Para algunas personas, la frase “tiempo libre” es un pase libre para holgazanear y no hacer nada. Aunque eso está bien en algunas ocasiones, el tiempo libre puede ofrecer una buena oportunidad para ponerse al día con tareas incompletas o para hacer progresos a nivel personal o profesional. Haz que tu tiempo libre sea productivo haciendo actividades para el desarrollo personal, a fin de conectarte con tus redes sociales y optimizar tu salud.

Método 1
Método 1 de 3:
Llevar a cabo el desarrollo personal

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    Revisa tus metas y establece nuevas. Usa el tiempo libre como un periodo de reflexión. Piensa en las metas que has establecido en el pasado, determina si progresas como te gustaría y evalúa si necesitas revisar tus metas o desarrollar nuevas.[1]
    • Por ejemplo, si estableciste una meta el mes pasado de “ahorrar 250 dólares”, puedes revisar tus ahorros para ver que tan bien has cumplido esta meta. Si has progresado como esperabas, pasa a la siguiente meta. Sin embargo, si no has hecho ningún progreso, puedes reducir la meta (por ejemplo, a “150 dólares”) o pensar en una estrategia para ayudarte a permanecer en buen camino, como conseguir otro empleo.
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    Identifica algunas cosas que te gustaría aprender. El tiempo libre fuera del trabajo, de la escuela o de las responsabilidades familiares se pueden invertir productivamente si usas esos fragmentos de tiempo para aprender cosas nuevas. Las habilidades nuevas pueden ayudarte a sacar ventaja en el trabajo o simplemente pueden desafiarte creativamente.
    • Haz una lista de algunas habilidades nuevas que te gustaría tener. Estas pueden incluir tareas como aprender un nuevo idioma, mejorar tu comprensión de las computadoras o aprender a montar un caballo.
    • Para tener una vida equilibrada, escoge algunas habilidades que se relacionen con tu desarrollo personal o profesional, y algunos pasatiempos que desees probar por pura curiosidad.
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    Perfecciona tu lista de tareas pendientes. Tu lista de tareas pendientes puede estar llena de tareas demasiado abrumadoras que sigas postergando para el día o la semana siguiente. Estas tareas pueden causar frustración y pocas veces se terminan de hacer sino hasta el último minuto. Asegúrate de completar las tareas pendientes de la lista ordenándola.[2]
    • Escribe las tareas pendientes más importantes para la siguiente semana en una hoja de papel. Luego, decide si esta tarea requiere de uno o de varios pasos. En vez de escribir “completar el ensayo de Historia”, escribe pasos individuales como “buscar recursos para al trabajo de Historia”, “crear un esquema” y “escribir el primer borrador”.
    • Las listas de tareas pendientes de un paso son más probables de realizar al final del día.
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    Gana un poco de dinero adicional. Si necesitas dinero adicional, puedes invertir tu tiempo libre del trabajo o de la escuela trabajando en otra cosa o buscando maneras creativas para ganar dinero. Consigue un segundo empleo que puedas realizar por las noches o durante los fines de semana. Monetiza tu pasión por la elaboración de joyas configurando una tienda de Etsy. Vende los libros o la ropa vieja que tengas en el ático.[3]
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Método 2
Método 2 de 3:
Conectarte socialmente

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    Expande tu red profesional. Después del horario de 9 a 5, hay una variedad de eventos de redes a los que puedes asistir. El almuerzo sabatino o los cócteles nocturnos pueden servir como el escenario perfecto para promocionar una idea nueva o para intercambiar tarjetas de negocio.[4]
    • Busca eventos de redes profesionales en tu área o presta atención en el trabajo o en tu organización profesional para enterarte de los eventos fuera del horario laboral.
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    Invita a algunos amigos o a familiares. Tener un grupo de apoyo social fuerte hace que seas más resistente al estrés e incluso desarrolla la autoestima. Si propendes a decepcionar a tus seres queridos debido a los compromisos escolares o laborales, usa tu tiempo libre para salir y fortalecer las amistades existentes.[5]
    • Planifica una noche de películas, una noche de juegos o una reunión. Llama a algunos amigos o familiares que nunca veas e invítalos a unirse a la diversión. Ponerte en contacto con las personas que amas es una manera maravillosa de pasar tu tiempo libre.
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    Empieza a trabajar como voluntario. Ayudar en la comunidad local te da la oportunidad de conectarte con otras personas, de hacer algo significativo e incluso de mejorar tu hoja de vida. Piensa en un área de necesidad en tu comunidad y averigua cómo puedes servir.[6]
    • Puedes ayudar a planificar un evento de la comunidad, trabajar en un refugio de indigentes o recoger la basura después del carnaval anual.
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    Haz actos aleatorios de bondad. Si buscas maneras interesantes de ocupar tu tiempo libre, haz algo bondadoso por alguien más. Los actos aleatorios de bondad demuestran a las personas que te rodean que deseas ayudar y, además, te hacen sentir bien contigo mismo.
    • Estos actos pueden ser cualquier cosa (como dejar pastelillos recién horneados a tu vecino anciano u ofrecerte como voluntario para cuidar a los hijos de tu hermana a fin de que pueda salir a una cita). Haz una lista de maneras divertidas en las que puedas retribuir a las personas que te rodean y trata de hacer un acto aleatorio de bondad completo cada día.[7]
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Método 3
Método 3 de 3:
Enfocar en la salud

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    Busca algunas recetas saludables que te gustaría probar. Si tienes un poco de tiempo libre, preparar comida es una buena manera de aprovecharlo. Cuando planificas y preparas tus comidas con anticipación, eres menos propenso a elegir opciones poco saludables como comida rápida o chatarra. Busca recetas interesantes en Pinterest y haz una lista de comestibles para salir de compras.
    • Pide ayuda a tu compañero de dormitorio, a tu pareja o a tu hijo. Esto te ayudará a hacer la tarea más rápido. Además, te divertirás más mientras trabajan juntos.
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    Haz ejercicios. La actividad física regular suministra una inyección de energía y mantiene tu mente alerta. Ya sabes que debes hacer ejercicios algunos días a la semana. Pero si te tiras en el sofá para ver televisión antes, es poco probable que te muevas más tarde. Prioriza en hacer ejercicios usando tu tiempo libre para respaldar tu bienestar físico y mental.[8]
    • Destina al menos 30 minutos para correr, caminar, montar bicicleta o alguna otra actividad preferida. Incluso puedes poner algo de música y sacudir las caderas mientras cocinas o limpias la casa.
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    Surte tu caja de herramientas de cuidado personal. Aunque no estés estresado en este momento, puedes influenciar positivamente en tu bienestar practicando el cuidado personal. Muy a menudo, puedes relegarte a ti mismo a la última parte de tu lista de prioridades. Crear una caja de herramientas de cuidado personal te ayuda a reunir actividades relajantes para que estén a la mano cuando necesites un descanso.[9]
    • Surte tu caja de herramientas de cuidado personal con objetos y actividades que rejuvenezcan la mente y el cuerpo. Puedes incluir velas y lociones perfumadas, baños de burbujas o sales, un libro para colorear, una novela, un proyecto de tejido o tu película favorita.
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    Limpia la casa. Quizás te preguntes qué tiene que ver la limpieza con la salud. Una casa limpia puede ofrecerte beneficios de salud mental debido a que no experimentarás estrés por no saber en dónde están las cosas. Además, si sufres de alergias o de otros trastornos crónicos, limpiar la casa regularmente puede disminuir los síntomas desagradables. Limpiar también te brinda la oportunidad de mover el cuerpo y de elevar el ritmo cardíaco.[10]
    • Usa productos naturales de limpieza para reducir tu exposición a las toxinas y maximizar los beneficios a tu salud y a tu bienestar general.
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Acerca de este wikiHow

Amber Rosenberg, PCC
Coescrito por:
Coach laboral
Este artículo fue coescrito por Amber Rosenberg, PCC. Amber Rosenberg es coach de vida profesional, coach de carrera y coach ejecutiva que reside en el Área de la Bahía de San Francisco. Como propietaria de Pacific Life Coach, tiene más de 20 años de experiencia en coaching y en corporaciones, empresas de tecnología y organizaciones sin fines de lucro. Se formó en el Coaches Training Institute y es miembro de la International Coaching Federation (ICF). Este artículo ha sido visto 17 414 veces.
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