Cómo ganar dinero cuando tienes ansiedad social

Coescrito por Trudi Griffin, LPC, MS

Ganar dinero puede ser un reto extremadamente difícil para las personas que sufren ansiedad social. El estrés provocado por las entrevistas puede afectar las posibilidades de obtener un empleo, mientras que la ansiedad también puede perjudicar la capacidad de mantenerlo, especialmente en aquellas profesiones que requieren muchas interacciones o la ejecución de diversas tareas a la vez. Sin embargo, las personas que sufren ansiedad social también pueden tener carreras increíblemente productivas; piensa en Bill Gates, Albert Einstein, J.K. Rowling o Warren Buffett. Para sacarle el máximo provecho a tu profesión, esfuérzate por lidiar con la ansiedad, escoge el trabajo correcto y aprende a impresionar a los potenciales empleadores.

Parte 1

Parte 1 de 3:
Escoger el empleo adecuado

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Reconoce el tipo de trabajo que necesitas. Un empleo sin ningún tipo de contacto humano no es una buena idea para una persona que sufre ansiedad social, dado que esto solo la aislará aún más y agravará sus miedos. En cambio, busca un trabajo en el que puedas interactuar diariamente con los demás sin exigirte o estresarte demasiado. Busca un empleo que cuente con las siguientes características:^{[1]
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- Bajo nivel de estrés. Evita los ambientes muy agitados que requieran trabajar bajo presión y contribuyan a incrementar la ansiedad.
- Entornos silenciosos. Los lugares muy ruidosos pueden provocar ansiedad en muchas personas.
- Pocas interrupciones. Realizar muchas tareas al mismo tiempo también puede causar ansiedad. Busca un empleo en el que puedas concentrarte en una actividad a la vez.
- Interacción limitada con las personas. Si bien lo ideal no es desarrollarte en una profesión que demande una interacción constante con el público (como cajero u operador de centros de atención telefónica), tampoco querrás obtener un trabajo en el que estés totalmente aislado del mundo. Busca un trabajo que requiera interacciones de a dos.
- Pocos proyectos en grupo. Los proyectos en grupo no solo exigen la interacción con otras personas, sino que incrementan la sensación de incertidumbre, otra fuente común de ansiedad.^{[3]
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Busca oportunidades que permitan un gran nivel de independencia. La creación de contenido y la programación son excelentes opciones para personas que sufren ansiedad. Sin embargo, asegúrate de interactuar diariamente con los demás. De lo contrario, este tipo de empleos podría intensificar más tus miedos. Estas son algunas profesiones que no exigen un gran nivel de interacción con las personas, pero que presentan cierto nivel de contacto humano:
- analista de laboratorio
- actuario o contador
- analista financiero
- inspector de construcción
- diseñador gráfico
- creador de páginas web
- limpieza de oficinas
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Busca un empleo que permita tener interacciones de a dos. La mayoría de las personas que sufren ansiedad social prefieren interactuar con una sola persona a la vez, sin ningún tipo de presión relacionada con el tiempo. Las profesiones que permiten este tipo de interacción incluyen:^{[4]
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- profesor particular
- terapeuta o consejero
- asesor financiero
- electricista, plomero, albañil, etc.
- niñera o cuidador de niños
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Trabaja con niños, animales o en contacto con la naturaleza. Si bien trabajar con niños puede parecer un poco estresante, muchas personas que sufren ansiedad social se sienten mucho más cómodas en la compañía de los niños. De manera similar, el trabajo con animales (como en una clínica veterinaria o en un refugio) o aquellos empleos que requieren un contacto con la naturaleza (paisajista, botánico, científico ambiental, guardabosque) pueden ser opciones muy relajantes para las personas que sufren ansiedad.^{[5]
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Parte 2

Parte 2 de 3:
Conseguir un empleo

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Concéntrate en tus habilidades, no en la ansiedad. La clave para conseguir un empleo es concentrarte en lo que tienes para ofrecer. Recuerda que solicitar un trabajo no es un proceso unidireccional. Es necesario que convenzas al empleador de que eres un buen candidato para el puesto en cuestión, mientras que el empleador debe convencerte de que el trabajo es una buena opción para tu carrera profesional.
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No te sientas obligado a mencionar tu problema de ansiedad social. La carta de presentación, el currículum y las entrevistas son formas de exhibir tus habilidades. Por lo tanto, no es necesario mencionar o pedir disculpas por tu ansiedad. Recuerda que las personas tímidas y reservadas suelen ser vistas como seres más confiables, por lo que tu reticencia podría ser un aspecto positivo durante una entrevista.^{[6]
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Fuente de investigación} Sin embargo, es importante hablar acerca de la ansiedad en los siguientes casos:
- La empresa en cuestión es conocida por contratar personas con necesidades especiales e incentiva la diversidad entre los empleados. Abrirte con tu empleador hará que tu relación con él sea mucho más sencilla.^{[7]
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- Crees que el empleador observará tu ansiedad y querrá hacerte preguntas al respecto. En este caso, admite tu problema y reformula la situación para que sea más positiva. Por ejemplo, puedes decir "Estoy un poco nervioso hoy, pero me gusta esforzarme por dar lo mejor de mí, incluso cuando me siento así. Es una excelente forma de crecer y mejorar".^{[8]
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- Crees que necesitarás algunas condiciones especiales, como un ambiente con pocas distracciones.^{[9]
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  Fuente de investigación} (Tu empleador no puede cobrarte o pagarte menos por proporcionarte las condiciones de trabajo necesarias).^{[10]
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  Fuente confiable
  US Equal Employment Opportunity Commission
  Ir a la fuente} Además, tendrás que hablar acerca de tu trastorno de ansiedad para obtener los beneficios otorgados por las leyes vigentes en tu país para las personas con discapacidades o necesidades especiales.^{[11]
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  Fuente confiable
  US Department of Labor
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Prepárate para las entrevistas. El mejor antídoto para la ansiedad durante las entrevistas es asegurarte de estar totalmente preparado. Cuando surjan pensamientos negativos (Estoy tan nervioso que seguramente arruine todo), detente por un instante y recuerda que te has preparado para la ocasión.^{[12]
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- Prepárate para hablar acerca de las lagunas o los huecos en tu currículum. Por ejemplo, puedes decir "Sí, he tenido algunos empleos a tiempo parcial hasta que logré mejorar mis habilidades. Por lo tanto, he comenzado a tomar capacitaciones adicionales". También puedes conversar acerca de los cursos que has tomado en los intervalos entre los empleos.
- Prepárate para responder preguntas comunes como, por ejemplo, ¿cuál es tu mayor debilidad? ¿Dónde te ves dentro de cinco años? ¿Por qué te ha interesado este empleo? ¿Por qué has dejado tu último empleo?^{[13]
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- Responde con pequeñas historias. Cuenta una historia convincente acerca de tu carrera, o una habilidad en particular que hayas adquirido. Ten presente ejemplos de situaciones reales para validar cualquier declaración que hagas.^{[14]
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Crea conexiones. Algunas investigaciones han demostrado que una persona tiene de 5 a 10 veces más posibilidades de conseguir un empleo a través de recomendaciones, en vez de solicitar un puesto directamente en un comercio o empresa. Sin embargo, cultivar contactos puede ser un desafío para las personas que sufren ansiedad social. Estos son algunos consejos para comenzar a construir tu red de contactos:
- Usa LinkedIn. Mantén tu perfil actualizado y conéctate con profesionales que puedan ayudarte.
- Organízate. Crea una planilla con la información de contacto de los profesionales que más respetas y con quienes quieras trabajar. En esta planilla, la calidad de los contactos es más importante que la cantidad.^{[15]
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- Programa interacciones de seguimiento. Crea entradas en tu calendario para contactarte con los profesionales en cuestión. No es necesario que te esfuerces demasiado. Un sencillo correo electrónico preguntando cómo han estado y si puedes ayudarlos en algo será suficiente.^{[16]
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- Usa la creatividad a la hora de mantenerte en contacto. Lleva un registro de tus contactos de LinkedIn. Si alguno de ellos consigue que le den un ascenso o un empleo nuevo, asegúrate de felicitarlo. Si lees algún artículo o blog que podría interesarle, compártelo con la persona en cuestión. Si comparten algún pasatiempo, envíale artículos relacionados.^{[17]
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- Agradece. Recuerda siempre agradecerles a tus contactos por cualquier consejo que te haya resultado útil. Un poco de gratitud puede hacer una gran diferencia.

Parte 3

Parte 3 de 3:
Lidiar con la ansiedad social

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Pide una cita con un terapeuta. Algunos estudios han demostrado que la terapia conductual cognitiva (TCC) es muy efectiva a la hora de reducir la ansiedad social. Un terapeuta te ayudará a reconocer tus miedos, te enseñará técnicas de relajación para lidiar con ellos y te guiará para poder confrontarlos y superarlos, una etapa a la vez. Los profesionales pueden recetar antidepresivos en los casos más graves, dado que permiten reducir el nivel de ansiedad para que la terapia sea más efectiva. Si sufres ansiedad social, pide una cita con un terapeuta cuanto antes.^{[18]
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Aprende más acerca de las técnicas de afrontamiento. Todas las personas experimentan ansiedad en algún momento, dado que es una reacción natural del organismo ante el estrés y el peligro. Algunas personas (ya sea por su genética o por el ambiente) presentan reacciones demasiado intensas. Afortunadamente, existen algunos medios comprobados para controlar el problema.^{[19]
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Llega temprano al trabajo. Comenzar a trabajar temprano te ayudará a sentirte más cómodo y a prepararte mejor para tener un buen rendimiento a lo largo del día. Además, tendrás más posibilidades de encontrarte con un compañero de trabajo a la vez, dado que no llegarás a la oficina cuando todos ya estén en sus puestos. ^{[20]
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Anota y evalúa tus pensamientos. La ansiedad social es provocada por miedos exagerados como, por ejemplo, Todos me miran… esto va a ser desastroso… pareceré un idiota. Anotar todos estos pensamientos te ayudará a identificar y combatir estas exageraciones. Reemplázalas por expectativas más realistas.
- Por ejemplo, si tienes que dar una presentación, quizás te preocupe que todo salga mal, que luzcas demasiado ansioso, que nadie te escuche, etc. Reemplaza estos sentimientos por expectativas más realistas como, por ejemplo, Estoy listo, y he preparado una presentación muy convincente. Si las cosas no salen del todo bien, no será el fin del mundo.
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Reformula la ansiedad como entusiasmo. Los síntomas de la ansiedad (aumento de la frecuencia cardíaca y la respiración, estado de alerta elevado, tendencia a sudar) son muy similares a las señales del entusiasmo. Quizá suene trivial, pero la forma en que pienses acerca de tus sentimientos es muy importante. En vez de pensar que estás ansioso, piensa que estás entusiasmado. Esto te ayudará a sentirte más seguro, en lugar de temeroso.
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Practica ejercicios de respiración profunda. La respiración regular y profunda provoca una respuesta relajante que reduce la frecuencia cardíaca, la presión sanguínea y la tensión muscular.^{[21]
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Fuente de investigación} Practica las siguientes técnicas en casa para poder aprovecharlas a la hora de enfrentar la ansiedad:
- Respiración lenta. Inhala a la cuenta de cuatro, mantén la respiración durante uno o dos segundos, y luego exhala a la cuenta de cuatro. Esto te ayudará a calmar el sistema nervioso.^{[22]
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- Respiración de resistencia. Crear resistencia durante la respiración tiene un efecto tranquilizante. Para ello, inhala por la nariz, juntando los labios al exhalar (como si estuvieses soplando), o haciendo un ruido al liberar el aire (como "om" o la palabra "relajación").^{[24]
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Concéntrate en el mundo exterior. La ansiedad incrementa cuando las personas evalúan su propio rendimiento. Quizás pienses No estoy siendo convincente. Mis manos están sudando. Estoy ansioso. Esto será desastroso. Por lo tanto, redirecciona el foco hacia el entorno que te rodea. Esto te permitirá dejar de pensar en ti mismo para concentrarte más en el presente, en lugar de sufrir por las preocupaciones relacionadas con el futuro.^{[25]
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- Describe los objetos que te rodean. Concéntrate en el ambiente: la alfombra, las paredes, los muebles. Descríbelos en detalle. Por ejemplo, puedes decir La mesa es de madera, muy sólida, con un acabado oscuro. Tocar el objeto en cuestión también puede ayudarte.^{[26]
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- Concéntrate en las personas que te rodean. Escúchalas con atención. Evalúa sus gestos o sus prendas.^{[27]
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Acepta la incomodidad. No importa cuántas estrategias de afrontamiento aprendas, la realidad es que a veces experimentarás ansiedad. Eso está bien. Todo el mundo se siente así en algún momento. Con frecuencia, es necesario aceptar la incomodidad para poder hacer algo que valga la pena. Concéntrate en el motivo por el cual realizas tal tarea como, por ejemplo, "Estoy ansioso, pero esta sensación valdrá la pena si consigo el empleo" o "Estoy ansioso, pero mi carrera lo vale".^{[28]
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