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El aceite de menta tiene varios usos. Por ejemplo, puedes utilizarlo para darle sabor a las bebidas o los alimentos como el chocolate o el glaseado, o como una sustancia natural con aplicaciones diversas que van desde ahuyentar a las hormigas hasta descongestionar el pecho. Puedes crear tu propio extracto de aceite de menta en unas pocas semanas, además es económico y fácil de preparar.
Pasos
Parte 1
Parte 1 de 2:Extrae el aceite de la menta
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1Elige un líquido para extraer el aceite. El vodka o cualquier otro licor de granos con un grado alto de alcohol pueden funcionar perfectamente, ya que contienen agua y alcohol para disolver los aceites. También puedes usar vinagre de sidra de manzana o glicerina, aunque el resultado final será menos potente y tendrá una vida útil más corta.[1] Las disoluciones caseras, como el extracto de vainilla que se encuentra disponible en las tiendas, generalmente se usan en dosis tan pequeñas que el alcohol no provoca un efecto significativo.
- Si vas a usar hojas secas de menta, utiliza un vodka que contenga entre 45 y 60 grados de alcohol.
- Para las hojas frescas de menta, usa un vodka o un licor fuerte (como el Everclear) que tenga entre 90 y 95 grados de alcohol.
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2Pica o machaca las hojas de menta. Pica un manojo de hojas frescas de menta en dos o tres trozos, o machácalas con la base de una taza limpia para que los aceites queden más expuestos al líquido.[2] Si vas a usar hojas secas de menta, puedes desmenuzarlas con tu mano o dejarlas enteras.
- Lava las hojas frescas de menta antes de picarlas.
- No es necesario que quites los tallos, pero debes deshacerte de las hojas oscuras o manchadas, ya que pueden estar podridas.
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3Pon la menta y el líquido en un frasco con cierre hermético. Rellena el frasco con la menta. Si quieres un extracto fuerte, deja un espacio de 1,25 centímetros (media pulgada) en el frasco. Por otro lado, si deseas una disolución menos aromática y sabrosa, puedes usar menos hojas de menta. Cuando pongas la menta en el frasco, vierte el alcohol o el líquido que elijas, de tal manera que cubra completamente las hojas. Después cierra el frasco herméticamente.
- Es posible que las hojas floten al principio. Puedes tratar de sumergirlas con una cuchara, aunque deberían hacerlo por sí solas después de algunos días.
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4Deja reposar el frasco durante algunas semanas y sacúdelo ocasionalmente. El tiempo exacto que debes esperar depende de qué tan fuerte quieres que sea el extracto, aunque el proceso generalmente tarda entre 4 y 8 semanas.[3] La mayoría de las personas prefieren guardar el frasco en un lugar oscuro, ya que la luz solar puede disminuir la vida útil del extracto. Sacude el frasco durante un par de minutos una o dos veces a la semana para que las hojas de menta se disuelvan más rápido.
- Puedes probar una gota del extracto para decidir si es lo suficientemente intenso para ti.
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5Cuela el líquido en un recipiente de vidrio de color marrón. Vierte el líquido a través de un filtro de café para retirar las hojas y los sedimentos. Después guarda la disolución en un recipiente de vidrio de color marrón para protegerla de la luz solar e incrementar su vida útil. De esta manera el extracto durará 6 meses o más, aunque posiblemente pierda su intensidad de forma gradual.
- Si la disolución huele a vodka o no es tan intensa como quieres, deja el frasco afuera durante otra semana y cubre la boca con un filtro de café nuevo o un paño. De esa manera una parte del alcohol se evaporará.[4]
Parte 2
Parte 2 de 2:Usa el extracto de menta
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1Añade un par de gotas a las bebidas calientes. Revuelve entre una y tres gotas del extracto en chocolate, agua caliente o un té de hierbas. Si la disolución es muy débil, puedes añadir más gotas. La cantidad de alcohol que contiene el extracto es insignificante, por lo que no tienes que preocuparte de resultar embriagado(a).[5]
- Tomar menta puede ser útil para tratar algunas formas de indigestión, aunque no debes hacerlo si sufres de reflujo ácido (acidez) o una hernia.[6]
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2Dale sabor a los alimentos que hornees. 2,5 ml (media cucharadita) de extracto de menta es suficiente para darle sabor a una hornada de brownies, dulce de azúcar o merengues. Quizás tengas que experimentar con la cantidad, ya que los extractos caseros varían en intensidad. En los casos de algunas recetas (como la del glaseado) es fácil mezclar un poco de extracto por vez y comprobar el sabor.
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3Repele a los insectos. El extracto de menta puede repeler a las hormigas, moscas y polillas, aunque no es efectivo para ahuyentar a los ratones o las ratas.[7] [8] Humedece algunas bolas de algodón con el extracto y ponlas en los lugares donde encuentres a los insectos. Reemplaza las bolas de algodón una o dos veces a la semana.
- Mantén las bolas de algodón fuera del alcance de las mascotas.
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4Usa la menta para aumentar la memoria y la concentración. Algunos estudios demuestran que el aceite de menta puede mejorar la concentración.[9] Moja un paño con el extracto y olfatéalo antes de estudiar, tomar un examen o en cualquier momento en el que sientas estrés o cansancio.
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5Diluye el extracto de menta en un aceite y aplícatelo en la piel. Prepara un ungüento con algunas gotas del extracto mezcladas con aceite de almendras dulces, aceite de oliva, manteca de karité o cualquier otro aceite que sea seguro para la piel. Puedes usar el ungüento para aliviar la congestión del pecho o el dolor de los músculos, articulaciones o erupciones provocadas por la hiedra venenosa. También puedes frotar la mezcla en tu frente y sienes para aliviar un dolor de cabeza tensional.[10]
Consejos
- Para conseguir la mayor cantidad de aceite en las plantas, coséchalas luego de las 10 a. m. (después de que el rocío desaparezca), pero antes de que los rayos solares sean demasiado fuertes.
- Si el extracto contiene sedimentos, cuélalo de nuevo con un filtro de café.
- Con estos pasos puedes preparar un extracto, el cual no es tan fuerte como un aceite esencial. Los aceites esenciales generalmente se preparan por medio de un proceso extenso de destilación por vapor que está fuera del alcance de los hogares comunes.
Advertencias
- El extracto puede permanecer fresco hasta por un año, aunque es recomendable que lo uses en los 6 meses siguientes a su preparación.
- Usa el extracto en cantidades pequeñas únicamente.
- Nunca uses un alcohol que no sea seguro de consumir. Ten en cuenta que incluso si no planeas usar el extracto en las comidas o bebidas, el alcohol isopropílico dejará un olor fuerte y desagradable.[11]
- Nunca frotes la menta en el rostro de un niño, ya que puedes afectar su respiración.[12]
Cosas que necesitarás
- Hojas secas de menta y un licor hecho de granos que tenga entre 45 y 60 grados de alcohol
- Opcionalmente, hojas frescas de menta y un licor hecho de granos que tenga entre 90 y 95 grados de alcohol
- Frasco con cierre hermético
- Colador
- Recipiente de vidrio de color marrón
- Cuentagotas (para usar el extracto)
Referencias
- ↑ http://www.herbcraft.org/preparations.html
- ↑ http://www.mommypotamus.com/mint-extract-recipe/
- ↑ http://www.theprairiehomestead.com/2013/10/diy-mint-extract-recipe.html
- ↑ http://www.lazybudgetchef.com/2012/09/how-to-make-peppermint-essential-oil.html
- ↑ http://www.herb-pharm.com/faqs.html# much
- ↑ http://umm.edu/health/medical/altmed/herb/peppermint
- ↑ http://projects.nri.org/adappt/docs/63-84.pdf
- ↑ http://cityroom.blogs.nytimes.com/2007/11/29/answers-from-the-urban-rodentologist-part-2/
- ↑ http://www.naturalnews.com/034368_aromatherapy_peppermint_memory.html