La clavícula es un hueso largo y delgado ubicado cerca de la base frontal del cuello y que une el esternón con la cintura escapular.[1] El ser humano tiene dos clavículas: izquierda y derecha. La rotura (fractura) de clavícula es una lesión relativamente común, especialmente en niños y adolescentes, ya que este hueso aún está en proceso de endurecimiento hasta que alcanzan la edad adulta (aproximadamente a los 20 años). La mayoría de las lesiones de este tipo generalmente se reportan por caídas, lesiones deportivas y por traumatismos a causa de accidentes automovilísticos.[2] Una fractura de clavícula requiere atención médica inmediata para determinar la gravedad de la lesión e identificar posibles complicaciones. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la recuperación se logra con descanso, el uso de un cabestrillo, la aplicación de compresas frías, analgésicos y algún tipo de terapia física.

Método 1
Método 1 de 3:
Buscar atención médica de emergencia

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    Acude al médico lo más pronto posible. Si sufres un traumatismo de consideración a causa de una caída o de un accidente automovilístico y sientes un dolor muy fuerte, sobre todo si está acompañado de un crujido, dirígete al hospital más cercano o a una clínica ambulatoria y busca atención médica. Cuando la clavícula se rompe se produce un dolor agudo cerca del hombro y en la parte superior del pecho; además, imposibilita el movimiento de la parte superior del brazo, especialmente si intentas levantarlo o tratas de alcanzar algo. Otros síntomas incluyen moretones, hinchazón, bulto sobre la zona de la fractura, dolor y crujido al mover el brazo, y algunas veces adormecimiento u hormigueo en la mano.[3]
    • Los médicos utilizan herramientas como la radiografía, tomografía de hueso y resonancia magnética que lo ayudan a identificar el lugar y la gravedad de la fractura. Las fracturas pequeñas y finas no suelen ser perceptibles en una radiografía hasta que la inflamación disminuye (hasta después de una semana aproximadamente).
    • Si se trata de una fractura compleja, que implica un hueso roto en múltiples pedazos, fragmentos óseos que penetran la piel o han quedado sumamente desalineados, será necesaria una cirugía. Solo del 5 al 10 % de fracturas de clavícula requieren cirugía.[4]
    • La mayoría de las veces, la clavícula se quiebra justo en la parte media; en casos poco frecuentes, se afecta la zona que la conecta con el esternón o el omóplato.[5]
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    Utiliza un cabestrillo o soporte para el brazo. Debido a su posición anatómica y a la imposibilidad de inmovilizar el hueso o la zona afectada, una clavícula rota no se enyesa. En lugar de eso, a menudo se utiliza un cabestrillo simple o un vendaje en ocho para que sirva de apoyo y para brindar comodidad inmediatamente después de una fractura de clavícula.[6] La férula en ocho abarca ambos hombros y la base del cuello para darle soporte a la zona lesionada ayudando a que mantenga derecha y hacia atrás. Algunas veces, es necesario envolver una venda más grande alrededor del cabestrillo para sostenerlo más cerca al tronco. Es necesario usarlo todo el tiempo hasta que el movimiento deje de producir dolor; generalmente, esto toma de dos a cuatro semanas en los niños y de cuatro a ocho para los adultos.[7]
    • Si vas a un hospital o a una clínica ambulatoria de emergencia, te facilitarán un cabestrillo o soporte para el brazo. Sin embargo, también puedes adquirirlos en la mayoría de farmacias o tiendas de suministros médicos.
    • Los cabestrillos vienen en todas las tallas, incluyendo aquellos diseñados especialmente para niños pequeños, teniendo en cuenta que la fractura de clavícula es una de las lesiones más comunes a esa edad; generalmente, como resultado de una caída sobre un brazo extendido.[8]
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    Toma analgésicos temporalmente. Es probable que el médico te recomiende un antiinflamatorio no esteroideo (AINE) como ibuprofeno, naproxeno o aspirina como un remedio a corto plazo para ayudarte a manejar el dolor y la inflamación asociado con la fractura.[9] En su defecto, podrían administrarte calmantes, como el acetaminofeno (Tylenol), o un opioide de venta con receta (como Vicodin). Ten presente que estos fármacos pueden ser fuertes para el estómago, riñones e hígado, así que lo mejor es no tomarlos por más de dos semanas seguidas. Si vas a tomar un opioide, hazlo exactamente según las indicaciones del médico, ya que puede ser adictivo.
    • La aspirina está contraindicada para menores de 18 años, ya que su consumo está asociado con el síndrome de Reye que suele ser mortal.
    • En caso se trate de una fractura grave que te produce dolor intenso, el médico podría prescribirte un fármaco más potente mientras estás en el hospital como, por ejemplo, opiáceos similares a la morfina; no obstante, ten en cuenta que su consumo excesivo puede generar dependencia y terminar en adicción.
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Método 2
Método 2 de 3:
Lidiar con una fractura de clavícula en casa

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    Inmoviliza la zona y aplícate hielo. Una vez que te hayan dado de alta del hospital o de la clínica ambulatoria, deberás inmovilizar el brazo y aplicarte hielo en la zona de la fractura mientras llevas puesto el cabestrillo o soporte para reducir la inflamación y calmar el dolor. Al día siguiente de producida la fractura, aplícate hielo o compresas frías durante 20 minutos cada hora mientras estés despierto. Durante los siguientes dos o cuatro días aplícate hielo en la zona inflamada y dolorida cada tres o cuatro horas por 20 minutos cada vez. Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y la aplicación de hielo causarán que la inflamación desparezca en una semana.
    • Dependiendo del tipo de trabajo que realices y de si la lesión afecta a tu brazo dominante, es probable que necesites tomarte unas semanas de licencia para poder recuperarte. Por lo general, el período de recuperación toma de cuatro a seis semanas, mientras que en las personas de edad avanzada este puede tomar hasta doce semanas.[10]
    • Generalmente, los atletas jóvenes logran retomar su actividad física dentro de las ocho semanas después de producida la lesión; sin embargo, esto depende de muchos factores, entre ellos la gravedad de la fractura y el tipo de deporte que practican. Consulta con tu médico cuál sería el momento adecuado para retomar con seguridad tu vida normal incluyendo la actividad física.
    • Si no tienes hielo a la mano, puedes usar compresas de gel congelado o bolsas blandas de verduras que quizá tengas en el congelador (las de maíz o guisantes son las que funcionan mejor). Antes de usar las compresas frías envuélvelas con un paño delgado, nunca las apliques directamente sobre la piel, ya que pueden provocar congelación o una quemadura por hielo.
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    Mueve ligeramente el brazo cuando el dolor empiece a disminuir. Después de unas cuantas semanas cuando la inflamación parezca haber desaparecido y el dolor prácticamente se haya disipado, podrás quitarte el cabestrillo por espacios de tiempo cortos y mover ligeramente el brazo y el hombro. No exageres, de tal forma que el hueso empiece a sonar nuevamente; no obstante, incorpora otra vez diversos movimientos que involucren las articulaciones, ligamentos, tendones y músculos afectados. Hazlo gradualmente, quizá puedas comenzar sujetando una taza de café y más adelante una pesa de 2 kg (5 lb). Además, debes comenzar a usar el cabestrillo durante menos tiempo.[11] Durante la primera fase de la lesión la clavícula requiere cierto movimiento para estimular la recuperación del hueso.
    • La falta de movimiento y la inmovilización total del brazo o del hombro de acuerdo al tiempo que dure la rehabilitación, puede provocar la disminución de la densidad mineral ósea, lo cual sería contraproducente en casos de fractura donde el hueso necesita recobrar solidez.[12] Un poco de movimiento y el levantamiento de pesas parecen atraer mayor cantidad de minerales hacia el hueso, lo que además de contribuir a su fortalecimiento, reduce la posibilidad de una nueva fractura.
    • La reparación ósea se da en 3 fases: fase reactiva (formación de un hematoma entre los extremos de la fractura), fase reparativa (las células especializadas empiezan a formar un callo sobre la fractura) y la fase de remodelación (se desarrolla nuevo tejido óseo y la lesión poco a poco recupera su forma original).[13]
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    Aliméntate bien especialmente durante tu rehabilitación. Tal como sucede con otros tejidos corporales, los huesos, necesitan de todos los nutrientes esenciales para recuperarse rápidamente y de manera adecuada. Existen evidencias de que una alimentación balanceada que incluya la cantidad suficiente de vitaminas y minerales ayuda a la reparación ósea en casos de fractura de clavícula y de otros huesos.[14] Por consiguiente, concéntrate en consumir frutas y verduras frescas, granos integrales, carnes magras, abundante agua y leche para brindarle a tu cuerpo los componentes esenciales que necesita para reparar la fractura.
    • Por otra parte, evita el consumo de todo aquello que pueda afectar tu recuperación, como el alcohol, gaseosas, comida chatarra y alimentos elaborados con grandes cantidades de azúcar refinado.
    • Para tener huesos fuertes y sanos es importante consumir alimentos ricos en minerales y proteínas; los encuentras principalmente en productos lácteos, tofu, frijoles, brócoli, semillas, nueces, sardinas y salmón.
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    Considera la posibilidad de tomar suplementos durante tu recuperación. Siempre se recomienda llevar una alimentación balanceada que nos permita obtener los nutrientes esenciales; sin embargo, la suplementación con los minerales y vitaminas es clave para la recuperación del hueso, te garantiza que cumplirás con todos tus requerimientos sin incrementar tu ingesta calórica. El exceso de calorías y la disminución de la actividad física a menudo origina el aumento de peso, lo cual no es recomendable luego de un período de recuperación de una fractura de clavícula o de cualquier otra lesión. Ten presente que debes adquirir un suplemento con un mínimo o libre de aglutinantes ni relleno para que tu cuerpo los absorba mejor.
    • Busca un suplemento que contenga calcio, fósforo y magnesio, ya que son los principales minerales principales presentes en la estructura ósea. Los adultos necesitan entre 1,000 y 1,200 mg de calcio al día (dependiendo de la edad y género). Sin embargo, es mejor que consultes con tu médico y nutricionista, ya que es posible que tus requerimientos sean mayores después de la fractura.[15]
    • Los oligoelementos esenciales que debes considerar incluyen: zinc, hierro, boro, cobre y silicio. Un suplemento multimineral debe contener todos estos oligoelementos.
    • Las vitaminas C, D y K son importantes porque contribuyen a la reparación ósea. La vitamina C es necesaria para la producción de colágeno. La vitamina D no solo es fundamental para la absorción intestinal de los minerales, sino que además el cuerpo la produce cuando la piel se expone directamente al sol. La vitamina k fija el calcio en los huesos y promueve la formación de colágeno.
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Método 3
Método 3 de 3:
Rehabilitarse después de una fractura de clavícula

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    Solicita que te deriven con un fisioterapeuta. Una vez que te hayas retirado definitivamente el cabestrillo o férula, notarás que los músculos que rodean el hombro y la parte superior del pecho lucen ligeramente más pequeños o quizá sientas que están débiles. En ese caso, es posible que necesites una rehabilitación física. Se recomienda iniciarla una vez que el dolor haya desaparecido y puedas realizar prácticamente todo tipo de movimiento con el hombro y el brazo. El fisioterapeuta te enseñará ejercicios específicos para fortalecer los músculos y recuperar tanto la movilidad articular como la flexibilidad.[16]
    • Generalmente, el paciente necesita asistir a terapia física de dos a tres veces por semana durante cuatro semanas como mínimo para lograr fortalecer de manera significativa la zona afectada.
    • Asimismo, el fisioterapeuta puede aplicar un tratamiento con electroterapia, específicamente la estimulación eléctrica para fortalecer los músculos del hombro y del pecho.
    • En el caso de una fractura de clavícula simple, la mayoría de personas retoman íntegramente sus actividades cotidianas en un período máximo de 3 meses; no obstante, existen factores importantes como la edad y el estado de salud previo a la lesión.[17]
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    Programa una cita con un quiropráctico u osteópata. Los quiroprácticos y osteópatas son especialistas en el tratamiento de lesiones musculoesqueléticas que se enfocan en devolver el movimiento normal y la funcionalidad a las articulaciones, huesos y músculos. Tras la recuperación de la zona afectada, es posible que las articulaciones involucradas estén rígidas o ligeramente mal posicionadas. Mediante la técnica de la manipulación manual articular, conocida como ajuste, se corrige la posición de las articulaciones que estaban desalineadas como consecuencia del traumatismo que provocó la fractura. Una articulación sana, con fluidez de movimiento no solo permite que los huesos y músculos funcionen correctamente, sino que reduce el riesgo de desarrollar artritis degenerativa (osteoartritis) en un futuro.
    • A menudo, durante el ajuste articular se escucha un sonido de “craqueo”, el cual no tiene la más mínima relación con el crujido que se produce cuando un hueso se rompe.
    • A veces, un solo ajuste manual puede restablecer por completo la movilidad articular y eliminar la rigidez; no obstante, lo más probable es que sean necesarias de tres a cinco sesiones para obtener resultados relevantes.
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    Considera la posibilidad de probar la acupuntura. La acupuntura es una antigua práctica china que consiste en introducir agujas delgadas en la piel en ciertos puntos de energía con el objetivo de reducir el dolor y la inflamación (muy útil inicialmente una vez producida la fractura) y para eventualmente estimular la recuperación.[18] Normalmente, no se recomienda la acupuntura para la recuperación después de una fractura y solo debería considerarse como un tratamiento complementario; sin embargo, existen reportes anecdóticos que refieren que estimula la recuperación de fracturas y otro tipo de lesiones. La acupuntura tiene un registro de seguridad bastante favorable y si tu presupuesto te lo permite vale la pena probar.
    • La acupuntura actúa al liberar compuestos químicos en el cuerpo que reducen el dolor y la inflamación, como las endorfinas y la serotonina.
    • Asimismo, activa el flujo de energía, a menudo referido por los profesionales en este arte como chi, el cual sería la clave para estimular la recuperación del hueso y de otros tejidos.
    • Diversos profesionales de la salud practican la acupuntura incluyendo a algunos médicos, quiroprácticos, naturópatas y kinesiólogos fisioterapeutas. La persona que elijas debe estar certificada por NCCAOM.
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Consejos

  • La osteoporosis (fragilidad ósea) aumenta el riesgo de fracturas en cualquier parte del esqueleto, incluyendo los huesos de las extremidades superiores.
  • La mayoría de las fracturas de clavícula se diagnostican como “fracturas por sobrecarga” o “fracturas capilares”, que son pequeñas grietas en el hueso que no son lo suficientemente graves como para desalinear un hueso o romper la superficie de la piel.
  • Abstente de fumar, ya que se ha demostrado que el consumo de tabaco dificulta la consolidación de las fracturas.[19]
  • Asimismo, la fractura de clavícula es la lesión ósea más común durante los partos complicados. Generalmente, se producen cuando el bebé se encuentra en una posición difícil dentro del vientre o debido a una condición llamada distocia de hombros.[20]
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Advertencia

  • Busca siempre el consejo de tu médico. ¡No utilices este artículo como reemplazo de un tratamiento médico!

Acerca de este wikiHow

Jonas DeMuro, MD
Coescrito por:
Cirujano de cuidados intensivos certificado por el colegio oficial
Este artículo fue coescrito por Jonas DeMuro, MD. El Dr. DeMuro es un cirujano pediátrico de cuidados críticos certificado por el coleio oficial en Nueva York. Recibió su doctorado en meicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Stony Brook en 1996. Completó su beca de investigación en Cuidados Críticos Quirúrgicos en el Sistema de Salud Judía de North Shore-Long Island y fue miembro del American College of Surgeons (ACS). Este artículo ha sido visto 2994 veces.
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