Puede ser difícil decidir si interrumpirás un embarazo o no, ya sea deseado, indeseado o inesperado. Decidir abortar es una decisión muy personal y solo tú puedes tomar esa decisión por ti. Puedes hablar con tu doctor, amigos cercanos o familiares sobre lo que debes hacer, pero no debes sentirte obligada a ninguna opción. Debes informarte de las leyes y procedimientos sobre el aborto averiguando por tu propia cuenta y reflexionando sobre tu propio estilo de vida y valores, y llegar a la decisión adecuada para ti.[1]

Parte 1
Parte 1 de 3:
Averiguar por tu propia cuenta

  1. 1
    Ve al doctor. Si sospechas que estás embarazada o lo has confirmado con una prueba de embarazo, saca una cita con un doctor, obstetra o ginecólogo. Él puede aconsejarte sobre tus opciones: aborto, adopción o criar al bebé.
    • El doctor no debe obligarte a ninguna opción. Solo debe brindarte información sobre las opciones disponibles para ti.
    • Si estás considerando un aborto, tal vez quieras preparar una lista de preguntas para formulárselas al doctor. Quizás te sientas avergonzada o tímida por hablar con alguien sobre un aborto, pero el doctor está ahí para ayudarte. Si te sientes obligada por el doctor a no abortar (por una razón que no guarda una relación directa con tu salud), considera buscar otro doctor.[2]
  2. 2
    Conoce tu derecho a la privacidad. Si eres adulta, no es necesario que le cuentes a nadie de tu decisión de abortar. Sin embargo, tal vez quieras decirle a un amigo de confianza o a un familiar que te apoyen durante el procedimiento.[3]
    • Si eres menor de 18 años y quieres abortar, quizás necesites el permiso de tus padres o, si no quieres informárselo a tus padres, el permiso de un juez, antes de someterte al procedimiento. Esta política varía en cada ciudad y muchas ciudades cuentan con leyes de notificación paterna. Infórmate de las políticas de tu ciudad con respecto al consentimiento paterno.[4]
  3. 3
    Aclara la información acerca de las complicaciones abortivas. Como el aborto es un procedimiento controversial, hay mucha desinformación sobre el aborto y sus efectos. Averigua por tu propia cuenta. Habla con tu doctor. Busca información de publicaciones gubernamentales o nuevas fuentes de confianza.
    • Ten cuidado cuando averigües en línea. Ten cuidado con cualquier página web que parezca manifestarse abiertamente a favor de la libertad de elegir o a favor de la vida.
    • Debes saber que el aborto es seguro. Solo 1 % de los abortos presentan complicaciones.[5]
    • Debes saber que los abortos no ocasionan cáncer de mama. Además, un aborto sin complicaciones no causa infertilidad ni problemas en futuros embarazos.[6]
    • El aborto no causa un síndrome posterior al aborto u otros problemas de salud mental. Sin embargo, es un acontecimiento estresante y a algunas mujeres les parece que pasan momentos más difíciles después del aborto, por ejemplo, debido a problemas de salud mental preexistentes o una falta de una red de apoyo.[7]
  4. 4
    Determina si eres elegible para un aborto médico. Los abortos médicos, o no quirúrgicos, se pueden realizar hasta diez semanas (70 días) desde el primer día de la última menstruación de una mujer. Un profesional de la salud te realizará un examen físico que normalmente incluye un ultrasonido y después te recetará mifepristona (o a veces metotrexato) y misoprostol.[8]
    • Si puedes y estás dispuesta a someterte a un aborto médico, primero tomarás la mifepristona, que bloquea la producción de progesterona de tu cuerpo, una hormona necesaria para el embarazo.
    • Después de 24 a 48 horas, tomarás el misoprostol, que hace que el útero se vacíe. Tendrás cólicos y un sangrado abundante, por lo general de 4 a 5 horas después de tomar el medicamento.
    • Una vez que esto haya terminado, tendrás que ver al doctor para asegurarte de que tu cuerpo haya expulsado todo el tejido. Un seguimiento es completamente necesario para asegurarte de haber interrumpido el embarazo. Si no lo has hecho por completo, podrían surgir graves complicaciones e infecciones.[9]
    • Las ventajas de un aborto médico es que se puede realizar en casa y en las primeras semanas del embarazo, en cuanto sepas que estás embarazada. Sin embargo, también conlleva riesgos si no se concluye el aborto por completo. Si es así, entonces es probable que necesites un aborto quirúrgico.[10]
  5. 5
    Averigua sobre el aborto quirúrgico. Este tipo de aborto, también conocido como aborto por succión, se puede realizar si tienes de 14 a 16 semanas de embarazo (esto puede variar dependiendo del profesional de la salud). El procedimiento implica dilatar el cuello uterino e insertar un tubo de succión pequeño en el útero para sacar el tejido del embarazo.[11]
    • La succión real, o el procedimiento de aborto, solo toma unos minutos. La mayor parte del tiempo que pases en la clínica o en el consultorio del doctor estarás esperando a que el analgésico o medicamento para relajar el cuerpo empiece a actuar, además de dilatar tu cuello uterino con el fin de crear una abertura lo suficientemente grande para que el tubo de succión encaje por ahí. Tu cuello uterino se puede dilatar con barras metálicas de mayor grosor, medicamentos o dilatadores que expandan la absorción de fluidos.[12]
    • Pasarás al menos una hora en recuperación para asegurarte de que no haya complicaciones inmediatas debido al procedimiento. Es posible que te pidan programar una cita de seguimiento adicional.
    • Si tienes más de 16 semanas de embarazo, te someterás a un procedimiento conocido como dilatación y evacuación (D&E). Es similar al aborto por succión, aunque requiere más tiempo y equipos. Es probable que tengas una recuperación más lenta que con el aborto por succión.[13]
    Anuncio

Parte 2
Parte 2 de 3:
Considerar tus valores y emociones

  1. 1
    Examina tu situación actual. Cuando consideres qué hacer con tu embarazo, piensa por lo que actualmente estás pasando en tu vida y considera cómo un embarazo o un bebé podrían influir en esa situación. Es posible que quieras pasar un poco de tiempo pensando en algunos problemas por tu propia cuenta.
    • Considera tu situación financiera. ¿Puedes costear los gastos de tener un bebé y criarlo?
    • Piensa en tus creencias personales sobre el aborto. Si no te sientes cómoda con el aborto, ¿considerarías dar al bebé en adopción?
    • Piensa en tu salud. ¿El embarazo sería dañino para tu cuerpo o estado mental? ¿Podrías lidiar con el impacto emocional y físico del aborto?
    • Piensa en tu red de apoyo. ¿Quién te ayudaría a criar a tu hijo? ¿El padre del bebé participaría en su crianza? Si abortaras, ¿quién estaría a tu lado para apoyarte?[14]
  2. 2
    Conversa sobre tus sentimientos con los demás. Habla con tu pareja, seres queridos o amigos que sepas que no te juzgarán o influirán en tu decisión. Muchas mujeres se sienten solas cuando lidian con un embarazo indeseado. Hablar con personas de confianza de tu red de apoyo podría ayudarte a sentirte menos aislada.[15]
    • Si el padre del bebé está presente y participa en tu vida, a lo mejor quieras hablar con él sobre lo que le gustaría hacer. Recuerda que no necesitas su permiso para abortar. Sin embargo, si sientes que podría obligarte de una u otra manera, tal vez quieras evitar decírselo.
    • No dejes que nadie influya en tu decisión. Si tu amigo te dice algo como “Si abortas, ya no podré ser tu amigo, porque creo que el aborto está mal”, podrías decirle “Siento que pienses eso, pero por favor no me presiones. Necesito hacer lo que es mejor para mí”.
    • Habla con alguien que haya abortado. Si conoces a alguien que ha abortado, pregúntale cómo fue su experiencia y si la recuerda como una vivencia positiva o negativa. Podrías preguntarle “¿Te sientes cómoda al hablar de tu aborto? ¿Podría formularte algunas preguntas al respecto? Estoy embarazada y no estoy segura de qué hacer”.
  3. 3
    Habla con un consejero. Tu doctor, clínica de planificación familiar o agencia de salud comunitaria podrían saber de servicios de asesoramiento que pueden ayudarte a decidir qué hacer. Asegúrate de que los recursos que te brinden sean servicios de asesoramiento imparcial y sin prejuicios que no intenten obligarle a la mujer a elegir una u otra opción.
    • Averigua de cualquier nombre o agencia que recibas para asegurarte de que sean imparciales. Busca cualquier afiliación que te parezca cuestionable (política o religiosa).
    • Debes saber que cualquier agencia o consejero de buena reputación te ayudará a explorar todas tus opciones sin juzgarte ni obligarte a nada. Si te sientes obligada a tomar una decisión en particular, encuentra a otra persona con la cual hablar.[16]
    Anuncio

Parte 3
Parte 3 de 3:
Llegar a una decisión

  1. 1
    Toma una decisión oportuna. Si estás considerando el aborto, debes tomar una decisión lo más rápido posible. Aunque quieres estar segura de tu decisión, también debes saber que es probable que mientras más pronto decidas interrumpir el embarazo, más fácil será el procedimiento. También tendrás más opciones disponibles.
    • En EE. UU., en la mayoría de los estados, no puedes hacerte un aborto después de las 24 semanas de embarazo, a menos que el embarazo suponga un riesgo para la salud de la madre.[17]
  2. 2
    Haz una lista. Si todavía no estás segura de qué hacer, a lo mejor quieras escribir una lista de los pros y contras de interrumpir tu embarazo. Ver tus pensamientos y sentimientos en el papel podría ayudarte a llegar a una decisión con más facilidad.
    • Anota los aspectos positivos y negativos, por más grandes o pequeños que parezcan. Compara las listas. Por ejemplo, es posible que quieras sopesar las tres opciones (crianza, aborto o adopción) o solo dos si sabes que no estás lista para ser una madre.
  3. 3
    Sigue los próximos pasos. Una vez que hayas tomado tu decisión, sigue rápido los próximos pasos. Si decides seguir con el embarazo, todavía querrás continuar con los cuidados prenatales lo más pronto posible. Si decides abortar, también debes programarlo lo más pronto posible.
    • Recuerda que probablemente tengas que ir a una clínica y también debes tener en cuenta los periodos de espera obligatorios de algunas ciudades. Considera las necesidades financieras que puedas tener con el fin de pagar el aborto.
    • Si planeas seguir con el embarazo, debes asegurarte de no fumar, no tomar bebidas alcohólicas ni consumir drogas, además de comer bien y tomar vitaminas prenatales que incluyan ácido fólico, un nutriente necesario para el desarrollo del feto.[18]
  4. 4
    Determina tus próximas necesidades de métodos anticonceptivos. Considera hablar de tus próximas necesidades de métodos anticonceptivos con un profesional de la salud o en la clínica de planificación familiar en tu siguiente cita. Averigua en línea de las opciones y habla con tu doctor sobre las opciones que funcionarían mejor para ti.
    • Si decides abortar, quizás se te pueda insertar un dispositivo intrauterino (DIU) durante el procedimiento del aborto. Consulta con tu doctor acerca de esta opción. Si bien previene el embarazo, no te protege contra infecciones de transmisión sexual.[19]
    • Si tienes una pareja sexual estable, conversa con él sobre qué protección les gustaría usar a ambos más adelante.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Carrie Noriega, MD
Coescrito por:
Obstetra y ginecóloga certificada por el colegio oficial
Este artículo fue coescrito por Carrie Noriega, MD. La Dra. Noriega es una obstetra y ginecóloga certificada por el colegio oficial, y escritora médica en Colorado. Se especializa en salud de la mujer, reumatología, neumología, enfermedades infecciosas y gastroenterología. Recibió su doctorado en la Creighton School of Medicine en Omaha, Nebraska, y completó su residencia en la Universidad de Missouri - Kansas City en 2005. Este artículo ha sido visto 34 206 veces.
Categorías: Salud de la mujer
Anuncio