de agua caliente con 1 cucharadita de semillas de comino. Déjalo en infusión durante 10 a 15 minutos antes de retirar las semillas y beber el té lentamente. Si lo deseas dulce, podrás agregar un poco de miel.
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    Toma un poco de té de menta piperita. La menta piperita empata con el jengibre como uno de los mejores remedios naturales para combatir las nauseas. Echa 1 cucharadita de hojas de menta piperita secas y machacadas o un poco de hojas frescas a 1 taza de agua caliente para hacer el té perfecto. Podrás tomarlo frío o caliente y cuantas veces quieras durante el día.
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    Prueba el ginger ale. Si comer jengibre no te es suficiente, toma una lata de ginger ale. Primero, revisa los ingredientes de esta bebida gasificada para que estés seguro de que está hecho con jengibre verdadero, no con sabores artificiales. El ginger ale aliviará tu estómago y evitará que vomites.[3]
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    Bebe un poco de jarabe de cola. Es un poco diferente a la gaseosa regular de cola, pero el jarabe de cola es un líquido espeso que sirve para tratar las nauseas. Como tiene el mismo sabor clásico de tu cola favorita, podría ser agradable para beber mientras tengas nauseas. Echa 1 o 2 cucharadas del jarabe sobre hielo picado y tomar sorbos del líquido lentamente durante varios minutos.
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    Bebe todos los líquidos lentamente. Sea cual sea tu elección para mantenerte hidratado, evita tomarla de golpe o tomar tragos grandes. Tu estómago ya está irritado, por eso tendrás que darle líquidos tomando sorbos pequeños lentamente.[4]

Consejos

  • No te cepilles los dientes inmediatamente después de comer, porque la pasta dental haría que tu estómago se sienta mal.
  • Enjuágate la boca con una mezcla de ¼ taza de vinagre con 1 taza de agua después de vomitar. Esta mezcla te sacará el mal sabor y el mal olor de la boca, además de los ácidos estomacales perjudiciales que podrían dañar la garganta y los dientes.

Advertencias

  • Si estás embarazada o si tienes alguna afección médica subyacente que podría haber desencadenado las nauseas, haz caso omiso de los pasos que te hemos mencionado y sigue más bien los consejos del profesional de la salud que esté a tu cargo.
  • Si las nauseas persisten y no encuentras la causa, consúltalo con un profesional de la salud.
  • Si las nauseas se presentan junto con mareos, dolores de cabeza, visión borrosa, etc., siéntate y pídele a alguien que llame al doctor. Si son los síntomas normales de alguna afección médica subyacente de la cual tienes conocimiento, deberás tomar los pasos que habitualmente tomas para tratarlas.

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Categorías: Náuseas y vómitos