Existen cosas peores que vomitar cuando ya te sientes mal. La gastroenteritis puede ser una enfermedad devastadora que mantienen a la gente en cama por varios días. Afortunadamente existen ciertas formas de reducir las probabilidades de que vomites cuando estás con gastroenteritis. Sigue leyendo y descubre cómo hacerlo.

Método 1
Método 1 de 3:
Comidas y bebidas para evitar los vómitos

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    Bebe poca agua. Vomitar puede ocasionar deshidratación, debido a esto, necesitarás reponer con agua el líquido que pierdes. Toma en cuenta que debes beber pequeños sorbos de agua, pues si bebes mucha agua y expandes tu estómago irritado, podrías volver a vomitar.[1]
    • Bebe pequeños sorbos de agua cada 15 minutos después de que hayas vomitado. Haz esto durante tres o cuatro horas para hidratarte.[2]
    • Si sientes náuseas moderadas, comienza a hidratarte bebiendo una cucharada de agua cada 10 minutos. Si no has vomitado en una hora, duplica la cantidad de agua que ingieres.
    • Sigue aumentando tu consumo de líquidos hasta que logres beber 240 ml (8 onzas líquidas) de agua por hora. Sigue bebiendo al menos esta cantidad de agua cada hora hasta que orines con normalidad cada 3 o 4 horas.
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    Chupa cubos de hielo o helados de hielo. Hacer esto te proporciona tres beneficios, pues podrás comenzar a rehidratarte lentamente, además los cubos de hielo te ayudarán a reducir las arqueadas. Y lo más importante es que los cubos de hielo o helados te ayudarán a eliminar el desagradable sabor que queda en tu boca después de haber vomitado.
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    Consume otros líquidos claros. Espera algunas horas después de haber vomitado para que comiences a consumir otros líquidos además de agua. Después de haber esperado unas cuantas horas deberás beber líquidos con electrolitos, que son minerales dentro del organismo que dan balance a los procesos metabólicos. Los vómitos generan un descenso de los electrolitos, por lo que tomar bebidas con electrolitos te ayudará a restaurar tu proceso metabólico.
    • Si vomitas nuevamente después de haber comenzado a rehidratarte, toma una pause para dejar descansar a tu estómago. Luego comienza a beber líquidos claros nuevamente.
    • Pedialyte es una excelente opción para reemplazar los electrolitos. También puedes encontrar equivalentes genéricos. No obstante, es mejor evitar las bebidas deportivas, ya que tienen un gran contenido de carbohidratos y no tienen muchos electrolitos reales.
    • Después de que hayas vomitado, espera algunas horas antes de beber cualquier líquido ligero. Cuando hayan pasado varias horas, bebe pequeños bocados de líquido cada 15 minutos durante tres o cuatro horas. Bebe líquidos ligeros como jugo de manzana o bebidas deportivas como Vitamin Water o Gatorade, té suave y caldos ligeros.
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    Bebe té de jengibre. Se ha probado que el tiempo y beber té de jengibre disminuyen la sensación de náuseas. El jengibre tiene un efecto calmante en el estómago, lo que disminuirá tus náuseas y la posibilidad de que vomites. Puedes comprar té de jengibre en cualquier tienda de comestibles.
    • Como alternativa, puedes masticar un pedazo pequeño de jengibre crudo y luego escupirlo.
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    Pasa a comer una dieta blanda. Una vez que mejores con el agua, los cubos de hielo y los líquidos claros, y sientas que tienes menos náuseas, puedes intentar comer algunos alimentos simples que son fáciles de digerir. Solo come si no has vomitado durante al menos cuatro horas. Las galletas dulces y saladas pueden ayudarte a dejar de vomitar. Algunos otros alimentos que puedes intentar consumir son: [3]
    • Bananas, arroz, puré de manzana, y tostadas solas. Puedes recordar estos alimentos con el acrónimo BAPT.

Método 2
Método 2 de 3:
Evita posibles desencadenantes

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    Evita olores, sabores e imágenes indeseables. Si el olor intenso de los ambientadores para coches te hace sentir náuseas incluso cuando no estás enfermo, entonces definitivamente deberás evitarlo cuando estés enfermo. Las cosas que veas, huelas y pruebes también son un estímulo para que vomites, así que es realmente importante que sepas qué te hace sentir náuseas.[4]
    • Por ejemplo, algunas personas sienten náuseas cuando ven sangre, incluso cuando simplemente es en una película. Otras personas sienten náuseas cuando comen queso azul, o comienzan a tener arqueadas con el olor de la basura. Sea cual fuere tu detonante, mantente lejos de este.
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    Mantente alejado de las bebidas carbonadas, ácidas o con cafeína. Estos tres tipos de bebidas pueden estimular las náuseas y pueden irritar el revestimiento de tu tracto gastrointestinal. Deberás evitar estos líquidos durante por los menos unos días después de que hayas estado vomitando.
    • Las bebidas carbonadas incluyen a los refrescos gaseosos y la cerveza.
    • Las bebidas ácidas incluyen al jugo de naranja, jugo de uva, y otras bebidas hechas de cítricos.
    • Las bebidas con cafeína incluyen al café, el té negro y las bebidas energéticas.
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    Evita la comida picante y grasosa. Este tipo de comida es conocida clínicamente porque provoca vómitos. Espera por lo menos 48 horas después de haber vomitado para poder consumir cualquier tipo de comida grasosa o levemente picante.[5]
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    Evita viajar en coche. Si te sientes mareado con los movimientos, entonces no deberás ir en coche. Cuando estás con gastroenteritis, de por sí tienes la predisposición a vomitar, y abordar un vehículo solo incrementará las posibilidades de que lo hagas. Esto se debe a los cambios rápidos de dirección (como cuando estás sentado en el auto y el conductor gira en U) que estimulan a los receptores del laberinto vestibular en el oído interno. Desde el oído interno, los impulsos se transmiten a través del tronco encefálico en el cerebelo, donde se provocan las náuseas, haciendo que te sientas mal.
    • Si no puedes evitar subirte a un coche, pide al conductor que cuando tenga que dar alguna vuelta lo haga despacio y que maneje con cuidado de modo que no haga movimientos bruscos. Esto disminuirá las probabilidades de que sientas náuseas.
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    No fumes. Probablemente ya sepas que fumar es malo para la salud. Sin embargo, es aún peor si estás intentando dejar de vomitar. Cuando fumas un cigarro inhalas nicotina, elementos que hace que el esfínter esofágico inferior (la apertura inferior de tu esófago) se relaje, lo que incrementa las posibilidades de que los ácidos estomacales irriten el esófago, haciendo que vomites.
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    Evita los fármacos antiinflamatorios no esteroides. Los fármacos antiinflamatorios son irritantes gástricos. Estos medicamentos inhiben la producción de prostaglandina en el cuerpo, estos son químicos naturales que protegen la cobertura del estómago, y utilizar medicamentos antiinflamatorios inhibe el efecto protector, generando irritaciones y vómitos.
    • Entre estos fármacos se encuentran las aspirinas, el ibuprofeno y el naproxeno.

Método 3
Método 3 de 3:
Utiliza técnicas de relajación y distracción

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    Ten pensamientos positivos. Las náuseas comienzan en el cerebro, por lo que la percepción que tenga tu mente de las náuseas hará que las puedas sentir. Debido a esto, debes desviar tu atención de las ganas de vomitar imaginando lugares pintorescos u otras imágenes que te relajen. Cuando comiences a sentir náuseas, imagina algo que te distraiga o calme. Escuchar música que te haga sentir calmado y feliz también te ayudara a mejorar tus pensamientos positivos.[6]
    • Por ejemplo, cuando comiences a sentir náuseas, imagina una mañana de navidad. Imagina a toda tu familia a tu alrededor, tu árbol de navidad, el fuego en la chimenea, etc.
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    Mira una película o lee un buen libro. Al igual que tener pensamientos positivos, involucrarte en una actividad que tendrá toda tu atención te ayudará a olvidar las náuseas. Cuando tu mente está ocupada, es menos probable que sientas náuseas, así que no vomitarás.
    • Mira películas que no te recuerden que estás enfermo. Por ejemplo, si te sientes mareado cuando ves sangre, no pongas películas de terror o alguna película de vampiros. Mira comedias, dramas, romances, etc.
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    Toma aire fresco. Incluso si te sientes muy débil para salir, puedes simplemente abrir la ventana y dejar que entre aire fresco en tu habitación. El aire fresco puede ayudar a que las náuseas se disipen. Si puedes, siéntate en una silla afuera. Deja que la brisa te calme y contempla tu alrededor. Enfocarte en algo lindo mientras respiras aire fresco te ayudará a no vomitar.
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    Mantente en una posición vertical. Cuando estés en la cama, mantén la cabeza elevada a unos 45 a 90 grados con ayuda de unas almohadas. Al mismo tiempo, eleva tus pies a un ángulo más alto que el de tu cuerpo también con almohadas. Esta posición puede utilizar el poder de la gravedad y evitar que vomites. Mantener tus pies más elevados que la parte central de tu cuerpo también ayudará a incrementar la circulación sanguínea.

Consejos

  • Descansa. La forma más rápida de recuperarte de cualquier enfermedad es descansando bien y dejando que tu cuerpo sane.
  • Inhala profundamente a través de la nariz y exhala a través de la boca.

Advertencias

  • Visita al doctor si los vómitos persisten por más de dos días en el caso de adultos y por más de un día en el caso de niños.
  • Si tienes vómitos explosivos, visita a tu doctor inmediatamente, ya que esto puede indicar que hay un problema más grave.

Referencias

  1. Fauci, Et al. (2012). Harrison’s Principles of Internal Medicine Eighteenth Edition. New York: McGraw-Hill Medical Publishing Division.
  2. http://www.uhs.umich.edu/diarrheavomiting
  3. Katzung, Bertram G. (2007). Basic & Clinical Pharmacology Tenth Edition. McGraw-Hill Medical Publishing Division.
  4. http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/ency/patientinstructions/000122.htm
  5. http://www.nytimes.com/1983/09/21/garden/eating-spicy-food-what-are-the-effect.html
  6. http://www.webmd.com/first-aid/vomiting-and-nausea-treatment

Acerca de este wikiHow

Luba Lee, FNP-BC, MS
Coescrito por:
Junta de revisión médica
Este artículo fue coescrito por Luba Lee, FNP-BC, MS. Luba Lee es una enfermera profesional certificada en Tennessee. Recibió su maestría en Ciencias de Enfermería en la Universidad de Tennesee en 2006. Este artículo ha sido visto 26 314 veces.
Categorías: Náuseas y vómitos