Un pastel con capas de bizcocho, helado y glaseado representa el regalo perfecto para un cumpleaños o una ocasión especial. Si lo preparas en casa en lugar de comprarlo en una tienda, puedes personalizar los sabores para crear un postre único y delicioso. Esta receta se prepara con capas de bizcocho y una cobertura batida.

Ingredientes

  • ½ taza de harina
  • ½ taza de maicena
  • 4 huevos, separados
  • ½ cucharadita de extracto de vainilla
  • ¾ de taza de azúcar granulada
  • 4 tazas de helado
  • 2 tazas de crema batida espesa
  • ½ taza de azúcar glas (en polvo)

Método 1
Método 1 de 3:
Preparar el bizcocho

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    Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y engrasa y enharina el molde. Utiliza mantequilla o margarina para engrasar un molde redondo de 23 cm (9 pulgadas), teniendo cuidado de asegurarte de que el fondo y los lados queden completamente engrasados para evitar que el bizcocho se pegue al molde. Espolvorea un poco de harina en el centro del molde e inclínalo de un lado a otro, de manera que la harina cubra el fondo y los lados. Luego, elimina el exceso de harina.
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    Mezcla ½ taza de harina y ½ taza de maicena. Utiliza un colador para tamizar los ingredientes o colócalos en un recipiente pequeño y revuélvelos con un batidor.
    • Si deseas preparar un pastel de helado de chocolate, debes agregar ½ taza de cacao en polvo a la mezcla.
    • Para preparar un pastel de especias, agrega ½ cucharadita de canela, ¼ de cucharadita de nuez moscada y ¼ de cucharadita de clavo de olor molido.
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    Prepara la mezcla de yema de huevo, vainilla y azúcar. Utiliza una batidora eléctrica para batir 4 yemas de huevo, ½ cucharadita de extracto de vainilla y ½ taza de azúcar granulada. Continúa batiendo hasta que la mezcla se vuelva espesa y pálida, lo que tardará unos 5 minutos.
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    Prepara la mezcla de clara de huevo. Coloca las claras de huevo y una pizca de sal en un recipiente mediano. Con un batidor limpio, bate las claras hasta que formen picos suaves. Continúa batiendo la mezcla y agrega el ¼ de taza restante de azúcar granulada. Sigue batiendo hasta que las claras se vuelvan rígidas y brillantes.
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    Combina los ingredientes. Incorpora con cuidado la mezcla de clara de huevo a la mezcla de yema de huevo. Incorpora la mezcla de harina con una espátula. Ten cuidado de no mezclar demasiado los ingredientes. Continúa envolviéndolos hasta que se combinen.[1]
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    Vierte la masa en el molde. Extiéndelo de manera uniforme en el molde con una espátula.
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    Coloca el molde en el horno y hornea la masa por 35 minutos. Gira el molde 180 grados a la mitad para asegurarte de que se cocine de manera uniforme. El bizcocho estará listo cuando insertes un mondadientes en el medio y este salga limpio. Retira el pastel del horno, voltéalo sobre una rejilla o plato y deja que se enfríe por completo.
    • Si el bizcocho parece quedarse adherido a los lados del molde, pasa una espátula de goma alrededor del borde del bizcocho antes de tratar de voltearlo.
    • Si el bizcocho se parte al voltearlo, coloca los pedazos sobre un plato y deja que se enfríen. Aún puedes utilizar el bizcocho.
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    Corta el bizcocho. Con un cuchillo dentado grande, corta en forma transversal para conseguir 2 discos finos de bizcocho. Envuelve cada uno en una envoltura de plástico y colócalos en el congelador durante varias horas. Puedes armar el pastel cuando las mitades se congelen.
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Método 2
Método 2 de 3:
Aplicar capas de helado

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    Suaviza el helado. Deja que las tazas de helado se asienten sobre la encimera durante unos minutos. Cuando esté lo suficientemente blando como para que lo manipules, utiliza una cuchara para colocar el helado en un recipiente grande. Revuelve el helado con la cuchara hasta que tenga la consistencia de un glaseado para untar, pero que no quede demasiado líquido.
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    Prepara el bizcocho. Mientras el helado se ablanda, retira las mitades de bizcocho del congelador. Desenvuelve una mitad y colócala sobre un pedestal para pasteles. Deja la otra mitad a un lado por ahora.
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    Alterna las capas de bizcocho y helado. Esparce 2 tazas de helado sobre la primera mitad de bizcocho con una cuchara y una espátula o un cuchillo. Trata de que no se derrame por los bordes del bizcocho. Debe quedar una capa gruesa y sólida de helado. Coloca la segunda capa de bizcocho sobre la capa de helado. Luego, extiende otra capa de helado encima del bizcocho.[2]
    • Para preparar un pastel más pequeño, puedes guardar la segunda capa de helado.
    • Si prefieres aplicar la capa de pastel encima, aún puedes aplicar 2 capas de helado. Después de extender la primera capa de helado, aplica una capa de galletas trituradas o chispas de chocolate. Luego, extiende la segunda capa de helado encima antes de agregar la segunda capa de bizcocho.
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    Congela el pastel. Coloca el pastel en el congelador hasta que se congele por completo, lo que tardará entre dos y cuatro horas.
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Método 3
Método 3 de 3:
Terminar el pastel de helado

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    Prepara la cobertura batida. En un recipiente, bate 2 tazas de crema batida espesa con una batidora eléctrica hasta que comiencen a formarse picos suaves. Agrega ½ taza de azúcar glas (en polvo) y continúa batiendo hasta que la cobertura se vuelva rígida.
    • Evita batir demasiado la cobertura, o se convertirá en mantequilla. Si esto ocurre, agrega de 2 a 4 cucharadas de batido pesado al recipiente e incorpóralo hasta que alcance la textura deseada.
    • Puedes agregar unas gotas de colorante alimentario a la crema batida para que combine con el helado. Por ejemplo, si planeas preparar un pastel de helado de fresa, agrega unas gotas de colorante alimentario rojo para preparar una cobertura rosada.
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    Aplica la cobertura al pastel. Retira el pastel del congelador. Extiende la cobertura batida sobre él con una espátula compensada. Si lo deseas, extiende más cobertura en los lados del pastel para ocultar las capas.
    • Puedes decorar el pastel con granas, chispas de chocolate o frutas si lo deseas.
    • Para preparar un pastel más elegante, coloca la cobertura batida en una manga y aplícala sobre el pastel en un patrón bonito.
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    Congela el pastel. Vuelve a colocarlo dentro del congelador para que la cobertura se endurezca. El pastel estará listo para servir en cuanto la cobertura se vuelva rígida.
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Consejos

  • Una vez que domines la preparación de este pastel, puedes probar algunas variaciones: helado intercalado entre dos capas de bizcocho, rellenos de frutas entre las capas de helado y bizcocho, etc.
  • También es posible sustituir el glaseado por helado aromatizado. Dado que no deseas que el glaseado de helado se derrita más cuando toques el pastel, debes congelar las capas apiladas de helado y bizcocho durante una hora antes de glasearlo con helado. Luego, simplemente ablanda el helado y revuélvelo hasta que consiga una consistencia batida y extiéndelo como si fuera glaseado.
  • Algunas ideas para sabores de pasteles helados son los siguientes:
    • pastel de vainilla con fresa, melocotón u otro helado afrutado
    • pastel de chocolate con helado de menta con chispas de chocolate u otro helado con chispas de chocolate
    • pastel de especias con helado de calabaza o helado de caramelo
  • Puedes agregar nueces y chispas de chocolate si lo deseas.
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Advertencias

  • Si planeas servir el pastel en una fiesta, sácalo del congelador inmediatamente antes de servirlo y regrésalo después de que todos se hayan servido. De lo contrario, el helado se derretirá, dejando un desastre pegajoso y un pastel pastoso.
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Acerca de este wikiHow

Emily Margolis
Coescrito por:
Panadera profesional
Este artículo fue coescrito por Emily Margolis. Emily Margolis es una empresaria de panadería y pastelería en Baltimore en Maryland. Con más de 15 años de experiencia en panadería y pastelería, fundó Baking with Chef Emily, donde ofrece clases particulares de panadería y pastelería en el área de Washington D. C. Este artículo ha sido visto 89 797 veces.
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