Cómo hacer café vaquero

El café vaquero es un método simple pero delicioso de preparar café que no necesita el uso de ningún equipo especial. De hecho, lo único que necesitas para hacerlo es agua, café, una tetera y una fuente de calor. Aunque el café vaquero suele prepararse sobre una fogata, también puedes hacerlo sobre cualquier tipo de fuente de calor. Dado que no es necesario filtrar los granos de café, la clave para prepararlo es asentar los granos y verter el café con lentitud.

Ingredientes

5 o 6 cucharadas de café molido grueso
2 tazas (500 ml) de agua

Rinde 1 porción

Parte 1

Parte 1 de 3:
Preparar el café

1
Pon a hervir el agua. Llena con agua una tetera para acampar de metal o esmaltada. Cuando el fuego se consuma, mueve el carbón caliente a un lado de la fogata y coloca una parrilla para campamento sobre el carbón. Pon la tapa en la tetera y colócala en la parrilla sobre el carbón caliente para hervir el agua.^{[1]
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Fuente de investigación}
- Si no tienes una fogata, también puedes hervir el agua en una estufa a gas, eléctrica o de leña.
- Para hacer una tanda más grande de café, aumenta las cantidades de café y agua por igual.
2
Retira el agua del fuego y enfríala por 1 minuto. Una vez que el agua haya hervido, retira con cuidado la tetera de la parrilla. Protege tus manos con agarraderas o guantes de silicona o utiliza pinzas para retirar la tetera caliente. Ponla en el suelo y deja enfriarse el agua durante 30 a 60 segundos.
- Es necesario enfriar el agua antes de añadir el café o el agua hirviendo lo hará amargo.^{[2]
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  Fuente de investigación}
- La temperatura ideal para preparar el café es entre 90 y 95 °C (195 y 205 °F), lo que es ligeramente por debajo del punto de ebullición.^{[3]
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  Fuente de investigación}
3
Añade el café y regresa la tetera al fuego. Vierte los granos de café en el agua caliente y revuelve la mezcla por 15 segundos para saturar los granos.^{[4]
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Fuente de investigación} Utiliza 5 cucharadas para obtener un café más suave o las 6 cucharadas enteras si lo prefieres más fuerte.^{[5]
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Fuente de investigación} Deja la tetera destapada y regrésala a la parrilla.
- También puedes utilizar café molido fino, pero el molido grueso soportará mejor el calor, lo que produce una taza de café menos amargo.^{[6]
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  Fuente de investigación}
4
Deja el café a fuego lento. Vigílalo de cerca, puesto que el agua no debe hervir por completo.^{[7]
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Fuente de investigación} En vez de eso, pon el agua a fuego lento, es decir a 90 °C (195 °F). El agua hervirá a fuego lento cuando las burbujas rompan con regularidad la superficie del agua, pero sin que esta alcance un hervor completo.^{[8]
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Fuente de investigación}
5
Retira la tetera del fuego y deja reposar el café por 2 minutos. Cuando esté hirviendo a fuego lento, retira con cuidado la tetera de la parrilla. Ponle la tapa y deja a un lado el café para que se infusione por un par de minutos.^{[9]
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Fuente de investigación}
6
Revuelve el café y déjalo reposar por 2 minutos más. Al cabo de 2 minutos, retira la tapa de la tetera y revuelve el café por 15 segundos más. Vuelve a colocar la tapa y pon la tetera a un lado para dejar que el café se infusione por 2 minutos más.^{[10]
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Fuente de investigación}

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Parte 2

Parte 2 de 3:
Asentar los granos de café

1
Deja reposar el café por 1 o 2 minutos adicionales. Quita la tapa para permitir la entrada del aire fresco en la tetera. Mientras el aire enfría los granos, se hundirán de forma natural hasta el fondo de la tetera.^{[11]
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Fuente de investigación} Asentar los granos es una parte esencial del proceso al preparar el café vaquero, puesto que los granos no se filtran.
- Dejar que los granos se hundan de forma natural es la manera más fácil de hacer que se asienten sin necesidad de añadir nada adicional al café.
2
Añade algo de agua fría para asentar los granos con mayor rapidez. Si no puedes esperar para tomar tu café, vierte 2,5 cucharadas de agua fría en la tetera con el café. Cuando el agua fría llegue a los granos, los enfriará y los forzará a hundirse hasta el fondo.^{[12]
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Fuente de investigación}
- No añadas mucha agua fría o el café resultará tibio en vez de caliente.
3
Añade cáscaras de huevo trituradas para asentar los granos y eliminar el sabor amargo. Esta es una tercera forma de asentar los granos. Después de hacer un huevo duro, deja que la cáscara se seque y luego tritúrala hasta obtener un polvo grueso con un mortero o un molinillo de especias. Espolvorea una pizca del polvo en el café y revuélvelo hasta combinar la cáscara y los granos.
- La cáscara de huevo hará que los granos se peguen y los forzará a hundirse en el fondo de la tetera. Dado que esta cáscara es ligeramente alcalina, también neutralizará la acidez del café y lo hará menos amargo.^{[13]
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  Fuente de investigación}
- La cáscara de huevo es una buena fuente de calcio.^{[14]
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  Fuente de investigación} No tienes que preocuparte por las enfermedades transmitidas por alimentos, siempre y cuando los huevos hayan sido tratados contra la salmonella o hervidos.
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Parte 3

Parte 3 de 3:
Servir y tomar el café vaquero

1
No viertas las últimas gotas de café de la tetera. Debes dejar las últimas cucharadas de café en el fondo de la tetera cuando prepares el café vaquero. Dado que todos los granos se concentrarán en las últimas gotas, es mejor tirar lo último del café en vez de tomarlo.^{[15]
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Fuente de investigación}
- Para el café vaquero tradicional, los granos no se cuelan.
2
Vierte el café poco a poco. Una vez que hayas terminado de prepararlo y los granos se hayan asentado en el fondo, es hora de disfrutarlo. Vierte poco a poco el café en una taza. Si lo haces muy rápido, revolverás los granos y obtendrás una taza de café granulado.^{[16]
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Fuente de investigación}
3
Añade leche y azúcar al gusto. Las personas en general prefieren tomar el café vaquero negro, pero puedes añadirle endulzantes, crema o leche si así lo deseas. Empieza con 1 cucharadita de azúcar a la vez y añade más si es necesario. Asimismo, añade 1 o 2 cucharadas de leche o crema a la vez y más hasta que estés contento con el sabor.
4
Añade una pizca de sal para reducir el sabor amargo. Algunas personas consideran que el café vaquero es amargo, sobre todo si se ha dejado hervir en el fuego por mucho tiempo. Puedes reducir parte del sabor amargo y suavizar los sabores con sal. Vierte 1/8 de cucharadita de sal en la taza de café y revuelve antes de disfrutarlo.^{[17]
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Fuente de investigación}

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