Cómo limpiar los ejotes

Los ejotes no solo son deliciosos y saludables, también son fáciles de limpiar. Lavar los ejotes puede ayudarte a reducir los residuos de pesticidas o prevenir una intoxicación alimentaria. Simplemente, enjuágalos en un escurridor y si los recoges frescos del jardín, puedes remojarlos para quitarles la suciedad. Es importante que mientras los preparas, seas higiénico para prevenir el riesgo de contaminación cruzada.

Método 1

Método 1 de 3:
Enjuagar los ejotes que compres en el supermercado

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Coloca los ejotes en un escurridor. Para mejores resultados, coloca los ejotes en un escurridor o en un recipiente para lavado. Esto te permite lavar los ejotes bajo el grifo mientras el agua escurre.
- Si no tienes un escurridor, puedes enjuagarlos en un recipiente y escurre el agua después de lavarlos.
- Si no tienes nada que te sirva, puedes sostener los ejotes con las manos mientras los lavas, pero sostenlos fuertemente para que no se caigan.
2
Deja que caiga el agua sobre los ejotes. Enciende el grifo con agua fría y deja caer agua sobre los ejotes y, si usas un recipiente o escurridor, muévelos con las manos para asegurarte que todos se laven.
- Quita la suciedad visible con los dedos mientras lavas los ejotes.
- El agua que utilices para limpiar los ejotes debe ser agua que se pueda tomar y si no es segura, usa agua destilada o de botella.^{[1]
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  Fuente de investigación}
3
Sécalos. Puedes quitar más bacterias de los ejotes al secarlos con una toalla después de lavarlos. Usa el papel de cocina para secarlos suavemente.^{[2]
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Fuente de investigación} Una vez que los hayas lavado y secado, puedes cocinarlos.

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Método 2

Método 2 de 3:
Remojar los ejotes frescos que recojas del jardín

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Llena un recipiente con agua fría. Si quieres limpiar los ejotes frescos que recojas del jardín, la mejor manera de quitar la suciedad es remojándolos. Llena un recipiente o fregadero con agua fría, debe ser lo suficiente para que cubra los ejotes.^{[3]
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Fuente de investigación}
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Enjuaga los ejotes. Coloca los ejotes en el recipiente y remójalos por uno o dos minutos. Usa los dedos para quitar la suciedad, también puedes moverlos con los dedos. Antes de escurrirlos, deja la suciedad o la tierra en el fondo del recipiente.^{[4]
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Fuente de investigación}
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Escurre el agua. Después de uno o dos minutos de lavarlos, colócalos en un escurridor, así el agua se escurrirá desde el fondo. Si no tienes un escurridor, dobla algunos papeles de cocina y coloca los ejotes encima del papel para que se escurran.
- Si no te comes los ejotes en el momento, sécalos con papel de cocina y asegúrate de que estén completamente secos antes de guardarlos, es posible que las verduras se pudran más rápido en el refrigerador.^{[5]
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  Fuente de investigación}
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Repite el proceso si es necesario. Es posible que los ejotes aún estén sucios. Llena el recipiente con agua y enjuágalos de nuevo y, repite este proceso hasta que hayas quitado toda la suciedad de los ejotes.

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Método 3

Método 3 de 3:
Ser higiénico

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Lávate las manos. Antes de limpiar los ejotes, lávate las manos con agua tibia y jabón antibacteriano por al menos veinte segundos. Este paso es especialmente importante si has estado tocando carne cruda o huevos. Siempre lávate las manos cuando manipules la carne y cocines vegetales .^{[6]
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Fuente confiable
US Food and Drug Administration
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2
Corta los ejotes y la carne por separado. Si cortas los ejotes con un cuchillo, asegúrate de usar una tabla para cortar diferente a la que usas con la carne cruda. Esto te ayudará a prevenir el riesgo de contaminación cruzada e intoxicaciones alimentarias causadas por bacterias como la E. coli y la salmonela.^{[7]
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Fuente confiable
US Food and Drug Administration
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Tira los ejotes mohosos. Si ves moho en los ejotes tíralos, además tira cualquier otro ejote que pueda propagarlo. No cortes solo la parte con moho para luego comerte el resto, ya que esto puede ser riesgoso.^{[8]
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Fuente de investigación}
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Evita los productos de limpieza. Muchos productos de limpieza son innecesarios cuando lavas los ejotes, ya que no son más efectivos que el agua.^{[9]
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Fuente de investigación}

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Consejos

Debes lavar los ejotes, incluyendo los orgánicos y los de cosecha propia antes de cocinarlos.
Es posible que los ejotes de cosecha propia usen más pesticidas que los importados.^{[10]
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Fuente de investigación}

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