Si padeces diabetes gestacional o tienes riesgo de desarrollarla, tu médico controlará tu nivel de azúcar en sangre. Para determinar qué tan efectivamente el cuerpo procesa el azúcar, evaluará tu nivel de azúcar en sangre antes de que comas. Si se encuentra por encima de los 95 miligramos por decilitro (mg/dL), es posible que tengas que hacer cambios en tu dieta y hábitos diarios. Por más que parezca abrumador, existen muchas cosas que puedes hacer y medicamentos que puedes tomar para controlar tu nivel de azúcar en sangre.

Método 1
Método 1 de 2:
Modificar tu dieta

  1. 1
    Desayuna tan pronto como te despiertes. Si sueles omitir el desayuno o te preocupa que comer dispare tu nivel de azúcar en sangre, comienza a comer cuando te despiertes. Un desayuno rico en proteína puede reducir el nivel de azúcar en sangre y darle a tu cuerpo alimentos nutritivos para digerir. Escoge opciones saludables como las siguientes:[1]
    • requesón
    • queso bajo en grasa
    • huevos duros
    • pan plano integral con mantequilla de maní
  2. 2
    Come varias comidas pequeñas durante todo el día. Esto ayuda a que el cuerpo regule mejor la liberación de la insulina para que el nivel de azúcar en sangre no se dispare después de una comida grande. Procura comer cuatro o cinco comidas pequeñas con proteína. De esta forma, el cuerpo liberará insulina de manera consistente, en vez de pasar mucho tiempo antes de procesar mucha comida.[2]
    • Si tienes náuseas o indigestión, probablemente las comidas pequeñas te resulten más fáciles de digerir.
    • Por ejemplo, puedes comer una manzana con algunas cucharadas de mantequilla de nuez y palomitas de maíz como refrigerio por la tarde. Luego, para una cena pequeña, puedes comer pechuga de pollo con una pequeña papa horneada, brócoli al vapor y leche.
  3. 3
    Come un refrigerio rico en proteína antes de acostarte. El cuerpo puede procesarlo mientras duermes, lo que previene un aumento de insulina en medio de la noche. Evita los refrigerios ricos en carbohidratos, dado que el cuerpo liberará mucha más insulina. Esto puede contribuir a un aumento en el nivel de azúcar en sangre en ayunas por la mañana.[3]
    • Como refrigerio rico en proteína, come algunos pasteles de avena y queso, un puñado de nueces o pan crujiente y mantequilla de maní.
  4. 4
    Mantente hidratada durante el día. El cuerpo no procesa el azúcar efectivamente si está deshidratado. Si bien no existe una cantidad de agua específica que cada persona deba beber, intenta beber tres o cuatro tazas (700 a 950 ml) adicionales que lo que bebas normalmente. Ten una botella de agua contigo durante todo el día y coloca un vaso de agua al lado de la cama para beber si te despiertas en medio de la noche.[4]
    • Si bien puedes beber té y café sin cafeína, estas bebidas pueden hacer que tengas que correr al baño más que el agua.
  5. 5
    Evita los refrescos y jugos azucarados. Quizás te canses de beber agua todo el día, por lo que está bien beber un poco de jugo de manera ocasional. Sin embargo, dado que tienes que controlar tu nivel de azúcar en sangre en ayunas, es importante que evites el jugo y los refrescos tanto como puedas.[5]

    Consejo: para que beber agua sea más interesante, puedes agregar un chorrito de limón o lima en un vaso de agua o beber agua carbonatada sin azúcar.

  6. 6
    Bebe un sorbo de vinagre de manzana con queso antes de acostarte. Si bien aún se necesita realizar más investigaciones, combinar vinagre con un refrigerio rico en proteínas podría reducir el nivel de azúcar en sangre en ayunas. Para ver si te funciona, bebe dos cucharadas de vinagre de manzana y come 30 gramos (1 onza) de queso antes de dormir.[6]
    • Un pequeño estudio ha descubierto que la combinación reduce el nivel de azúcar en sangre en ayunas en un 4 a 6 %.
  7. 7
    Come carbohidratos con cada comida si te tratas con insulina y tienes diabetes gestacional. Procura comer al menos 45 gramos de carbohidratos por comida para controlar el nivel de azúcar en sangre y que el bebé crezca bien. Habla con tu endocrinólogo u obstetra y ginecólogo para hablar de tus opciones alimenticias para que tú y el bebé estén lo más saludable posible.
    • Si no te tratas con insulina, sigue con tus otros cambios alimenticios.
    Anuncio

Método 2
Método 2 de 2:
Realizar cambios en tu estilo de vida

  1. 1
    Haz ejercicios de intensidad moderada cinco veces por semana. El ejercicio puede utilizar el exceso de glucosa en la sangre, lo que mantiene bajo el nivel de azúcar en sangre en ayunas. Procura realizar 30 minutos de actividad moderada cinco veces por semana. Puedes caminar enérgicamente, nadar, hacer estiramientos o jugar de forma activa con los niños.[7]
    • Es posible que tengas que ajustar los ejercicios y las actividades a medida que el embarazo progresa. Por ejemplo, puedes hacer un programa aeróbico y senderismo en el primer trimestre antes de hacer estiramientos suaves y caminar para el tercer trimestre.

    Consejo: recuerda consultar con tu médico antes de probar con una rutina de ejercicio. Quizás quiera modificar el nivel de actividad física.

  2. 2
    Da una caminata de 10 minutos después de cenar. Levántate y camina después de la última comida del día para que tu cuerpo la procese. Algunos estudios muestran que una breve caminata después de comer puede reducir el nivel de azúcar en sangre, y caminar después de cenar puede mantener bajo el nivel de azúcar en sangre en ayunas al despertarte por la mañana.
    • Si notas que caminar después de cenar te ayuda a mantener bajo el nivel de azúcar en sangre en ayunas, procura dar una caminata breve después de cada comida.
  3. 3
    Duerme mejor. Muchas mujeres experimentan problemas para dormir a medida que el embarazo progresa. Desafortunadamente, menos de seis horas de sueño de calidad por noche pueden disparar los niveles de azúcar en sangre. Prueba estos consejos para dormir mejor:[8]
    • Agrega cojines y almohadas para sentirte más cómoda.
    • Despéjate o relájate antes de dormir.
    • Limita la exposición a las luces brillantes y las pantallas antes de acostarte.
  4. 4
    Trabaja de cerca con tu médico para controlar tu nivel de azúcar en sangre. Ya sea que tengas diabetes gestacional o a tu médico le preocupe tu nivel elevado de azúcar en sangre, es importante que lo visites al menos una vez al mes. El profesional quizás recomiende visitas más frecuentes cerca del final del embarazo, o si tienes diabetes gestacional.[9]
    • Sigue las indicaciones de tu médico con respecto al control del nivel de azúcar en sangre en casa. Es posible que tengas que hacerte una prueba todos los días para evaluar tus niveles.
  5. 5
    Toma metformina o insulina para mantener bajo el nivel de azúcar en sangre. Si has realizado cambios en tu dieta y estilo de vida, pero tus niveles siguen elevados, tu médico podría recetarte medicamentos para controlarlos. Es posible que tengas que tomar insulina por la mañana para evitar el aumento natural que ocurre al despertarse.[10]
    • Algunas mujeres experimentan niveles de azúcar en sangre más elevados por la mañana debido a rebotes después de descensos en medio de la noche o una sensibilidad reducida a la insulina. Si experimentas esto, habla con tu endocrinólogo para determinar la causa. Es posible que tengas que recibir pequeñas dosis por la noche para combatirlo.

    Consejo: quizás te sientas frustrada o decepcionada por tomar medicamentos, pero recuerda que tienes una afección médica que tratas para tener un bebé saludable.

    Anuncio

Consejos

  • Pregúntale a tu médico acerca de la posibilidad de tomar un suplemento de mio-inositol diariamente, dado que puede reducir el nivel de azúcar en sangre en ayunas. Dado que se necesitan más investigaciones para determinar si es seguro usar durante el embarazo, es importante que hables con tu médico acerca de los últimos estudios.[11]
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Erik Kramer, DO, MPH
Coescrito por:
Doctor en medicina osteopática
Este artículo fue coescrito por Erik Kramer, DO, MPH. El Dr. Erik Kramer es médico de atención primaria en la Universidad de Colorado, especializado en medicina interna, diabetes y control de peso. Recibió su doctorado en Medicina Osteopática en el Touro University Nevada College of Osteopathic Medicine en 2012. El Dr. Kramer es miembro diplomado de la Junta Estadounidense de Medicina de la Obesidad y está certificado por el colegio oficial.
Categorías: Embarazo
Anuncio